Luego de cortar vuelvo a mirarlo,error fatal ,el que me ha costado el corazón y parte de la vida.

El cielo brillante de su mirada me hace prisionera,estoy a su merced.

-Acércate Lizzie-me dice el sonriendo,mas bien doblegando mi voluntad con una de sus sonrisas.

Me acerco,esclava de su voz profunda,esclava de  su presencia viril. Soy suya.

Tan cerca de el,que nuestros alientos se mezclan y confunden.

Billy me mira profundamente antes de decirme con intensidad.

-Por una mirada, un mundo; por una sonrisa, un cielo; por un beso... yo no sé qué te diera por un beso-.

Suspiro.¿Realmente vivía antes de conocerlo?.

-Bequer-digo solamente.

-Tu preferido...¿Que puedo darte por ese beso que esperan hace tanto mis labios?-me dice derritiendo mi corazón hasta que queda deshecho a sus pies.

-Dame todo Billy...o no me des nada-recito también,como aquella vez años atrás.

-Me recuerda a nuestra primera cita en la biblioteca-me dice ladeando la cabeza.

-No fue una cita-le contesto sonriendo.

-Si lo fue,una hora,un lugar,solos, poesía,risas...tus nervios-me dice provocandome.

-¿Mis nervios?...Si,claro- le digo.

-Si,como cuando te di la pulsera,te escribí la primera nota,el día de mi cumpleaños...los nervios la traicionan Seño-.me dice con tono sugestivo-.

-Tranquilo caramelito...Yo no acepte nada aun-dije desafiante.

-¿Y no lo quiere?-me dice travieso.

-Ay cosas que no se preguntan Billy...Si no te portas bien, tendré que sancionarte-digo jugando como el.

-Uhmm...Lo he dicho y lo diré,Eres toda una morbosa Lizzie-me dice y me toma de la cintura, apretándome  contra el.

 Nuestras bocas anhelantes  vuelven a unirse al fin.Mi amor ya no sabe a chicle,su sabor es varonil,como a menta fresca mezclada con licor.Nos devoramos hambrientos,nos hundimos uno dentro del otro.No nos negamos ningún rincón o espacio al besarnos.

-Siéntate-le digo con voz temblorosa por la pasión.

El se sienta en el sillón,yo me subo encima de el.

-Deseaba  besarte el cuello,pero eres tan alto-digo riendo y el  también  ríe despacio.Luego hago lo que dije, beso su cuello con deseo,mientras una de mis manos se abre paso hasta su pecho,por debajo de su camiseta.Acaricio la suave piel de su fuerte torso,mi lengua juega ahora alrededor de su oreja.Lo deseo tanto que no puedo ir despacio.

Me muevo sobre el ajustándome a su orgullosa hombría erguida.Enrollo sus rizos entre mis dedos mientras mis labios atrapan los suyos desesperados.

-Tranquila Lizzie...tenemos tiempo-me dice soltándome por un momento,con voz agitada.

-Te deseo tanto Billy...no puedo,luego iremos despacio¿Si?-digo yo,ardiendo en  ansias.

De a poco lo tumbo sobre el sillón,y me siento encima.Lo  miro por un momento,es enloquecedoramente bello.Lo veo sonreír divertido por mi obvia necesidad de el.

Le desprendo el cinturón y luego le desabrocho el pantalón,cada vez con mas urgencia.Muero de ganas  de volver a tenerlo...¿Para que ocultarlo?

Luego comienzo a bajárselo,junto a el bóxer.Se lo quito todo y lo tiro por  ahí.

Me paro a un lado del sillón,y me quito la tanga,mientras el se saca la camiseta.

No pasa nada de tiempo, cuando vuelvo a mi posición sobre el,me acomodo despacio,para permitir que se adentre en mi.Lo voy sintiendo entrar muy lento,muy sabroso,hasta que la unión es completa.Entonces me muevo en un  insaciable vaivén,sacandole gemidos a su boca,que se combinan con los míos en la  mas apasionada melodía.

Los dos decimos palabras ardientes,que nos encienden, y avivan mas las potentes llamas que nos envuelven.

Sus manos aprisionan mis senos desnudos debajo de la camisola,mientras yo gozo sin control cabalgándolo.

Una sensación eléctrica y placentera nos recorre a ambos,un deleitable estremecimiento nos envuelve y nos transporta a la cúspide de la satisfacción,jadeando y disfrutándola juntos.

-Oh por Dios...Eso fue tan increíble-digo sobre su pecho.

-Si,lo fue pero,debo reconocer que sentí que abusaste de mi-me dice mirándome con picardia.

-Quejas con tu madre, niñito-le digo mientras reímos.

Poco después,y mas apaciguada ahora.Volvemos a amarnos en mi cama,lento,despacio, probándonos por completo.Ahora el me domina,con su esbelto cuerpo sobre el mio, llevándome a la exquisita culminación un par de veces. 

Es de tarde cuando luego de una ducha juntos,bajamos a comer algo.Preparo sándwiches,mientras el me mira pensativo.

-¿Y cuando comienzan los ensayos?-le pregunto trayendolo de nuevo a la tierra.

-La semana que viene...¿Vas a ir a verme?-me pregunta expectante.

-Prometo que tratare amor...Estoy con mucho trabajo,y hoy ya falte por razones medicas-le respondo mirándolo con fingida seriedad.

-Si,estas enferma de amor por mi,y con mucha fiebre por ahí-me dice señalando mi lugar mas intimo.

-Mucho de todo Billy,amor,deseo,amistad...Me pasa todo contigo-le digo lo que siento.

-A mi también...Mi bella ragazza,-termina  diciéndome en un perfecto Italiano.

-Si me dices algo en francés...Dejare que me hagas lo que quieras-digo provocativa.

-¿Si?-dice acercándose lento a mi-Mon bien-aime, Ma Lizzie.

No se que me dijo,pero sonó maravilloso viniendo de sus labios.Me cuelgo de su cuello,y olvidándonos de  la comida,me lleva aferrada a el ,a mi cuarto.

Es de tarde,jugamos en la cama a encestar palomitas de maíz,en un zapato.Me gana,porque como siempre es muy tramposo,y me hace reír antes de tirar.

Nos observo,como antes,perdidos en nuestro propio mundo,y entiendo que esto que creamos años atrás,este lugar solo para nosotros,es donde quiero vivir desde ahora....y para siempre.