Capítulo 28
~Alex~
Justo cuando dijo eso sentí un escalofrío recorrer todo mi cuerpo, lo miré con atención.
—Seré directo y sincero.
—¿Cuándo no lo has sido? — arqueo una ceja.
—Esa niña no es buena.
Muevo mi cabeza en negación volviendo a mirar a la ventana.
—Ella nos ha ayudado mucho, ¿cómo puedes creer eso?
—Muy bien, si no me crees no pasa nada— se encoge de hombros —yo solo doy mi opinión estas son sus misiones y yo solo influyó por estar dentro de ti así que tú eres el que decide si quieres creerme o no.
Él se levanta de la silla y va a una de las puertas que supongo después de unos minutos al escuchar como agua caía que era el baño; ahora que lo pienso la habitación es grande y está muy organizada, tiene un gran armario de madera y una cama muy alta para mi gusto, si me subiese a dormir me caería. Vuelvo a mirar hacia las ventana, estas eran pequeñas y me recargué del marco de una de ellas viendo hacia afuera.
—Este lugar es muy tranquilo— suspiro.
Escucho la puerta abrir y lo veo salir con una toalla envuelta en su cadera, aún estaba mojado y de su cabello caían gotas de agua a su cara, él movió su cabello hacia atrás y me miró confundido.
—¿Qué?
—¿Aquí también hay gimnasio?
Me echo a reír y el pasa su mano por su abdomen marcado y desvío mi mirada para tomar la silla y colocarla frente a la ventana y mirar el lugar con atención. Había muchos árboles con flores, este lugar era muy colorido y era notable que estas flores si eran inofensivas, viendo todo esto recuerdo lo tanto que extraño mi hogar junto a mi abuela y me da un poco de nostalgia recordar cómo íbamos al campo a ver las flores y animales que habían y ahora debe estar preocupada por yo no estar allí a su lado y me hace sentir decaído.
—Cuéntame más— digo sin inmutarme y en voz baja pero no tanto como para que no me escuchara.
—Pues como te había dicho esa niña no es buena, me da mala espina— hace una pausa parándose a mi lado ya vestido —a su alrededor presiento un aura oscura.
—Y yo creo que ella sólo quiere ayudarnos— miró por encima de mi hombro y vuelvo a mirar al frente —ha sido la única que ha sido buena con nosotros, ¡hasta nos ha ayudado con los retos!— dije lo último con un poco más de ánimos.
—Entonces, ¿dices que yo no te he ayudado en nada?
—Tu solo quieres mi cuerpo para poseerlo, o ¿me equivoco?
—¿Has pensado eso siempre? — al mirarlo parecía estar ofendido —¡Eres increíble!, luego de defenderte a ti, tus estúpidos amigos, luego de hasta salvarles las miserables vidas me vienes con esto.
Lo vi caminar de un lado a otro enojado, se quedó unos segundos parados frente a la puerta de salida tomando el manubrio.
—¡Bien! — exclamó —supongo que podrías sobrevivir tú solo, así que puedes irte— señaló fuera sin voltear a verme.
No podía creer lo que él estaba diciendo, lo miré sorprendido, pero él aun así no volteó y fui hacia él para tomar su mano y voltearlo para chocar nuestras miradas, no sé por qué veía desilusión en su mirada aun estando tan serio.
—¿Me dejarás? — insisto —no puedes hacerme esto Marcus, si tú eres mi arma ¿cómo piensas que me defenderé allí? — señaló con mi mano el lugar.
—Deberías ir a decirle a la "niña" que te ayude y te salve cuando quieran matarte— miró a otro lado —yo no te ayudo en nada, no te sirvo como lo hace ella desde tu punto de vista soy el malo de la historia y solo te estoy utilizando cuando en realidad he estado todo este tiempo protegiéndolos en todos los casos, en especial a ti, creo pensar que al que utilizan es a mí, pero ¿sabes qué? ya no más— hizo una pausa para darme una mirada tan fría como nunca —espero no ser invocado cuando estés en problemas— me dio una sonrisa falsa saliendo de la casa y yo lo seguí.
—No seas dramático, no puedes dejarme así, sin arma para defenderme— sostuve la esquina su camiseta para detenerlo —Por favor, no me dejes...
—Elige bien tus palabras antes de dirigirte a mí— me miró sobre su hombro y lo abracé.
—Perdón, ¿sí?, vamos necesitamos ayudar a los chicos.
—T-Tú, aléjate— tartamudeó.
Le obedecí levantando mi cara para verlo, pero la tomó con su mano empujándome, pero sin soltarme y sin decir nada sentí como una fuerte oleada de aire me empujó y di unos pasos atrás cayendo al suelo en el momento en el que cerraba mis ojos, las paso por mi cara volviendo a abrir mis ojos y no veo a Marcus. Me levanto rápidamente buscándolo con la mirada por todo el lugar y corro fuera.
"Escucha, ve despacio por donde llegamos".
Me paralizo y luego empiezo a caminar con lentitud por donde habíamos llegado y cruzar la piedra.
—Gracias— susurré.
Al no escucharlo decir nada empecé a caminar preguntándome dónde podrían estar y mientras más avanzaba veía lo mismo así que decidí aplastar una fruta sobre una piedra para continuar y me di cuenta de que le estaba dando vueltas al bosque.
—No debimos separarnos— me quejo sentándome en el suelo —ahora no tengo idea de donde podemos estar— limpio mis manos de mis pantalones.
"¿Crees que me importa?".
Marcus balbuceo cortante y tomó mi cuerpo en su mando, quedé en silencio mientras vi como caminaba golpeando una piedra que se le atravesó en el camino para distraerse hasta que un destello de luz rápido llamó nuestra atención y frente a nosotros estaba la niña molesta.
—¿Dónde están los demás? — Marcus preguntó haciéndose pasar por mí.
—Te llevaré hacia ellos.
Ella iba acercándose a mí y Marcus echo mi cuerpo hacía atrás hasta que ella tomó la parte baja de mi cuello y cuando estuvo unos centímetros de mi boca Marcus tomó el cuello de la niña alejándola.
—Caminando— dijo con frialdad y la tensión empezó a notarse —¿si sabes que sé caminar?— escupió con sarcasmo y una sonrisa forzada.
—Bien, discúlpame— dio media vuelta —solo intentaba hacer las cosas más sencillas.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro