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Capítulo 04.

El resto de la semana pasó muy lento para NamJoon, quien deseaba un momento a solas con su nuevo compañero, lo cuál resultaba complicado. Sólo se quedaba viendo o escuchando desde el sofá la hermosa voz de Jeon y su risa, era como una melodía muy agradable o como su nueva canción favorita. Podría escucharla todos los días y jamás de hartaría.

JungKook trataba de hacerse cercano a los demás profesores, conocerlos mejor y crear una confianza con ellos. Aunque tal vez lo hacía por si necesitaba ayuda con algún alumno problema, no quería ser una carga con el amable profesor Kim.

Era sábado, día de clases extracurriculares y eran pocos los alumnos y profesores los que se encontraban en el campus. En el caso de NamJoon, él sí tenía que asistir, y para su mala suerte JungKook no. Su clase ya había dado fin y ahora caminaba en dirección a su auto, con los gritos de las animadoras de lo equipos de la preparatoria a lo lejos.

Dejó caer sin cuidado su maletín en los asientos traseros del auto y luego se colocó el cinturón de seguridad. Fue ahí cuando sintió que su teléfono celular vibró en el bolsillo de su pantalón, antes de comenzar a manejar decidió ver de quién se trata. Todo su interior se emocionó al ver el nombre de JungKook en la pantalla:

"JJK💕"
¿La invitación sigue en pie?
03:10pm.

Por supuesto. Te enviaré
la dirección en un momento.
03:11pm.

Rápidamente buscó la ubicación del bar y la envió, en verdad iba a salir con él. Estarían solos y debía aprovecharlo de la mejor manera. En su camino a casa se esforzó en recordar cada prenda de su armario, tenía que hacer una elección minuciosa para llamar su atención. Los colores oscuros eran su fuerte y lo hacían ver maduro, atrayente, varonil y tal vez podría hacerlo babear.

Estacionó el auto en su espacio de la cochera y al bajar lo aseguró debidamente. Entró a la casa y saludó con mucho amor a su hermosa mascota de pelaje blanco perfectamente cuidado y brillante.

Hoy voy a hacer que el hombre que escogí para ser tu papi caiga rendido a mis pies, y para eso necesito verme bien le dijo a su mascota Moni mientras sacaba algunas camisas para ver cuál es la indicada.

Sobre la cama dejó un completo desorden que tendría que recoger antes de irse, aunque todavía faltaban horas.

¿Una camisa sencilla es una buena elección? Podría dejar los primeros botones abiertos se miró al espejo y suspiró ㅡ. Ojalá pudieras hablar y darme tu opinión, aunque también podría llamarle a HyeJin.

Lo pensó por un momento, necesitaba ayuda y aunque su hermana era un poco ruda, a ella le hacía feliz brindar su ayuda y conocimientos sobre el buen vestir por lo que se apresuró a buscar su teléfono celular y llamarla.

Por otro lado se encontraba JungKook, quien seguía pensando en el mensaje que el profesor Kim le envió hace unas horas, le emocionaba la idea de salir con alguien que no sea su novia y sus amigos. NamJoon era interesante y estaba seguro de que podían formar una buena amistad.

De su armario sacó una camisa de seda en color azul, la tela brillante hacia un perfecto contraste con su piel y su cabello. Se mordió el labio pensando en si debía, hace tiempo que la compró y nunca la usó.

¿Debería? se preguntó a sí mismo frente al espejo, tomando la prenda del gancho y colocándola como si la tuviera puesta.

¿Por qué estaba tan nervioso? Cuando la imagen del moreno llegaba a su mente, algo en su interior se movía con entusiasmo. Ni siquiera con su novia se sintió de esa manera en su primera cita, y ahora que lo pensaba, podía ser malo. ¿Estaba prefiriendo a un hombre que recién conoce por la chica que ha estado a su lado casi toda su vida?

No, JungKook, tranquilo. Sólo es la emoción de conocer a alguien nuevo respiró hondo y se sonrió ㅡ. Sí, es por eso, porque no tiene nada que ver con que sea guapo. Dios perdóname pero, debo reconocer de que es atractivo, para eso tengo estos ojos, ¿o no? Es más, yo solo veo a NamJoon como un compañero, no como a EunBi, mis ojos de amor son totalmente de ella.

O eso creía él.

Le avisó a su novia que saldría con un compañero de trabajo y le envió la dirección del lugar por si llegaban a beber de más y necesitaban ayuda para regresar a casa. Sabía que su dulce EunBi lo recogería y lo cuidaría pues era un mal bebedor.

Antes de entrar a la ducha, decidió que llevaría la camisa de seda azul y un pantalón de vestir en color negro, dejó la ropa sobre la cama junto con un cinturón. Estaba ansioso por probarse ese conjunto y que todo el mundo lo viera, aunque no estaba interesado en que las chicas lo miraran.

Nuevamente el rostro de NamJoon llegó a su mente, con esa maldita sonrisa perfecta con un par de hoyuelos que se marcaban en sus mejillas y un traje negro, como el día en que le dio el tour por la preparatoria.

Basta, JungKook se dio un par de palmaditas en el rostro.

Secó su cabello con la ayuda de una secadora y trató de no peinarse muy formal, quería verse bien y tal vez con cierto aire juvenil, que lo hiciera sentir cómodo y seguro consigo mismo. Después procedió a tomar las prendas de la cama y colocárselas con sumo cuidado para no arrugar la tela tan delicada. Recogió las mangas de la camisa hasta los codos, dándole un punto extra a su aspecto.

Cuando menos lo esperó, la hora acordada llegó y JungKook se apresuró a buscar las llaves de su auto mientras le avisaba a Namjoon que saldría para allá.

NamJoon terminó de un solo trago su bebida mientras revisaba su teléfono, ya habían pasado quince minutos de la hora acordada y JungKook no aparecía. ¿Se había arrepentido? El solo pensamiento lo hizo sentir como un completo fracasado.

A su alrededor había muchísimas personas divirtiéndose, bebiendo en grupo, bailando en la pista y otros solitarios en sus mesas justo como él. Por un lado se calmó de que no era el único tonto, pero por otro no podía dejar de pensar en que lo había dejado plantado.

Con el paso de los minutos las parejas o amigos de los otros sujetos llegaron, siendo ahora el único idiota solitario en el bar. Molesto, se levantó de la silla dispuesto a marcharse y buscando su billetera.

¡NamJoon, lamento la tardanza! la agitada voz del menor le hizo detener todos sus movimientos ㅡ. Tuve un problema con mi auto y... ¿Te vas?

N-no, yo...

Descuida, olvidé avisarte. Mi auto no quiso arrancar de último momento, fue muy inoportuno. Tomé un taxi para llegar aquí pero, en serio olvidé enviarte un mensaje suspiró ㅡ. Estás en todo tu derecho de irte, yo entiendo.

Él lo pensó un momento, no podía marcharse luego de que JungKook hizo un esfuerzo por llegar al bar. Además, su mirada desilusionada movió todo en su interior, tanta ternura en ese par de ojos cafés brillantes lo iba a matar.

No soy un idiota como para dejar ir esta oportunidad de estar contigo. Toma asiento, yo voy a ordenar para los dos le regaló una media sonrisa para aligerar el ambiente.

¿Estás seguro? preguntó el menor mordiendo su labio inferior de forma discreta.

El tiempo que esperé por ti es relativamente poco a comparación de una semana entera. Siéntate, iré por las cartas para ordenar. Y por cierto, te ves muy guapo. El azul va muy bien contigo.

Ahí estaba ese maldito guiño que desde un principio aceleró el corazón de JungKook. ¿Tenía un tic o algo por el estilo? Él quiso creer que sí.

El azabache se giró un poco, viendo el caminar de NamJoon hasta la barra. Aquel hombre vestía con una camisa conocida como tira hueso, con detalles y pequeños cortes circulares a lo largo de ella. Arriba de esta llevaba una camisa de vestir de tonalidad blanca, dejando la mitad de sus botones sin abotonar. Sus mangas se encontraban arremangadas hasta sus antebrazos, haciéndolo lucir aún más sexy.

Aunque lo que podría relucirse más, era los pantalones de cuero negro, con aquel cinto de la misma tonalidad enrollar su cintura, que lo hacía lucir realmente deseable, sin olvidar de cómo su cabello perfectamente peinado hacia atrás y sus accesorios los complementaba a la perfección.

Cuando lo vio caminar de regreso a la mesa fue imposible apartar la vista, sus miradas se engancharon y las mejillas de JungKook se pintaron de un leve color rosado cuando NamJoon le sonrió de lado.

Me tomé la libertad de ordenar comida para ambos, pero puedes elegir la bebida que sea para acompañarlo comentó Kim elevando la voz lo suficiente para ser escuchado por el tímido hombre de camisa de seda azul.

Gracias la sonrisa de JungKook tembló y optó por desviar la mirada a la carta de bebidas ㅡ. No conozco mucho sobre esto, ¿podrías ordenar por mí?

De acuerdo, vayamos por algo sencillo. Por favor, trae dos botellas de Soju dijo Kim al atento mesero que se acercó a ellos y JungKook se dedicó a observar lo que ocurría a su alrededor ㅡ. Entonces, ¿me explicarás lo que ocurrió con tu auto esta noche? Y antes de que respondas, quiero pedirte una disculpa por no haberte llamado y preguntar si todo estaba bien o cual fue el motivo de tu retraso en lugar de pensar en irme de aquí. No suelo reaccionar así él sonrió de lado, apoyando su espalda en el alcolchonado asiento.

Realmente no hay nada que perdonar, fue mi culpa el no haberte avisado. Y contestando tu pregunta, ese estúpido auto costó mucho como para que de la nada comience a fallar. Simplemente no quiso arrancar, mañana tendré que pedirle a mi novia que me lleve a la preparatoria por la siguiente semana y por la tarde llamaré para llevarlo a algún taller soltó un suspiro cansado.

Con gusto me hago disponible para cuando necesites un aventón. Tienes mi número, eres libre de llamarme sin importar la hora para lo que necesites.

Te lo agradezco mucho, NamJoon. ¿Cómo estuvo tu día de hoy? le pregunta el azabache cruzando los brazos y apoyándolos sobre la mesa, mostrando un gran interés en el otro.

Bastante activo como cada sábado. Creo que no te lo comenté, pero doy clases extracurriculares los sábados. Además de enseñar inglés, también doy clase de cocina.

¿En verdad? el chico levantó las cejas sorprendido ㅡ. No luces como alguien a quien le gusta cocinar, y mucho menos impartir clases de ello.

Me lo han dicho un par de veces, pero no miento al decir que soy bueno en la cocina. Si no hubiera decidido convertirme en un profesor, probablemente ahora mismo estuviera en una cocina de un restaurante de cinco estrellas preparando platillos pretenciosos para gente adinerada.

¿Y te arrepientes? Es decir, ¿crees que serías feliz cocinando platillos deliciosos en lugar de enseñar inglés a adolescentes de preparatoria?

En eso, el joven mesero llegó a la mesa con la característica botella verde acompañado de dos vasos de vidrio y sus ordenes de comida. Ambos agradecieron al mismo tiempo.

Soy muy feliz con mi empleo, no cambiaría por nada ser profesor. Me siento muy orgulloso de mí al lograr que mis alumnos lleguen hasta el último semestre y se graduen con honores. En una cocina nunca experimentaría algo como eso.

JungKook sonrió y le dio la razón asintiendo levemente. Tomó un vaso de cristal con una mano para inspeccionarlo, lo miró detenidamente antes de darle una olfateada. Parecía inofensivo, y bebió todo el contenido del vaso de un solo trago, arrugando la nariz cuando el líquido quemó ligeramente su garganta.

Ju-jungKook, creo que deberías ir más despacio. ¿Has bebido antes? preguntó NamJoon notablemente preocupado y angustiado.

El azabache no quería parecer un tonto frente a un hombre como NamJoon. Tal vez por un orgullo estúpido y por no querer verse débil.

¡Pero claro que sí! exclamó de forma exagerada, junto a una sonrisa temblorosa debido a los nervios ㅡ. Necesito otra.

¿Seguro? el moreno titubeó al momento de rellenar el vaso.

Vamos, NamJoon, no soy un hombre débil. Me gusta beber como cualquier persona local.

Bueno, ya estaba exagerando. Y tras ese segundo vaso, siguió otro, y otro más hasta el punto en que JungKook comenzó a reír como un idiota cuando NamJoon trataba de hacerlo entrar en razón y devolverlo a la realidad. La verdad es que un simple vaso podía llevarlo a ese estado debido a que nunca en su vida había consumido alcohol, y NamJoon lo conprendió muy tarde. Vaya que estaba arrepentido, y mucho.

Llegó el momento en que NamJoon decidió que lo mejor era llevarlo a casa, le preocupaba que el menor hiciera algo estúpido o que perjudicara aun más su salud. Pagó la cuenta y llevó a su acompañante en su espalda, mientras JungKook reía y decía incoherencias mientras se abrazaba al cuerpo ajeno como un bebé Koala.

En breves minutos, NamJoon se encontraba colocandole el cinturón de seguridad en el asiento de copiloto.

Profesor Kim, ¿a dónde me lleva? Yo tengo una novia hipó.

Te llevaré a casa, cerebrito. Necesito que me digas la dirección para poder llevarte, ¿la tienes escrita o puedes hacer un esfuerzo para decirme al menos la zona? le preguntó sentándose en cuclillas frente a él y posando una de sus grandes manos en el muslo ajeno.

¿Alguna vez le han dicho que tiene unos ojos preciosos, profesor Kim? sonrió de manera juguetona y luego comenzó a reír.

El mayor fingió no escuchar, el menor estaba borracho. No podía tomarlo en serio, así que se tragó el suspiro y pidiendo disculpas, buscó la billetera de JungKook en los bolsillos de su pantalón. Causando manoteos por parte del menor al no entender la situación.

¿Qué cree que está haciendo? frunció el ceño al sentir su cuerpo extraño luego de aquellos toqueteos en su trasero.

Necesitaba tu identificación para poder llevarte a casa. Descuida, te devolveré la billetera cuando hayamos llegado con bien a tu hogar. Ahora, quedate quieto, no hagas más tonterías, y por lo que más quieras, no te duermas. ¿Entendido? levantó una ceja y JungKook sintió sus piernas temblar ante tan sexy gesto.

JungKook asintió de manera sumisa sin perder el contacto visual con su mayor. Llegó a la conclusión de que se veía mucho mejor sin sus lentes, su rostro se lucía de manera espléndida, encantando a todo el mundo con un simple guiño. NamJoon le hizo preguntas para mantenerlo despierto, debía reconocer que el azabache lucía tierno hasta cierto punto.

Agradeció al cielo cuando logró dar con la dirección, y se sorprendió de lo hermosa que es la casa de su colega.

Vamos JungKook, arriba le dijo mientras le quitaba el cinturón de seguridad.

¿A dónde me lleva? preguntó confundido cuando un hombre lo sacó del auto.

¿Qué estaba pasando? Se talló un ojo al notar que su vista era muy borrosa, pero en ningún momento se le ocurrió que tanto alcohol en su sistema estaba durmiendo cada uno de sus sentidos. Incluyendo su heterosexualidad.

Hemos llegado a tu casa, Kook. ¿Necesitas ayuda para abrir la puerta? Yo puedo hacerlo por ti, solo necesito las llaves de la puerta decía el mayor, sosteniendo de la cintura a su tambaleante compañero para mantenerlo en pie.

No necesito hipó ayuda, ya soy un adulto y puedo hacer las cosas por mí mismo.

No quise insinuar algo así, me refiero a que estás tan ebrio que no sabes lo que dices e imagino que mucho menos sabes acerca de tus acciones explicó NamJoon con ese tono sereno que tanto le caracteriza, no podía alterarse con ese bonito joven que colgaba de su cuello.

Por supuesto que sé lo que hago se defendió arrugando el ceño.

Antes de traerte aquí dijiste que tienes una novia y después mencionaste que mis ojos son bonitos, ¿qué clase de hombre hace eso? preguntó con toda esperanza de encontrar su tan esperada luz verde para pretenderlo como es debido.

Aunque la mayoría de las personas hoy en día han dejado de lado ese tipo de cosas, él seguía siendo de esos hombres a la antigua. Le encantaba conocer a la persona y enamorarse poco a poco de su hermosa personalidad, pero con JungKook supo de inmediato que es justo el hombre que tanto ha buscado y estaba seguro que no importaba si descubría algún hábito desagradable o extraño, él seguiría enamorado hasta los huesos.

¿Acaso no puedo, NamJoon? Me gustan sus ojos, y más cuando no lleva lentes sonrió en grande para él y luego se soltó a reír.

NamJoon bufó cuando se encontraban frente a la puerta, sabiendo que le dolería dejarlo solo en una inmensa casa sin que alguien lo cuide o esté pendiente de él porque, evidentemente, es su primera borrachera. Aunque le sorprendía que en ningún momento ha vomitado o presentado náuseas.

Abre la puerta y entra, necesitas ir a recostarte antes de seguir diciendo locuras acerca de mis lindos ojos soltó una risita divertida ㅡ. A menos que tengas algo más que decir acerca de mí.

Tengo algo más que decir, pero no encuentro las palabras adecuadas dijo posando ambas manos en el amplio pecho contrario para mantenerse en pie por sí mismo.

¿Entonces como...

Para su gran sorpresa, JungKook se abalanzó sobre él, acercándose lo suficiente para que sus labios se encontraran en el camino. No supo cómo reaccionar, había soñado tanto con un momento así pero no creyó que se cumpliría tan pronto y mucho menos con el azabache en ese estado.

Movió los labios de manera torpe, le dio la impresión de que nunca antes había besado a alguien pero lo atribuyó a que estaba ebrio. Por más deseoso que se encontrara de seguirle el juego, no podía, su estúpida conciencia le molestaba y una luz roja se encendió indicando que debía alejarse o lo lamentaría.

Pero su mente simplemente lo distrajo lo suficiente para que JungKook se alejara y con torpeza abriera la puerta.

No le diga a mi prometida hipó una vez más sobre esto.

JungKook, yo...

Buenas noches.

La puerta fue cerrada justo frente a su nariz sin darle la oportunidad de preguntar qué había sido eso. Parpadeó un par de veces procesando la situación y el torpe pero tierno beso que recibió, pasó la lengua lentamente por sus propios y finalmente sonrió.

Dio media vuelta y comenzó su camino hasta su auto, donde al subir y luego de colocarse el cinturón de seguridad, soltó un largo suspiro sin perder su boba sonrisa.

Heterosexual, sí como no.

· ─𖥸─ ·

~Nota~~
¡Amorcitos míos, he vuelto! Lamento mucho la demora, si están leyendo alguna de mis otras obras sabrán que estoy teniendo muchos problemas con mi celular. Ya estoy buscando un trabajo para ahorrar y tener uno nuevo.

Pero mi plan se vio pospuesto porque mi hermana y mi sobrinita se contagiaron de Covid, ha sido un mes muy difícil. A eso sumarle que mi hermana empeoró, pero al menos mi sobrina ya está fuera de peligro y ahora yo la estoy cuidando porque no pueden estar juntas :(.

Aproveché que se durmió para poder terminar este capítulo y traerlo especialmente para ustedes ♡. Espero les haya gustado, lamento si algún error se me escapó por ahí. Prometo que pronto lo corregiré.

¿Ya vieron que tenemos nueva portada y un nuevo banner? Están hermosos y quedé muy satisfecha con el resultado, probablemente sea la permanente uwu. Gracias por esperar y por leer a pesar de la tardanza, les amo muchito ♡.

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