°^El nuevo corte^°

Hitch estaba completamente confundido, por ver a su amiga entrando al cuarto del conserje. Este simplemente se acercó y se colocó enfrente de la puerta, tocando tres veces.

—Se qué estás ahí adentro.

— No claro que no.

Se escucho del otro lado de la puerta. Hitch simplemente rodó los ojos y como pudo trato de abrir pero está había puesto llave, así que simplemente comenzó a forcejear.

— Escucha. Necesito hablar contigo, ¿Podrías salir?.

— No puedo, no estoy aquí.

— Si no estás aquí. ¿Como es que estoy hablando contigo?.

— Magia.

Fue lo único que contesto la chica, así que el potro solo se marchó, aún que su amiga le haya dicho que hablara con Izzy, sería imposible intentar alguna conversación en este momento. Así que solo camino, mirando por cada una de las habitaciones.

Encontrándose con ponis de todo tipo, que al ver que el sheriff había entrado, solo lo recibían con una sonrisa en el rostro. Pero fue el momento en que al cruzar una de las habitaciones, este vio a un poni rojo, pero por la melena corta no lo había reconocido a la primera, así que al momento de procesar la imagen, este se quedó en el marco de la puerta.

Su mirada mostraba un poco de molestia, enfrente de el estaba un televisor, y prestando atención a la novela que miraba simplemente no se dio cuenta, que un potro ya estaba dentro de la habitación.

— Hola.

Sprout al voltear se quedó un poco sorprendido al ver a su amigo, ahí de pié, este le dio una sonrisa y contestando su saludo con un simple: ~Hola~.

— ¿Como te sientes?.

— Mucho mejor. — abriéndole un espacio en la cama.

— No es necesario.

Dijo el de melena verdosa, acercándose a la cama, y con una confianza que sorprendió al mismo Sprout. Hitch había acercado su casco hasta el rostro del potro de color rojo y con delicadeza la examinó, mirando que en su ojo derecho estaba un hematoma cubriendo parte de el. Hitch simplemente bajo su mirada.

— Sprout.

Mencionó el nombre del potro con tristeza en su voz, y sin querer este ocultó su rostro sobre el colchón en el que estaba recostado su amigo. Sprout simplemente quedó sin habla, al ver a su amigo de esa forma, aún que no sabía si estaba llorando oh solo se hacía el dramático.

— Hitch.

Escucho su nombre y al momento de levantar su cabeza unos patas delanteras de color rojo rodearon el cuello del poni amarillo, Hitch miro con todo el detalle que aquellos ojos de color verde que le miraban, y con la combinación de una sonrisa muy tierna, no pudo evitar devolverle la sonrisa.

Sonrisa la cual desapareció cuando sintió el olor a alcohol a un costado de su rostro y se dio cuenta que su amigo había tomado un rotulador de color negro.

— Una cosa en la cual puedes seguir pensando en lo que hiciste.

Hicth confundido busco un espejo a su al rededor, y al encontrar uno miro que en su ojo derecho había una estrella con un pequeño texto abajo que decía: ~Me debes una cena, oh me quejo con la señorita de mi seguro~

— Muy gracioso Sprout. — Intentando lavar la tinta.

— Use rotulador 90. — sonría malévolo.

— Sabes que la venganza es mala.

Dijo Hitch girando para poder ver a su amigo que estaba nuevamente cómodo en la cama.

— Pero también es dulce.

— Me alegro que estés de buen humor.

— Claro que sí. — Mirando la novela.

— ¿Cómo has estado? ¿Por qué aún sigues aquí?.

— Fue gracias a Pipp. — Contesto Sprout sin dejar de ver la televisión. — Izzy me dijo que estaba muy preocupado por mí, incluso que lloro.

— Eso es muy dramático.

— Lo mismo le dije. — Mirando de reojo a Hitch. — Pero como ella es la princesa, me hicieron varios exámenes.

— Eso debió de doler.

— Después de la novena  inyección me dió completamente igual. — Enseñando ambos cascos delanteros, y ver las 20 inyecciones que tenía.

— ¡Dios!. — Mostrando una mueca de dolor.

— También lo llame. Pero el desgraciado no hizo acto de presencia. — Decía mirando la tele. — Resulta que soy alérgico a las nueces y los mariscos.

— ¡WoW!. — sorprendido. — Ahora ya se que cosas no darte en tu cumpleaños.

— Hitch. — avergonzado. — ¿Puedo preguntarte algo?.

— Claro, dime, ¿Sucede algo?.

— ¿Por qué estás aquí en primer lugar?.

— ¿¡Qué!?. — confundido. — No entiendo muy bien tu pregunta en realidad.

— Hitch. Yo me he enfermado muchas veces. — Evitando la mirada de Hitch. — Y nunca nadie se quedó conmigo, oh me visitó. ¿Por qué ahora te preocupó tanto?.

— Pues esa es una buena pregunta. — Mirando el suelo.

— Después de lo que pasó...

— Ya olvida eso. — tomando a Sprout de su casco. — Esa ya es página pasada. No dejes que una mala decisión afecte tu forma de pensar.

— No era la respuesta que quería.

Ambos se quedaron callados por un momento, pero ahora fue Sprout quien tomó los cascos del otro y tirándolo hacia el.

Sprout había besado a Hitch.

Estos estaban un buen rato en la misma posición, Sprout besando a Hitch, mientras que este simplemente se dejaba besar. Sin darse cuenta, que en el pórtico había una tercera figura que se había parado al ver tal escena. Y simplemente se marchó del sitio.

Y al momento en que ambos se separaron, los dos tenían sentimientos completamente distintos. Para Hitch eran sentimientos encontrados, mientras que Sprout. Siempre había soñado que besaría algún día a Hitch, y ahora que lo hizo.... No sintió nada.

— Sprout....

Habló Hitch. Pero este simplemente no dijo nada, y solo volvió su mirada hacia el televisor. Mientras que Hitch intentaba hablarle, este solo se quedó callado tratando de ignorarlo.

— Entiendo.

Hitch solo se levantó y camino hasta la puerta, que misteriosamente estaba abierta. Pero antes de marcharse se detuvo en el pórtico.

— ¿Podemos hablar después?.

Sprout se mantenía callado, estaba completamente apenado. Y lo único que hizo fue esconderse entre las sábanas.

—Cuando estés listo. Habla conmigo. — dijo antes de irse.

Sprout al quitarse la manta blanca, solo vio la habitación vacía.