Narra Camus.

Estaba feliz, me había casado con el amor de mí vida Surt, estábamos en el  salón del templo de Athena, todos nos felicitaban con grandes sonrisas hasta Hades, ¿Saben? Ver al rey del inframundo sonreír me dio miedo pero bueno, el único que no había venido a felicitarme era Milo, lo buscaba con la mirada pero no lo encontraba y más con la multitud de gente que venían a felicitarnos aunque cómo rayos espero que el venga, después de lo que le hice.

Flashback.

Milo había llegado al templo de Acuario para hacerme "entrar en razón" pero no hay nada que hacer ya todo está decisidido,

Milo: Camus, por favor no lo hagas.

Camus: Milo ya por favor, no importa lo que tú me digas, no voy a cambiar de opinión.

Milo: ¡Es que tú no puedes casarte! - me gritó desesperado, para luego correr y darme un beso en los labios cosa que me sorprendió y disgusto mucho lo separé de mí rápidamente y le pegue una muy fuerte cachetada que lo dejo en el suelo.

La verdad esa no era mí intención lo juro, nunca fue mí intención llegar a tanto, yo jamás le había tocado ni un sólo cabello, no se que me pasó, pero la cosa no paro ay.

Camus: No vuelvas a hacer eso ¿Me escuchaste Milo? ¿Pero que rayos te pasa?

Milo: - se levantó del suelo - amor, ¿Sabes? Eso es lo que me pasa Camus, y perdoname por lo que te voy a decir pero me enamoré de ti, ¿ya? Esa es la razón por la que no quiero que te cases.

Camus: estás loco, tú solo eres mí amigo nada más Milo. Y te pido te retires de mí templo pasaré esto por alto por esta ocasión, agradece que no le digo nada a Athena y el patriarca.

Milo: muy bien y lo siento por haberte molestado con estás cosas Camus - me dijo y se fue.

La verdad tiempo después fue que me di cuenta de lo que había hecho pero ya no quise saber más de el, total se lo había ganado.

Fin del Flashback.

El remordimiento vino a mí otra vez así que cuando Surt se descuido me fui a buscarlo, tenia que disculparme lo busque por toda la fiesta pero no lo encontré, vi que los jueces Minos y Aiacos también buscaban a Radamanthys, iba a salir a buscar a afuera, pero Surt no me dejó me sentí mal pero bueno me disculparia después de la luna de miel.

Por otro lado

Narra Milo.

Estaba escuchando música con unos audífonos puestos, estos me los había regalado Shun, sabía de sobra que estaba incomodo por la boda Hyoga eh Isack, bueno ellos están con su maestro, en fin Seiya y Kiki vienen a verme a cada diez minutos, Shun, Shiryu y Ikki vienen a dejarme comida también.

Di un suspiro y vi hacía la luna.

Milo: ¿Cómo me encantaría poder salir de aquí?

Radamanthys: ya somos dos - dijo y se sentó a mí lado a los pies de la estatua.

Milo: y ahora tú, ¿Que haces aquí?

Radamanthys: hago lo mismo que tú tratando de escapar de ese lugar del infierno - sacó dos cigarros - ¿Quieres uno? - me ofreció.

Milo: no gracias, no fumó.

Radamanthys: bueno - dijo guardo uno y encendio el otro, después de dar la primera calada habló - eres muy sumiso ¿No? Athena si les tiene bien educados.

Milo: no se si tomar eso cómo un alago oh un insulto.

Radamanthys: eh los dos supongo - vio al cielo - ¿Quieres ir al cine? - le dijo cuando lo volteó a ver.

Milo: ¿Cómo dices?

Radamanthys: Vamos al cine.

Milo: ¿Eh? Claro ¿Que día?

Radamanthys: ahora - dijo y se paró.

Milo: ¡Ahora! - pregunto asombrado mientras que el otro lo tomaba de las manos y lo paraba.

Radamanthys: dijiste que te querías ir de aquí ¿No? Bien vámonos, no tenemos nada que hacer aquí - dijo y de un momento a otro su sapuri apareció.

Milo: no oye espera tengo que avisarle por lo menos a la señorita Athena que voy a salir - le dijo en lo que el otro lo agarro por la cintura.

Radamanthys: no te preocupes que Athena no se dará cuenta de la ausencia de uno de sus perros.

Milo: ¡OYE! - le gritó molesto y el otro lo cargo al estilo princesa y lo saco volando del santuario.

Con los soldados.

Soldados: - viendo a dos cosas no identificadas volando.

Soldado 1: ¿Eh? ¿Debemos preocuparnos por eso? - dijo señalando lo que se veía en el cielo.

Soldado 2: - alzó su vista - ¿eh? No tal vez sea un pajarito.

Soldado 3: si claro, un pajarito - dijo sarcástico.

Después de eso se pusieron a pelear entre todos.

Con Milo y Radamanthys.

Milo se encontraba agarrando fuertemente a Radamanthys tenía miedo que ese espectro lo lanzará al vacío era un espectro loco no podía confiar en el.

Radamanthys: oye sueltame un poco ¿Quieres?.

Milo: que me asegura que cuando lo haga no vas a tirarme al vacío - le dijo con su cabeza escondida entre el cuello del otro.

Radamanthys: muy bien pasajeros se les informa que empezaremos a descender así que tendremos un poco de turbulencia al decencender - dijo y empezó a moverse bruscamente provocando que el otro se sujetará más a él río por lo bajo y descendió en el suelo - está servido caballero.

Milo poco a poco fue abriendo los ojos y se separó del espectro un poco viéndose en el parque Radamanthys lo bajo.

Radamanthys: bien vamos a ver una película - dijo y empezaron a caminar.

Milo: ¿Cuál veremos?

Radamanthys: ¿te parece bien una de terror? A mí no me gustan las románticas y las de acción ya las vi.

Milo: por mi no ay ningún problema yo te acepto lo que sea - dijo y se fueron.

En el Santuario.

Templo de Athena.

Athena: ¡Milo!, ¡Milo! - gritaba entre la multitud.

DM: ¡Alacrán! ¡Alacrán! - gritaba en otra parte.

Afrodita: ¡Milo! ¡Milo! - nada - ¿Dónde estará? - pregunto confundido - bueno mejor seguiré buscando, ¡Milo! - volvió a gritar.

Camus se acercó a Athena.

Camus: ¿señorita Athena?

Athena: ¿Que ocurre Camus?

Camus: ¿No a visto a Milo?

Athena: no Camus de hecho lo estoy buscando porque Shion quiere presentarle a un amigo - le dijo sonriendo mientras le guiñaba en ojo.

Camus: ¿Un amigo?

Seiya: Saori...

Athena: ¿Que pasa Seiya? ¿Lo encontraste?

Seiya: No.

Shun: Saori yo lo había visto a los pies de la estatua de Athena hace poco de hecho le llevaba un poco de agua que me pidió pero ya no está allí.

Athena: es extrañó, Milo jamás se va de algún lugar sin avisarme primero sabe que me preocupo mucho - dijo viendo hacia otro lado.

Con los jueces.

Aiacos: ¡Radamanthys!

Minos: ¡Radamanthys!

Aiacos: ¿Dónde demonios estará?

Minos: hay que encontrarlo si no el señor Hades no matará.

Aiacos: ¡Radamanthys!... - siguieron gritando.

Con los caballeros.

Afrodita: Masky...

DM: ¿Que paso?

Afrodita: Escuche que Radamanthys no aparece, ¿Y si se fue con el juez?

DM: vamos Afrodita, ¿que probabilidades ay de que Milo y Radamanthys estén juntos?.

Afrodita: es cierto ¿Y si Radamanthys lo secuestro para torturarlo? - dijo asustado.

DM: sabes perfectamente que Milo se sabe defender bien, jamás va a dejarse secuestrar sin haber peleado.

Afrodita: tienes razón, pero sigamos buscando.

DM: bien - dijo y siguieron caminando.

Mucho tiempo de búsqueda después.

En el bar del pueblo.

Milo y Radamanthys estaba En el bar

[ Si después del cine lo llevo al bar, no ay nada de anormal ay, no claro que no es lo normal que se hace ]

Bueno los dos ya estaban pasandos de copas mientras hablaban de sus problemas amorosos, a los dos les había ido mal pobres.

Radamanthys: entonces, voy cómo idiota - decía con su vaso en la mano mientras se balanceaba un poco - Le digo Ey Kanón - tomó a Milo de la nuca y lo acercó a su rostro - quiero decirte que me gustas mucho y mua - le dio un beso en la mejilla - le estampó un beso en los labios.

Milo: ¿Así? ¿Y que te dijo? - le dijo al momento de llevar el vaso a su boca y dar un sorbo - ah, ahora que el maestro Dohko y el patriarca me vean así me matan.

Radamanthys: no te preocupes por eso estás ya bastante grandecito para tomar tus propias desiciones.

Milo: ¿Dime qué te dijo?

Radamanthys: me dijo que no asi secamente me dijo, sabes que estoy enamorado de otra persona me dijo y se fue sin más - dijo y volvió a tomar de su bebida.

Milo: por lo menos a ti no te golpearon cuando te declararse - le dijo viendo con tristeza hacia el suelo.

Radamanthys: ¿Cómo? ¿Quien lo hizo?

Milo: lo hizo el mismo tipo que se casó hoy, y por si no le bastará la humillación que me hizo aquella vez me obligó a estar en su boda ¿Sabes? Me obligó a fingir una falsa felicidad que no sentía.

Radamanthys: no sabía que ese caballero podría a ser asi de malo.

Milo: no a mí me fue bien, a comparación de cómo se ah vengado de otras personas conmigo fue bueno.

Radamanthys: Entiendo, oye... ¿Has escuchado ese dicho que dice que los niños y los borrachos dicen la verdad?

Milo: ¿Eh? Pero claro que sí, es un dicho muy famoso. ¿Porque?

Radamanthys: bueno es momento de desahogarnos de todos nuestros males - Se paró en la mesa ante la atenta mirada de Milo y gritó - ¡HADES Y KANÓN ME LA PELAN! - Milo solo se limitaba a reírse y tapar su rostro con una mano, Radamanthys se quitó la camisa la giró y se la tiro a una chica que lo veía, dicha mujer recibio la camisa y se la puso.

Milo: jajaja estás loco - le dijo en cuanto el otro se sentó.

Radamanthys: un poco bicho, oye tú haz lo mismo.

Milo: no, esos espectáculos no son dignos de un santo de Oro, eso sería caer en la mayor de las ridiculeces.

Radamanthys: vamos bicho.

Milo: ya dije que no.

Radamanthys: entonces lo haré yo - se volvió a parar.

Milo: Radamanthys no lo hagas, Radamanthys ¿Que haces? bájate.

Radamanthys: ¡ATHENA Y ACUARIO SE LA PELAN! - grito señalandolo mientras él se tapaba el rostro con ambas manos.

Tiempo después.

Santuario 12:00 am.

Iban agarrándose mutuamente para no caerse mientras trataban de hacer el menor ruido posible.

Milo: tengo que llegar a mi templo.... - dijo arrastrando las palabras.

Radamanthys: eres muy hermoso, eres un gran hombre... - decía acariciando su mejilla.

Milo: no me alages que me sonrojo - dijo poniendo su dedo índice en su mejilla y volteando su rostro hacia otro lado quedaron callados un rato y soltaron una gran carcajada mientras se retorcían de la risa.

Llegaron a las escaleras de Aries.

Milo: ay que subir, Shss.... - le dijo poniendo su dedo índice en sus labios.

Radamanthys: Shsss... - dijo copiando su acción, después de eso dieron el primer paso, caendo los dos de frente en las gradas se levantaron y empezaron a Shitearse mutuamente.

Milo: Shsss...

Radamanthys: Shsss....

Empezaron a subir de forma silenciosa, pasaron los demás templos sin problema digamos, ya que tropezaba, se reían, tiraban algunos floreros oh se les complicaban evadir las trampas, todo bien, todo correcto hasta que llegaron a Libra.

Templo de libra.

Shion y Dohko estaban despiertos preocupados por no saber nada de Milo, tiempo después lo vieron llegar con Radamanthys, los dos iban cantando, no más bien gritando para despertar a los demás, ya que querían que todos no pudieran dormir.

Milo/Radamanthys: ¡FELIZ NAVIDAD, FELIZ NAVIDAD! ¡FELIZ NAVIDAD PRÓSPERO AÑO Y FELICIDAD!... - gritaban felices.

Shion los veía furioso, Dohko por su parte estaba asustado, jamás había visto a Milo asi, nunca se había pasado de copas, esto era nuevo, Shion se acercó.

