Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 4 "El enredo comenzó"


Dedicado a @26aLELOPEz07 @ Liliemvi

—Jefe —dice Ray, con su típico gesto de fastidio que tanto ama molestar Harry —hay un pedido del Instituto St John. Vas a llevarlo tú ¿cierto?

El instituto Central de St John es una de las 3 escuelas donde tienen cursos de lengua de señas británico y en algunas ocasiones hacen algún tipo de pedido a la cafetería de Harry que es una de las más cercanas. Generalmente Ray hace las entregas, pero este día está "exhausto", quizá de la vida, porque lleva apenas unas dos horas en su turno.

—Creo que te equivocaste de roles amigo, el jefe soy yo —responde Harry, apenas mirando al hombre pues está en su teléfono —además, siempre alardeas que soy viejo, entonces, ve tú Tarzán, y haz lo tuyo.

—Esa es la cosa jefe, —replica sin remordimiento— tengo un permiso de mi médico que me impide hacer movimientos bruscos o podría sufrir una hernia de disco.

—¡Jesucristo! Solo vas a llevar galletas y cafés... en la moto.

—No puedo cargar nada jefe —se queja con un falso gesto de dolor —cargar esos cafés podría dislocarme el hombro.

—Pensé que era la hernia de disco.

—Es todo un conjunto de peligros, la salud no es un juego Señor.

—Tienes veinte años Ray.

—Una desgracia jefe, la vida se me escapa lentamente de las manos —dramatiza mientras se acomoda en una silla frente a su jefe —soy tan joven y guapo.

—Nunca he conocido a nadie con la misma pereza que tú Ray, literalmente nadie es tan flojo como tú.

—Valórame jefe, soy una especie en peligro de extinción que camina en este valle de lágrimas —añade— y no es pereza, es ley de Newton acerca de la conservación de la energía.

—Es conservación de la materia! —exclama el jefe —Y por todos los cielos, ¡muévete! organiza la cocina Ray, arregla el desastre de cosas.

—Jefe, no están desorganizadas, simplemente dejo que las cosas se acomoden en libertad, donde se sientan a gusto, en todo caso es un perfecto orden que solo yo entiendo.

—Tu maldito cheque se siente mejor en mi cuenta bancaria, creo que dejaré que esté allí hasta que se sienta libre de volar del nido ¿es justo, no?

Harry bufa pero prefiere dejar pasar esto, como siempre. Ray es un buen tipo, si tan solo sacudiera su terrible flojera y su actitud mordaz, piensa el jefe, sería bueno; pero no todo en la vida se puede. Comienza a preparar los paquetes de rosquillas, algunas galletas y dos mini tartas que debe llevar al instituto mientras que Jimmy, otro de sus empleados, termina los cafés. Es el día libre de Liam.

—¿A qué nombre se hizo el pedido?

—Allí — Ray señala hacia una tarjeta con los datos, una caligrafía causante de migraña para el jefe.

—¿Puedes dármela? —solicita con voz seria, Harry está detrás del mostrador acomodando todas las viandas, Ray sigue sentado en uno de los taburetes, la tarjeta a escaso medio metro de él.

—No puedo, está muy lejos jefecito, —hace el ridículo intento de alcanzarla mientras estira apenas su brazo y sus uñas rozan uno de los bordes —demasiado lejos.

—Ray, solo extiende el maldito brazo y entrégame la tarjeta —gruñe el jefe.

Empieza a exasperarse, pero sabe que será inútil. Ray siempre se sale con la suya.

(...)

—Estás alegre —es lo único que sale de la boca de Liam cuando Louis entra a su clase y alborota el cabello corto de éste.

—Yo siempre, la vida es alegría, la vida es maravillosa, la vida es un carnaval.

—¿Qué es un carnaval? —pregunta con verdadera curiosidad pues nunca había escuchado la palabra.

—Es una orgía, ¿te apuntas?

Liam lo mira, con esos ojitos cafés e intenta descifrar si la invitación es real. Conoce a Louis desde hace un tiempo, desde que Louis estaba con Luke y sabe cuánto sufrió por él, no lo ha visto completamente bien desde lo que pasó con aquel tipo, así que verlo ahora tan sonriente es algo extraño pero agradable.

—Pareces ya sabes, Louis,—duda antes de preguntar —¿Conociste a alguien nuevo después de...

—Tal vez.

No hay más respuesta pero es suficiente, aún es un tema difícil de tratar. Liam asiente y sus labios se mantienen cerrados por varios minutos hasta que el castañito corta ese silencio

—Comencemos —dice, después de todo están aquí para una clase.

"Hola, soy L-O-U-I-S y mi seña es esta —Louis muestra su dedo medio y sonríe precioso aunque todavía es petulante, ocasionando una sonrisa en Liam —"¿cuál es tu nombre?"

"Hola soy L-i-a-m y mi seña es esta —el chico más alto mueve su mano dominante en vertical y la pasa sobre su rostro en dirección al lado izquierdo.

