Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

16. Un Río De Emociones

POV Bella

Terminamos el helado, para después seguír andando en la moto, como dos viajeros sin rumbo. Todo eso pasó en una hora en total. Ese momento fue tan perfecto, hasta que después ocurrió lo que nadie quería.

--¡Ahí estás!

Yo y Chat volteamos la cabeza, y definitivamente la que exclamó fué la villana, quién estaba acompañada por Ladybug. Ellas luchaban entre sí, mientras al mismo tiempo nos seguían.

¿Por qué algo siempre debe arruinar el momento?

--¡Chat Noir! ¡Dile a esa chica que detenga esa moto!--habló la azabache detrás.--¡No puedo hacer esto sóla!

Volvimos a voltearnos, para concentrarnos en el viaje.

--¡Acelera más!--me gritó el rubio.--¡Por favor! ¡Nos encontraron!

Le hize caso, y cada vez aceleraba más. Al igual que él, estaba muy asustada.

--¡Tomen esto!--exclamó la espeluznante enfermera, quien nos lanzaba un montón de jeringas.

--¡Esquívalas!--gritó el chico, igual de aterrado que yo.

Yo conducía el vehículo hacia un lado y luego al otro, formando unos largos zig-zags mientras gritábamos.

--¡Chat Noir te hablo en serio!--le decía Ladybug a él, mientras nos seguía desde los techos.--¡Estuve por una hora luchando con ella y aún no logro quitarle el akuma! ¡Baja de ahí ahora!

--¡Tu no puedes ordenarme qué hacer!--le respondíó Chat.

Yo aceleraba más la moto. Por suerte, los semáforos que habíamos pasado estaban en verde y hasta ahora no habíamos chocado con ningún auto.

--¡Necesito tu cataclismo! ¡El akuma debe estar en algunas de las jeringas de su bolso!--exclamó Ladybug, quedándose atrás.

--¿Y arriesgarme a que alguna me pinche? ¡Jamás!--gritó más fuerte, para que ella lo escuchara.

--¿Que tal si lanzo las jeringas hacia adelante, gato escurridizo?--dijo la akumatizada.

La mujer hizo caso a sus propias palabras. Yo y Chat Noir agachamos nuestras cabezas, de modo que ninguna nos llegó a caer. Al levantarla, nos percatamos que el semáforo cambió a rojo.

--¿Que hacemos, Bella?

Yo lo miré, para luego acelerar mucho más la moto, pasando el semáforo en ese estado.

Si mi mamá me viera haciendo ésto, me mata.

--¡Aaaahhh!--gritamos al mismo tiempo.

Por suerte no habíamos atropellado a nadie. Luego de esto, nos terminamos riéndo. Seguíamos yendo para los lados, esquivando agujas y autos, más rápido que antes.

--Tengo miedo. ¿Y si esto no resulta?--pregunté, asustada.

--Tú sigue y no pienses en eso.--me respondió Chat.--Sé que vamos muy rápido, pero te prometo que nada malo nos pasará.

Sus palabras me calmaron un poco, así que seguí. Me voltee para ver qué tan lejos estaban las otras dos chicas, y al parecer íbamos tan rápido que no lograban alcanzarnos. Me dí cuenta de que la gente comenzaba a tomarnos fotos mientras estábamos en la moto, pero luego se desmayaban con las inyecciones que le lanzaba la villana.

--¡Se acabó!--gritó la mujer.--¡Esta vez no podrán escapar! ¡Inyecciones cohetes!

La villana tomó dos jeringas de su bolso, más grandes que las anteriores, para lanzarlas hacia nosotros. Esta vez nos seguían, no teníamos escapatoria.

Al menos si moría, sería junto a él ¿No?

--¡Creo que ahora sí es nuestro fin!--gritó él.

Esta vez Chat miraba hacia adelante, mientras yo miré hacia atrás rápidamente para ver qué tan rápido se acercaban, y luego volví a voltearme. Ví la torre Eiffell. Lo que iba a hacer, quizás sí nos mataría.

--¡Pues no tenemos otra opcion, Chat!

Aceleré más el vehículo, dirigiéndome a la torre. Mi plan era nada más y nada menos que, con nuestra moto a toda velocidad, termináramos escalando la torre.

Definitivamente esto fué lo más arriesgado que he hecho en toda mi vida.

--¡Aaaahhh!--gritábamos, aún más fuerte.

Dí una corta mirada hacia atrás, o mejor dicho, hacia abajo. Lo que alcanzé a ver fué que las inyecciones ya no nos seguían, sin embargo, siguieron adelante, chocándole a otros dos parisinos. La villana se quejaba, pero luego no logré ver nada más que los Parisinos más pequeños abajo. Mientras, Chat Noir miraba hacia los lados, viendo seguramente a las personas que estaban en la torre.

Después miré hacia arriba, donde ya habían helicópteros de la policía y las noticias. Volví a mirar hacia adelante, aún manejando la moto, pensando en qué momento moriría. Adrien, o Chat, me lo advirtió desde el principio, pero no hice caso, y yo misma tuve que hacer ésto para darme cuenta de lo suicida que era.

Me quedé asustada y gritando todo el viaje. Ya llegábamos hacia la punta, y nos faltaba muy poco.

Genial, moriríamos hechos puré.

Finalmente, pasamos la punta. Estábamos en el cielo, volando encima de la moto, ambos gritando, aunque no entendía mucho por qué Chat lo hacía, quizás sólo porque quería. Ahora rápidamente estábamos cayendo, y no pude evitar llorar.

Mientras gritaba y las lágrimas caían por mi cara me quedé pensando. ¿Cuáles serían las ventajas de morir? ¿Ser libre al fin, quizás? Tal vez sí, ya que no tendría más órdenes y no oiría las peleas de mi familia nunca más, y seguro nadie lloraría por mí. Si, morir era la mejor opción. Parece que eso de que los miedos te matan terminó siendo cierto. Chat paró de gritar, seguro para decirme algo.

--¡Tranquila! ¡Estás conmigo! ¡Yo te cuido!

Esas últimas palabras me encantaban de su parte, pero sabía que no lograrían hacerse realidad, ya que ambos, o quizás sólo yo, sabía que moriríamos en este instante, era obvio. Faltaba poco para que llegáramos al suelo. La única posibilidad de sobrevivir era hacer caer la moto en pié, pero era prácticamente imposible.

--¡Confío en tí! ¡Puedes hacerlo!

El también se había dado cuenta de lo que yo tenía que hacer. Aún así, miré lo mejor posible donde tenía que hacerla bajar, aunque seguramente sin ningún buen resultado. Parecíamos un meteoríto, ahora que lo pensaba, y pronto sería estrellado contra el suelo, causando una explosión.

Siempre con las mismas ideas pesimistas y suicidas.

Unos pocos centímetros más contra el suelo. Yo comenzé a acomodar la moto en la mejor posición, mientras susurraba pidiendo perdon por todos mis errores. Aún así me concentré, y sin saber cómo hize que cayéramos justo en pie hacia el suelo. La gente aplaudía mientras la moto seguía andando velózmente por la calle.

--¡Lo hiciste, princesa!--exclamó el chico, alegremente.

Dejé de gritar. Mientras seguía llorando pensaba: ¿Cómo no morimos si era lo más probable? ¿Chat hizo algo con su bastón? Lo más probable es que sí, porque nunca yo haría algo así tan bien, si todo lo que hacía siempre lo hacía mal, y lo peor es que eran cosas de las más simples. Seguía con algunas lágrimas en mis ojos, pero finalmente acepté la idea de que estábamos vivos y a salvo, así que sonreí.

Estaba feliz, algo no muy común en mí.

Mientras tanto, los parisinos nos seguían aplaudiendo. Luego nos alejábamos a un lugar más vacío y con casi nada de gente, pero me dí cuenta de que íbamos a 100 kilómetros por hora, y estábamos a punto de chocar con una estatua.

--¡Cuidado!--gritó Chat.--¡Frena!

--¡No se cómo!--contesté.

Y era cierto. Si nunca conducí un vehículo como este... ¿Cómo iba a lograr frenarlo? Aunque pensándolo mejor, si yo misma pude salvarme a mí y a Adrien de la muerte ¿Por qué no podría hacer esto? Bueno, simplemente porque las cosas nunca me salían bien dos veces.

Aún así, intentaba tomar y pisotear cualquier cosa, hasta que finalmente logré pisar el freno de abajo y tomar fuertemente el de arriba, parando todas las ruedas justo a punto de chocar contra la estatua. Acomodé la moto en una posición razonable, logrando detenerla a tiempo.

Ambos nos bajamos del vehículo, dejándolo a un lado. Lo primero que sentí fué un fuerte abrazo de Chat, uno que nunca había recibido antes.

--¡Lo lograste, my Lady! Nos salvaste ¡3 veces! ¡Tal vez hasta más!

No sabía que decir, y sólo sonreí. El dejó de abrazarme, pero no me soltaba de los hombros. Me confundí por unos segundos, para luego sentir lo que jamás me imaginé.

Mi primer beso.

Correspondí, aunque no sabía si lo hacía bien o mal, porque nunca antes había besado a un chico. Al parecer si le gustó, ya que aún no dejaba de besarme. ¿Y por qué mentir? A mi me encantaba esta sensación.

Dejamos de besarnos por falta de aire. Nos miramos fijamente, y yo aún no tenía palabras para decir. Este día viví un verdadero río de emociones: alegría, miedo, tristeza y hasta amor, todo eso en unas pocas horas.

--¿Bella?--preguntó él, sacándome de mis pensamientos.

--¿S-si?--respondí

--¿Q-que opinas de todo esto, bogaboo?

Sus apodos me encantaban.

--Confusión.--respondí, sinceramente.--Es sólo que... hoy sentí tantas cosas a la vez, todas casi al mismo tiempo. De una emoción, pasaba a otra y... es dificil procesar todo esto en unos segundos.

--¿Y qué sientes ahora, en este instante?

--Emm... no lo sé.

El me siguió mirando, y yo sólo lo miraba a la cara. Me cuesta mucho mirar a las personas directamente a los ojos, pero con todo lo que pasé junto con él sabía que estaba segura.

--Esta bien que no lo sepas, y que te sientas confundida.

El me soltó, y luego comenzamos a caminar.

--Seguro es la primera vez que has vivido todo esto. Tu primera escapada ante una villana, la primera vez que literalmente volaste y además tu primer beso, que fué con el superhéroe más apuesto de Paris.--dijo, para luego guiñarme el ojo.

--Si.--afirmé.--Hablando de la villana... ¿Qué vas a hacer?

--No te preocupes, seguro Ladybug ya hizo su Lucky Charm y pronto Paris volverá a la normalidad. Por mientras, tu y yo quedémonos aquí, solos.--habló, mirándome coquetamente.

Asentí con la cabeza, sonriendo. Sus coqueteos me parecían tan adorables.

--Bella... ¿Puedo preguntarte algo?

--Lo que quieras.

--A tí... ¿T-te hubiera gustado ser superheroína alguna vez? Ya sabes, como Ladybug o yo.

--No.--contesté, rechazando rápidamente.--No podría luchar casi todos los días con villanos como ustedes dos. Además... ¿Qué pasaría si viene un villano con algo que me aterroriza, como nos pasó hoy?

--Eso último es una rotunda afirmación, señorita Bella.--dije, posando mientras la señalaba.--Pero... ¿Es por miedo?

--No sólo por eso, sinó porque prefiero estar en mi casa, relajada y descansando.--respondí, para luego soltar una pequeña risita.

--Vaya, al parecer la princesa resultó ser bastante perezosa.--comentó él, con tono de broma.

Yo reí. La pasaba muy bien con él, y siempre deseaba que nuestros momentos jamás terminaran.

--Una última pregunta.--dijo Chat.

--¿Cual?

--Tu... ¿Me amas tanto como yo?

Me quedé un rato sin responder, y no porque no lo hacía, al contrario, lo amaba más que a mi propia vida, sólo que aún me daba vergüenza admitirlo.

--S-si.--asentí, al fin.

Ví como sus hermosos ojos verdes se iluminaban y él sonreía cada vez más.

--Te amo, Adrien.

--Yo mucho más, Bella.

Me volvió a besar. Yo volví a corresponder, hasta que otra vez nos detuvimos por falta de respiración. Ambos divisamos a lo lejos unos puntos rojos en el cielo, aclarando obviamente que Ladybug logró, una vez más, salvar el día.

--C-creo que deberíamos ir al centro comercial para buscar nuestras cosas.--hablé yo.

--Y también para que te quites ese disfraz, que te queda hermoso por cierto.

--Gracias.

--Denada, princesa.

Me cargó y me llevó al centro comercial. Volvimos al mismo lugar en el que dejamos a los chicos, y por suerte estaban ahí. Adrien se destransformó y vino a buscar mis cosas y las suyas, mientras me escondí por mientras, aún disfrazada. El regresó a mí para darme mi montón de cosas, y yo me dirigí al baño para sacarme el disfraz y volver a ser la Bella de siempre.

Salí del baño. Adrien seguía hablando con los chicos, y yo me acerqué a ellos.

--¡Aquí estás, Bella!--exclamó Nino.--¿Donde estabas?

--En la tienda aún, pero estaba en el suelo.

--Fué una akumatizada, Bella.--fingió aclarame Adrien.--Luka y Nino también fueron afectados, y creo que yo igual.

--¿Y compraste el regalo, Bella?

--Si.--mentí.

--Bueno chicos, yo y Bella debemos irnos.--habló Adrien.--No le dijimos a nuestros padres que salimos temprano hoy, así que debemos volver a la escuela y fingir.

--Vaya, ¡Que rebeldes chicos!--exclamó Nino.

Nos despedimos de Nino y Luka, para luego dirigirnos a la escuela. Llegamos justo a tiempo, ya que el chofer de Adrien y el autobus escolar llegaron sólo unos segundos después que nosotros.

--Creo que debemos despedirnos. ¡Hasta mañana, Bella!

--Adios, Adrien.

Ambos queríamos besarnos en la mejilla, pero como quisimos hacerlo al mismo tiempo no resultó. Finalmente, él dejó que yo lo besara.

Nos subimos a nuestros respectivos vehículos, ambos yéndose por caminos separados. Pensaba todo el día en la asombrosa aventura que tuve con él, una que jamás podría olvidar.

Sin embargo, pensé: ¿Eso significa que yo y Adrien ya somos novios? Aunque lo amaba y era feliz con él, aún creí que era bastante apresurado. Aún nos faltaban cosas por descubrir, y una relación debe componerse de más cosas, o quizás yo era la que tenía miedo de tener novio, aunque por la edad que tenía no debería.

Pero aún creía que todo esto era muy apresurado...


































Holaaas!!! Perdón por la tardanza, es que si no es la escuela es la familia :/

Peeeero si no es la familia... ¡ES INFINITY WAR!

Si, ya me la ví, y la verdad es que sí quedó como una de las películas más épicas de la historia, aunque con algunas partes algo difíciles de entender :v

(Y también tiene sus partes bien sad :"v)

Si no la han visto... ¡VEANLA! ¡CORRAN! :V




Ok, ya me calmé :v. Me despido por el día de hoy. Los quiero mucho y con todo mi kokoro 💜💜. Gracias por leer lo que escribo y por todo el apoyo que me dan :3.

Sin nada más que decir, bye!! 😁👋🏻

PD: Vean Infínity War, no se arrepentirán :v

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro