Los días de Harry
Los Días de Harry.
04 de Noviembre, 2011.
—Pensé que iba a encontrarte lleno de moscas y oliendo a alcohol—es lo que dice Dexter al entrar a mi apartamento.
—¿Es esa la razón por la que usaste la llave que te di para casos de emergencia?—murmuro sin siquiera despegar la vista de la televisión.
—Bueno, estaba armándome una jodida escena en mi cabeza en donde te encontraba hecho mierda.
—No necesito estar desarreglado y arrastrándome para manifestar que tengo un corazón roto.
—Bueno, deberías darle ese consejo a Andrew, quien ahora seguramente se encuentra tomando un fuerte café cargado hecho por Ethan.
—¿Qué sucedió con él?—pregunto viéndolo finalmente, Dexter abre sus ojos con sorpresa.
—¡Joder! Tienes los ojos irritados, Harry si quieres llorar hazlo, prometo que no voy a reírme.
—No quiero llorar, quiero golpear a las personas ¿me dejas golpearte hermanito?
—Cabrón—murmura Dexter por lo bajo pero alcanzo a escucharlo—¿sabes? Entiendo el miedo de Kaethennis Harry, esta aterrada, siempre ha sido ella sola y el niño, nunca se planteó si quiera que algún día su hijo querría un padre.
—Hay maneras de decir las cosas Dexter, manera y formas sin herir a una persona que te ha dicho más de una vez cuanto te ama. Creo que por respeto al menos pudo ser más…
—¿Más que Harry? Sea cual sea la manera en la que te lo dijera iba a dolerte, quizás solo debes dejar que ella se dé cuenta de su jodido error, porque lo hará, esa mujer te ama.
—¿Y si luego es demasiado tarde?
—Ni tú te crees esa mierda Harry, no eres de los que renuncian, estoy seguro que te harás el difícil porque estas como un cachorro herido que no quiere ser tocado por la mano que lo apaleó, pero en algún momento tu solo irás por una explicación. Te conozco bastardo.
—¿Esta es la parte en la que dices que me amas?—intento bromear.
—No diré algo que ya sabes.
—Tan dulce, yo te amo más—bromeo haciéndolo reír, acabo sonriendo un poco, pero solo un poco porque a dos días de haber llegado de Liverpool me siento dolido.
Él muerde su piercing que ahora hace que las chicas enloquezcan más por él, luego se gira a observarme de nuevo.
—¿Quieres decirme como se sintió que él te llamara “papi”?
No puedo evitar sonreír ante la pregunta. Creo que es la primera vez que puedo expresar en voz alta la manera en la que se sintió.
Puede que en el momento en el que lo dijo estaba alterado por Kae, pero luego en la tranquilidad de la camioneta comencé realmente a comprender que él me había llamado papi, que es la manera en la que me ve.
—Yo nunca me he sentido tan orgulloso Dex, ni siquiera cuando quedé en la banda—llevo una mano a mi pecho—mi corazón incluso latió muy rápido y sentí un nudo en mi garganta porque deseaba volver a escucharlo decirme “papi azul”.
>>Siempre he sabido que quiero quizás dos niños, pero lo veía en un futuro, pero maldita sea si Harry Daniel no cambio mis planes, porque lo quiero ahora, quiero llamarlo hijo, mi primer hijo. Tu tenías que escucharlo y verlo, como me señalaba y gritaba papi, es una de las mejores cosas que me ha pasado en la vida y no quiero perder eso. No quiero perderme la oportunidad de ser llamado papi por él.
—¿Crees que luego él pueda llamarme tío? Digo, si ella no lo deja entonces voy a raptar realmente al niño—dice riendo— si te sirve de algo, yo también te veo como su padre Harry, todos lo hacemos, incluso ella solo que le da miedo admitirlo.
Suspiro y recuesto mi cabeza del sofá, quizás Dexter tiene razón, pero ahora, justo ahora que me siento tan lastimado y herido por ella… yo no quiero saber de ella, ni un poco.
—Dime que ha sucedido con Andrew.
—Isla le dio una especie de ultimátum y él jodidamente se emborrachó en su departamento mientras pensaba en el ultimátum.
Procedo escuchar la historia y Dexter me asegura que si hay alguien que en poco tiempo tendrá un corazón roto, ese es Andrew y no lo contradigo porque es algo que todos hemos notado, todos menos Andrew.