"Bien Liam, ¿cuál es tu edad?

"Tengo 24 años y tú?

"25 para siempre, soy Peter Pan. No envejezco"

Liam vuelve a sonreír porque es la manera tan peculiar en que Louis enseña lo que le hace sentir cómodo, todos en el instituto lo dicen, Louis Tomlinson es un tipo que se asegura de que todos sus alumnos a su alrededor estén cómodos.

La clase avanza como siempre y luego de una hora, finalmente concluye. Louis checa su reloj, el pedido de la cafetería ya debería estar aquí, piensa. Decide salir a investigar por su propia cuenta y se despide de Liam cuando éste sale por la puerta principal.


(...)

Unos minutos más tarde, Harry está por salir, "St John, sala A, pasillo 3, cubículo 6. Niall Horan. Director" es lo que logra descifrar en la tarjeta que Ray escribió. Deja todo en perfecto estado en su auto, decide que la moto de la cafetería no será suficiente y usa su propio vehículo.

Le toma menos de diez minutos llegar al Instituto, el lugar es amplio y muy luminoso. Harry puede leer algunos carteles en sus paredes, también hay carteles más bajos con puntos en relieve, él reconoce que pertenecen al sistema Braille porque el Instituto se encarga también de la enseñanza de éste.

Hay algunas personas que deambulan por los pasillos, Harry observa que algunos usan un aparato auditivo pero cada uno lo ignora, parecen muy ocupados observando libros e incluso hay dos chicas que caminan a la par mientras mantienen una conversación a través de sus manos, un chico alto lleva un par de auriculares y eso le recuerda a Liam que siempre tiene puestos los suyos. Una mujer sale de algún cubículo y camina a su lado, Harry observa al can que la acompaña y comprende que es un perro guía para invidentes.

Una chica alta lo observa detrás de su escritorio y le hace una seña para que se acerque, no puede evitar los nervios cuando ella lo mira por un minuto hasta que Harry levanta la bolsa con el pedido de rosquillas y galletas, mientras con su otra mano sostiene los cafés y conserva la tarjeta entre sus labios, presionada por sus dientes para evitar que caiga al suelo, apenas podría hablar, pero piensa que no servirá de nada, así que evita hacerlo, no quiere equivocarse.

Anna G. (administración) alcanza a leer e imagina que las imágenes y puntos que se notan en su gafete, indican lo mismo pero en lengua de señas o Braille.

Asienta la bolsa en el mostrador y luego entrega la tarjeta a la chica, no tiene caso hablar en voz alta porque él intuye que la chica no lo escucharía, contra toda su voluntad Harry comienza a señalar los productos y en seguida a sí mismo, lleva su mano hacia su oreja y hace un gesto como si fuese un teléfono y de nuevo al pedido.

"Ok"—asiente la chica y le sonríe, porque a su parecer, el repartidor es uno de los suyos.

Ella señala el pasillo y Harry se siente un idiota cuando puede leer en grande Sala A y luego hacia cada pasillo con una letra diferente, Pasillo 3 de nuevo puede leer. Tan bobo, piensa el ojiverde, asiente hacia la chica, toma la bolsa y camina hacia éste.

El número 6 se erige en grande por encima de la puerta y Niall Horan se lee en ella.

Por un momento no sabe si tocar o solo entrar, el director ¿será sordo? Preguntas capciosas que no tienen respuesta y Harry piensa que; la amabilidad ante todo, golpea levemente la puerta cuando escucha un "adelante".

—Hola —dice aliviado de poder interactuar sin torpeza —¿Su pedido?

—¡Oh! Esto es para los chicos— responde con una sonrisa el director —seguramente es para la clase de Louis, uno de nuestros profesores más queridos.

El hombre mayor toma su billetera para pagar mientras continúa charlando con el repartidor.

—Nuestros instructores son muy profesionales, todos aquí dominan a la perfección su área, lengua de señas, Braille etc, Ahh—divaga el señor H—solo nos falta un instructor de defensa personal y estaríamos completos. Pero Louis es el mejor, aquí entre nos —bromea— todos tienen un tipo de enamoramiento por él, y por eso siempre están tratando de enamorarlo.

—Suena como alguien muy especial.

—¡Lo es! —asegura mientras entrega el importe al ojiverde.

—Las chicas enamoradas son muy tiernas.

—O muy locas —corta —pero nah, a Louis lo persiguen tanto chicas y chicos.

El chico está gratamente sorprendido con este director, luce jovial y alegre, a pesar de tener algunas ojeras bajo sus ojos y una gran pila de documentos sobre su mesa. Siempre es tan agradable encontrar personas de mente abierta, que no juzguen.

Que tu profesor o tu jefe sean así, como el señor Horan es un privilegio.

—¿Eso está bien para usted? —pregunta con tremenda curiosidad.

Hay una campanita escondida en el fondo de su cerebro que ahora lo instiga a conocer a ese tal Louis. Harry duda y piensa que, hasta no ver, no creer.

—Claro, me gustan los romances y las bodas, estoy a favor de todas las bodas, siempre que me inviten —guiña — Louis es el más especial de todos los que trabajamos aquí, sus alumnos lo aman y él termina pasando más tiempo del debido, se olvida incluso de comer ¿puedes creerlo?

—Comprendo.

—¿Puedes ayudarme con eso? —pregunta el director, mientras toma la bolsa de viandas y Harry sigue sosteniendo en sus manos los vasos de café —Yo llevaré esto.

Se encamina por el pasillo de vuelta hacia la sala donde algunos profesores descansan, uno de ellos se acerca al director y le hace algunas señas que Harry obviamente no entiende. Es un intercambio de información y en seguida el director comienza a entregar las rosquillas.

—Louis está en la otra sala, acompáñame —pide el director— debe haberse saltado el desayuno, otra vez.

Hay dos mujeres y otro hombre joven a quienes el director entrega sus viandas mientras Harry continúa observando con detenimiento todo el material visual, hay una pared cubierta de imágenes de manos, señalando configuraciones y frases que lo interpretan.

—Por aquí.

Cuando Harry camina detrás del hombre, puede escuchar solo el silencio que aprisionan las paredes del lugar. Es innegable que la atmósfera aquí se siente menos tóxica que allá afuera donde los ruidos y el caos de la ciudad ajetreada producen.

El hombre se acerca a dos chicos que están sentados, conversando entre ellos, parecen adolescentes de menos de catorce años pero su desenvolvimiento asombra a Harry. Intercambian información por un minuto hasta que decide dejar el resto de las viandas, coloca una notita con un "Para Louis" y la deja sobre el escritorio.

—Parece que salió —declara— dejaré aquí su comida, no creo que tarde.

Caminan de regreso y se despiden, el director agradece al repartidor y Harry se limita a mover la cabeza hacia la chica del recibidor. Camina hacia la salida todavía pensando en cómo será ese Louis y cuánto debería hacer para que alguien hablara así de bien de él, toma su celular para enviar un mensaje y cuando está a punto de salir, choca de frente con otra persona que al parecer venía tan distraído como él. El impacto, aunque leve; le produce un chichón en la cabeza, por encima de su frente.

Está a punto de gritar o de disculparse con la otra persona hasta que sus ojitos se encuentran y ¡mierda! ¡Es él!

Harry lo recuerda, es el mismo chico que vio hace unos días mientras salía a trotar.

Esa cara, ese cuerpo, esa estatura...

¡Jodido infierno! ¡Es él!

Algo similar se debe producir en Louis cuando el único movimiento es de sus pupilas que se dilatan al encontrar a este tipo! Es el mismo que le dio los cafés y los bollos! ¡Es el mismo del día que hablaba con Zayn!

Siente una emoción recorriendo su pecho, es una especie de nervios y alegría revolviéndose. Aún no lo saben pero, este es el momento, este preciso momento en que dos viejas almas se reencuentran en este espacio.

Harry inhala nervios y Louis exhala esperanzas, hay un ambiente que se vuelve rápidamente cómplice entre ellos, es como si con cada inhalación se respirara amor.

Louis lo mira, todavía sin poder hablar pero casi muere por decir algo como "felicidades, acabas de coronarte como la persona más bonita de mi mundo", porque sí. Después de Luke, Harry es la primera persona que guía la vista del corazón de Louis.

"San Justin Bieber regenerado, líbrame de las tentaciones, o déjalas caer encima"—piensa Louis mientras sigue observando al hombre frente a él. Y si alguien le preguntara al castañito cómo se sentía, después del golpe; sin pensarlo hubiera respondido "a punto de prostituirme", porque solo Louis es capaz de mezclar con el balance perfecto entre lo atrevido y lo romántico.

Harry está pasmado, el golpe le sacudió su única neurona hetero que le quedaba y ha muerto esa desdichada, el hombre frente a él es guapísimo y Harry quiere tocarlo para comprobar que es real.

Justo cuando está a punto de hablar, sus ojos se enfocan en el gafete del chico Louis Tomlinson (instructor lengua de señas).

Harry abre sus ojos y como si la estupidez se reprodujera en el aire, señala con una mano a su propio oído y luego a su boca, su cabeza hace un ligero movimiento de negación.

Es sordo, es todo lo que Louis piensa y así, fue como el gran enredo comenzó.


...................................................

"Escapa de todo y de todos. Y cuando creas que estás lo suficientemente lejos piensa en quién querrías ahí contigo. Así sé yo quién es importante en mi vida"...anónimo.


Hola, como siempre vengo emocionada a actualizar y a la vez muy nerviosa por si no les late esta historia (ojalá que sí). ¿Opiniones?

En otras noticias, Facebook me bloqueó, tengo cuenta nueva MAKI NADA MÁS por si quieren seguirme.

y ...El jueves es mi cumple!!!!!!

Besos...

MAKI <3

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro