
29.Viaje juntas (I)
🎵heavenly - cigarettes after sex
❤️🔥
En el momento en el que entró a su casa pudo sentir la horrible tensión que había y como sus empleados le hacían reverencias viéndola algo preocupados. Seguro que habían escuchado gritar o bien a sus dos hermanas mayores o a su madre.
Nayeon se dirigió al despacho que tenía su madre en casa, la puerta estaba cerrada así que decidió sentarse en el sofá donde se hallaban el bloque de revistas con la portada con la cara de Mina y ella.
Tomó una de estas y comenzó a leer:
"Im Nayeon, la hermana más pequeña de las tres hijas de la reconocida CEO Im Jihyun de Im Corporation, parece ser captada por varios de nuestros reporteros con una hermosa chica"
"Las fuentes afirman que la han visto varias veces en la universidad en la que estudia Im, pues muchos suponen que se conocieron en esta, la misteriosa chica cuya identidad aún no podemos confirmar parece trabajar en la cafetería y normalmente suelen encontrarse en los aparcamientos para después tener citas en el coche de la menor de las Im"
Nayeon abrió los ojos leyendo lo último ¿qué clase de fuentes tendrían esos idiotas?
"Nos sorprende ver, aún así, que Im esté teniendo esta posible relación con una persona que no pertenezca a la clase elite con la que está acostumbrada a relacionarse"
—¿Te parece bien lo que pone ahí? —Sohee llegaba junto a Suzy.
La menor se levantó rápidamente dejando la revista a un lado para sonreír nerviosamente.
Podía ver llamas en los ojos de las mayores, sobretodo en los de Sohee.
Como ya se ha dicho miles de veces, el ego de la pequeña Im se reduce cada vez que sus hermanas mayores aparecen.
—¿Buenos días? —sonrió algo nerviosa Nayeon.
Sohee tenía mucho por decir.
—Ay Nayeon...—suspiró Suzy.
—¿Bueno? Es que no puedes tener tu vagina quieta o qué —atacó Sohee.
—Al ser la menor siempre ha tenido privilegios, pero esto tiene que acabar —asintió la modelo.
Suzy no parecía tener que decir más, pero su hermana más mayor lo haría.
—¡Podrías pensar en la empresa y en lo que ocasionas por querer follar! ¡Y si lo haces hazlo bien!
Sohee estaba hecha una furia, gritando a todo pulmón y Suzy solo estaba cruzada de brazos.
—Yo no...
Nayeon se sentía tan pequeña e intimidada por sus dos hermanas que apenas podía formular palabras.
Era cierto que antes era algo...¿mujeriega? Bueno, no, no tanto. Ella no llegaba al nivel de Rosé (para su alivio) pero tampoco había sido un ángel anteriormente.
Antiguamente se hubiera callado y hubiera dejado sentenciar un castigo como la cancelación de su tarjeta de crédito o cancelar un viaje con sus amigas, pero esta vez la situación era completamente diferente.
—Está vez ella me gusta de verdad —se atrevió a decir.
Sus hermanas miraron a la coreana menor frunciendo el ceño.
Nayeon acababa de usar el verbo "gustar" en otra persona que no era ella.
—Así que asumo toda la culpa yo —bajó la mirada apenada —Fui tonta, pero por favor no quiero que esto sea malo para ella.
De nuevos, las dos mayores se miraron entre sí bastante extrañadas.
—No sé si podríamos hacer algo por ella —Suzy relajó sus facciones —pero los paparazzis podrían ponerse pesados.
—Por tu gran imprudencia podrían acosarla hasta en su propia casa —volvía a regañar Sohee.
A Nayeon se le borró la sonrisa al imaginarse que podría ocasionarle aún más problemas a la japonesa.
Antes de que pudiera articular otra palabra, la puerta del despacho de la CEO de Im Corp se abría de golpe. De esta, salía su madre con cara de pocos amigos.
—¡Se suponía que estabas a cargo de sus tonterías! —bramó malhumorada Jihyun.
Nayeon pudo divisar a su guardaespaldas, Chris haciendo una reverencia y manteniéndose pidiendo disculpas en esas postura por unos segundos más.
Se sintió algo mal por su leal compañero.
—Suficientes disculpas, agente Bang, retírese —ordenó la mujer.—y no volveré a pasar otra impertinencia así.
—No volverá a ocurrir.
El hombre salió tras esta haciendo una reverencia mas hacia las hermanas para salir de la sala.
—¿Qué? Es otra de esas chicas con las que te gusta acostarte —se dirigió hacia su hija más pequeña.
Ahora le tocaba confrontar a su madre.
—No lo es.
—Nayeon, por favor es una cualquiera ¿No te pedi que le dieras una oportunidad a la hija de los Jeon?
—¡No me interesa Somi! ¡Y por qué tienes que hablar de las personas así!
—¡Porque no puedes andar con cualquiera, eres...!
—Soy una Im.
—Exacto —la señaló su madre —cada cosa que hagas, cada cosa que digas y cada error que cometas siempre lo estarás haciendo con ¡nuestro apellido e imagen de la empresa!
La discusión parecía terminar ahí. Harían lo de siempre, apartar un poco a Nayeon del foco central y problema finiquitado.
—Dirás que es una de tus amigas más, como siempre y pedirás perdón por los malentendidos —sentenció la señora Im —y dejarás de jugar a lo que sea que estes jugando con esa chica y fin.
—Mamá, se llama Mina y no es una más ni tampoco una cualquiera —Nayeon la miró manteniéndose con firmeza —no he hecho nada malo está vez, así que no iré a ningún sitio sin Mina.
Su madre, habiendo tenido suficiente golpeó la mesa. Se le estaba agotando la paciencia.
—Es mi culpa, todo esto es mi culpa. Tuve que ser más dura contigo, tus hermanas tienen razón te consiento demasiado.
Suspiró diciendo esto último y llevándose las manos al rostro.
—Mamá —Suzy intervino.—Podrían ir a nuestra casa a las afueras de Busan.
Nayeon observó con ojos de esperanza a Suzy que parecía un ángel en esos momentos. Por algo era modelo y actriz, es más era una diosa.
—Quitando este incidente, Nayeon ha asistido a todas y cada una de nuestras reuniones. Tampoco ha vuelto a causar problemas en discotecas con sus amigas.
—¿Te harás responsable Sohee?
Nayeon y Suzy miraron a la más mayor de las tres.
Sabían por qué le estaba preguntando aquello a Sohee, todo dependía de ella...
—Eres la mas mayor y sensata de tus hermanas.
—Tener aquí a Nayeon y a su novia merodeando será solo un problema —dijo con seguridad —más aún ahora que estamos intentando arreglar las cosas. Estoy de acuerdo con Suzy, ganaríamos tiempo para pensar que responder a los escándalos.
Nayeon parpadeó varias veces observando a la más mayor de las Im. Sohee la había favorecido y eso no ocurría todos los días.
—Aquí el lunes a la mañana —suspiró si madre —Ni un día mas ni un día menos.
—Entendido.
—¿Podrás darme un respiro? —negó con la cabeza la mujer para caminar a la salida tomando su teléfono móvil —secretario Choi, dime mi agenda para hoy y recuerda la reunión con los periodistas.
La universitaria asentía, ya podía imaginarse tomando su teléfono para limpiar la agenda de Mina en un santiamén.
Unas cuantas llamas y ¡boom! Mina y Ella estarían de Camino a Busan un fin de Semana.
—¡Adiós mamá! —despidieron con una sonrisa.
Sintió como su alma volvía a su cuerpo tras ver a sus madre marchar, las tres hermanas sonreían y agitaban su mano despidiendo a su madre que les sonreía de vuelta.
En cuanto se fue por completo, Sohee tiro de una de su mejilla derecha y Suzy su mejilla izquierda con fuerza.
—Esto no ha sido ningún favor hermanita —rió Sohee.
—Ya estás contándonos todos los detalles y todo lo que ha pasado con la tal Mina.
Oh, odiaba tanto ser la maknae. Y volvía a odiar a sus hermanas mayores.
🤪🤪
Había sido un completo descontrol, tenía cientos de mensajes y peor aún ahora estaba discutiendo de manera acalorada con Nayeon por teléfono.
Mágicamente sus jefes se habían puesto todos de acuerdo para darle el fin de semana libre.
Con mágicamente se podía imaginar que había sido todo obra de Im.
—No puedes hacerme esto...¡ahora dices que tus hermanas y madre han dicho que vayamos a tu casa en Busan...!
Simplemente no podía creerlo. Le había pedido que dejara de abusar de su influencia y no mantenía su promesa.
—¡Claro que estoy enojada! ¡Me da igual si esta vez era necesario!
A ver, claramente le asustaba un poco el que se entrometieran en su vida privada. Pero la rabia la cegaba.
—¿Qué si voy a ir? Pues no.
Jihyo la pellizcó, causando que saltara y se quejara del dolor.
Sus dos mejores amigas oían la discusión sentadas en el sofá como si se tratara de la mejor telenovela jamás emitida.
Aunque había dicho que no, Lisa ya había sacado la maleta y Jihyo se estaba ocupando de lo que llevaría Mina para su pequeño viaje de fin de semana con Nayeon su...¿novia? ¿Eran novias?
Otro misterio más, lo habían pintado tanto como una relación en aquel artículo que hasta Myoui tenía dudas sobre lo que estaba pasando entre ella e Im.
—¡Di que sí! ¡Amiga sabes lo que yo daría por una escapada romántica con una multimillonaria! —lloriqueó Lisa.
—Indirecta para Rosé —asintió Mina.
—No mencionemos a esa idiota.
—No desvíes el tema —golpeó su hombro Park —Mina sé razonable, si lo han aprobado sus hermanas y si madre es por algo.
Le tomó estar unos segundos en silencio para decidirse.
—Está bien, iré —accedió volviendo a la llamada con Im.
Sus amigas aplaudieron y festejaron incluso aún más que la propia Mina. Parecía que ellas eran las que tendrían un fin de semana de vacaciones.
Había quedado en que Nayeon pasaría por ella antes de las siete así que tenia tiempo de sobra para asegurarse que llevaba todo en su pequeña maleta.
—Sabes lo que pasa cuando una pareja se va de viaje ¿no? —Jihyo sentía que tenían que hablar de eso.
—¿Qué pasa? —levantó una ceja su mejor amiga —¡Y no es mi novia!
—¡Mina por favor! ¡Vais a dormir en la misma cama! —Manoban se sentía nerviosa.
—¿Quien ha dicho eso? No creo que...—Mina fue interrumpida por Jihyo.
—Vas a acabar durmiendo con ella Mina, va a pasar.
La protagonista frunció en ceño ¿a qué se debía esa conversación tan rara? Si querían decirle algo que se lo dijeran directamente.
—Pues es algo lógico, tendremos que dormir —suspiró Myoui.
—¡Mina Maria! ¡Despierta maldita! —la tomó por los hombros Lisa gritando —¡Vais a follar! ¡Vais a tener sexo!
—¡Ehh! —la empujó la japonesa.
Tenía la cara roja y Jihyo negó con la cabeza fulminando con la mirada a su amiga.
—Lisa...
—¿Qué? Ya me estaba desesperando —suspiró frustrada. —ve preparando esa vagina virgen.
—¡Puedes dejar de decir vulgaridades!
Mina tenía la cara completamente roja. Primero que todo, ella no pensaba que fuera a pasar y tampoco iba a tener sexo con Nayeon.
¿Y cuantas veces más tenía que decir que no era su novia?
Ósea no es que le molestara que lo supusieran, simplemente era muy complicado para su cabeza.
Y Mina no solía dar el primer paso ni era de tener iniciativa.
—Tranquila Mina, simplemente déjalo ser y disfruta —alentó Park sobando su espalda.
—Bueno Nayeon tiene unos dedos bastantes largos, suerte con eso.
De nuevo Lisa estaba molestándola.
—¡Basta ya!
—Después te gustará, tiene cara de que es buena en la cama.
—¡Cállate ya Manoban!
Mina pensó por un momento en ello detenidamente. Aquellos temas le aterraban. Jamás se había sentido preparada y dudaba que pasara algo más alla de besos entre las dos.
