Desperté mareado por el golpe, uno de mis ojos sangraba... tal vez ya no pueda ver; los cuerpos de los niños estaban desparramados por todos lados... algunos calcinados, otros desmembrados, arranque un poco de la ropa de mis amigos para cubrir mi ojo. Levante la vista y pude divisar a aun cuerpo moviéndose, era aquella niña, al parecer se torció el tobillo, fui a su encuentro ella también estaba consiente... por largas horas caminamos e intentamos huir... pero solo nos adentramos a territorio enemigo... al final fuimos capturados y entrenados por enemigo.

- ¿Qué nos va a pasar?... no me quiero quedar aquí... - murmuraba ella, mientras sostenía mi brazo con temor

- Tranquila... yo evitare que te hagan algo

- No deberías de prometer cosas imposible mocoso – comento el hombre que estaba al frente de ellos – pero tengo que admitir que me gusta tu valentía

- ¡¿Qué nos van a hacer?!... – a pesar de mi miedo quise saberlo... pensé que sería lo mejor... tal vez me equivoque

- Jajaja mi querida niña, aquí... nos van a servir como esclavos o tal vez en otra cosa... bueno eso depende de cómo se comporten... ahora aclarado eso... cuál es su nombre – pregunto aquel hombre

- Mi nombre es Brick – trate de sonar autoritario, pero supongo que aquí eso no funciona...

- Y el tuyo pequeña niña – su cara cambio a la de una pervertido

- Su nombre es Miyako... ella es mi hermana – ella se sorprendió por lo que dije, pues ella saco su pequeño rostro de mi espalda para después sonreír y mirar al hombre con una mirada desafiante... "esa mirada no es suya pensé"

- Bien mocosos... a partir de hoy, serán entrenados para protegerme... pues yo soy el que gobernara todo este estado JAJAJAJAJAJA – y si como sus risas empezaron... también desaparecieron tras la puerta al cerrarse

- ¿Qué haremos, yo no puedo quedarme aquí... si lo hago...mi hermana nunca me encontrara? – Miyako cada vez se desesperaba más en esa habitación que les privaba de su libertad

- Tienes que calmarte... ella nos va a encontrar, te va a encontrar entendiste. Pero por el momento tenemos que obedecerlo... tal vez así sepamos donde esta

- Estas ¿seguro?... yo no quiero obedecer a ese cerdo... me miraba muy extraño

- Te dije que te protegería no... deja de llorar... salgamos de esta habitación y vallamos a dormir, no quiero dormir en esta habitación blanca...

- Está bien... vamos