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Lectura

Pareja:MiloxCamus
Advertencia:+18





Si bien al caballero de Acuario le encanta estar en la tranquilidad de su habitación leyendo un libro de sus favoritos en completo silencio hasta que su cuerpo aguante, después de tomar una ducha para quitar el sudor y polvo de los entrenamientos matutinos que hay en el coliseo con sus demás compañeros, pero hoy al parecer no es de esos días para disfrutar de su libro ya que el pelirrojo no se puede concentrar en su lectura cómo el quiere porque su cuerpo lo está traicionando, su temperatura aumenta y un rubor intenso adorna sus mejillas.

Su miembro siente como empieza a despertar y se va poniendo duro con el pasar de los minutos su pezón estaba duro y erecto.

Por más que intentaba prestar atención a la lectura y olvidar esas sensaciones no podía, el libro lo apretaba con sus dedos fuertemente y lo dejó sobre su frente, finalmente su cuerpo cedió a sus mas bajas pasiones.

- Ahh... un gemido bajo escapó finalmente de sus labios.

- Quieres que continue amor?. Una segunda voz habló, el tono que usaba era sensual y coqueto para seducir a su presa.

- S-si, quiero que continues. Su mente ya no pensaba con claridad, estaba cegado por el placer que recibía en ese momento.

- Te haré gritar mi nombre hasta el final mi hermoso mago del hielo. Una sonrisa ladina se formó en sus labios.

Pero ustedes se preguntaran ¿quien es esa persona que hace que Camus actué diferente a como es él tan serio y frio de actitud?

Vayamos tres meses antes donde pasó algo inesperado y que impresionó a mas de uno...

FlashBack Tres Meses Atras.

Era un día nublado en el santuario, todo era paz y tranquilidad ya que no había guerras.

Al parecer iba a llover, rara vez eso pasa ahí en Grecia pero eso no les importaba a ningún caballero dorado, al contrario les agradaba ya que así suspenderian los entrenamientos, al ser sábado sus cuerpos los sentían un poco mas cansados ya que todos los días eran duros los combates cuerpo a cuerpo usando sus mejores técnicas.

Había un rubio sentado en las gradas del coliseo con la mirada fija en cierto pelirojo que combatía con el caballero de libra, no se perdía ningún detalle de los movimientos que hacía el caballero de acuario.

Vio que su combate terminó y decidido más que nunca se apresuró a caminar a paso seguro hacia él pelirojo que estaba enmedio del coliseo.

- Camus. Habló el rubio y él nombrado volteó en su dirección.

- ¿Que pasa Milo?.

- Yo... quería saber si tú... y yo... sus palabras quedaron atoradas en su garganta, por más que lo intentaba decir sentía que no podía, toda la determinación que traía consigo se fueron al mas allá.

- ¿Quieres que entrene contigo?. El caballero de acuario preguntó, ya que eso creía lo que intentaba decir su compañero de armas y amigo.

El rubio negó con la cabeza y el pelirojo alzó una ceja confundido todos los caballeros veían la escena de los dos con expectación al saber que pasaría.

- Entonces?. Se cruzó de brazos esperando una respuesta pero el rubio solo agachó la cabeza y sus ojos miraban el suelo, se dio media vuelta dispuesto a irse pero una mano detuvo su andar.

Milo al ver que su adorado rubí se iba, se armó con todo el valor del mundo y lo detuvo.

Al diablo todo si su adorado francés no aceptaba sus sentimientos y lo rechazaba, no importaba si su corazón se partía en miles de pedazos él seguiría siendo su mejor amigo con el dolor de su alma, pero debía decir todo lo que su corazón y mente le decían que gritara a los cuatro vientos su amor por Camus, como pasó eso ni siquiera Milo sabía la respuesta porque sin darse cuenta ya lo tenía metido hasta en los huesos ese ardiente amor.

- Camus... mi adorado francés... mi mejor amigo. soltó un suspiro y se arrodilló en el suelo como si fuera a pedirle matrimonio sin soltar la mano de Camus. Eres una hermosa joya que llegó al santuario cuando apenas tenías cinco años, yo recuerdo ese día en que llegaste yo desde que te vi supe que eres especial para mí, te hablé y nos hicimos amigos desde ese entonces nunca nos separamos aunque tu actitud sea diferente a la mia nos complementamos bien.
El día de hoy quisiera ante ti decirte lo mucho que te amo, como pasó ni yo lo sé pero sé que te llevo dentro de mi corazón. Yo quería decirte si... ¿Quieres ser mi novio?

Camus estaba asombrado por las palabras de su amigo y su corazón latió a mil por hora.
Miraba fijamente a los ojos de ese rubio revoltoso pero los aparto de inmediato y se enfocó en todos esos ojos curiosos que miraban la confesión que no se esperaba ninguno de sus compañeros o bueno algunos ya sabían de ese amor que profesaba el escorpión hacia ese francés pelirojo que no se daba cuenta o tal vez si?

- Yo... emm... tú, yo no... lo siento!. El caballero de acuario soltó el agarre de su mano y salió corriendo del coliseo dirigiendose hacia las casas, de sus ojos salían lágrimas que nublaban un poco su visión pero él ni sabía porque.

Milo se quedó estático y con la mirada fija en su amado rubí que salia de su campo de visión, sus manos las hizo puño por la frustración del momento.

Los demás santos de oro no podían creer lo que pasó, Milo fue rechazado por el onceavo guardian.

- Milo no te rindas, yo sé que Camus siente lo mismo por ti. Habló el caballero de Capricornio

- Así es Milo, amigo yo sé que harás que él te ame además tu no te rindes tan fácil ¿o si?. Una sonrisa amigable salió del caballero de Leo dándole animos al bicho ya que el sabia que desde hace tiempo babeaba por el pelirojo.

- Vamos alacrán ponsoñozo, no te rindas!. Gritó el de cáncer en tono de burla.

Milo sonrió, sus animos volvierón de nuevo y él no se dejaría vencer. Además se dió cuenta que al confesarse la mano de Camus tembló, no sabía si era una buena señal o no.

- Corre Milo y no lo dejes ir de tus patas!. Gritaron todos sus compañeros dándole su apoyo, el cuál él agradecía mucho.

Corrió tan rápido que pudo alcanzarlo en Virgo.

- Camus espera!. Gritó el escorpión y éste se detuvo.

- Milo... yo... en verdad no me esperaba tu confesión. Es cierto lo que dices y no estás jugando conmigo?. Dudaba si, ya que esas palabras se las podría decir a quien sea, pero él no caería tan fácil su mirada se tornó más fría que de costumbre.

El rubio le dedicó una sonrisa radiante que se le marcaban esos hoyuelos que le parecían tiernos al pelirojo que sólo a él le pertenecían.

- Camus dime, cuándo te he mentido a ti?. Cambió su expresión a uno mas serio para que así creyera en sus palabras que eran 100% reales.

- Mi amigo escorpión tú nunca me has mentido. Su expresión se suavisó un poco y sus ojos rubíes tenían un extraño brillo. Yo sé que no es correcto de mi parte huir así pero los nervios me dominarón por primera vez y tener todas esas miradas enfocados en nosotros me obligó a correr.

- Entonces?. Milo estaba ansioso por escuchar lo que diría el onceavo guardián.

- Yo... por más que traté de ocultar éste sentir, me es imposible, esa faceta fría que pongo con todos se cae contigo, sólo tú sabes derretir esa capa de hielo eres el fuego que hace derretirme con cada sonrisa y abrazo que me brindas y aunque alguna vez dije que los sentimientos no sirven para nada y solo te hacen débil es una mentira, yo Camus De Acuario Guardián De La Onceava Casa Zodiacal hoy te confieso Milo De Escorpio que también te amo con todo mi ser. Y si... acepto ser tu novio. Una sonrisa escapó de los labios del pelirojo y se abalanzó en los brazos de Milo para darle un pequeño beso en los labios para así iniciar una hermosa relación.

Sus compañeros horas después se enteraron de la gran noticia y ellos no podían estar más felices por ellos.

Fin del FlashBack

Regresando a la actualidad.
Desde ese día ambos se la pasan juntos conviviendo como pareja ya sea en el templo de Escorpio o el de Acuario pero luego de un mes y medio de noviazgo Milo quería pasar a otro nivel pero siempre Camus lo ignoraba por leer un libro o por poner de excusa que quería llegar virgen hasta el matrimonio pero aún así Milo no se rendía, cada día intentaba provocarlo aunque fallaba peró el sabía que tarde o temprano caería en su aguijón.

Y éste día tocaba en la onceava casa pasar el tiempo juntos ya sea haciendo una actividad para los dos o simplemente cada quien hacía algo diferente pero juntos y Milo éste día no perdería tiempo ya que su amado cubito dijo que quería leer un libro en su recámara y que él hiciera lo que se le dé la gana pues al decir esas palabras de nuevo intentaría provocarlo.

Aunque no se esperó que funcionara sus técnicas de seducción, ya que el pelirojo siempre lo rechazaba pero lo que no sabía Milo es que su amado con el pasar de los días se volvía adicto a esas manos morenas que lo recorrían en todo su cuerpo y lo hacían estremecer.

Por eso el pelirojo dijo que quería leer en su recámara ya que era un pequeño pretexto para que Milo lo manoseara y lo tomara de una vez por todas, al diablo esperar hasta el matrimonio él quería entregarse al escorpión.

Sin darse cuenta los dos estaban desnudos, Milo entre las piernas de Camus.

Sus manos recorrían esa espalda ancha y llegar a esos brazos musculosos que tanto adoraba, esa piel morena que le fascinaba, amaba todo del escorpión.

Milo por su parte succionaba esa piel tan blanca como la nieve dejando varias marcas rojas que él sabía que luego serián más notorias.

Descendió sobre su clavícula dejando a su paso besos húmedos y uno que otro chupón.

Él quería marcarlo en todo su cuerpo y para que así supiera todo el santuario que Acuario tenía dueño y ese era el escorpión dorado.

Bajó a sus pectorales, mordiendo la piel y llegar hasta esos pequeños pezones rosados para lamer uno y mordisquearlo levemente causando unos deliciosos gemidos en el pelirojo que se retorcía por ese placer que le era dado, sin duda el escorpión era un buen amante.

Descendió hasta el abdomen marcado de su pequeño rubí y adentró su lengüa en el ómbligo simulando pequeñas embestidas.

Camus ya no reprimía más sus gemidos, de la comisura de su boca le escurria sáliva, si eso sólo era el comienzo de toda la pasión no quería imaginar cuándo el miembro de su adorado bicho entrara en su virginal entrada.

Su líbido de ambos se encendió a mil, el miembro de Milo palpitaba, ya pedía a gritos entrar en lo más profundo de Camus.

Con mucho amor y cuidado volteó al pelirojo boca abajo y levantó su cadera para ver en todo su esplendor ese redondo trasero.

Se le antojó darle una nalgada y así lo hizo, Camus arrugó las sábanas por tan repentino acto que lo hizo gemir fuerte, dolor y placer al mismo tiempo.

- Ahhh... Milo! Más quiero más!... Ngh. Sin duda esa nalgada  lo excitó demasiado e hizo que su miembro palpitara chorreando un poco del liquido pre-seminal.

Milo acató la orden de inmediato 3,4,5,6 nalgadas en ambos glúteos hizo que el francés se viniera sobre las sábanas.

El escorpión aún faltaba pero él sabía que llegaría la mejor parte.

La lengüa de Milo se dirigió a esa palpitante entrada y delineó el contorno mojándolo con su saliva, para que entrara más fácil jugando por unos segundos.

Mojó tres de sus dedos hasta dejarlos bien lubricados.

- Amor, quiero que te relajes ya que será un poco incómodo al principio pero te aseguro que después me pedirás más.

- Está bien, confio en ti cariño. Empezó a relajar su cuerpo el pelirojo inhalando y exalando aire por su boca para asi estar tranquilo.

El primer dedo entró y soltó un pequeño quejido de dolor pero nada que no pudiera controlar, ese dolor no era nada comparado al de las batallas así que eso no era nada para él, el segundo fue introducido haciendo movimiento de tijeras pero no hubo dolor, al contrario sentía cierto placer su entrada se dilataba más y su cuerpo reaccionaba de nuevo, sintiendo ese calor invadir todo su ser, para cuándo el tercer dedo entró los primeros gemidos empezaban de nuevo a salir de su boca.

Milo sintió algo húmedo en sus dedos y al sacarlos se pudo dar cuenta que era un poco de sangre, estaba comprobado que Camus era virgen, el sería él primero y único en tomar a ese rubí francés.

Su miembro estaba listo para entrar en esa golosa entrada, metió la punta de su pene y poco a poco se introdujo a fondo, el pelirojo arqueó su espalda por tan agradable sensación y él mismo empezó a mover sus caderas para que Milo empezara con sus estocadas primero lentas para después subir el ritmo poco a poco.

Era exquisito sentir cómo la cálidez rodeaba todo su miembro y jadeaba de placer.

- M-Milo! Más! Más rápido! Agh!. Era la petición del francés y Milo no se hizo del rogar aumentó el ritmo de sus embestidas haciendo esos ruidos obscenos de dos cuerpos entregándose al amor y placer, la cama crujía por tan bestiales movimientos, sin duda ese escorpión era un Dios haciéndole el amor.

- Camusss. Arrastró las últimas letras del nombre de su amado haciéndole saber que pronto se vendría.

Milo jaló los cabellos pelirojos haciendo que su espalda se alzará y dándole besos por toda su espalda, el francés soltó un delicioso ronroneo que endulzó los oídos del escorpión.

Camus gemía el nombre de su amado una y otra vez. El orgasmo de ambos estaba cerca y lo sabían,  2,3,4 estocadas más y llegaron al orgasmo juntos Milo dentro de Camus y éste de nuevo en las sábanas.

Su respirar de los dos era agitado y se dejarón caer en la cama rendidos por el acto recién hecho.

Camus volteó un poco su cuerpo para mirar de frente a Milo y abrazarlo por la cintura éste pasó su brazo por el cuello de Camus para que quedara como almohada.

- Te amo Milo

- Y yo a ti mi ángel francés.

Le dio un pequeño beso en los labios y tapó la desnudes de ambos para así dormir juntos y abrazados esa noche.

Sin duda Milo sabía como interrumpir la Lectura de su bello copo de nieve.




🦂❄💙🦂❄💙




Hola mi gente bonita que tal les pareció este primer one-shot? Ojalá les haya gustado, ésta historia la estoy escribiendo desde el hospital ya que mi hermana la operaron y yo me quedé a cuidarla en la noche.
Si les gustó ya saben mis amores voten, eso me alegraría muchisisisisisisimo 💖

La próxima historia es a base de ésta imagen que pinté en una de esas apps para relajarte y al ver esos ojos violetas pensé en mi amado cubo Dégel vestido como una mujer gitana, haber que tal me queda, aun no sé cuándo la subiré pueden ser historias cortas o algo largas pero me quiero lucir con el segundo one-shot espero no decepcionarlos 😉 y ya saben si quieren un pedido de su pareja favorita de acuario y escorpio solo dejen su comentario o en mensaje privado.

Sin más me despido mis nenes
Atte. Skarlet Antares ❄💙🦂

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