¿Pero y si se daba? Mina se abofeteó mentalmente para bloquear esos pensamientos, definitivamente iba a pedir que durmieran en camas separadas si hacía falta.
😋😋
Estacionó el coche en la parte trasera del apartamento sintiéndose algo nerviosa, le avisó a Mina de que ya estaba abajo y esta le respondió que tardaba quince minutos en bajar. Debía de asegurarse que llevaba todo.
Nayeon pensó que sería más divertido si ella conducía hasta Busan y así se ahorrarían ser vistas públicamente. También pensó que sería genial porque le pondría una playlist llena de canciones románticas y ñoñas que le recordaban a la japonesa.
Sus películas y momentos que había imaginado miles de veces con la nipona tuvieron que posponerse al ver que tenía tres mensajes en su chat grupal con sus amigas.
jenjen: nos ha dicho un pajarito que te vas de viaje con tu japonesita👀
rosie: cambiando nuestra fiesta de fin de semana por una mujer 😔
jisuu: tu haces lo mismo Park...
disfruta, Nayeon
gracias chicaas
cuando vuelva fiesta asegurada
Jeongyeon leyó los mensajes más sólo reaccionó con un corazón al mensaje de Nayeon.
La inquietó no obtener respuesta por parte de su mejor amiga así que no dudo en llamarla rápidamente.
Yoo contestó inmediatamente.
—¿Estás molesta? Siento tener que cambiar nuestros planes...sé que tenías ganas de ir a acampar este finde...
—Está bien, igual tengo que estudiar ya me estoy pareciendo a Jisoo.
—¿Segura, segurísima?
Jeongyeon guardo unos segundos de silencio para luego soltar una pequeña carcajada.
—¡Que sí! Que pesada eres —aseguró su mejor amiga —mi madre me llama, te dejo ¿si? Recuerda pasarlo bien con Mina.
Ni siquiera pudo contestar, pues Yoo ya había colgado. "Me he preocupado por nada" pensó Im.
—Te voy a matar —un golpecito en su ventanilla hizo saber que ella estaba ahí.
—¡Minari!
Como toda caballera se bajó del coche y ayudó a poner la maleta de Myoui en el maletero para después ofrecerse a abrirle la puerta.
Y sí, eso lo había practicado en su mente diez veces antes.
Al principio hubo un silencio pues ni siquiera la habladora de Nayeon sabía por dónde comenzar, ambas se miraron al mismo tiempo.
—Lo del artículo...
—Lo que ponía en...
—No dejaré que nada de esto te afecte —aseguró Im.
—¿No hay nada que yo pueda hacer al respecto? —Mina se sentía algo frustrada.
—Confiar en mi.
La universitaria le sonrió y Mina negó con la cabeza dándole un suave golpe en el hombro.
Ya impaciente, Im colocó su playlist y comenzó a tararear cada dulce canción para la protagonista mientras conducía, dándole alguna que otra mirada mientras lo hacía.
A la menor le pareció bastante gracioso ver a Nayeon cantar "Only" de Lee Hi a todo pulmón para ella, por lo que acabo sacando su móvil para grabarla.
Un mensaje llegó a su bandeja y la despistó por un instante. Era de Mingyu.
"Mina, estas bien???"
"Si me necesitas sabes que estoy aquí para cualquier cosa"
A Mina le pareció descortés no responderle así que simplemente le mando un "no tienes por qué preocuparte, estaré bien"
Y hablando del muchacho, sus ojos viajaron hasta Nayeon y luego hacía la foto de perfil de Mingyu. No se parecían en absolutamente y se suponía que compartían sangre.
—¿Por qué no me dijiste que Mingyu era tu primo?
—Pensé que lo sabrías, igual no lo considero familia.
Eso no lo entendía y Nayeon procedió a explicarle más.
—Mi madre es la menor de tres hermanos y ella acabo heredando Im Corporation, sin querer alargarme más las únicas que hemos recibido el apellido Im hemos sido yo y mis hermanas.
Por la expresión seria de la contraria no quiso preguntar más, quizás era más complicado de lo que creía. Tenía que investigar y saber más acerca de Nayeon y su círculo familiar.
—Entonces te pone celosa que Mingyu me hable.
—Siempre ha querido quitarme lo que es mío.
—¡Eh! —Mina golpeó su pierna ofendida —No estoy interesada en ser tuya.
Nayeon esbozó una sonrisa y batalló para tomar su mano sin soltar el volante. Después le dio una mirada que hipnotizaría a cualquiera.
—Te acabará interesando.
Y aunque acababa de sonar como lo más sexy del mundo y aún más por cómo se veía mientras conducía, la japonesa no daría su brazo a torcer.
—Psicópata engreída.
—Ya estabas tardando en insultarme, pingüino malhumorado.
—Cuida tu boca señorita Im.
—¡Me está distrayendo señorita Myoui!
Así iba a ser todo el viaje...
💤💤
Cuando llegaron a la dichosa "casa" Mina literalmente se pensó que era eso, una casa. No pensó que prácticamente era una posada de cinco estrellas con aguas termales incluidas y de dos pisos para su comodidad.
Tenía la esencia de casa en el campo, pero seguía siendo moderna y algo retirada del bullicio de la ciudad. Era algo perfecto para pasar un fin de semana allí.
—Bienvenida, joven ama —varios de los trabajadores salían a recibir a Im con sus maletas.
Encima tenían a personas que le ayudaban con sus maletas y que le llamaban "joven ama"
—Estaremos aquí el fin de semana, por favor tratad con respeto a mi compañía.
Todos hicieron una reverencia en dirección a Mina que se puso algo nerviosa diciendo que no era necesario.
—La cena estará lista en menos de quince minutos, joven ama —informó una mujer mucho más mayor sonriéndole a la coreana.
La japonesa realmente se sentía como en una telenovela.
—¿Estas segura de que no es un hotel con temática de pueblo? —inquirió mientras subían a su habitación por las escaleras.
—No, es una de nuestras casas para vacacionar, lleva perteneciendo al grupo Im desde hace mucho —se encogía de hombros Nayeon como si tener eso fuera algo normal —y estas personas se encargan de mantenerla limpia y como debe ser.
Podrían haber dado un tour por toda la enorme casa, pero estaban tan cansadas que en cuanto llegaron esperaron a por la cena y al terminar Mina aprovechó para cambiarse de ropa.
—Maldita Jihyo...
Al buscar su pijama vio que su mejor amiga le había empacado los más cortos posibles. No había otra opción así que se lo puso sintiéndose algo nerviosa por lo que diría Nayeon.
—¿Que más me da lo que me diga esa idiota...?
—Estas hablando de mi —volvía Im a la habitación.
Y con ella traía una botella de Sake, pero no cualquier marca. Era Sake Tokiwa y su botella premium.
—¡Voy a abrirlo!
La mayor se sentó frente a Mina en la pequeña mesa que habían puesto para cenar.
—Es demasiado caro...
Era obvio que Nayeon lo había escogido por la nipona.
—Tómalo como regalo de cumpleaños, por favor.
—Solo por esta vez —se mordió el labio Myoui.
—Demos sólo un trago, no quiero que te emborraches.
—¡No soy mala bebiendo!
El rostro de Mina se tiñó de rojo, pero esta vez por lo ofendida que se sentía.
—¿Segura? —elevó una ceja Im.
—Déjame en paz.
Solo bebió dos vasos pequeños pero sentía sus mejillas sonrojadas. Sin embargo, Mina quería demostrarle a la universitaria que se equivocaba y se terminó el tercer vaso.
Nayeon, en cambio parecía fascinada con el sabor de la botella mientras seguía sirviéndose. Ya llevaba cinco vasos y seguí como si nada.
—¿Eres inmune al alcohol o qué? —preguntó frustrada causándole una risita de la coreana.
Los ojos de la menor se desviaron hacia las manos de esta, tenia aún una bonita camisa blanca con las mangas recogidas y sus manos servían el alcohol con cuidado.
Era cierto que sus dedos eran largos prácticamente podía sujetar la gran botella con una sola mano.
"Los dedos de Nayeon son bastante largos" la voz de Lisa resonó en su cabeza y se sonrojó aún más.
Ahora sí que sentía su rostro entero arder como el infierno.
¿Cuanto le medía la mano? No, eso no, aún mejor cuánto serían sus dedos ¿nueve centímetro? ¿ocho centímetros? Mina no estaba para calcular longitudes.
Pero y si era eso ¿iba a acabar mal?
Encima la coreana tenia demasiada fuerza no quería imaginarse como sería si...
Los ojos de Nayeon hicieron contactos con los suyos y en un ataque Mina se revolvió en su asiento causando tirar algo de su Sake en la camiseta de Im.
—¡Lo siento...!
La coreana tomó esto con calma y negó con la cabeza.
—Estoy bien.
—¡No estoy borracha!
—No pasa nada Minari...
Se levantó y buscó algo en su maleta para después desabotonar su camisa y quitársela.
—¿Qué haces? —exclamó Mina tapando sus ojos.
—Puedes mirar cuanto quieras, Minari.
—¡No quiero ver!
—Pero yo quiero enseñarte.
—Ya basta, maldita pervertida y exhibicionista —bramó demasiado sonrojada.
Si seguía estando tan roja entonces acabaría sangrando por la nariz y Mina definitivamente no quería eso.
—Vale, vale sé que te gustó demasiado.
Nayeon se terminó de colocar su pijama y se sentó al lado de Mina. Quizás demasiado cerca, prácticamente se había apegado a la anatomía de la japonesa.
La nipona se atrevió a mirar a la mayor y al chocar miradas, esta no pudo resistir más para poder robarle un beso a Mina.
El beso había comenzado de manera muy intensa, Im hacía uso de su lengua y a la vez iba deslizando su mano por el muslo de Myoui.
Su corazón casi sale disparado cuando se dio cuenta de que ella también estaba colando su mano por el abdomen de la coreana.
—¿Tus hermanas te dijeron algo malo? —preguntó separándose abruptamente.
Nayeon frunció el ceño e intentó mantener sus respiración relajada.
—Están un poquito molestas porque siempre causo problemas, pero no es tu culpa.
—Si puedo hacer algo para...
—Minari, te he metido en esto, déjame sacarte de esto. No quiero que nada de esto te afecte.
La mencionada soltó una risita apoyando su cabeza en su hombro.
—Soy la nueva novia de la hija menor de las Im.
—Debería poner nueva prometida y futura esposa.
—¿Qué dices? Ni siquiera soy tu novia.
La japonesa negó con la cabeza mientras fruncía el ceño.
—Debería de pedirte ser mi novia primero, ¿verdad? —masculló Nayeon para sí misma.
No quería que Mina la oyera.
A continuación, la universitaria acarició con delicadeza el hermoso rostro de la menor y sonrió apegándola un poco más a ella.
—Minari, ¿si pudieses hacer lo que quisieras que harías?
—Me graduaría con honores y le construiría la casa que le prometí a mi madre.
Nayeon se quedó en silencio observándola atentamente. Cosa que le llamó la atencion a Mina.
La mayor no era exactamente la persona más callada del mundo.
—¿Qué? ¿He dicho algo que no te esperabas?
—No sé, nunca me hablas de ella.
—Ah, es porque...no lo sé.
Quizás si conocía la respuesta, pero prefería no escavar mucho en sus sentimientos enterrados.
—Sana y tú la echáis mucho en falta, ¿verdad?
—No sabes cuanto.
Hacía mucho que no lo admitía, de hecho ni recordaba la última vez que lo hizo. Pero se sentía como quitarse un peso de encima.
¿Sería culpa del alcohol? No es que estuviera borracha pero al estar en esa posición tan cómoda con Nayeon la estaba llevando al borde de la honestidad.
—Mi madre estaría avergonzada si viera cómo me está yendo en la vida.
Apretó su agarre en la mano de Im que sujetaba sin poder mirar hacia arriba.
—¿De qué hablas? Sana es muy afortunada por tenerte como hermana —acarició su mejilla con su pulgar —lo has hecho muy bien, Minari.
Mina sonrió sintiendo con amor los cumplidos. Lo último que dijo hizo que hasta le temblara la voz.
