Eran alrededor de las 2 a.m. y todos seguían en la sala de espera, aguardando noticias de HyunAh, Vante estaba recargado en JungKook, quien lo abrazaba dándole consuelo, HwaSa trataba de hacer lo mismo con HyoJong, pero parecía no funcionar, el sólo estaba con la mirada perdida, sujetando la mano de Hugo fuertemente, estaba aguantando las ganas de no romperse, tenía que ser fuerte por su esposa.

— Familiares de HyunAh Volcaba – un médico salió del pasillo que llevaba a la sala de Urgencia.

— Somos nosotros – Vante se levantó seguido de los demás.

— ¿Usted es...?

— Soy su amigo y él es su esposo – Vante explicó tan rápido como pudo – Sólo seré su traductor.

— Ella y el feto están estables, apenas tiene 3 semanas, por lo que este incidente lo vuelve un embarazo de mediano riesgo – explicó sorprendiendo a todos que hablara en inglés

— ¿Puedo verla? – HyoJong quería correr y admirarla, la necesitaba con todo su ser.

— Seguro, sólo no la presionen, parece estar en shock aún – el médico le indicó el número de habitación.

HyunAh no era la única en shock, todos lo estaban, nadie esperaba que esto pasara, las palabras sobraban en esta situación, ¿Que se podía decir ante la situación?, era tan sorpresivo y repentino.

— Entra, te necesita – lo animó Hugo al ver dudar a HyoJong entrar – Nosotros te esperaremos aquí afuera.

— No me siento listo – apenas susurro, Vante pudo notar que le temblaban las manos así que las tomó para darle fuerza.

— Entonces entraré yo – dijo Hugo para que HyunAh no estuviera sola más tiempo.

El chico sin dudar entró y cerró la puerta con cuidado, la chica estaba acostada en la camilla, boca arriba y con las manos tomadas sobre su estómago, sino fuera por el movimiento de su pecho al respirar parecería que estaba muerta, incluso parecía no parpadear.

— Tu si sabes cómo dar sustos - Hugo se acercó con movimientos lentos y suaves para no exaltarla.

— Lo siento – la voz de Hyuna sonó ahogada como si resistiera el llanto.

— No te disculpes – él se acercó a la camilla e hizo a un lado con cuidado a la chica para subirse y acostarse con ella y abrazarla un poco.

— Sólo tú te subes a la camilla de un enfermo - bromeó ella acercándose más a Hugo, los abrazos de él eran mágicos, no sabía porque, pero eran capaces de quitarte la tristeza, el estrés y el enojo, dejándole una sensación cálida en el alma, era de esos abrazos que duran todo lo que necesitas.

— No estas enferma, sólo embarazada – aclaró él, haciendo tensar a HyunAh.

— No sé si quiero estarlo - susurro apurando la mirada de él, con vergüenza.

— Lo que tu decidas, no impedirá que te siga abrazando – dijo seguro – Tu cuerpo, tu decisión.

HyunAh no contestó nada, tenía muchas cosas en la mente, pero sobre todo no dejaba de pensar en HyoJong y su reacción ante la situación, seguramente estaría paralizado a un paso de la puerta, se sentía tan mal, no quería que esto pasara, no al menos en mucho tiempo.

— HyunAh tienes una llamada – Hugo la sacó de sus pensamientos acercándole su teléfono.

— ¿Hola? – no estaba segura quien llamaba.

— No sabes cuánto odio no poder salir del hotel ahora mismo – era Keita, se supone que debía estar descansando debido a que en un par de días empezaban sus competencias.

— No quería que te enteraras – admitió.

— Muy tarde, escucha HyunAh tienes que recuperarte y verme ganar esa medalla de oro.

— Keita yo... Prometo que lo haré, no sé cómo, pero lo lograré.

— Esa es mi HyunAh, entonces te dejo descansar.

— Yo debería decir eso...

— Pero lo dije yo, adiós – colgó de inmediato para dejar a HyunAh con la palabra en la boca, su llamada fue breve pero necesaria.

— ¿Puedes traer a HyoJong? – Hugo enseguida se movió y salió de la habitación, pocos segundos después el otro chico entró.

A diferencia de Hugo, él se sentó en el banquillo que estaba a un lado de la camilla para tomar la mano de HyunAh, sus miradas estaban llenas de miedo y nerviosismo, tenían que tomar una decisión juntos.

— Yo... No sé qué decir – HyoJong intentó empezar esa difícil discusión.

— Estoy muy asustada - HyunAh decidió hablar desde lo más profundo de su alma.

— Yo estoy más asustado, nunca pensé verte llena de sangre.

— Perdóname, no sabía que esto estaba pasando – HyunAh sintió un nudo formarse en su garganta, no quería llorar.

— Tranquila, está bien – el beso en el dorso de su mano para tranquilizarla no serviría de nada ya que eso la exaltaba un poco más.

— No me siento lista, perdón, pero no puedo – HyunAh habló tan rápido que HyoJong apenas le entendió.

— Yo tampoco me siento listo, pero tengo más miedo el cómo puede afectarte todo esto.

— Deberíamos estar pensando en él en vez de en nosotros – ambos sabían a lo que ella se refería, tenían miedo de decir la palabra.

— Es mejor no... – HyoJong dudó si seguir o no, pero conocía a su esposa y se conocía a sí mismo.

— Tenerlo ahora – HyunAh finalizó la frase por él.

— ¿Hyuna entiendes todos los riesgos que esto conlleva? – HyoJong sabía que ella perdería una parte de su ser al tomar esta decisión.

— Sé que no seremos los mismos de siempre después de esto, pero si te mantienes a mi lado puedo hacer lo que sea – HyunAh derramó una sola lagrima, acercándose a HyoJong para estar más juntos y sentirse.

— Como dejar a la cosa más bella que me ha dado la vida – habló pensativo, rodeándola con sus brazos y besar su cabello.

— ¿Crees que los demás me odien?

— Los demás no tienen nada que juzgar, esto es entre tú y yo, pero sé que siempre te apoyarán – aseguró el chico.

— Entonces hay que hacerlo – HyunAh se separó y se acostó para descansar, le dolía todo el cuerpo y la adrenalina estaba bajando.

— Hablaré con el doctor, no te preocupes yo arreglaré todo – dijo HyoJong arropándola con las sábanas y besando su frente.

— Te amo – HyunAh le susurro al tenerle tan cerca.

— Yo te amo más – también le susurro – Trata de descansar.

El no salió de la habitación hasta que su esposa se quedó dormida, afuera se encontraban todos todavía, HwaSa y Vante estaba apuntó de quedarse dormidos, siendo Hugo y JungKook sus soportes para no caer al suelo. HyoJong miró su teléfono y eran las 3:00 a.m.

— Sera mejor que vayan a descansar, yo me haré cargo de todo, no se preocupen – el chico no quería causar más preocupaciones.

— Querido HyoJong sé que eres como un lobo solitario, pero por esta ocasión déjanos ser tu soporte – HwaSa se le acercó poniendo su mano en su hombro para consolarle.

HyoJong al fin se permitió llorar en los brazos de HwaSa, el susto que Hyuna le hizo pasar, por un momento pensó que la perdería.

— Yo hablare con el médico – Hugo se acercó también a HyoJong

— ¿Cómo sabes que le voy a decir? – el pálido chico se limpió las lágrimas torpemente, sin dejar de ser abrazado por la morena.

— Puede que sea tu esposa, pero es nuestra mejor amiga, la conocemos casi tanto como tú – Hugo le respondió, él siempre sabía que iba a pasar.

— Arreglaremos todo, tu quédate con HyunAh – repitió Vante regalándole una sonrisa para calmarlo.

HyoJong no dijo nada y regresó adentro, siendo Vante quien habló con el médico notificando su decisión, arreglando la cita para mañana en la tarde con un especialista, Vante pidió no saber el proceso, pero el médico le aseguró que podría salir ese mismo día.

Eran alrededor de las 3:40 a.m. cuando todos caminaban de regreso al hotel, pudieron pedir un taxi, pero prefirieron caminar y digerir todo lo sucedido. Después de esto nadie seria el mismo, pero era parte de crecer y madurar, todo tiene un por qué y un para que.

Ya he llegado :D/

Espero que les haya gustado 💜

Se que muchos no estarán contentos pero me gusta salir fuera de lo convencional

No olviden votar y comentar que es de gente chida 😎👌💜

Los amo a todos

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