Shion: aver jovencito me puedes explicar ¿donde estabas?

Milo: estaba, estaba - vio a Radamanthys - ¿Dónde estaba Rada?

Radamanthys: tú no pero Milo si estaba conmigo hace rato, ahora que lo recuerdo ¿Dónde está? ¡Milo! - grito dando una vuelta y después dijo - oh aquí estás amigo, creí que te había dejado perdido en el pueblo - le dijo abrazandolo.

Shion sentía que le iba a dar algo por la cólera, después de hablar con ellos los dos siguieron caminando hacia Escorpio.

Dohko: así que si estaba con el juez.

P/Shion: vaya sorpresa, ¿No lo crees? - dijo negando y de brazos cruzados, ambos viendo en la dirección por la que los otros se fueron.

Un tres meses después.

Narra Camus.

Estaba regresando de mi luna de miel, la verdad estuvo mejor de lo que pensé, nos dirigimos al santuario al llegar fuimos recibidos de la manera más gentil posible, cómo siempre cortesía de mi diosa, todos mis compañeros estaban ay, todos menos Milo, Cuándo pregunte por el me dijieron que había salido.

Bueno, fue lo que pensé yo.

Tiempo después.

Ya era de noche, y el muy desgraciado nisiquiera se había tomado la molestia de venir a verme así que yo tome la iniciativa y me levanté y fui a Escorpio.

Camine un rato hasta que llegue al templo, entre sin avisar no lo vi en la sala pero eso no fue por mucho cuando lo ví aparecer con un jarrón con agua y lo ví sentarse y del sillón tomo un precioso ramo de rosas rojas las saco y puso en el jarrón y agarro un pequeño trozo de papel, lo ví sonreír fascinado acariciando los delicados pétalos de la flor, me acerque con curiosidad.

Camus: hola amigo - el se volteó rápido a verme y me sonrió.

Milo: hola Camus No sabía que ya estabas en el santuario ¿Cuando regresaste amigo?

Vaya parece que esas ideas locas salieron de su cabeza pero porque me siento tan mal por este cambio.

Camus: regrese esta tarde - le dije mientras tomaba asiento a su lado - ¿Y esas flores?

Milo: oh las flores, ¿Están lindas verdad?

Camus: mucho, Afrodita se lució está vez.

Milo: - río - no, estás no me las dio Afrodita.

Camus: ¿Entonces?

Milo: - no me respondió y solo se dedicó a ver las Rosas -

Camus: ¿No vas a responder?

Milo: deberías irte con Tú esposo Camus, no es bueno que lo dejes sólo - fue lo único que me dijo acomodó el florero a la mitad de la mesa de centro y me dejó solo en el sillón.

Me quedé un poco abrumado por su acción, Milo jamás se había portado así de distante conmigo y que lo hiciera ahora me dolió.

Dos meses después.

Estaba en la entrada de mi templo, escuchando la voz de Milo estaba cantando a Capella al compás de una guitarra acústica.

Estoy armando una nave para viajar
Y escapar hacia el infinito
Cruzar el tiempo y espacio para explorar
Y encontrar la luna y soñar
Que paso sólo un rato más contigo
Que de mi lado no te vas a ir jamás.

Estoy robándome un barco para navegar
Y surcar un mar de recuerdos
Para perderme en una isla en medio del mar
Y encontrar el tesoro y pensar.

Que mi vida era completa contigo
Que si el tiempo pudiera regresar
Quiero saber si en algún lugar
El tiempo no pasa

Quiero pedir un minuto más
Decir sin hablar
Que quiero solo un rato más contigo
Que de mi lado no te vayas jamás
Quiero subir en un globo directo al cielo

En una nube buscarte para charlar
Y platicarte que intento
Todos los días la formula encontrar
Para poder regresar el tiempo

Quiero saber si en algún lugar
El tiempo no pasa
Quiero pedir un minuto más
Decir sin hablar
Que quiero sólo un rato más contigo
Que de mi lado no te vayas jamás...

Estaba escuchando atentó la verdad se me hacía extraño todo esto, Milo cantaba desde su templo para todo el santuario cuando alguien se iba hacia una misión oh para siempre, era triste ¿Quien se ira del santuario? Eso era lo que pasaba está demás decir qúe estoy en mi templo, Surt se había ido a Asgard, ya que dijo quería ir a comprar unas cosas para nuestro bebé, si ya iba a ser papá.