***
06 de Noviembre, 2011.
—¿Andrew tu estas bien?—pregunto cuando lo veo sentado con una botella de agua en el sofá del lugar de ensayo, el resto no ha llegado aún de comer.
—No, no lo estoy—se limita a responder, me siento a su lado—voy a hablar con Isla, no me ha gustado su ultimátum, estoy cansado Harry.
—¿De qué?
—De fingir, de medir mis pasos, de ser lo que quiere. Joder de dejar de hacer las cosas que quiero, me siento como un maldito niño al que su madre reprenderá si no hace lo que quiere—ríe de manera sarcástica y luego hace una mueca—la amo, pero esto no me está haciendo feliz ni un poco, ni siquiera he podido dormir.
—¿Qué piensas hacer?
—Fácil, le diré que o me toma como soy o bueno, supongo que acaba.
No digo nada, pero si Isla ha intentado moldearlo es porque evidentemente no lo acepta como es y estoy prediciendo un poco lo que va a suceder.
—¿Qué hay de ti? Hoy te has equivocado como tres veces durante las canciones y tienes un poco de ojeras.
—Bueno supongo que ya sabes que como que me han cortado—me callo abruptamente—olvídalo, me han botado y pateado de Liverpool porque ella necesita “espacio” y yo “confundo” a Harry Daniel, ya sabes, soy el hombre que confunde a todos.
—Suenas enojado, muy enojado.
—Mierda, claro que estoy enojado, muy enojado, tan enojado como para querer sacudirla—frunzo el ceño.
—¿Quieres papel y lápiz para que escribas una canción?
—No soy un cantante country Andrew, no voy a escribir una canción de odio que luego se haga famosa y de la que más adelante pueda arrepentirme.
—Bueno, Ethan escribió una canción de dolor de Samantha que se hizo muy famosa y de la cual está orgulloso, oh y Adele saco todo un disco acerca de su dolor…
—Bueno, yo no haré eso—digo y él ríe, al menos lo he hecho reír. Él dice que yo tengo ojeras pero él tiene unas ojeras enormes que ni Lissie puede ocultar con maquillaje.
—Mujeres Harry, por eso es que hay tantos mujeriegos en este mundo, nos vuelven un desastre.
Voy a responder pero entonces Dexter aparece con una sonrisa y gritando como un idiota.
—¿Cuál es el alboroto?—pregunto.
—Keith me escribió ¿adivina?
Por un momento imagino cualquier cosa que puede haberle pasado a Kaethennis o a Harry Daniel, pero me relajo al entender que si ese fuera el caso, mi hermano no estaría sonriendo.
—Bridge ha dado a luz, Adam ha llegado al mundo.
Lo miro sorprendido y es Andrew quien realiza la pregunta que quiero hacer.
—¿Ella estaba de parto?
—No, fue una cesárea de emergencia—responde Dexter, disfrutando ser quien sabe la información.
—¿Pero ella está bien? ¿Adam?—pregunto.
—Ella está bien, él niño está en observación.
Asiento con la cabeza y deseo realmente que Adam pueda salir sano y a salvo con sus padres. Ellos lo merecen.
***
13 de Noviembre, 2011.
—¿Por qué no me respondes las llamadas?—cuestiona mamá entrando a mi departamento seguida de Hilary.
La miro sorprendido, no me esperaba que apareciera, Dexter, quien abrió la puerta camina con rapidez hacia la cocina, algo me dice que ha sido él quien la ha llamado.
—Hilary abre las ventanas—ordena mamá, yo entrecierro mis ojos cuando la luz me ciega—al menos no hueles mal, lo que significa que te has bañado.
—¡Por supuesto que me he bañado! También como, solo estoy cómodo en mi apartamento ignorando al mundo, gracias.
Siento un repentino jalón en mi oreja, mierda, he hecho enojar a Hannah. Escucho la risa suave de Hilary.
—Harry Cole nunca, jamás de los jamás vuelvas a hablarme de esa forma si no quieres que te de una buen escarmiento ¿de acuerdo cariño?
—Claro, claro mamá, lo siento—murmuro deseando que liberé mi oreja, ella lo hace.
