aclaración: mayores ; quirks ; no spoilers.

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Kirishima está caliente. Literalmente caliente en gran parte de su cuerpo, haciendo énfasis en su rostro y en sus hombros. Está rojo, más rojo que nunca. Y le duele demasiado.

No hay que ser un genio para comprender que se ha quemado por el fiero sol de Junio, ¡pero qué iba a saber él, si ese día estaba nublado! Había llovido en la mañana incluso, y ahí está la razón de por qué no llevó bloqueador solar a la piscina (y se metió igual a ella a pesar de que estaba feo.)

—Te dije que usaras protector.

Y ahí está Bakugō, atrás suyo con crema en mano y sus te los dije. Te dije, te advertí que iba a salir el sol. Ha repetido esas frases desde que despertó adolorido.

—Déjame en paz. —Pucherea. Sisea cuando el rubio toca ligeramente más fuerte en su hombro—. ¡Auch, oye! … ¿Me pasas más cremita, porfis?

Bakugō chasquea la lengua. No es la primera vez que el pelirrojo se pasa de cariñoso con el sol. Parece que no conoce el significado de protector solar (o de usar camiseta al menos). Y esto viene siendo una realidad desde el secundario.

Bakugō escupe un "no" y le deja el pote sobre la cama. Aunque para una parte de él siempre es divertido frotar el formado cuerpo de su novio con crema, Kirishima debe aprender la lección.

¿Y de cuál lección hablamos? De que él siempre lleva la razón.

Aunque más tarde, probablemente, cedería a las constantes súplicas del pelirrojo. No es un monstruo sin corazón (casi.)

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me quemé mal en mi fiesta de egresados y de ahí nace este drabble. jsjsjsjs
pero yo no tengo un aries pa que me frote la espalda con cremita mientras me reta por irresponsable 🙄 AJAM ariimidoriya AJAM.