Afrodita: Tiene una hermosa voz, ¿No lo crees?.

Camus: hola Afrodita ¿Qué haces aquí?

Afrodita: vine a Escuchar la hermosa voz de Milo contigo amigo mío - me dijo sentándose a mi lado.

Camus: es muy hermosa, pero dime Afrodita ¿Sabes quién se ira del santuario?

Afrodita: - sonrió triste - ¿Encerio no lo sabés Camus?

Camus: ¿Que es lo que debería de saber?

Afrodita: el que se va es Milo, Camus, ¿viste al no joven que está ahora en Escorpio?

Camus: claro que sí.

Afrodita: el es el nuevo caballero de Escorpio, el sucesor de Milo.

Camus: entonces...

Afrodita: así es, Milo definitivamente deja el santuario para llevar una vida normal, y más por el pequeño que tiene en su vientre.

Camus: ¿Que me estás diciendo? ¿Milo está embarazado?

Afrodita: si, nos dio la noticia hace una semana en la cena, pero cómo tú nunca cenas con nosotros...

Ya no quise seguir hablando y baje a Escorpio corriendo, era cierto que había notado a Milo muy raro últimamente y aparte de eso salia siempre a escondidas de todos ¿que estaba pasando? Llegue y entre al templo.

Lo ví sentado en una de las ventanas del templo, viendo con dirección hacia el cielo tenía una de sus manos en su pequeño vientre aún así que me acerque y le hable.

Camus: dime qué no es cierto Milo - el me volteó a ver.

Milo: ¿De que hablas?

Camus: de tú partida del santuario y lo de tú bebé - el me vio con ligera tristeza y se bajó de la ventana, se acercó a mí hasta tenerme enfrente y me dijo

Milo: todo es verdad Camus, si me iré del santuario y si estoy esperando un bebé.

Camus: ¿De quien? - le pregunte exaltado.

Milo: de mi novio ¿Si? La verdad no sé ni porque te enojas.

Camus: Milo te recuerdo que hace muy poco tiempo me dijiste que yo te gustaba, ¿Que paso con eso?

Milo: te supere eso pasó, Me rompiste el corazón aquel día, no te importaron mis sentimientos y a parte de eso me golpeaste y tienes el sinismo de venir a reclamarme ahora ¿Que te pasa Camus?

Camus: lo siento, la verdad lo siento, no se qué me pasó esa noche Milo, perdóname, pero necesito saber ¿Quien es el papá de ese bebé? - escuché otra voz.

Radamanthys: Soy yo Acuario - dijo apareciendo el juez del inframundo yo me quedé quieto en mí lugar Milo solo asintió cuando lo voltee a ver - ¿Todo bien?

Milo: - asíntio mientras el otro lo abrazo -

Radamanthys: solo vine por las últimas cosas y después podremos irnos ¿Bien? - Milo asintió y el otro solo dejó un beso en sus labios y entró. Dejándonos solos.

Camus: ¿Desde cuándo?

Milo: ¿Hm?

Camus: ¿Desde hace cuánto?

Milo: fue unas semanas después de tú boda, ese día que no me encontraron por ningún lado, me había ido con el, hablamos de muchas cosas y nos dimos cuenta de que teníamos muchas cosas en común, tiempo después decidimos intentarlo y nos hicimos novios, cuando me sentí listo me entregué a el, y bueno fue así como pare así, el dijo que debía salir del santuario para llevar mí embarazo normal, además que queríamos vivir cómo una familia, empezar de cero, decirle adiós a todo esto.

Camus: Pe... - el interrumpió.

Milo: escucha Camus, te pido perdón por haberme enamorado de ti ¿Si? Te deseo lo mejor en tú relación y acepto tus disculpas de todo corazón pero me veo en la obligación de decirte que no me busques ¿Si? Olvídate de mí, y si algún día nos volvemos a ver será como desconocidos.

Camus: si está es tú desición la aceptó.

Milo: te lo agradezco mucho.

Radamanthys apareció.

Radamanthys: bueno vámonos... - dijo le tomó de la mano el se despido de mí con la mano y se fueron.

Continuará...