—Ahora hazme el favor de ponerte un pantalón que vamos a ir a comer, Carter nos está esperando.
—Sí, apúrate que estoy hambriento—grita Dexter sacando comida de mi nevera.
—¿Comida familiar?—pregunto porque no pienso contradecir a mamá.
—No, comida “saquemos a Harry Cole de su auto miseria” apúrate—me ordena y obedezco con rapidez.
A las madres nunca hay que llevarles la contraria.
***
14 de Noviembre, 2011.
¿Dónde jodidos esta Kaethennis?
Sé que le dije que sabría de ella cuando así lo quisiera, pensé que realmente no le costaría mucho vencer su miedo y darse cuenta que la amo y a Harry Daniel, pero tras estas dos semanas no he sabido nada, absolutamente nada de ella.
Observo mi celular con ira. ¡Maldita sea! Nadie me mando a enamorarme, nadie.
Paso una mano por mi cabello mientras siento la mirada de Dexter, estoy en su apartamento. Él come y me observa, como si intentara calmarme con su mirada. Yo he de tener harto a Dexter con mis quejas y descargas de furia, pero es un hermano que vale oro, no se ha quejado ni una vez.
—Que veas tu celular continuamente no hará que suene ¿sabes eso, verdad?
—Cierra la puta boca Dexter.
—Vaya, ahora resulta que tienes muchas palabras sucias para decir—dice con una pequeña sonrisa—vamos, deja salir la mierda que contienes.
—Se jodió ¿me entiendes? Mando esta relación a la mierda, me cansé de esperar, lo entiendo. Es un “fuera de mi vida Harry” lo capto, maldita mierda, todo que se vaya a la mierda.
—¿Algo más Harry?
—Estoy tan cabreado—grito frustrado— se acabó, esta cosa “karry” terminó, listo aquí queda.
—Claro…
—Estoy hablando en serio Dexter Thomas.
—Que digas mi nombre completo no me intimida ni un poco.
—¡Vete a la mierda! Tú, Kaethennis, todos váyanse a la maldita mierda— digo saliendo de su apartamento y lanzando con fuerza la puerta.
Es cuando llego a mi apartamento que me doy cuenta que dejé mi celular, pero no me importa. Ya lo he dado por terminado.
***
16 de Noviembre, 2011.
—¡Hey!—dice Dexter llegando hacia mi mientras compro un café fuera de nuestro lugar de ensayo—¿Cómo está mi hermano malhumorado?
—Tu hermano malhumorado va a arrojarte café caliente si comienzas a fastidiarme.
—¿Qué pasó con todo ese amor de hermano que decías sentir por mí?
—Dexter, ¿Qué sucede?
—Dejaste tu celular en mi apartamento, y puesto que ahora te dedicas a evitar al mundo, no me quedo de otra que esperar a ver tu jodido culo en el ensayo—me lo tiende, lo tomo y lo guardo—te han llegado un montón de mensajes y notificaciones.
—Que bien.
—Y Kathennis llamó y te dejó un mensaje—dice y el café cae al suelo haciéndonos saltar para que no nos salpique.
—Mierda—digo viendo el café derramado en el suelo con el ceño fruncido.
—Ella te dejó dicho algo.
—Ah vale.
—¿Vale? ¿es todo lo que dirás?
—¿Qué se supone que debo decir? Se supone que no somos nada, así que si, vale.
—Vaya—me mira incrédulo— solo vaya, Harry realmente nunca te he visto de este modo, estoy… mierda, sorprendido.
—No veo el porqué.
—¿Te sientes bien?
—Estoy respirando que es lo importante—es lo que digo antes de girarme de nuevo hacia uno de los que atiende—dame la misma orden, por favor.
Esperamos mi café, últimamente tomo mucho, pero supongo que es porque eso me mantiene activo. Me giro hacia Dexter.
—Bueno ¿vas a darme el recado o vas a verme como si fuera un extraño?
—En serio que estas muy hostil—niega con la cabeza—básicamente es que ella tiene algo importante que decirte, que necesita realmente hablar contigo, que la llames.
Asiento con la cabeza tomando mi café, luego comienzo a caminar de vuelta seguido por él. Parece que quiere decir algo.
—¿vas a llamarla, verdad?
—Supongo que lo haré en algún momento.
—¿Por qué no ahora?
—Porque esperé mucho tiempo ¿sabes lo que pasa cuando esperas mucho tiempo Dexter?—pregunto, él solo me observa con el ceño fruncido—te cansas, y yo estoy cansado, muy agotado de toda esta mierda del corazón roto.
—Pero…
—Supongo que la llamaré mañana.
Digo dando por zanjado el tema. Sí, me cansé.
***
17 de Noviembre, 2012.
—¿Qué mierda Andrew?— pregunto viéndolo empacar, parece tan cabreado que soy muy cuidadoso.
—Me largo, no puedo estar en un lugar donde la persona que dijo amarme me dijo como no podía lidiar con mi mala actitud— espeta cerrando la maleta— ¡Mala actitud! Pues resulta que mi “mala actitud” es mi maldita personalidad. Que se joda, que se joda de la manera en la que me ha jodido al no quererme como soy.
—¿A dónde se supone que irás?—pregunto aun sorprendido viéndolo movilizarse, ahora parece que tiene mucha energía pero sé que en algún momento caerá y desde luego como su amigo pienso estar ahí. Así tenga que viajar con él.
—Fuera de Londres, no lo sé, hice una reservación en un hotel—dice deteniéndose finalmente a verme—no puedo quedarme aquí, no ahora.
—De acuerdo, entonces debes conducir a mi apartamento para yo también tomar algo para llevar—él me ve incrédulo—¿no pensaste que te dejaría solo, verdad?
Él sacude su cabeza antes de salir del apartamento siendo seguido por mí. Supongo que lo de llamar a Kaethennis, el mensaje que Dexter me dio ayer, lo dejo para después.
Después todo estuve mucho tiempo esperando, un día más para ella no ha de marcar mucha diferencia.
***
18 de Noviembre, 2011
¿Dónde se supone que he dejado mi celular?
Andrew y yo llevamos solo un día instalados en el hotel y justo cuando busco mi celular para hacerle saber a Dexter y padres donde estoy no encuentro mi celular.
Frunzo el ceño mientras busco una vez más.
Otra cosa que se me ha perdido es Andrew. Aunque intuyo que está en el bar del hotel, esto será bastante difícil.
La ultima que vez que vi mi celular tenía más de una llamada perdida a Kaethennis, se supone justo ahora iba a contactarla.
—Será mejor buscar a Andrew—murmuro para mí mismo saliendo de la habitación y topándome de frente con Jenny.
Mi primera reacción es la sorpresa. No entiendo que hace aquí. Ella me da una gran sonrisa.
—Harry justo pasaba a saludarte…
—¿Qué haces aquí?
—Quise despejarme unos días—la observo con los ojos cerrados, pero luego sacudo mi cabeza.
—Lo siento, pero voy en búsqueda de Andrew.
—Déjame y te acompaño—la escucho a decir pero ya he comenzado a caminar, aunque la siento detrás de mí.
Encontrar a Andrew no es difícil, lo difícil es llevarlo a la habitación y asegurarme que no va a ahogarse con su propio vomito cuando comienza a liberar todo el licor que ha ingerido.
—Mierda Andrew—digo arrojándole un poco de agua fría al rostro.
—Siento… que la… odio—dice arrastrando las palabras antes de vomitar una vez más.
—Tu tranquilo.
Él vomita una vez más y luego observa a Jenny en la entrada del baño.
—Aléjate… de ella—gime de manera dolorosa—es una arpía…
No lo contradigo mientras él da otra arcada y vomita.
En algún momento Andrew se queda dormido y me cuesta mucho llevarlo a la cama, me encargo de dejarlo en posición fetal, lo último que quiero es que se ahogue con su propio vomito.
Por alguna razón parecida a la estupidez, acepto ir a tomar algo con Jenny y lo cierto es que no resulta tan mal.
Durante un largo tiempo conversamos, de una manera agradable, de esa manera en la que solíamos hacerlo en nuestros momentos buenos en la relación.
Por un momento me encuentro deseando volver a ese tiempo donde todo lo tenía fácil, donde la relación era monótona y una rutina que realmente no me afectaba. Pero eso sería renunciar a unos buenos recuerdos con Kaethennis y Harry Daniel.
Kaethennis ha marcado mi vida y no sé cómo borrarla.
Aun cuando al despedirnos Jenny se pone cariñosa, logro esquivarla y asegurarme que Andrew respira y está profundamente dormido.
Esa sí que es la imagen de un hombre destruido.
***
19 de Noviembre, 2011.
—Harry, debes bloquear tu cuenta o hacer algo—me dice Andrew con voz rasposa y gafas de sol por la resaca—quien sea que encontró tu celular se está divirtiendo escribiendo por ti en twitter.
—¿Qué?—digo arrebatándole el celular de las manos—cancelaré mi correo electrónico desde aquí, no podrá entrar de ese modo.
—Como quieras.
Miro brevemente a Andrew, luce fatal y apuesto a que su resaca es terrible, ni siquiera puede observar el plato de su desayuno. Él silba repentinamente mientras acabo de cancelar mi correo electrónico.
—No sabía que Jenny Fletcher estaba aquí—musita, alzo la vista y Jenny se acerca a nosotros.
—¿Es en serio? De hecho ayer dijiste algo como que me alejará de esa arpía.
—Tan equivocado no estaba—murmura justo antes de que ella llegue hacia nosotros.
—¿Qué tal sigues Andrew?
—Vivo—es lo que responde poniéndose en pie— creo que iré a caminar.
Lo veo irse, Jenny toma asiento con una gran sonrisa, me incomodo un poco.
—Entonces solo somos tu y yo.
—Más como que era yo y tú te sumaste.
—Que bromista eres Harry.
De hecho, yo hablaba muy en serio.
***
Hablar con Jenny durante toda la tarde por un momento me tuvo viajando a los recuerdos, a nuestra relación y aunque un momento extraño lo fácil, me doy cuenta que no añoro esos tiempos.
Me gusta el paso que ha seguido mi vida, estoy orgulloso de mis decisiones, aun cuando éstas me llevaron a estar justo donde estoy ahora: sintiéndome como la mierda por extrañar a dos personas que amo con locura.
Estamos en el pasillo del hotel terminando la conversación.
—De verdad me alegra haberte encontrado aquí Harry.
—Sí, es como una gran coincidencia ¿eh?—digo rascando la parte baja de mi nuca.
Ni siquiera la veo venir, un momento ella está sonriéndome y al otro besándome. Besando con ahínco y fuerza, siento humedad sobre mis labios.
Estoy aturdido pero luego la aparto y la observo con sorpresa.
—No puedes hacer eso Jennyfer, no… simplemente no lo hagas.
—¿Por qué? Podemos recordar viejos tiempos Harry, solíamos pasarla bien.
—No me interesa el sexo vacío, amo a alguien y no voy a hacer esto. No puedo y no quiero.
—¿Qué mierda te sucede Harry? ¡solíamos ser novios! Soy atractiva, tenemos historia, años de relación.
—Solo dos y medio.
—Como sea, debes extrañarme, no entiendo que está mal contigo ¿Qué es lo que te ha hecho ese intento de mujer?
—Me ha enamorado, algo que tu no lograste.
—¡Ja! Te diré lo que ha hecho: solo es una niña que intenta comportase como mujer ¿no lo ves? No es nada madura ¿el niño? ¡Maldita sea! Es obvio que solo lo usa para atraparte ¿es que eres ciego?
Por un momento casi olvido que es mujer, pero luego sacudo mi cabeza.
—No soy ciego, veo lo que tengo que ver y estoy viendo que eso de ser amigos no va a funcionar, que tengas una buena noche Jennyfer.
Me doy la vuelta caminando hacia el ascensor para ir a mi habitación, la escucho hablar tras de mí, pero ni intento escucharla.
Paso mi mano por mis labios intentando quitar su pintura labial.
¿Qué mierda es esta? ¿en qué momento he caído en estos días oscuros?
Cierro los ojos con fuerza dentro del ascensor, no quiero nada. Realmente quiero mandar todo al carajo, ni siquiera quiero hablar con Kaethennis.
No quiero hacer absolutamente nada, y eso es peor que la resignación.
Hola.
Odio a Jennyfer lalalalaala.
Ya vamos recta final en las escenas extras. Para las que no sepan el libro de Doug ya esta siendo subido.
Espero les guste.
Pagina de facebook en el primer comentario y en mi biografía.
Un beso.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro