Pareja:MystoriaxÉcarlate
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Una diosa aburrida ya que no había guerras ni nada todo era paz se encontraba en sus aposentos pensando que hacer eran cerca de las 10:30 de la noche y algunos dormían, de repente le surgió una idea ¿y si convierte a uno de sus caballeros en mujer solo por tres días como reaccionarían sus compañeros de armas al verla diferente de lo habitual?

Sin pensar en las posibles consecuencias tomó su báculo y elevó un poco su cosmo, ¿a quién le tocaría esa broma?

Su mente se iluminó ya que tenía el candidato perfecto, era una forma de ayudarlo para que confesara su amor ya que algunas veces en las reuniones que se hacían en el recinto patriarcal se daba cuenta de como miraba a su camarada, el amor era tan fuerte en ambos solo que uno no se armaba de valor y el otro prefería ignorar su sentir.

Una pequeña energía salió disparada hacia el lugar indicado y otra cosmo energía hacia los demás templos ya que sería aburrido ver solo a esos dos darse amor, una risita de chiquilla se le escapó y feliz se fue a descanzar.

Amanecía en el santuario y en la octava casa zodiacal un escorpión tenía la costumbre de despertar con los primeros rayos de sol.

Abrió sus ojos lentamente, sentía pesado la sábana que cubría su cuerpo, retiró dicha tela para incorporarse sentándose al filo de la cama, se puso en pie y se sintió raro ya que ahora se sentía menos alto, no le dio mucha importancia y fue a darse una ducha.

Retiró su ropa interior y se metió a bañarse, las gotas de agua mojaban cada rincón de su cuerpo y el jabón resbalaba por toda la piel tersa, siguió con su labor hasta llegar a la altura del pecho dónde notó finalmente unos bultos enormes bajó la mirada y eran un par de senos de mujer, su mirada se dirigió más abajo y su amiguito de toda la vida no estaba.

Rápidamente salió y se miró en el gran espejo que había en el cuarto de su recámara, su cabello rojo estaba más largo de lo normal, sus facciones varoniles cambiaron por unas más delicadas, los pechos que ahora tenía, sus caderas más anchas y estilizadas.

Una mujer.

Se quedó pasmado viendo su nueva apariencia que no le gustaba.

Su estado de shock no duró mucho ya que gritó a todo pulmón porque ésto no era posible, se negaba a aceptarlo los alaridos de chica se oyeron por todas las doce casas alertando a sus compañeros de armas.

Qué dios habrá sido el de la broma convirtiendolo así, él que era todo un hombre ahora era una bella mujer, el gran Écarlate de Escorpio Del Templo Celeste ahora era una amazona.

Muchos pasos alertaron a la chica, su cuerpo desnudo lo cubrió con su camiseta roja que ahora le quedaba enorme pero cubría hasta las rodillas.

- Se escuchó gritos de mujer en el octavo templo. No sabemos si atacan nuestros enemigos o alguién en peligro, andando!. El mayor de los geminis corria con los demás hacia la entrada del templo y los restantes por la salida de dicho lugar.

- Écarlate puede estar en peligro y no sabemos que es lo que pasa, hay que buscar por todos los rincones a él. Dijo un preocupado Dohko de Libra adentrándose en la recámara, los doce ya que Abel fue integrado a la orden dorada se internaron en los aposentos privados.

La puerta la tumbaron de un solo golpe y todos se quedarón babeando por la belleza que se encontraba abrazandose a si misma, el hechizo empezó a surtir efecto en todos y miraban con corazoncitos flotando alrededor a aquella peliroja.

- Disculpe señorita, estamos buscando a nuestro compañero Écarlate. ¿De casualidad no lo ha visto?. Escuchamos un grito y venimos rápido para auxiliar a quien esté en peligro. Dohko salió de su impresión devorando con la miráda al escorpión que solo traía puesto la camisa que le llegaba a las rodillas mostrando su piel.

- Chicos soy yo Écarlate, acaso no me reconocen ¡¿o esque soy muy fea?!. Sus ojos se cristalizarón y rompió en llanto, los dorados no sabían que hacer, trataban de decirle cosas bonitas pero no funcionaba.

Mystoria que hasta ese momento se encontraba en shock por el repentino cambio en la persona que amaba en secreto, caminó apartando al montón de idiotas que sólo hacian llorar mas a la peliroja.

La envolvió entre sus brazos y diciendole:

- No llores pequeña todo saldrá bien si?. Si quieres te acompaño al templo de nuestra diosa para que te ayude con ésto y pueda aconsejarte ya que es la diosa de la sabiduría, puede darnos respuestas para que vuelvas a ser ese escorpión fuerte y enigmático que te caracteriza.

El llanto cesó y al ser mas bajita sus orbes verdes se alzarón para ver los celestes y con una ligera sonrisa asintió.

Tomados de la mano subierón las restantes casas zodiacales hasta llegar a su destino, los demás quedaron en shock porque fueron ignorados por su bella compañera pero no se quedarían atras, iniciando un plan para que esa escorpioncita sea de alguno de ellos cueste lo que les cueste.

Su diosa se hizo la sorprendida al verla en su nueva forma, pero su travesura iba saliendo bien ya que el peliceleste no soltaba la mano de la chica.

La ayudó a prestarle algunos vestidos en lo que conseguía ropa de su talla, un lindo vestido rojo con piedritas negras en la parte de los hombros y su cabello se lo ató su diosa en una coleta alta dejando unos mechones sueltos a cada lado de su rostro y unas zapatillas rojas con un pequeño tacón, Mystoria esperaba afuera sentado en los escalones en lo que hablaban de lo sucedido pero su diosa no le dio ninguna pista y que esperara hasta que encontrara alguna cura para que vuelva a ser el de antes.

A ojos del peliceleste, Écarlate se veia hermosa con ese vestido que resaltaba más su belleza pero no porque fuera mujer si siendo hombre era guapo.

Cabizbaja caminó todas las casas acompañada de el acuario debía acostumbrarse a su nuevo cuerpo, en el octavo templo todos sus compañeros la esperaban con ramos de rosas, chocolates en forma de corazón y regalos.

En cuánto vieron a la peliroja todos se le amontonarón rodeándola y empujando a Mystoria a un lado la chica se sentía asfixiada ya que se empujaban unos a otros para darle sus presentes a la bella amazona.

Gritó a todo pulmón que se fueran de su casa ya que quería estar sola y pensar en una solución a su problema.

Como perritos regañados todos se retirarón a sus respectivos lugares aunque via cosmos quedarón de verse más tarde en el templo de géminis para seguir con sus planes.

Mystoria igual se retiraba pero una delicada mano lo detenía.

- Gracias por todo Mystoria, en verdad te agradezco por tus palabras que lograrón tranquilizarme. En un tonto impulso la chica se paró de puntitas y besó la mejilla del peliceleste que se sonrojó por el reciente contacto.

- No fue nada pequeña escorpioncita, aunque no seamos tan cercanos yo te aprecio mucho y puedes contar conmigo para lo que sea. Le dedicó una cálida sonrisa y se retiró a su templo para hacer sus deberes.

La noche cayó en el santuario mientras el octavo y onceavo templo dormían sus guardianes, los restantes estaban en la tercer casa zodiacal pensando para mañana su manera de conquistar a Écarlate pero ninguno se ponía de acuerdo con las ideas mencionadas así que enojados todos dijeron que cada uno hiciera lo que quisieran.

Era el segundo día convertido en mujer abrió sus ojos lentamente pero vaya sorpresa la que se llevó al ver a Dohko con una sonrisa de oreja a oreja que la miraba dormir; se adentró tipo cinco de la mañana hasta que vio como comenzaba a despertar, Écarlate que no lo vio venir gritó asustada.

Su vecino sagitario que pasaba por "casualidad" en el templo lo escuchó y se adentró en los aposentos viendo a Dohko sentado en la cama tratando de calmar a la peliroja, lo sacó a patadas del lugar y él se quedó con la chica que ya mas calmada le agradecía pero las intenciones de Gestalt eran otras ya que intentó robarle un beso a Écarlate pero se ganó una cachetada por abusivo.

¿Pero que le pasa a éstos idiotas? Era el pensamiento de ella tomando una ducha pero no se esperaba que Death Toll se adentrara sigiloso al cuarto de baño y la espiara hasta que salió envuelta en una toalla, el de cabellos rojos la devoraba con la mirada, ya no mostraba sorpresa al contrario su enojo aumentó sacando a relucir su aguja escarlata y su cosmos era amenazante contó hasta tres para que saliera por esa puerta y como alma que lleva el diablo se fue corriendo asustado.

Ya vestida se dispuso a salir de su templo para ir a entrenar al coliseo dónde ya los demás estaban esperando la presencia de la belleza peliroja en cuánto la vierón se le amontonarón de nuevo excepto Mystoria diciendole que estaba muy hermosa, que era el amor de su vida entre otras pendejadas más que ya comenzaban a irritarla pero los ignoró como pudo ella, se acercó al peliceleste saludándolo ambos sonrojados y tímidos.

Si las miradas mataran el pobre del onceavo guardián estaría apuñalado por todas las miradas filosas que sus compañeros le dirigían a él, dejando eso de lado se concentrarón en entrenar pero Ox de tauro se mostraba arrogante que nadie le ganaría ya que era tan poderoso alardeando a los demás sus biceps bien marcados y que ésto vuelve loca a todas las chicas dirigiendo su mirada a la escorpio pero ésta la ignoraba.

Los ánimos se calentarón y Kaiser de leo que era igual fuerte se enfrentó a Ox en una batalla para ver quien se quedaba con el amor de la amazona dorada pero en la pelea intervino Izo de capricornio diciendo que él era el mas fuerte ya que poseia Excalibur otro caballero más se sumó a la batalla de tres.

Cardinale presumiendo que era merecedor del amor de Écarlate ya que es guapo no como ellos que eran feos se agarraron a golpes entre los cuatro pero se les unierón Dohko, Death Toll y Gestalt que no se rendían aunque ya los rechazarón.

Los restantes caballeros tan sólo observaban a los idiotas impulsivos y Écarlate preocupada porque nadie saliera herido por culpa suya, convertirse en mujer fue una maldición ya que ahora sus compañeros se peleaban por ella, la pelea fue interrumpida por el patriarca que enojado castigó a los que iniciaron la batalla con limpiar el coliseo y no salir de sus templos.

Mystoria no pudo acompañarla ya que el patriarca le dio la órden de vigilar a los revoltosos de sus compañeros y no causaran más desastres.

Écarlate subía los templos cansada, en virgo se detuvo un momento ya que la voz del dueño del templo le habló, Shijima que se encontraba en la pose flor de loto la abandonó para acorralar en un pilar a la chica en el oído le susurró que ella solo era para él y de nadie más la voz que utilizó era calmada pero amenazante.

Se alejó de ella para meditar y hablar con Buda sobre la futura madre de sus hijos, la peliroja camino a prisa los demás templos hasta llegar al suyo.

Se tiró en el sofá asustada por todo lo que pasaba desde que es mujer, cerró sus ojos un momento deseando que fuera un sueño y que en cuanto despertara seguiria siendo un hombre, el guardián del primer templo usando su poder de teletransportación fue directo al octavo viendo a la chica en el sofá.

- Hola Écarlate. La voz de Shión hizo abrir sus ojos rápidamente y ponerse alerta por si intentaba algo como los demás.

- Hola Shión que te trae por acá?.

- Verás yo quería saber si se te ofrece algo no sé una bebida, un masaje por si estás cansada o lo que quieras no dudes en pedirmelo. Se encontraba sonrojado, ese chico peliverde era demasiado tímido que le causó ternura, era él primero que era atento con ella y sin mala intención.

- Te lo agradezco pero estoy bien, espero no te moleste pero necesito estar sola.

- Oh por supuesto que no, si necesitas algo no dudes en llamarme si?

- Claro. Una despedida con su mano y  se fue teletransportándose de nuevo al templo de aries esperando ser llamado por esa chica que lo hacía suspirar.

Era medio día se dirigió a su habitación para darse una ducha y despejar su mente, quitó toda prenda de su cuerpo para meterse al cuarto de baño pero en esos momentos unas manos la sujetarón.

Los gemelos Caín y Abel usando su otra dimensión se infiltrarón en el octavo templo observando cuándo la chica se desnudaba, con sigilo caminarón para no ser notados interceptándola antes que se metiera a bañar, los gemelos eran conocidos por obtener lo que quieren al costo que sea necesario haciéndolos peligrosos, la chica asustada no sabía que hacer.

Estaba en medio de esos dos mastodontes que no dejaban de tocar cada parte de su cuerpo, la lujuria se reflejaba en sus orbes y las sonrisas cínicas que le daban, el hechizo para algunos terminó por volverlos locos de amor hacia su compañera de armas.

Sus ojos se cristalizarón ya que sería abusada sexualmente, no podía hacerles frente ya que los gemelos eran poderosos y ella al ser mujer estaba más indefensa que como hombre.

Odiaba ser débil, alzó su cosmo para pedir ayuda y que alguién rápido llegara a salvarla.

Besaban el cuello de la chica y las manos seguian recorriendo su anatomía las lágrimas recorrian sus mejillas deseando que ésto acabara, la habitación se sintió fria de un momento a otro y los cuerpos de los gemelos dejó de sentirlos.

Subía el sexto templo con desgano ya que el patriarca pidió vigilar a los idiotas de sus compañeros, una vez limpiarón todo él se marchó para ver como estaba Écarlate pero ya entrando al septimo templo un cosmo conocido por él pedía ayuda, corrió usando la velocidad de la luz hasta llegar al templo de escorpio dónde una escena grotesca se suscitaba ante sus ojos, los gemelos tenían acorralada entre sus cuerpos a Écarlate que con lágrimas se resistía a ser mancillada así.

La sangre le hervía de coraje y alzando su cosmo helado encerró en un ataúd de hielo hasta sus hombros a Caín el mismo destino fue para Abel que no vierón el ataque de Mystoria, el peliceleste cubrió con una manta el cuerpo desnudo de Écarlate que temblaba de miedo pero que se desmayó en sus brazos.

Via cosmo se comunicó con su diosa avisandole todo lo sucedido, no creyó que se saliera todo de control con su hechizo pero debía darles un castigo a los gemelos, le ordenó a su caballero cuidar de Écarlate pero que para estar mas segura se quedara con él en el onceavo templo a dormir o hasta que todo se calmara.

Aceptó la ordén ya que creia lo mismo, ella estaria mejor con él.

Mystoria para estar más seguro usando su poder cerró la entrada y salida de su templo con un muro de hielo grueso si querían pasar ya sea para subir o bajar debian buscar otro medio ya que el acceso estaba cerrado temporalmente.

El peliceleste limpió el cuerpo de la peliroja con una tela húmeda para quitar los rastros de sáliva y las lágrimas, le puso una camisa blanca de él para acostarla en su cama admirándola en silencio.

Desde que era un adolescente siempre le llamó la atención aquel chico solitario que entrenaba solo y él que le encantaba el silencio para leer un libro desde lo alto de un árbol lo observaba todos los días.

Cuándo alcanzo la madurez sus facciones varoniles le sentaban bien, se veía super guapo y esos ojos verdes le encantaban pero le parecía curioso los vasos sanguíneos alrededor de sus ojos haciendolo ver como si fueran cicatrices.

Ahora convertido en mujer era igual que como lo conoció en hombre solo que ahora se ve más delicada y frágil, pero en esencia seguía siendo él.

Si se quedaba siendo mujer para siempre la amaria con la misma intensidad que como lo hacía antes? La respuesta es que no importaba si era ¿él o ella? Su amor hacia Écarlate es por sobre todas las cosas y no importa él genero ya que sería la misma persona de la que se está hablando.

Dejó sus pensamientos de lado y salió de su recámara para preparar algo de comer para su invitada.

Se preguntarán ustedes ¿porque a Mystoria no lo volvió loco de amor el hechizo que con sus demás compañeros hacia la peliroja? Porque él ya ama desde antes a la amazona dorada y es tan puro y sincero que el hechizo no surtió efecto en él.

Se removió incómoda en la gran cama llegando a su mente ese horrible suceso de unas horas atras, no sabia si era de tarde o noche pero vio que traia una camisa blanca larga por debajo de las rodillas y un delicioso perfume varonil inundaba sus fosas nasales cerró sus ojos por inercia disfrutando del aroma, reconoció que no era su templo dónde estaba y esa no era su cama.

Se levantó y caminó por el pasillo hasta dar con la puerta de la cocina dónde el dueño terminaba de preparar la comida, reconoció esos cabellos celestes.

- Mystoria. Estaba de espaldas que ni se dio cuenta de su presencia.

- Écarlate veo que ya despertaste, ¿te encuentras bien?

- Si lo estoy, gracias.

- No es nada pequeña. Pero sientate que ya mismo te sirvo la comida. Asintió con la cabeza y ocupó un lugar en la pequeña mesa.

Sirvió dos platos con un caldo de verduras y pollo que olía delicioso, se le hacía agua la boca por probarlo.

La primer cucharada entró y sus papilas gustativas quedarón enamoradas por su sabor.

- Está delicioso Myst.

-Me alegra que te haya gustado. Le dedicó una sonrisa y continuaron comiendo en silencio.

Una vez terminarón de comer, ayudó a lavar los platos sucios, secarlos y acomodarlos en su respectivo lugar.

Volvieron a sentarse en la pequeña mesa para charlar de diversos temas sin tocar lo que pasó desde que fue convertido en mujer pero Écarlate sabía que debía agradecerle como se debe.

- Sabes Mystoria te agradezco de todo corazón lo que has hecho por mí, sé que no he sido un gran compañero de armas desde antes ya que siempre te he ignorado cuándo intentabas entablar conversación conmigo pero es porque tengo mis propias razones, me doy cuenta que eres alguién noble que merece mi respeto, ahora que llevo ésta maldición de ser mujer te has convertido en mi caballero de armadura dorada dispuesto a salvarme de las situaciones que me han tocado vivir. Gracias, muchas gracias. Se levantó de su silla para ir hacia donde estaba Mystoria y sentarse en las piernas del acuario para rodear sus brazos por el cuello y esconder su rostro en el hombro del peliceleste.

El otro no cabía de la sorpresa pero sus manos rodearón la pequeña cintura de la peliroja aferrandola contra su cuerpo en un abrazo que cobraba cálidez entre los dos, sus corazones latían en sincronía con el otro.

- No tienes que agradecerme, ya que siempre estaré para ti cuando me necesites aunque no seamos cercanos o no me hables yo sin dudar te ayudaré. Tienes a alguién que está dispuesto a todo por ti.

Se separarón del abrazo y se vierón directo a los ojos, Écarlate siempre se vio atraído hacia el guardián de acuario no entendía porque ya que nunca hablarón entre ellos o existia amistad para sentir aquello.

Un impulso la llamaba a juntar sus labios con los de él, le hizo caso a su instinto y el beso le supo a gloria a ambos.

Sus besos eran adictivos para el otro, no querían separarse pero el aire les hacía falta a sus pulmones rompiendo el contacto, un ligero hilillo de sáliva seguía uniéndolos.

Ruborizados trataban de controlar su respiración.

Mystoria tomó de la mano a la bella escorpio y le besó los nudillos.

- Écarlate si tú supieras cuánto te amo desde que soy un adolescente, quiero que me des una oportunidad de enamorarte para ser merecedor de tu corazón, no me importa si para siempre sigues siendo mujer yo amo a los dos por igual.

- Pero si ya te ganaste mi corazón precioso acuario desde antes de todo ésto, solo que prefería ignorar todo éste sentir que me causabas era un mar de confusiones pero sabes mi amor es solo para ti.

- Quieres ser mi novia?.

- Si, si quiero. Volvió a abrazarlo y le dio un corto beso en los labios sellando su noviazgo.

Casi caia la noche en el santuario y la nueva pareja disfrutaba cada momento entre risas y pequeños besos hasta que llegó la hora de descanzar donde durmierón abrazados.

El tercer y último día como mujer estuvo tránquilo ya que nada pasó con sus compañeros aparte que la mayoría estaban castigados excepto Shión que visitó el onceavo templo para saber como se encontraba Écarlate usando la teletranportación y se llevó la sorpresa de ver a ambos besandose apasionadamente en el sofá, incómodo y rojo hasta las orejas carraspeó para separarlos: un lo siento escapó de los labios de ambos, conversarón por varios minutos y el peliverde se despidió para desaparecer, el hechizo en sus compañeros desapareció en cuánto los primeros rayos de sol aparecierón pero ¿porque Écarlate seguia siendo mujer?

La razón esque desapareceria a la hora que fue el cambio osea a las 10:30 pm y el otro hechizo de amor era menor asi que al salir el sol del tercer dia se disiparia de todos.

El día pasó tan rápido para la pareja que disfrutaban la compañia del otro, eran las 10:27 pm a tres minutos de que volviera a ser hombre nuevamente.

Acostados en la suave cama se daban besos llenos de pasión que iba aumentando el calor en sus cuerpos desnudos, se amaban con locura y deseaban ir a otro nivel, fundir sus cuerpos en la danza más antigüa que solo los amantes hacían.

Los besos húmedos bajarón por el cuello de la chica que gimió gustosa, su entrepierna se humedecía por la excitación pero algo raro le pasaba a su cuerpo eran exactamente las 10:30 pm y poco a poco toda su anatomía iba tomando la forma de un hombre, Mystoria estaba tan entretenido en su labor que ni cuenta se dio lo que sucedía con su amante.

Bajó por el pecho lamiendo un pezón que se endureció con el leve contacto un nuevo gemido salió de los labios contrarios pero éste lo escuchó más águdo de lo normal, ignorando eso siguió con su labor atrapando el otro con su dedo lo pellizcaba.

- Ahhh... Myst-Mystoria. Esa voz, alzó la vista para ver al pelirojo que lo miraba con ternura y lujuria.

- Écarlate mi amado escorpión rojo, de nuevo eres tú.

- Si lo sé, al parecer se acabó esa maldición de ser mujer ya comenzaba a odiar serlo porque solo problemas causaba con nuestros compañeros.

-No digas eso, ya que algo bueno salió de todo eso y esque pude animarme a confesarte mi amor.

- Tienes razón y sabes que...

- Que?

- Te amo acuario.

- Yo igual te amo escorpio.

Unierón sus labios en un beso necesitado y demandante rodando por toda la cama, la temperatura en sus cuerpos subía y las manos recorrían sin pudor alguno la piel contraria.

Écarlate quedó arriba del peliceleste besando y succionando el cuello blanco dejando marcas rojas, bajó por el pecho llegando a esos pequeños pezones rosa donde los dejó ensalivados continuando su descenso hacia la entrepierna que estaba semi erguida.

Admiró ese trozo de carne y relamiendose los labios por el delicioso festín que se llevaría a la boca se metió todo el falo, un ronco gemido escapó de los labios de Mystoria, la humedad y la cálidez que le rodeaba todo su miembro era exquisito, por impulso movió su cadera haciendo que su pene se adentrara en lo más profundo de la garganta del pelirojo, comenzó a mover su cabeza de arriba hacia abajo de vez en cuando succionaba la punta del miembro y masajeaba con su mano los testículos.

El peliceleste gozaba de las sensaciones y la rica mamada que le daba su amante, su pene crecia más conforme pasaba los minutos y el liquido pre-seminal hacia acto de presencia.

Las descargas eléctricas por todo su cuerpo le anunciaban su próximo orgasmo pero él no quería terminar en la boca del pelirojo prefería en otro lugar.

- Detente!... quiero, quiero venirme dentro de ti. Aceptó la orden sin rechistar y se acomodó en la cama en cuatro alzando su redondo trasero exponiendo su mojada entrada que esperaba ser poseído.

- Soy todo tuyo belleza acuariana. Movió su trasero de un lado a otro incitándolo, ver ese lado atrevido le encantó y dándole una fuerte nalgada arrancándole un pequeño grito de sorpresa al de ojos verdes.

Paseo su lengüa por ese pequeño orificio separando los glúteos con su mano apretándolos hasta dejar marcado sus dedos por la fuerza empleada, el otro se deshacía en gemidos de placer moviendo sus caderas en busca de más contacto.

Ensalivó bien la entrada y masajeó su pene que comenzaba a perder rígidez, despertándola enseguida al ver en todo su esplendor tanta belleza, los cabellos exóticos de color rojo caian grácilmente por los costados cual cascadas y ese trasero que sería solo de él.

Puso la punta en aquel anillo de carne y de una sola estocada se adentró por las paredes anales que estaban estrechas pero húmedas, sentir la cálidez rodearle su pene hizo que soltara un jadeo de satisfacción, el otro gimió alto al ser penetrado de repente pero no se quejó.

Movió su cadera dándo a entender que podia comenzar con las estocadas y el otro captando la orden movió su pelvis iniciando con suaves movimientos que al pasar los minutos aumentó la velocidad ya que su escorpión pedia a gritos sentir más profundo aquel miembro tocando el punto g en repetidas ocasiones volviendo loco a Écarlate que movía su cadera en sincronia de los estoques.

Sus cuerpos perlados en sudor se movían frenéticos, los sucios sonidos escapaban de la boca de ambos que no los reprimían para nada al contrario los dejaban salir por las cuatro paredes y les valía si eran escuchados, el ritmo aumentaba como el calor que hacía en la habitación, Écarlate se aferraba a la sábana de color azul ya que su próstata era tocada deliciosamente por el pene de Mystoria.

Sus cuerpos ya no daban tregüa para más, las corrientes eléctricas les recorrian de la cabeza a la punta de los pies anunciando el inminente orgasmo que llegó como una fuerte oleada arrancando el último gemido a los dos, el peliceleste eyaculando en el interior del pelirojo y éste en la sábana dejándose caer rendidos en la desordenada cama, quedando dormidos al instante sin importarles estar desnudos.

La mañana los recibió abrazados y con una sonrisa de oreja a oreja, ahora que volvía a ser hombre le daba más confianza salir del onceavo templo, desayunarón y salierón a entrenar ya que no tenía ninguna molestia en la espalda baja encontrando a todos sus compañeros con caras de vergüenza ya que cada uno le pidió perdón a Écarlate por sus malos comportamientos en especial los gemelos de géminis que se pasarón de la raya éste con una sonrisa los perdonó a todos diciendo que olvidarán lo sucedido y quedara como un mal sueño.

Nunca se supo quién fue el dios de la broma aunque cierta diosa prefirió callarse ya que sino seria congelada o dejada como colador por tal bromita pero que resultó con una pareja que se amaban demasiado tal como lo hizo Ganímedes en su momento con Antares.

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Hola mis lindos lectores esperó les haya gustado el intento de Genderbender que hice con ésta parejita.

Mi querida Mabesagittarius esperó te guste el resultado de la historia, valoro mucho cada plática contigo y en esas surgió ésta idea.

Sin más me despido los amo espero subir pronto el otro one-shot ya que las pastillas por ahora aturden mucho mi mente pero mi salud ya va mejorando.

Atte. Skarlet Antares ☠🦂❄💙