El castaño de ojos color rosas caminaban sin prestarle atención a la platica de su hermana con su amigo, ambos sabían que llamar su atención sería como una sentencia de muerte.

- hola César - claro que Kevin no lo notaba -.

- viejo, ¿que te paso? ¿te dejo la novia? - pregunto Max algo preocupado, este tenía ojeras y los ojos hinchados, pero no tuvo respuesta y César se fue a su salón - ¿qué le pasa?.

- esta enojado, pero dejenlo, debe entender - dijo Sun para después ella irse a su salón -.

- ...... -.

Los demás se quedaron un poco con la intriga, miraron a Ángel pero este sólo se encogió de hombros, debían distraerlos de, los que mierdas tengan de problemas, en eso el chico de pelo largo tuvo una idea.

- hay que llevarlos a mi casa - dijo sonriendo -.

- ya tuvieron un mal día en la dino selva - dijo Máx viendo lo enojado - mejor piensa en otra cosa, creo que de todos modos se aburririan en tu estúpida casa, idiota.

Kevin y Ángel miraron a Máx con enojo, no sólo le  recordar lo de la selva, su forma de hablar hacia Richie era muy grosera e hiriente, aún así Richie no quitaba su tranquila sonrisa.

- mi papá va a desenterrar cosas, eso los mantendrá ocupados y luego podemos hacer una fogata y contarnos historias de terror - hablo tranquilo -.

- claro como si después de pelear con mis padres lo que más me gustaría es ir a sudar como cerdo y luego no poder dormir - rodó los ojos después de su sarcasmo -.

- ya cállate - hablo Kevin, este se cayó por miedo más que nada - opino que es buena idea.

- ¡SI! ¡y comeremos la deliciosa comida que prepara tu papá! - dijo Ángel sonriendo - en el receso les diremos.

Ángel y Kevin se fueron dejando solos a Máx y a Richie, este último seguía con su sonrisa, tomó su celular y miro la fecha.

- espero que sepas lo que haces - dijo Máx enojado -.

- 20 de marzo, créeme si no los una buena leyenda, no se que podrá hacerlo - dijo para después irse caminando dejando con la duda a Máx -.

Por otro lado, César estaba sentado en su asiento junto a la ventana, desde el primer día le parecían desesperantes sus compañeros, la pesadilla es peor pues casi atrás de el se encontraban el típico grupo de chicas que sólo se ponían en la ventana para ver a los chicos lindos, todavía había más cosas.

- hey idiota ¿que haces? - dijo el chico de pelo blanco al igual que su piel -.

Damián era una de esas cosas, el está un año adelantado, así que le tocó estar, por desgracia, con el, siempre con su actitud hipócrita, con sus hermanas era un maldito ángel caído del cielo, mientras que con los demás, incluyendo a César, era una mierda de persona, nadie sabía el por qué, quizás no quería que sus padres lo castigarán por la culpa de sus hermanas, tal como el caso de César, pero otros tenían el chisme, que era porque el era un caso sin remedio por lo cual quería que sus hermanas fueran amadas y respetadas a pesar de que lo odiaran a el.

Los dos chicos se empezaron a agredir por media de las palabras, Damián estaba recargado en la mesa de César mirándolo, hasta que empezaron a llegar más alumnos, ya ahí dejaron de decirse cosas y solo se miraron.

Se miraron a los ojos unos momentos, hasta que César susurro:

- violetas, me encantan tus ojos violetas....

- ¿siempre eres así de directo? - dijo sonrojado, empezando a caminar -.

- digamos que la veces en las que tu eres grosero - por primera vez en 3 días el chico mostró una sonrisa totalmente sincera -.

- idiota - no lo admitía, pero le empezaba a gustar esa sonrisa, llegó a su asiento que estaba a tres bancas de el -.

César sonrió, sus mejillas estaban rojas y tenía una sonrisa de enamorado combinado con idiota, seguía viendo al de pelo blanco que sacaba sus cuadernos, en eso escuchó algo detrás de el.

- awwww~ que bonito el amor - dijo la chica, ella no era como las demás - ¿quieres ver en su cara preocupación?.

Su pelo rubio y lo sujetaba en una enorme trenza, sus ojos eran azul claro, todos la conocían por ser la mejor en los deportes y tener mucha rivalidad con Max que también le apacionaban, César la miro confundido.

- Samara de que estas hablando - pregunto viéndola, está sólo río -.

- ejem.... ¡oye Damián! ¡hoy toca con mi mamá! - dijo burlona -.

Damián, que la voltio a ver desde que escuchó su nombre, se le vio una cara digna de película.

- ay No ......

- NADIE SE VA A IR HASTA QUE ACABEN LAS 10 VUELTAS ¡y no me ímporta si es corriendo a arrastrándose! - después de eso sopló a su silbato, viendo ya a la mayoría en la novena vuelta, aún su pelo negro y amarrado en una coleta y sus ojos azules seguía siendo muy demandante - ¡y ya saben que pasa si no es tan asiendo nada!.

- hija de... - Damián se detuvo a media cancha, en eso llegaron César y Sam, estos todavía seguían trotando y le dieron una vuelta a Damián - odio a tu madre.

- oh vamos mamá es buena - dijo la chica sin dejar de trotar - debiste ver como me traía cuando quise aprender fútbol americano, uff.

- que pasa si alguien no está asiendo lo que ella dice - pregunto César parandose junto con Damián para descansar un poco -.

- la maestra Silvia suel- PUFFF - no terminó de hablar Damián al recibir un fuerte balonazo en su cara, era de voleibol, de tambaleo antes de caer encima de César que no aguanto el peso y cayó -.

- ¡¡SI!! ¡DOS EN UNO! - río con victoria la mujer atlética -.

- ¡MAMÁ! - se quejó Samara enojada, dejo de trotar para ayudar a los chicos, pero antes de intentarlo vio la posición en la que estaban - uy jeje.

César intento pararse pero no pudo, al voltear a ver vio a Damián que cayó entre sus piernas y su cabeza quedó en su abdomen, este se sobo el golpe pero al ver como estaban ninguno podía dejar de verse, estaban nerviosos, pero de la nada, Samara cayó bruscamente alado de ellos sosteniendo su abdomen con fuerza al recibir un balonazo en esa parte, con uno de baloncesto.

- ejem, perdón por quitarles el momento, pero estamos en una cacha - dijo Silvia, haciendo que César se moviera bruscamente y dejará caer a Damián al suelo por unos segundos, pero también se levantó rápido, ambos quedaron como si nada, aunque la chica seguía retorcida en el suelo -.

Damián no dijo nada y se fue caminando para terminar su última vuelta, César le iba a seguir cuando miro hacia la otra cancha, el colegio tenía dos canchas juntas para que estuvieran dos grupos al mismo tiempo, a ellos también les daba la mujer, pero uno de ellos hizo que César temblaran, con su típica y escalófriante sonrisa Kevin Sólo miraba a César, aún con esa expresión era fácil saber que decía.

- estoy perdido -.....

○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○○

- ¿¡hermano estas bien!? - pregunto Fernanda viendo a su hermano -.

- ¿por que lo dices? -

- estas rojo - dijo Lucía - ¿qué paso?.

- ehh nada nada jeje ^//^.