°^ Disculpa a media ^°

Hitch entrego entrego el celular al pegaso, quien solo lo acepto volviendo a su puesto. Hitch estaba en la banca de al lado derecho, mientras que Thunder se mantenía del lado izquierdo. El lugar estaba en completo silencio, eran pocos los sonidos que habían. Ya que dos pegasos que no conocían se encontraban ahí vigilando. Lo primero que noto Hitch fue lo increíblemente ordenado que estaba todo. Incluso habían trapeado el suelo. Pero la voz de Sprout retumbó en su cabeza.

Mirando como aquel pegaso nada más se mantenía en su celular, mostrando una mirada completamente sería. Hitch solo volvió a mirar el suelo, pensando en que sería lo primero que tendría que decir, mientras que Thunder por su lado, observó al poni terrestre unos segundos y luego seguir en su celular.

—Oye... — Hablo Hitch. — ¿Podemos hablar?.

— No. — contesto Thunder.

— Solo quiero disculparme contigo.

— Se nota que lo haces de corazón. — dijo ahora mirando a Hitch. — ¿Oh solo sigues órdenes?.

— Un poco de ambas en realidad.

— Escúchame terrestre. — Hablo Thunder. — No se qué quieres conseguir con todo esto. Se que unas disculpas, lo acepto. Pero déjame decirte algo claro. — Levantándose. — Cuando salga de aquí iré directo con Sprout. Y mientras yo esté con el, no te quiero cerca.

— Por dios. Qué obsesión tienes. — Asustado.

—No es obsesión, solo estoy marcando mi territorio.

— De todas formas. Conozco a Sprout. — dedicándole su sonrisa más conocida. — El hará siempre lo que sea, y no tiene que pedir permiso de nadie que no sea su madre.

— Como sea. — Mirando su celular. — Solo no me molestes y déjame un rato que quiero dormir. .

— Como gustes. — Recostándose en la banca. — Supongo que no es mala idea.

— Callate. — hablo molesto.

— Qué tipo más insolente. — Contesto Hitch recostándose.

Ambos están completamente tumbados. Aún que quisieran dormir, estos no podían. Estaban preocupados por Sprout, más aún por lo que había pasado.

Pero afuera de las celdas. Tormenta miraba la pequeña televisión, pasando una serie de romance juvenil, cosa que la tenía en un mar de lágrimas.

— ¡Esto están cruel!. — sollozaba. — Por que nunca pueden ser felices.

— Deja de ver esas cosas. — hablo su compañero quien leía el periódico. — Meterán ideas raras en tu cabeza.

— Lo que tú digas. — Decía mientras se limpiaba las lágrimas. — aguafiestas.

— Oye. — acercándose a tormenta. — ¿Cuanto tiempo más los dejaremos ahí?.

— Nuestra princesa dijo. Qué al menos estén 24h dentro.

— ¿Estás seguro?.

— La verdad es que no recuerdo.

— Bueno. — Pensando un poco. — Por que no dejamos salir a uno primero.

— Esa es una mala idea. — Mirando la celda.

— ¿Por qué?. Es una buena idea.

— No estoy seguro, mejor hay que dejarlos ahí. No tenemos que meternos en más problemas.

— No, nos hemos metido en ningún problema.

— ¿Pero nuestro jefe Rob que dirá?.

— Seguro le encantará la idea.

Ambos pegasos volvieron a sus lugares. Solo estaban sentados esperando a Rob. Tormenta nada más leía un poco, mientras que relámpago coloreada un libro infantil. Mientras que en la celda ambos ponis lograron dormirse, al menos lo que dure.

Por la puerta principal, apareció aquel poni terrestre.

Rob es un pony terrestre bronceado con un pecho más claro de color crema, así como una raya de color crema entre los ojos. Lleva un sombrero panamá gris azulado con una banda gris oscuro. Tiene ojos azul oscuro y su melena, cola y cejas son de color verde azulado. Único en otros ponis, parece tener una sobremordida.

Este constantemente se muerde el labio superior, ya que por la influencia que tuvo, desde un potrillo. Aún siente un poco de miedo cuando un unicornio se aproxima a el.

Aún con sus muchas diferencias y características muy particulares, todo el tiempo era confundido con Hitch, lo que lo obligó a siempre usar su gorro. Normalmente en Maretime Bay, no suele interactuar con muchos, ser elegido para algo le producía mucho estrés. Y ahora que tiene que ser un sheriff temporal.

— Hola. — Nervioso. — Pegasos amigos.

— Al fin viniste. — Se acercó tormenta. — Mi compañero y yo hablamos.

— ¿Enserio?. — sonriendo, así evitar que lo vean asustado.

— Podríamos liberar a los prisioneros uno cada tres horas.

— B-bueno. — Pensando. — ¿Por qué quieren hacer eso?.

— Fue solo una idea.

— No está mal la verdad. — Ya más tranquilo. — Pero tendría que hacer un papeleo para eso, Sunny querrá saber también por qué los dejamos libres.

— Yo me encargo de eso. — Rápido tormenta comenzó a hacer los documentos.

— Bueno. — hablo relámpago. — ¿A quién sacamos primero?.

Rob nuevamente estaba estresado. La verdad es que le daba completamente igual quien saliera primero, pero si liberaba a Hitch, seguro pensarán mal, y si liberaba primero al pegaso, ellos pensarán que por miedo libere a uno de los suyos. Rob estaba nervioso, que sin querer comenzó a morderse nuevamente el labio inferior.

— ¿Te encuentras bien?.

Preguntó el Pegaso, quien extraño miraba al poni. Este simplemente solo le devolvió una sonrisa nerviosa. Relámpago simplemente sacó una moneda y la lanzó al aire.

— Muy bien. Herradura por tu amigo terrestre y pájaro si sale Thunder. — Dijo atrapando la moneda.

— Está bien. — Curioso por el resultado.

Ambos ponis estaban emocionados, y fue el resultado que tranquilizó a Rob. Ya que en un principio había decidido que Hitch fuera el primero. Pero esta vez no quedo como un racista.

— Muy bien. Iré por tu amigo. — Hablo relámpago.

— Espera. — Interrumpió. — Déjame traerlo, después de todo. — Apenado. — Yo estoy a cargo.

— Escucha lindo. — dijo relámpago. — Déjame ir a mi, así Thunder no pensara que escogiste a tu amigo por preferencia.

Ese simple comentario hizo que este se pusiera nervioso, nunca había tenido un halago por parte de sus amigos terrestres, y el primero que escucho tuvo que venir de un pegaso. Así que solo dedicándole una sonrisa, este asintió. Dándose la vuelta para poder sentarse en el escritorio, mientras que relámpago entraba en la celda.

— ¡Muy bien!. — levantando la voz. — ¡Bellas durmientes arriba!.

— ¿Qué sucede?. — Se quejó hitch.

— Este poni terrestre que no se calla.

Hablo Thunder. Intentando mantener los ojos abiertos, pero fue el golpe de una uva lo que lo termino de despertarlo. Hitch había sido el responsable, por qué con cada cosa que hiciera, era una excusa para ser molestado por el Pegaso.

— Muy bien. Tenemos nuevas órdenes. Ambos serán liberados.

— ¡Al fin!. — Dijo Thunder, estirando sus alas.

— Pero.

— Eso ya no me gustó. — Hablo ahora Hitch.

— ambos serán liberados. Pero por horas diferentes, así que el primero será el poni terrestre.

— ¡Qué!. — Grito Thunder. — ¡¿Por qué tiene que ser el primero!?.

— No fue nuestra decisión.

— ¿Entonces quién lo decidió?.

— Una moneda.

Fue lo último que dijo para salir de la celda, no sin antes esperar a Hitch. Quien caminaba en silencio, pero cuando el Pegaso se volteó. Este rápido le saco la lengua a Thunder quien nada más ardía en furia.

Hitch. Tomo sus cosas que le habían quitado, y metiéndolo rápido en su alforja. Se despido de ambos pegasos, al igual que Rob. Quien solo le dedicó una sonrisa de despedida. Hitch tenía que ser rápido, y de alguna manera de llegar lo más pronto posible al hospital en el que estaba Sprout. Ya que no sabía cuánto iba a tardar para que liberarán a su némesis. Y lo primero que pensó fue en el tren, pero a las horas que eran del día, estaría muy lleno para llegar a tiempo. Aque,en Zepelín era la mejor opción, Thunder podía volar y sin darse cuenta podría adelantarse. Así que lo único que se le ocurrió fue correr por el sendero donde su amigo tenía transporte experimental.

Pero no todo era color de rosa para un pegaso, quien ahora se encontraba completamente molesto, sabía perfectamente por qué Hitch había salido corriéndo. Así que lo único que tenía que pasar, es esperar a que lo liberarán.

— Jefe. — Hablo tormenta. — Iremos por comida, ¿Quiere algo en particular?.

— No importa. Lo que me traigan estará bien.

— Traeremos helado de atún. — dijo tormenta.

— Entonces me podrían traer un pastel de chocolate. — contesto sonriente.

— Muy bien. Pastel de chocolate será.

— Seguro podrás cuidar al prisionero mientras no estamos. — Hablo relámpago.

— Está bien. Son solo unas tres horas para que pueda salir.

— Muy bien, si hay intento de chantaje llamanos por tu radio.

— ¿Tengo radio?. — se dijo así mismo.

Pero antes de que pudiera preguntar de qué radio hablaba, ambos pegasos se habían marchado. Así que ahora se encontraba solo. Primero quiso usar su celular, para entretenerse un rato, pero esa idea se descartó cuando miro que solo tenía 15% de la batería, y para colmo no traía el cargador en su alforja. Así que únicamente lo usaría para contestar mensajes oh atender llamadas importantes.

— maldición.

Se quejó el poni, quien en un momento se fijó en aquel pegaso que se encontraba en la celda. Parecía devastado, así que con un poco de temor, este se acercó con una botella con agua. No sabía cómo comenzar para tener una charla con el, es por ello que tenía el comodín de la botella.

— ¿Quieres agua?. — Preguntó Rob.

— No gracias. — contesto. — Estoy bien.

— Bueno, no soy psicólogo, pero por la manera en la que hablas, estás en la esquina de la celda y desde aquí veo como lloras. Bien, bien, no parece que estés.

— ¡WoW!, Estoy sorprendido. ¿Como adivinaste?. — Dijo con sarcasmo.

— Soy mitad unicornio. — Contesto con burla. — Si no quieres el agua. Está bien.

—¡Espera!.

Alzó la voz el pegaso, logrando que Rob se detuviera, este se volteó en dirección a la celda, y al momento de que este se acercara un poco más a la luz. Rob quedó embobado por unos momentos al ver aquellos ojos de un color muy únicos en si, ya que era la primera vez que lograba ver unos ojos de un color lila. Qué a por la poca luz eran mucho más brillante, un sentimiento extraño le invadió el cuerpo, ya sea nerviosismo oh simplemente atracción, por ver más de cerca al poni.

Ya hay 10 capítulos nenis. Así que por el momento dejaré de actualizar esta historia para concentrarme más en las otras que tengo, y las nuevas claro está. Así que de regalo por estar aquí, y esperar con paciencia les doy una pequeña serie de imágenes que encontré en Pinterest. Esa aplicación bonita de mujeres.

También espero que les agrade el nuevo personaje, se me hizo bonito Rob. Apenas sale en la película, oh simplemente se ve de fondo.

Art: DoodleMarkyMark
Traducido: Bronies Mexicolt Latino