—Pero no puedo evitar sentirme culpable y miserable. Fui tan mala hija, incluso el mismo día que mi madre...
Se aguantó las lágrimas cortando la frase. El nudo en su garganta no la dejaba hablar.
Fue entonces cuando Nayeon la rodeó con ambos brazos.
—Está bien —aseguró Im —Déjalo salir.
—Desde que ella se fue he estado en este conflicto, extrañándola y odiándola porque no está aquí.
Finalmente soltó sus primeras lágrimas, lágrimas que antes no se había permitido dejar salir.
—Y ha sido tan duro, me sentía tan sola y tenía miedo —sollozó enterrando su rostro en el hombro de la mayor —y a veces es tan difícil parecer fuerte todo el tiempo.
Nayeon la abrazo con más fuerza asintiendo mientras la escuchaba hablar.
—Conmigo no tienes que serlo.
La menor levantó su mentón observando como Im también tenía los ojos aguados.
—No tienes que reprimir ni un solo sentimiento conmigo, Minari.
Y lo siguiente que hizo fue darle un beso en la frente mientras limpiaba con el mayor cuidado del mundo sus lágrimas.
—Estaré aquí para escucharte y darte mi hombro para que llores o lloremos juntas.
—¿Por qué me dices todo esto?
Sabía que Nayeon se gustaba de ella, pero se suponía que Bambam también lo hizo. Incluso estuvo en una relación con él, pero jamás recibió ese tipo de apoyo.
Era cierto que tuvo a Jihyo y a Lisa en sus momentos duros.
Pero Nayeon simplemente era diferente.
Era otro tipo de calidez que la embriagaba y la hacía sentir tan segura que acababa confundiéndose en el mar de sentimientos que le ocasionaba.
¿Era eso lo que se llamaba amor realmente? ¿Estaba enamorada?
—Porque te quiero Mina y no puedo dejar que lleves todo el dolor y carga sola —las mejillas de Nayeon ardían —y me duele, me duele verte sufrir.
—Yo también te quiero Nayeon. Y perdona si a veces soy demasiado fría yo a veces simplemente no sé cómo expresarme y...
Nayeon negó con la cabeza y la silenció con un corto beso en los labios.
—Lo entiendo, te entiendo y me gustas tal como eres.
—Yo no te he preguntado que harías si pudieses hacer lo que quisieses.
La mayor no tuvo que pensárselo ni dos veces para responder.
—Estar aquí contigo.
—Mentirosa.
—¿Por qué? Es verdad aquí o en cualquier otro sitio, me da igual mientras sea contigo.
—Te creo.
Podía creerle pues los ojos de Im prácticamente derramaban miel mirándola.
—Contigo me siento completa, Minari. Y de verdad siento que no necesito nada más.
La japonesa se abrazó a Nayeon colgándose de ésta prácticamente y enrollando sus brazos alrededor de su cuello.
Im la cargó sin ningún problema hasta la cama dónde abrazaron hasta quedarse dormidas no tardando mucho en hacerlo.
—No hay otro lugar en el que desearía estar ahora mismo —Mina masculló antes de cerrar los ojos.
Esa noche Myoui Mina comprendió lo que era dormir junto a alguien. Lo que era la intimidad, más allá de lo físico, aún estando completamente vestida, pero apegada a la anatomía de su enamorada entendió lo que era querer y ser querido.
Ella se había desnudado completamente con Nayeon sin quitarse ni una sola prenda de ropa.
Ella le había mostrado la verdadera desnudez de su corazón, de su alma, su lado más débil y frágil.
Y Nayeon no había hecho más que abrazarla y acogerla con sus brazos abiertos dándole el calor que necesitaba en ese momento.
🙆🏻♀️
MINAYEON>>>>>
Voy pidiendo perdón por adelantado por los posibles errores, pero quería actualizar
—¿Ven que la relación de Mina y Nayeon ha avanzado mucho?
por cierto les quería compartir qué conseguí entradas para el soundcheck de twice en Londres :'D
aún no me lo creo voy a verlas en directo 😭😭😭
de la felicidad escribí este capitulo lo más cursi posible 🙏
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro