Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

OVA 1 (3/3). Responsabilidad...

En el nombre del Padre... y del Hijo... y del Espíritu Santo... Amén...

Esas fueron las palabras dichas por un sacerdote; el cual en estos momentos, se encontraba parado frente a una tumba...
Siendo más específicos... frente a la tumba del fallecido Hisashi Midoriya...

Era un día nublado y lluvioso... Ideal para la situación actual que ocurría en estos momentos en el cementerio...
Y tanto amigos como familiares del difunto Hisashi, vinieron a su funeral para dar su más sentido pésame y despedirse de él...

Había transcurrido una semana desde que ocurrió el incidente que le arrebató la vida a Hisashi Midoriya...
Y desde entonces... las cosas han sido sumamente difíciles para la principal familia Midoriya; o sea, para Inko y para Izuku...

Por su parte, la muerte de su esposo fue un golpe emocional muy duro y difícil de soportar y de creer para la recién viuda Inko Midoriya; quien no ha parado de llorar desde que se enteró de la noticia de la muerte de Hisashi; y tampoco ha dejado de preguntarse cómo fue que ocurrió todo esto tan repentinamente y qué fue lo que sucedió exactamente con su amado esposo, ya que la policía le había informado que encontraron el cuerpo sin vida de Hisashi afuera, en las calles, a altas horas de la noche, en la escena de un posible conflicto; lo cual eso era una duda que se implantó en la mente de Inko y que la ha estado torturando durante todo este tiempo...

Ella quería llorar fuertemente para tratar de desahogarse... Quería echar todo por la borda y encerrarse en su habitación para no salir de ahí en mucho tiempo... En verdad ella quería estar sola ahora...
Pero tenía que ser fuerte... Tenía que soportar esto y tratar de seguir adelante, ahora que su esposo ya no estaba con ella; ya que la misma Inko se decía a sí misma que ahora, más que nunca, tenía que ser fuerte... por ella y por su hijo...

Y hablando de él... Izuku, por su parte, ya no tenía ni un solo rastro de brillo en sus ojos; más que solo un vacío profundo que reflejaba su tristeza...

Durante este tiempo, Izuku se había distanciado por completo de su madre; volviéndose más cortante con ella y serio a la hora de dirigirle la palabra, ya que no estaba listo para verla a los ojos, sabiendo que él era la razón principal por la que Hisashi ya no se encontraba con ellos ahora mismo...

Él no ha parado de pensar una y otra vez en esa noche... y en cómo es que la muerte de su padre había sido totalmente su culpa...

Aún recordaba cómo fue que todo ocurrió...
Y también cómo es que esa noche, con un profundo dolor en su corazón, tuvo que dejar a su padre ahí, tirado en la escena, para huir lo más pronto posible debido a que la policía estaba cada vez más cerca del lugar y no podía dejar que lo vieran; logrando así escapar y desaparecer en la oscuridad, mientras continuaba derramando cientos de lágrimas que no paraban de salir de sus ojos por culpa de la enorme tristeza que estaba experimentando en ese momento...

Y ahora mismo, todos los presentes en el funeral se encontraban alrededor de la tumba; viendo cómo acababan de sepultar el ataúd que contenía el cuerpo sin vida de Hisashi, en lo profundo de la tierra...

Algunos veían la tumba con miradas tristes, otros con rostros serios, otros con ojos llorosos y otro simplemente mostraban su respeto; aunque eso no quitaba el hecho de que sentían una enorme tristeza...

Mientras que con Izuku, él veía la tumba de su padre con una mirada baja y una expresión vacía... Sus ojos no mostraban ni un solo rastro de brillo...
Él era el único de los presentes que no traía paraguas; y a pesar de que le ofrecieron varias veces uno, este se negó rotundamente a aceptarlo; ya que quería sentir la fría y calmante lluvia en todo su cuerpo para así tratar de despejar su mente un poco...
Y también... para camuflar las lágrimas traicioneras que llegaban a escapar de sus apagados ojos esmeralda...

Pero entonces, Izuku decidió voltear un segundo para ver a su madre; la cual se secaba las lágrimas con un pañuelo, mientras que sollozaba en silencio y era consolada por una de sus mejores amigas...

Al ver a su madre en ese estado, nuevamente la culpa se apoderó de Izuku...

"¿Qué es lo que he hecho...?"
Esa era la pregunta que seguía torturando al peliverde desde aquella fatídica noche...

Pero entonces, en ese momento, el ex mejor amigo del peliverde; aquel que le hizo la vida imposible a nuestro muchacho desde que se enteró que era solamente un quirkless y quien poseía un gran complejo de superioridad; Katsuki Bakugo, se acercó a Izuku para dar su más sentido y sincero pésame; ya que a pesar de que no se llevan para nada bien, Bakugo respetaba mucho al padre del peliverde...
Y además, su madre, Mitsuki Bakugo; aquella mujer que era la mejor amiga de Inko, la cual estaba consolando en estos instantes; lo obligó a ir con Izuku para brindarle su apoyo.

Bakugo: Deku...

Izuku: (muy serio y sin voltear a verlo) ...

Bakugo: Lamento tu pérdida... Sé que esto debe ser duro para ti y...

Izuku: (muy serio y sin voltear a verlo) No necesito tu lástima, Bakugo.
Luego de todo lo que me has hecho tener que soportar durante años... aún tienes el descaro de venir aquí y fingir que me brindas tu apoyo en esto...

Bakugo: Deku...

Izuku: (muy serio y sin voltear a verlo) Vete de aquí... Y déjame solo...

Bakugo: ... Como quieras.

Sin intención de comenzar una pelea en ese momento, Bakugo simplemente se retiró de ahí, dejando al peliverde nuevamente solo; quien continuó obsevando en silencio la tumba de su padre...

Izuku sentía un profundo dolor en su pecho al saber que ya no volvería a ver a su padre...
Pero... también sentía un profundo sentimiento de odio e ira que lo carcomía desde adentro...
Y la razón era por aquel sujeto que le arrebató la vida a su padre esa noche...

Desde que ocurrió esta tragedia, Izuku no ha dejado de pensar en ese maldito...
Jamás iba a olvidar ese rostro delgado...
Esa perversa sonrisa retadora...
Y esos ojos que reflejaban un cruel deseo de luchar hasta la muerte...

Y debido a ello... Lo único en lo que ha estado pensando el peliverde desde esa noche en que perdió a su progenitor...
Era en buscar a ese sujeto y hacerle pagar por lo que hizo...

Él quería... Venganza...
________________________________________

Esa misma noche...

Luego de que concluyera el funeral de Hisashi Midoriya, todos los que asistieron se retiraron del cementerio y regresaron a sus respectivos hogares, aún con una sensación de tristeza presente en ellos; pero por su parte, al regresar a casa, nuestro muchacho de inmediato se encerró en su habitación, debido a que no quería ver a nadie en ese momento; dejando sola a su madre con su dolor, a pesar de que era consciente de ello...

Y después de un largo rato, cuando finalmente anocheció lo suficiente, Izuku se colocó su traje de vigilante y escapó de su casa para salir un momento a las calles; no para patrullar, sino por una razón en específico; por lo que justo ahora mismo, el chico se encontraba en la cima de un edificio muy alto, observando hacia la nada con una mirada totalmente vacía y seria...

Izuku: (serio) ...

???: Hermosa vista, ¿no lo crees?

Y fue entonces cuando, en ese momento, detrás suyo apareció ni más ni menos que la hermosa heroína Lady Nagant; la cual de forma misteriosa, había subido ágil y sigilosamente hasta la cima de aquel edificio en donde se encontraba Izuku.

Y por si se lo están preguntando, la heroína era totalmente consciente de lo que había ocurrido con el padre del peliverde; ya que se enteró a través de las noticias. Y a pesar de que, en un principio, ella trató de brindarle su apoyo al peliverde; ahora que estaba pasando por un momento realmente difícil; lastimosamente no supo nada de él hasta dos noches antes de que se realizara el funeral de Hisashi; donde al encontrarlo sentado justo en la cima del edificio donde se hallaban actualmente los dos, ella trató de darle su más sentido pésame; pero el chico solamente se limitó a pedirle un peculiar favor para después largarse de ahí rápidamente, sin haberle dicho una sola palabra más y siendo totalmente serio con ella...

Izuku: (acercándose a ella, serio) ¿Tienes lo que te pedí?

Lady Nagant: ... Sí.

Respondiendo afirmativamente a la pregunta que le había hecho el peliverde, sin que este la haya saludado primero ni nada, en ese momento Lady Nagant le entregó a Izuku una carpeta que contenía exclusivamente información sobre el asesino de su padre; siendo este en realidad el peculiar favor que el chico le había pedido hace unas noches atrás. Y una vez que la recibió, el chico procedió a abrir la carpeta para comenzar a examinar cada uno de los datos que había sobre aquel maldito criminal...

Izuku: (revisando los datos) ...

Lady Nagant: Su nombre real es desconocido hasta la fecha; pero lo apodaron como "Hood".
Era un peleador clandestino que se ganaba la vida luchando en peleas ilegales. Pero llegó a un punto en el que ya no le interesaba pelear más por dinero, sino sólo para disfrutar del regocijo de una pelea; lo que lo llevó a desarrollar una seria obsesión por querer enfrentarse a oponentes que él considerara fuertes, para así poder derrotarlos en combate y posteriormente acabar con ellos.
Y debido a ello, un día su obsesión lo llevó a enfrentarse mano a mano contra la heroína Mirko; pero terminó siendo derrotado por ella y posteriormente fue arrestado y llevado a prisión.

Mientras escuchaba la información que le compartía Lady Nagant con respecto al asesino de su padre, en ese instante, Izuku pudo ver en el archivo una fotografía de él; lo cual causó que su ira apareciera en ese preciso momento...

Pero logrando mantener la compostura, Izuku terminó de revisar la información que tenía en sus manos para después cerrar la carpeta y entregársela nuevamente a Lady Nagant; para que ella pudiera devolverla al lugar de donde la tomó y no levantara sospechas o se metiera en problemas.

Izuku: (serio) Te agradezco por haber cumplido con el favor que te pedí. Te debo una.

Y sin decir algo más, en ese momento Izuku estaba a punto de retirarse de ese lugar, sabiendo ahora todo lo que necesitaba saber sobre el villano que buscaba; pero antes de que pudiera irse, Lady Nagant lo detuvo para preguntarle algo de suma importancia...

Lady Nagant: (seria) Una vez que lo encuentres... ¿Qué es lo que pretendes hacer con él?

Izuku: (muy serio) ...

Lady Nagant: (seria) No vas a entregarlo a las autoridades, ¿cierto?

Izuku: (muy serio) ... No. Haré que se arrepienta por lo que hizo...

Lady Nagant: (seria) ¿Y tú no vas a arrepentirte? ¿En serio planeas mancharte las manos de esa forma?

Izuku: (muy serio) Él se las manchó primero. Y por lo que me dijiste y lo que acabo de leer, esta no sería la primera vez que él asesina a un inocente. Le estaré haciendo un gran favor al mundo al deshacerme de él...

Lady Nagant: (seria) Escucha lo que estás diciendo. No eres tú quien está hablando, es la ira.
Lo que buscas no es justicia, es venganza. Y sé que tú eres mucho mejor que eso...

Izuku: (enojado) ... Él mató a mi padre...

Lady Nagant: (seria) ¿Y eso te da el derecho de matarlo a él?

Izuku: (enojado) ...

No obstante, Izuku no estaba dispuesto a seguir teniendo esta conversación; por lo que solamente se dio la vuelta y caminó hasta la orilla del edificio en el que se encontraban; y sin decir más, Izuku procedió a transformarse en Insectoide para acto seguido irse volando lejos de ahí; bajo la mirada de la heroína, quien sólo se limitó a apretar los puños con fuerza, en señal de frustración y angustia; a la vez que imploraba que el chico no cometiera un grave error que lo arrastrara a la oscuridad...
________________________________________

Ha pasado una semana entera desde que se llevó a cabo el funeral de Hisashi Midoriya...

Durante este tiempo, Izuku ha estado saliendo cada noche a las calles para encontrar alguna pista o rastro de información que lo guiara directo hacia el asesino de su padre; el cual ahora sabía que era conocido bajo el nombre de "Hood".

Y aprovechando que la escuela le había otorgado un par de días libres para que pudiera afrontar con calma la situación actual que estaban viviendo él y su madre con respecto a la muerte de su padre, de igual manera, nuestro querido peliverde también ha estado saliendo a las calles durante el día para buscar información al respecto sobre el paradero del criminal fugitivo; aunque de manera mucho más discreta, ya que no podía arriesgarse a llamar la atención de la policía o de los héroes profesionales mientras se encontraba en su búsqueda de venganza...

Pero desgraciadamente, esos días libres que le dio la escuela por fin habían terminado el día de hoy; por lo que justo ahora, nuestro querido protagonista se encontraba caminando por los pasillos de su escuela, con la cabeza baja, de mala gana y sin ningún tipo de ánimos; mientras se dirigía hacia su casillero para tomar algunas cosas e irse directo a su salón de clases.

No obstante, durante el camino, Izuku se percató al instante que estaba siendo observado bajo la mirada de casi todos sus compañeros de clase y la mayoría de los estudiantes de otros grados; quienes estaban al tanto de la situación del peliverde; por lo que en vez de ignorarlo o molestarlo como usualmente lo hacían, simplemente lo veían con lástima; cosa que le desagradó totalmente a nuestro muchacho...

Sin embargo, Izuku decidió solamente ignorarlos y continuó caminando durante un par de metros más hasta que finalmente llegó a su casillero; pero mientras se encontraba quitándole el candado para abrirlo, en ese preciso momento, uno de sus compañeros, que solía molestarlo con frecuencia, se acercó directamente a él para decirle algo...

Extra: Oye, Midoriya.

Izuku: (serio, tratando de ignorarlo) Hoy no...

Extra: (colocando una mano sobre el hombro del peliverde) Sólo quiero hablar...

Pero al momento de que aquel chico colocó una de sus manos sobre el hombro derecho de Izuku, sorpresivamente, este de un momento a otro lo sujetó del cuello y lo alzó unos centímetros del suelo para después azotarlo con furia contra los casilleros; cosa que impresionó y preocupó un poco a los demás estudiantes que veían esta escena, ya que nunca se esperaron que el peliverde tuviera la fuerza necesaria como para levantar de esa manera a alguien sin problemas.

Pero en ese momento, en lugar de que aquel chico golpeara al peliverde o le reclamara por haberlo atacado sin razón aparente, este no hizo absolutamente nada debido a que en ese instante pudo ver en los ojos de nuestro muchacho la enorme tristeza e ira que él estaba sintiendo en estos momentos; por lo que nuevamente sólo puso con delicadeza una de sus manos sobre su hombro y procedió a hablarle con total comprensión...

Extra: (comprensivo) Sé que murió tu padre... Lo lamento mucho...

Izuku: ...

Pero a pesar de que, por primera vez en mucho tiempo alguien que no era de su familia mostraba algo de empatía hacia él, a Izuku no le importó en lo más mínimo y solamente se limitó a soltar a su compañero para después largarse de ahí, bajo la mirada de todos los presentes que se encontraban en el pasillo; los cuales se quedaron ahí parados, mientras empezaban a susurrar cosas entre sí sobre lo que acababa de suceder; pero no pudieron seguir con el chisme debido a que unos segundos después sonó el timbre de la escuela; indicando así que las clases estaban a punto de comenzar; por lo que rápidamente todos los estudiantes se fueron de inmediato a sus respectivos salones de clases.

Pero por su parte, nuestro querido protagonista decidió faltar a clases, ya que no estaba de humor para entrar a su salón y ser el centro de atención de todos los neandertales que tenía como compañeros; por lo que este simplemente escapó de la escuela, sin importarle las posibles consecuencias posteriores. Y justo ahora, él se encontraba caminando por las calles, sin algún rumbo aparente, hasta que de pronto se detuvo en medio de un callejón oscuro y abandonado; y de la nada, soltó un fuerte golpe contra una de las paredes del lugar. Y la razón por la que había hecho tal acción, fue por un desesperado intento por tratar de desestresarse; ya que durante todo el trayecto, desde la escuela hasta el callejón en el que se encontraba actualmente, los recuerdos de aquella fatídica noche comenzaron a invadir su mente y a atormentarlo...

Pero sin estar calmado aún, en ese momento el peliverde soltó otro fuerte puñetazo a la pared; y al haberlo hecho, del mismo modo que con el primer golpe, no sintió casi nada a causa de que su furia y su tristeza eran mucho más grandes que el dolor físico; por lo que viendo esto, Izuku decidió golpear nuevamente la pared, pero ahora con mucha más fuerza...
Y luego volvió a golpear la pared otra vez... Y otra vez... Y otra vez...

Y mientras el chico golpeaba la pared con todas sus fuerzas y sin detenerse, cientos de recuerdos volaban a través de su mente en ese momento; todos relacionados con su difunto padre; hasta que finalmente se detuvo al sentir de repente un intenso dolor en sus manos que lo hizo reaccionar; y al voltear a ver sus manos, Izuku pudo observar cómo sus nudillos se encontraban completamente lastimados y cubiertos de sangre; como consecuencia por haber golpeado frenéticamente la pared por quien sabe cuánto tiempo...

Izuku: (mirando sus nudillos) ¡Agh...! Mierda...

Por fortuna para nuestro muchacho, al final del callejón en el que se hallaba, había una llave de agua que se veía prácticamente funcional; por lo que Izuku se acercó a la llave y la abrió para dejar que el agua fría cayera sobre sus manos, para así poder limpiar la sangre que había sobre ellas y calmar un poco el dolor.

Pero entonces... en ese mismo instante, de repente Izuku sintió algo tocar su espalda, seguido de un peculiar sonido que aprendió a reconocer en estos últimos meses, a causa de sus labores como vigilante... Y entonces, de pronto un sujeto completamente desconocido para él comenzó a hablarle desde la espalda...

Lo que estaba ocurriendo en ese momento, era que nuestro querido protagonista estaba siendo apuntado con un arma por la espalda, por un simple ladrón que iba pasando por ahí y, al ver al peliverde solo en ese callejón abandonado, creyó ver la oportunidad para cometer un robo "fácil" a plena luz del día y sin que nadie se diera cuenta...

... Pero creo que todos sabemos cómo terminarán las cosas en realidad...

Ladrón: (serio, apuntándole al peliverde) Si no quieres morir aquí, niño, entonces más te vale obedecerme y no hacer ningún escándalo. ¿Quedó claro?

Izuku: (serio) No estoy de humor, amigo... Por favor, déjame solo...

Ladrón: (molesto, apuntándole al peliverde) No trates de hacerte el valiente, mocoso. Ahora, vacía tu mochila y entrégame todo lo que traigas de valor.

Izuku: (muy serio) Te lo advierto... Vete de aquí antes de que algo malo te pase...
Esta es mi última advertencia...

Ladrón: (enojado, apuntándole al peliverde) ¡Veo que tienes pelotas para responderme, niño; pero no estoy jugando!

Izuku: (pensando, enojado) Yo tampoco...

Ladrón: (enojado, apuntándole al peliverde) ¡Así que será mejor que hagas lo que...

No obstante, antes de que el ladrón continuara amenazando al peliverde; de pronto fue cegado por una intensa luz verde que provino justamente del chico y lo cubrió por completo; y cuando dicha luz se disipó, él repentinamente soltó un fuerte grito de dolor al sentir un inmenso dolor en su hombro derecho que lo obligó a soltar el arma que estaba sosteniendo...

Dicho dolor era indescriptible para el ladrón... Era una sensación de dolor totalmente horrible e insoportable; como si alguien estuviera cortando su brazo con un cuchillo en ese instante...

Pero antes de que el ladrón pudiera notar qué es lo que le había sucedido, de repente fue arrojado fuertemente contra una de las paredes del lugar y posteriormente cayó duramente al suelo; y fue en ese entonces cuando pudo apreciar enfrente suyo a una extraña criatura humanoide que se asemejaba mucho a un pez; sólo que más monstruoso...

Y por supuesto, aquella criatura se trataba de ni más ni menos que de nuestro querido protagonista, quien se había transformado en uno de sus alienígenas en ese momento para poder atacar al ladrón; y dicho alienígena, era conocido bajo el nombre de... ¡Acuático!

Acuático: (enojado y serio) Te lo advertí, ¿no es cierto?

Ladrón: (asustado y adolorido) P-Por favor... Perdóname...

Acuático: (enojado y serio) Temo que ya es muy tarde para pedir disculpas...

Ladrón: (totalmente asustado y adolorido) ...

Al darse cuenta del gran error que cometió, al creer que podría robarle fácilmente al chico y subestimarlo por completo, el ladrón rápidamente trató de ponerse de pie para huir lo más lejos posible de ahí; pero no pudo hacerlo a causa de la gran y profunda herida que le hizo el Pisccis volann en el hombro.

Lo que había sucedido anteriormente para que el ladrón obtuviera aquella espantosa y dolorosa herida, fue que, una vez que Izuku se transformó por completo en alien, este aprovechó que la intensa luz que generó el Omnitrix al momento de transformarlo había cegado al ladrón momentáneamente, para acto seguido abalanzarse inmediatamente sobre su oponente y morderlo duramente, sin contenerse, en el hombro derecho con sus poderosas fauces; provocándole una enorme y fatal herida al momento de incrustarle sus dientes y lograr atravesar tanto su carne como sus huesos...

Únicamente con su mandíbula, Acuático había logrado atravesar fácilmente la piel y los músculos de su oponente; como si estuvieran hechos de plastilina; y también había destrozado cada uno de los huesos que conformaban su hombro; como si de simple porcelana se hubiesen tratado...

Acuático: (muy serio) Debiste haberme hecho caso cuando tuviste la oportunidad...

Ladrón: (totalmente asustado y adolorido) ¿Q-Qué es lo que planeas hacerme...?

Acuático: (muy serio y aterrador) Voy a enseñarte por qué nadie debe meterse conmigo...

Acuático: (abalanzándose sobre su oponente) ¡RAWR!

Ladrón: ¡AAAAHHHHHHHHHH!

Lo que sucedió posteriormente en ese callejón... es algo que es mejor nunca tener que saber...

Ciertamente, Izuku no asesinó al ladrón...

Ni tampoco hizo lo que muchos creen que podría haber hecho en su estado actual...

Pero si de algo hay que estar completamente seguros... es que nunca volveremos a saber de aquel ingenuo delincuente que, sin saberlo, cometió el error más grande de toda su existencia... Y posiblemente el último...
________________________________________

Ha transcurrido otra semana desde entonces...

Durante este tiempo, Izuku no ha dejado de salir a las calles para seguir buscando algún rastro sobre el paradero del hombre que está buscando; ya sea durante el día o durante la noche...

Tampoco ha estado durmiendo casi nada en todo este tiempo; ya que, según el propio Izuku, no descansaría hasta haber logrado su cometido; por lo que él ha estado ingiriendo cientos de bebidas energizantes para mantenerse completamente despierto; a pesar de que eso estaba perjudicando lentamente su salud...

Hasta este punto, a Izuku ya no le importaba nada...

Ni su salud... ni su tiempo... y ni siquiera sus estudios; ya que tampoco ha estado asistiendo a clases desde entonces, y ni le importaba si terminaba siendo expulsado de la escuela...

Lo único que le importaba al chico en estos instantes, era encontrar al asesino de su padre... y hacerlo pagar por todo el dolor y el sufrimiento que le causó a él y a su madre...

Y parece que eso estaba a punto de volverse realidad esta noche...

En estos momentos, Izuku se encontraba arrodillado en la orilla del tejado de un pequeño edificio, ubicado en la alcaldía de Shibuya; esperando a que el Omnitrix terminara de recargarse, tras haberlo utilizado previamente, para poder volver a patrullar por la zona; pero justo en ese instante, de pronto su interceptor de señales captó una transmisión de la estación de radio de la policía...

Interceptor de señales: ¡Atención a todas las unidades cercanas a la prefectura de Shibuya, reportan un 10-79 en el banco central! ¡El asaltante es un hombre blanco, alrededor de treinta y cinco años; de cabello negro, ojos distorsionados y con un tatuaje visible en su hombro izquierdo!
¡La descripción encaja con el último de los fugitivos que escapó de la prisión hace unas semanas atrás! ¡Se le vio por última vez dirigirse al Sur de la calle 19, a bordo de un vehículo robado! ¡Procedan con cautela!

Izuku: (serio y furioso) ... Te encontré...

Esa era la transmisión que Izuku había estado esperando escuchar durante todo este tiempo... Y finalmente, el momento por fin había llegado... Había encontrado al criminal que asesinó a su padre... Y no iba a dejarlo escapar...

Por lo que sin perder más tiempo; y teniendo la fortuna de que el Omnitrix nuevamente se había recargado, justo a tiempo para su uso; en ese momento Izuku rápidamente activó el Omnitrix y se transformó en una criatura naranja sin ojos y sin cola, similar a un perro gigante, de cuatro patas, con púas en la espalda y dientes muy definidos que sobresalían de su boca...

Aquel alienígena de apariencia salvaje, era conocido bajo el nombre de... ¡Bestia!

Y acto seguido, Bestia comenzó a movilizarse por los edificios, ya sea corriendo, escalando o saltando entre ellos, gracias a la gran agilidad y capacidad atlética que poseía; con el fin de alcanzar y llegar a su objetivo, el cual en estos momentos lo estaba reconociendo como su presa. Y gracias a sus sentidos superdesarrollados, pudo rastrear la ubicación de su "presa" con ayuda de su gran audición; guiándose con el sonido de las patrullas de policía que podía escuchar a la lejanía; por lo que velozmente aceleró su paso para poder alcanzarlos.

Y una vez que logró alcanzar a las patrullas de policía; las cuales en estos momentos se hallaban persiguiendo el auto robado en el que iba el asesino del padre del peliverde, conocido bajo el seudónimo de "Hood"; el alienígena cuadrúpedo aceleró aún más el paso y se impulsó desde la cima de un edificio mediano para dar un gran salto y aterrizar justo encima del vehículo, donde iba su tan anhelada presa.

Bestia: (lanzándose al ataque) ¡ROOAAAARRR!

Logrando aterrizar encima del auto y sobresaltando al conductor criminal, Bestia rápidamente dio un fuerte golpe en el techo del vehículo con una de sus enormes patas delanteras y logró atravesarlo fácilmente para después tratar de sujetar a su presa; pero antes de que pudiera hacerlo, sus instintos le advirtieron sobre algo malo que estaba a punto de suceder en ese momento, por lo que velozmente se quitó de ahí; logrando así evitar a tiempo varios disparos que vinieron de un arma cargada que llevaba consigo su presa.

Bestia: (evitando los disparos) ¡RARGH!

Como los disparos no cesaban por parte del criminal, rápidamente Bestia se vio obligado a tener que saltar a otro vehículo cercano, el cual se trataba de un camión de carga, para así evitar salir herido; por lo que usando parte de su lado humano para pensar y analizar la situación, en ese momento, de manera apresurada el Vulpimancer saltó hacia la barra superior de un poste de luz cercano y la usó como base para comenzar a balancearse ágilmente entre varios postes de luz igual de cercanos; empezando a tomar velocidad poco a poco, hasta que nuevamente alcanzó al vehículo robado que conducía su presa y obtuvo el impulso necesario para soltarse y llegar directo hacia él; aterrizando esta vez encima del capó del auto. Y sin darle la oportunidad al criminal de que le disparara o lo atacara con su quirk, instantáneamente Bestia destruyó el parabrisas del auto y sujetó con su pata delantera el volante para después girarlo bruscamente; ocasionando que el auto se volcara violentamente y diera vueltas y vueltas hasta que finalmente se estrelló contra un muro.

Afortunadamente, Bestia logró ponerse a salvo antes de que el automóvil se volcara por completo; al haber saltado hacia la pared de un pequeño edificio cercano y trepar hasta la cima. Y posteriormente, se escondió en las sombras para que las patrullas de policía o héroes profesionales que estaban a punto de llegar a la escena lo vieran; al igual que algunos civiles que se hallaban cerca del área en ese momento.

Sin embargo, una vez que llegaron a la escena, tanto la policía como los héroes profesionales se sorprendieron al no encontrar al criminal prófugo; ni tampoco algún solo rastro suyo o del dinero que había robado.
Era casi como si hubiera desaparecido misteriosamente en el aire; por lo que rápidamente se dividieron por toda el área para buscarlo, ya sea a él directamente o alguna pista o indicio de su paradero.

Pero nuestro querido alienígena cuadrúpedo sí sabía perfectamente en dónde se había metido su presa; ya que el había sido testigo de su "misteriosa desaparición"; gracias a su habilidad para percibir los movimientos de su alrededor con lo que parecía ser un sensor natural para detectar el calor de las cosas, como si fuera una serpiente o cámara infrarroja. Y pudo detectar de principio a fin cómo es que su querida presa logró salir ilesa del accidente de auto gracias a la ayuda de su quirk, para después tomar el dinero que robó y correr directo hacia el callejón que estaba literalmente a un lado de donde se estrelló y, muy curiosamente, utilizar la alcantarilla para esconderse y escapar de ahí; creyendo fielmente que nadie lo había visto... o notado...

Pero ahora que el Vulpimancer ya sabía en dónde se había metido su presa; además que anteriormente logró capturar su aroma durante la persecución; rastrearlo y encontrarlo iba a ser un simple juego de cacería para él...

No obstante, nuestro muchacho debía ser rápido en encontrarlo, antes de que se agotara el tiempo y regresara a la normalidad; porque si no lograba hallar al asesino de su padre a tiempo, muy posiblemente volvería a escapar y a esconderse como una vil rata por un largo tiempo... Y eso era algo que Izuku no estaba dispuesto a permitir...

Definitivamente, lo encontraría... y le pondría fin a todo esto esta noche...
________________________________________

Unos minutos después...

Ubicándonos en el interior de una vieja bodega abandonada, en estos momentos podemos observar perfectamente al criminal que nuestro querido protagonista ha estado buscando durante todo este tiempo para poder vengarse; el cual se encontraba caminando nervioso por el lugar, mientras portaba una sola pistola cargada en su mano...

Tras haber escapado de la escena, a través de las alcantarillas, para no ser visto por la policía, algún héroe profesional, o aquel extraño perro gigante que lo atacó hace unos minutos, Hood continuó corriendo por el drenaje hasta que finalmente salió por la alcantarilla de otro callejón; donde a unos cuantos metros cercanos, se hallaba una vieja bodega abandonada, la cual en realidad se trataba de su guarida.

Al principio, Hood pensó que se había salido con la suya; que había logrado escapar de la policía y de los héroes con el enorme saco de dinero que había robado del banco.
Pero luego de que transcurrieran unos cuantos minutos, de pronto comenzó a sentir una extraña sensación de frío, incomodidad y pánico; como si algo no estuviera bien...

Sentía que... no estaba ahí solo...
Que algo o alguien más estaba ahí con él... acechándolo en la oscuridad...
Pero él no veía a nadie... y la poca iluminación que tenía, por la luz de la luna que se filtraba por las ventanas rotas, no le ayudaba en nada...

Hasta que fue entonces cuando, en ese momento, repentinamente Hood vio pasar por las paredes del lugar una extraña y misteriosa sombra... confirmando de esa manera que realmente había alguien más ahí con él...

Hood: ¡¿QUIÉN ESTÁ AHÍ?!

Y sin esperar respuesta alguna, tan pronto como volvió a ver a aquella sombra pasar cerca suyo, Hood comenzó a dispararle desenfrenadamente, a cualquier lugar en donde esta apareciera y desapareciera misteriosamente, hasta que terminó vaciando el cartucho de la pistola.

Hood: (aventando el arma) ¡Carajo...!

Mientras volteaba a todas partes, en busca de lo que fuera que estuviera acechándolo; Hood rápidamente se dirigió hacia la salida del edificio para poder largarse de ahí; pero al momento de intentar abrirla, se extrañó al notar que estaba bloqueada por fuera, pero no era algo que le preocupaba al criminal, ya que fácilmente podía crear una nueva salida con la ayuda de su quirk.

Pero justo antes de que Hood pudiera hacer algo, de la nada fue sujetado por lo que parecían ser un par de tentáculos de color negro y blanco, para luego ser lanzado duramente contra algunas cajas vacías que se hallaban aún en la bodega. Y una vez que se reincorporó, este de manera enojada volteó a ver hacia todas partes para buscar al responsable de esta acción; pero se quedó totalmente paralizado al ver a unos pocos metros frente suyo a un... fantasma...

Aunque... en realidad... ese "fantasma" se trataba de ni más ni menos que nuestro querido protagonista; el cual ahora mismo se hallaba transformado en su alienígena más escalofriante, aterrador, enigmático... y maligno... ¡Fantasmático...!

Pero rápidamente, Hood salió de su estupor y perplejidad al agitar la cabeza varias veces; y entonces, encaró al alien Ectonurite...

Hood: ¡¿Y tú... qué se supone que eres?!

Fantasmático: (siniestro) ... Venganza...

Al oír aquella y única escalofriante palabra que provino del fantasma en ese momento, Hood tuvo un muy mal presentimiento... ya que ahora era perfectamente consciente sobre cuáles eran las verdaderas intenciones de su espeluznante atacante...

Pero... ¿Por qué venganza?
¿Acaso aquel espectro lo conocía?
¿Ya lo había visto antes?

Esas eran algunas de las preguntas que Hood se hizo en el momento en el que supo cuál era el objetivo de su atacante.

Pero eso no le importó para nada; ya que Hood no tenía planeado dar un paso hacia atrás y retroceder ante su contrincante; por lo que sin dejarse intimidar por él, siguió actuando como de costumbre, de manera confiada y arrogante, y le respondió con soberbia al Ectonurite...

Hood: (arrogante) ¡¿Ah, sí?! ¡Pues entonces, aquí me tienes!

Habiendo gritado eso, de manera rápida, Hood utilizó su quirk para aumentar las fibras musculares de sus brazos y se abalanzó directo hacia el Ectonurite, mientras que este solamente se quedó estático en su lugar; y al momento de acertar el golpe, el villano terminó pasando de largo al alienígena debido a que no pudo atacarlo, ya que lo atravesó como si fuera simple aire; cosa que puso en aprietos a Hood, ya que él dependía completamente de su fuerza bruta para atacar y derrotar a sus enemigos; y ahora que sabía que no podía lastimar al Ectonurite con ataques físicos... estaba en serios problemas...

Fantasmático: (serio y siniestro) Patético...

Siendo ahora su turno de responder, Fantasmático en ese momento desapareció de la vista de Hood, alertándolo por completo y esperando recibir algún ataque sorpresa de cualquier lado; pero entonces, de pronto el Ectonurite apareció justo detrás suyo para después adentrarse dentro de su cuerpo; con la intención de tomar el control sobre él...

Hood: (siendo poseído) ¡AGH! ¡¿Qué... QUÉ ES ESTO...?! ¡AHHH!

Una vez que Fantasmático logró tomar posesión del cuerpo del criminal, este hizo activar su quirk en sus brazos para luego empezar a golpearse a sí mismo con mucha brutalidad y salvajismo; al igual que azotaba bruscamente su cabeza o su cuerpo entero contra las paredes del lugar o las columnas que sostenían la estructura del edificio abandonado en el que estaban; logrando así dañar gravemente el cuerpo de Hood.

Pero sin estar satisfecho con eso, en ese momento, Fantasmático, aún estando en el cuerpo de Hood, comenzó a apretar fuerte y dolorosamente el brazo derecho del criminal, usando la otra mano, para acto seguido comenzar a estirarlo con demasiada brusquedad; hasta que finalmente, logró arrancarlo del cuerpo por completo...

Y deseando ver la reacción que tendría su pequeña víctima en ese momento, Fantasmático dejó de tomar posesión de él; y una vez que lo hizo, no pasó ni un solo segundo cuando Hood entró en shock y se derrumbó en el suelo para después empezar a gritar fuertemente de dolor, mientras sostenía el lugar donde antes solía estar su brazo; tratando de evitar que la sangre siguiera brotando a chorros...

Ver al criminal en ese estado... gritando con locura por el intenso dolor que sentía en ese preciso momento... y estando totalmente desconcertado por haber perdido uno de sus brazos... de alguna manera que no comprendía en su totalidad... hacian sentir a Fantasmático... Muy bien...

Y queriendo torturar aún más al criminal enfrente suyo, Fantasmático comenzó a acercarse lenta y macabramente hacia él...

Por otro lado, al darse cuenta que su contrincante sólo apenas había comenzado con su retorcido y sádico plan de venganza, en ese momento Hood pudo sentir en los más profundo de sí un sentimiento que nunca antes había experimentado durante una batalla... Miedo...

Así que como pudo, rápidamente empezó a arrastrarse por el suelo para tratar de alejarse de él; aunque no sirvió de mucho...
Y fue entonces cuando, por primera vez en su vida, pidió misericordia ante su oponente; cosa que jamás creyó que llegaría a hacer, ya que usualmente era a él a quien le pedían piedad sus contrincantes cuando estaba a punto de terminar con ellos; y no al revés...

Pero bueno, eso ya no importa ahora...

Hood: ¡No me lastimes! ¡Dame una oportunidad! ¡TAN SOLO UNA!

Fantasmático: (intimidante) ¡¿Y qué hay de mi padre?! ¡¿Acaso tú se la diste a él?!

Hood: (confundido) ¿Eh?

Fantasmático: (aterrador) ¡DILO!

Lleno de ira, en ese instante Fantasmático sujetó el cuello de criminal con sus propias manos y lo levantó del suelo para después obligarlo a mirarlo fijamente a la cara mientras se asfixiaba lentamente, sin poder hacer nada para defenderse...

Y fue entonces cuando, en ese instante, con la información que ha obtenido de su oponente hasta el momento, Hood ató cabos sueltos y por fin pudo recordarlo...
Recordó aquella noche en la que escapó de prisión y se enfrentó a una extraña criatura veloz que llamó su atención desde el inicio; pero que al final resultó ser un simple adolescente con la percepción de la realidad muy alterada...

Hood: (perplejo, sin poder respirar) Tú... ¡Tú eres el mocoso de aquella noche, ¿cierto...?!

Fantasmático: (furioso) ¡NO ME LLAMES ASÍ!

Sin importarle que el asesino de su padre haya descubierto finalmente su identidad, el Ectonurite en ese instante arrojó bruscamente al criminal directo hacia el techo; y una vez que se estrelló contra él, simplemente dejó que la gravedad hiciera su trabajo y dejó que cayera de espaldas duramente contra el suelo...

Hood: (herido) Ugh...

Fantasmático: (muy serio) Además, eso no tiene importancia ahora...

Habiendo dicho esto, Fantasmático ahora utilizó sus tentáculos para sujetarlo nuevamente y elevarlo un poco en el aire, a la vez que lo acercó un poco hacia él, para después proceder a hablar...

Fantasmático: (muy serio) TÚ le arrebataste la vida a un buen hombre... Y ahora YO te arrebataré la tuya... ¡Wuajajajajajaa!

Dejándose llevar únicamente por sus emociones y pensamientos negativos y retorcidos en ese momento, posiblemente a causa de esa escalofriante transformación, nuestro querido protagonista comenzó a azotar a Hood salvajemente contra el suelo, una y otra vez, lo cual lo obligó desde el inicio a activar su quirk en todo su cuerpo para así amortiguar el daño; al mismo tiempo que utilizó sus propias fibras musculares para cerrar la enorme herida que había en el lugar donde perdió su extremidad y crear un nuevo brazo improvisado con ellas.

Y sin darse cuenta de que Hood había activado su quirk para protegerse de sus ataques, Fantasmático en ese momento lo azotó una última vez más al suelo con toda su fuerza, para acto seguido comenzar a golpearlo ferozmente en el rostro; ya que él mismo quería terminar el trabajo con sus propias manos... Y continuó golpeándolo sin detenerse, una y otra vez... dejando que su mente y lo poco que aún mantenía de juicio se fueran nublando lentamente...

Fantasmático: (pensando) Cada golpe que le estoy dando, me hace sentir mucho mejor... Hacer esto me hace sentir... satisfacción...
Así que, ¿esto es lo que se siente estar por encima de alguien más débil que tú...? Sé que no debería disfrutar esto... Ni mucho menos estar haciendo esto...
¡Pero mi mente...! Algo dentro de mi mente... me está indicando que siga...
Me ordena que no me detenga...
¡Me incita a que descargue toda mi furia sobre él...! Y me parece una excelente idea...
Ver a este asesino en ese estado tan patético y vulnerable... me hace sentir poderoso...
Ver el miedo en sus ojos... ¡me hace sentir invencible...!
Más... ¡Más...! ¡Quiero más...! ¡Quiero golpearlo más...! ¡Quiero torturarlo más...! ¡Quiero acabar con él...!
¡QUIERO VERLO MUERTO!

Poco a poco, el juicio y la conciencia de nuestro muchacho iban perdiéndose por culpa de esa transformación que, de algún modo, envenenaba su alma y amplificaba si lado oscuro y sus deseos de venganza; y si eso continuaba así, existe el riesgo de que perdamos a nuestro querido Izuku... para siempre...

Pero afortunadamente para todos nosotros, aunque no para nuestro querido protagonista, en ese momento el símbolo del Omnitrix; el cual se hallaba justo en el pecho del fantasma, escondido detrás de lo que parecía ser una capa de piel que poseía; empezó a parpadear rápidamente en rojo mientras emitía una alarma, lo cual le indicó al Ectonurite que el tiempo de transformación se había agotado; por lo que en ese instante, de pronto una intensa luz roja lo cubrió por completo e iluminó todo el lugar momentáneamente. Y cuando la luz se disipó, se pudo observar ahora que nuestro querido protagonista había regresado a la normalidad; sólo que se encontraba totalmente desorientado y confundido en estos instantes, ya que por alguna razón desconocida, no podía recordar absolutamente nada de lo que había sucedido hasta ese momento, luego de haberse convertido en Fantasmático; lo cual le pareció muy... extraño...

Izuku: (desorientado) ¿Huh? ¿Qué...? ¿Qué sucedió...?

No obstante, antes de que nuestro muchacho pudiera seguir haciéndose más preguntas al respecto sobre su extraña y misteriosa amnesia, en ese instante, al ver que el peliverde ya no se hallaba convertido en ese tétrico fantasma, y que ahora se encontraba completamente vulnerable, inmediatamente Hood lo apartó de encima suyo con un fuerte golpe lateral que lo mandó a estrellarse contra la pared; lastimándolo en el proceso y destruyendo parte de su máscara de vigilante.

Y una vez que se libró del peliverde, Hood se levantó del suelo para después dirigirse directo hacia nuestro querido protagonista, hasta llegar justo delante de él, y poner uno de sus pies fuertemente sobre su pecho, en señal de burla, mientras que volvía a adquirir su misma actitud y personalidad de siempre; a la vez que reflejaba una mirada de odio y enojo hacia el chico; dándole así a entender que ahora era su turno de vengarse...

Parecía que la historia se estaba repitiendo en ese momento... Justo como aquella noche... El Omnitrix nuevamente había regresado a la normalidad a Izuku en el peor momento posible... Y ahora, de nuevo el peliverde se hallaba completamente vulnerable ante el peligroso criminal...

Hood: (arrogante y enojado) ¡JAJAJAJAJA! ¡Esto sí que no tiene precio...! ¡¿En serio creíste que te saldrías con la tuya y podrías acabar conmigo?! ¡JAJAJAJAJA!
¡Tiene que ser una maldita broma!
¡Un mocoso como tú jamás podría contra un peleador como yo!

Izuku: (adolorido) Tsk...

Hood: (serio y enojado) Y ese error te costará muy caro, niño...

Y tras decir eso, bajo un claro tono de amenaza, en ese momento Hood comenzó a aumentar aún más las fibras musculares de absolutamente todo su cuerpo; brazos, piernas, torso, cara, etcétera; lo cual provocó que este empezara a incrementar su tamaño, hasta que llegó a medir los cuatro metros de altura, aproximadamente; convirtiéndose así en un extraño monstruo hecho de fibras musculares...

Hood: (enojado) Me aseguraré de devolverte todo el daño que me causaste esta noche... Hasta que no quede absolutamente nada de ti; más que solo un simple y patético charco de sangre...

Y mientras esto ocurría, en ese momento nuestro querido Izuku estaba tratando desesperadamente de activar una vez más el Omnitrix para poder pelear y defenderse del enfurecido criminal...

Izuku: (manipulando el reloj, en voz baja) Vamos... Funciona... Solo por esta vez...

Pero por más que lo intentaba, el reloj no le respondía, ya que aún necesitaba tiempo para recargarse; y el color rojo que poseía su núcleo ahora, era señal de ello...

Hood: (observando al peliverde) ¿Porqué estás jugando ahora con ese estúpido reloj?
¡Bah! ¡No importa!
¡Llegó la hora de acabar contigo!

Y sin más que decir, en ese instante Hood levanto su puño izquierdo hasta lo más alto para después dirigirlo a gran velocidad directo hacia el peliverde; para así proporcionarle un poderoso ataque que acabaría con él, sin dudarlo...

Pero justo antes de que el ataque del villano impactara directamente sobre Izuku, en ese mismo instante, de algún modo, el Omnitrix volvió a activarse nuevamente; cosa que el chico no podía comprender por qué, pero sin pensarlo dos veces, inmediatamente lo presionó fuertemente contra la pared a la que estaba arrinconado, sin saber en qué alienígena iba a convertirse exactamente; pero bajo estas circunstancias, cualquiera era mejor que nada.

Y entonces... en el momento exacto en el que Hood logró conectar su gran ataque contra el peliverde, este logró transformarse antes de recibir el golpe; generando así una gran nube de polvo, al haber destruído también la pared que se hallaba detrás del chico, mezclada con un fuerte destello verde...

Y creyendo que ese había sido el fin del peliverde, Hood ni siquiera se molestó en revisar si seguía con vida y comenzó a alzar sus brazos, en señal de victoria, una y otra vez; regocijándose a sí mismo varias veces, mientras mantenía una sonrisa muy confiada y arrogante. Pero entonces...

???: (molesto) No me digas que ese fue tu mejor golpe.

Hood: (reaccionando) ¿Eh?

En ese preciso momento, de pronto Hood recibió un muy fuerte puñetazo en el rostro que lo mandó a volar y a estrellarse fuertemente contra un par de estanterías que había por ahí; destruyéndolas en el proceso.
Y una vez que este se reincorporó, de manera sumamente enojada, rápidamente volteó a mirar al lugar en donde recibió aquel gran golpe, el cual juraría que se sintió como si hubieran sido dos puñetazos en uno solo; aunque no podía ver casi nada debido a la cortina de polvo que él mismo alzó anteriormente con su ataque.

Pero en cuanto el polvo finalmente se dispersó, en ese momento Hood se impresionó al ver a un gran ser de piel roja de aproximadamente 3 metros de altura; con grandes músculos, cuatro ojos de color verde y dos pares de brazos en cada costado; siendo este obviamente nuestro querido protagonista, quien se hallaba transformado en el último de los alienígenas que tenía actualmente disponibles en el Omnitrix; y siendo este, hasta el momento, su alienígena más fuerte en lo que respecta a fuerza bruta... ¡Cuatrobrazos!

Hood: (fascinado) ¡JAJAJAJAJA!
¡Realmente eres una caja llena de sorpresas, niño! ¡ESO ME GUSTA!

Cuatrobrazos: (muy serio) ...

Hood: (empezando a emocionarse) ¡Mírate ahora...! ¡Luces como un verdadero peleador! ¡Te ves realmente fuerte! ¡Pero comprobemos si eso es verdad!

Dejándose llevar por la emoción de tener una verdadera batalla, mano a mano, y uno contra uno, pero sin dejar de lado su principal objetivo de acabar con el chico, Hood inmediatamente se lanzó directo al ataque; y de igual manera, Cuatrobrazos hizo exactamente lo mismo y se lanzó también directo al ataque; dando así inicio a la pelea entre estos dos grandes combatientes.

Hood comenzó demostrándole nuevamente a su rival sus increíbles habilidades de combate al atacar con precisión y ferocidad; a la vez que esquivaba y contraatacaba varios de los ataques del Tetramand, al cual se le notaba que apenas y tenía algo de experiencia y práctica en el combate cuerpo a cuerpo.

Por su parte, Cuatrobrazos luchaba lo mejor que podía contra su adversario; y gracias al entrenamiento y las técnicas de combate que le había estado enseñando Lady Nagant desde hace tiempo, se las arregló para poder pelear decentemente; pero aún así, de inmediato se notaba que su contrincante tenía mayor experiencia en combate que él.

Ambos contrincantes estuvieron intercambiando golpes de esa manera durante algunos minutos, sin detenerse; hasta que en cierto momento, Hood sujetó con fuerza la cabeza del alienígena para después azotarlo duramente contra una de las columnas de concreto del lugar; destruyéndola en el acto. Y acto seguido, aún teniéndolo sujetado de la cabeza, Hood lo levantó y lo acercó directo a su rostro para observarlo con altanería.

No obstante, antes de que Hood pudiera decirle algo, Cuatrobrazos en ese instante aprovechó la cercanía de ambos y le acertó un poderoso gancho doble con sus brazos inferiores, lo cual lo obligó a soltarlo; para luego ser él quien lo sujetara fuertemente de la cabeza y jalarlo para darle un potente rodillazo en la barbilla que logró desorientarlo un poco. Y seguido de eso, el Tetramand lo apartó para luego darle dos fuertes puñetazos en el rostro y el abdomen que lo hicieron caer de rodillas al piso; y después lo sujetó con fuerza para empezar a dar un par de vueltas sobre su propio eje y finalmente soltarlo para mandarlo a volar directamente hacia el otro lado de la bodega, causando que se estrellara duramente contra la pared y la atravesara por completo; terminando así saliendo al exterior, donde no había absolutamente nadie a los alrededores.

Y sin darle la oportunidad a su enemigo de tan siquiera levantarse, Cuatrobrazos inmediatamente llegó hasta donde se encontraba Hood, con un simple salto corto, y siguió atacándolo con fuertes golpes, mientras que este todavía se hallaba derribado en el suelo.

Cuatrobrazos golpeaba a su enemigo con toda su fuerza y sin detenerse para nada; dejándose llevar totalmente por la furia para poder atacarlo....

Y a pesar de que las fibras musculares que cubrían el cuerpo de Hood actuaban como una especie de armadura que lo protegían de los fuertes ataques del Tetramand, él aún así trató de defenderse un poco; al igual que trató de buscar una apertura en su rival que él pudiera aprovechar para invertir los papeles; pero fue inútil... Se hallaba plenamente a merced de su oponente...

Nuestro muchacho continuó golpeando al asesino de su padre con toda su fuerza fuerza y sin contenerse ni un solo instante; lo cual sorprendentemente empezaba a destrozar las fibras musculares de Hood y a dejarlo expuesto ante los ataques de Cuatrobrazos...

Esto continuó de esa manera por un tiempo más; hasta que finalmente, poco a poco, los golpes del Tetramand fueron bajando de intensidad, hasta detenerse por completo...
Y entonces... estando ahora totalmente dispuesto a ponerle fin a todo esto... en ese momento, con una de sus manos, sujetó del cuello al asesino de su padre; quien ahora se encontraba malherido, con sangre en la mayor parte de su cara y ropa, varios golpes notables en su rostro, un ojo medio cerrado y morado, y con la gran mayoría de sus fibras musculares destrozadas; y con otra de sus manos, preparó su último ataque para terminar con esto... de una vez todas...

El chico en verdad quería hacerlo... Deseaba hacerlo... Quería cumplir su venganza... Quería acabar con el criminal que le arrebató la vida a su amado padre...
Pero sobre todo... quería terminar con su dolor y su sufrimiento...

Sin embargo... al estar a punto de dar el golpe final... Izuku se detuvo en el último instante al ver por un solo instante su reflejo a través de los ojos de Hood... Y lo que vio... no le gustó para nada...

Cuatrobrazos: (en shock) ...

Fue entonces cuando finalmente reaccionó y se dio cuenta de todo lo que hizo y de lo que estaba a punto de hacer...

El dolor, la ira y la tristeza habían nublado su juicio por completo y dictado sus acciones desde entonces...

Y ahora que se había dado cuenta de eso, Izuku por fin aceptó que esto no era lo correcto... Que esto no habría sido lo que su padre hubiera querido... Y por supuesto... esto tampoco lo traería de regreso...

Por lo que en ese momento... aún con un profundo dolor en su corazón... Izuku tomó una importante decisión... Una decisión que marcaría su destino a partir de ese momento... Perdonarle la vida a su enemigo...

Así que sin nada más que hacer ahí, el chico soltó finalmente al peligroso criminal y se dio la vuelta para proceder a alejarse de él...
Y a pesar de que le había perdonado la vida al asesino de su padre... Él jamás lo perdonaría por lo que hizo...

Hood: ...

No obstante, por su parte, al ver cómo fue que terminaron las cosas, Hood en ese instante se enfureció como nunca antes lo había hecho en su vida.

Para Hood, se supone que la victoria se define a partir de que alguno de los dos fuera el único en sobrevivir; pero no de esta manera.

Él se negaba profundamente a aceptar este tipo de derrota... Literalmente, prefería morir antes que aceptar esto...

Por lo que rápidamente, Hood habló en voz alta para llamar la atención del Tetramand; quien únicamente se detuvo un momento para escuchar lo que sea que tuviera que decirle el criminal... Y entonces...

Hood: (enfurecido) ¡Regresa y pelea, mocoso! ¡NO HE ACABADO CONTIGO!

Cuatrobrazos: (muy serio) Pero yo sí...
No vales la pena... Nunca lo valiste... Y nunca lo valdrás.

Una vez que Cuatrobrazos le respondió de esa manera tan cortante y directa al criminal, este nuevamente retomó el paso para poder irse ahí; pero por otro lado, Hood se enfureció mucho más al escuchar lo que le había dicho el chico alienígena...

Escucharlo insultarlo de esa manera, creyéndose mucho mejor que él, era algo que Hood no estaba dispuesto a tolerar; por lo que inmediatamente, se lanzó directamente a atacar al alien por la espalda con un poderoso golpe. Pero rápidamente, Cuatrobrazos se percató de esto y ágilmente pudo esquivar el ataque del villano, para acto seguido acertarle un potente doble uppercut en toda la cara; derribándolo y dejándolo finalmente fuera de combate.

Cuatrobrazos: (serio) Ahora vas a tener que esperar aquí, hasta que la policía o los héroes profesionales lleguen por ti.

Y sin nada más que decir, Cuatrobrazos dio un gran salto para aterrizar justo en el tejado de un edificio pequeño, cercano a su posición, para luego volver a dar otro salto y aterrizar en otro edificio y así sucesivamente; empezando a alejarse poco a poco de la zona, donde finalmente pudo darle un cierre a su venganza... Tal vez no de la manera que él hubiera querido en primer lugar; pero si de la manera que, para él, sin duda era la correcta...
________________________________________

Por otra parte...

Luego de que transcurrieran algunos minutos, después de que nuestro querido protagonista se retirara del lugar, Hood empezó a recuperar la consciencia lentamente; hasta que finalmente se levantó.

Al principio, se encontraba algo desorientado debido al último ataque que había recibido por parte de Cuatrobrazos; pero una vez que recobró todos sus sentidos y recordó todo lo que había sucedido, su enojo regresó con aún más intensidad...

Hood: (furioso) Ese maldito mocoso...
Se atrevió a dejarme en ridículo...
Se atrevió a humillarme...
No lo perdonaré...
Y tampoco aceptaré esta derrota...
Me vengaré... Me haré más fuerte...
¡Y HARÉ QUE PAGUE CON SU SANGRE!

???: Entonces, tal vez pueda ayudarte con lo que deseas.

Hood: ¡¿Eh?!

Al oír aquella voz que nunca antes había escuchado, en ese momento, rápidamente Hood se puso en guardia y comenzó a voltear hacia todas partes; estando completamente alerta en caso de cualquier indicio de ataque.

Y en eso, de pronto, una rara niebla oscura apareció justo enfrente de Hood; y de ella, salió un extraño hombre alto que parecía estar hecho de esa misma niebla, el cual vestía de forma muy elegante.

Hood: (estando en guardia) ¿Quién eres?

???: Mi identidad no es relevante por el momento. Lo importante ahora, es que he venido a ofrecerte un trato.

Hood: (en guardia) ¿Un trato? ¿Qué clase de trato?

???: Verás, mi maestro ha estado buscándote desde hace algún tiempo. Mencionó que tienes el potencial que necesita para llevar a cabo un experimento de suma importancia que nos beneficiará en el futuro.

Hood: (bajando la guardia, serio) ¿Y qué clase de experimento es?

???: Temo que no puedo entrar en más detalles por el momento; a menos que aceptes el trato y vengas conmigo.

Hood: (serio) Tsk. ¿Y qué ganaría yo si accedo?

???: (captando la atención de Hood) Poder.

Hood: (totalmente atento) ...

???: Obtendrías mucho poder... Más allá de lo que cualquiera podría imaginar. Serías prácticamente invencible. Y por lo que escuché hace un momento, eso es justo lo que estás buscando... ¿Tengo razón?

Hood: ...

Al escuchar aquella tentadora oferta, no se necesitó más para que Hood fuera totalmente convencido; ya que bajo estas circunstancias, en las que su enojo y frustración por haber perdido contra un simple niño eran realmente exponenciales, estaría incluso dispuesto a venderle su alma al diablo con tal de obtener mucho más poder para cumplir su venganza y erradicar a chico mutante de la existencia...

???: Entonces... ¿Aceptas el trato?

Hood: (sonriendo maliciosamente) Acepto...

Y sellando el trato con una macabra sonrisa que no podía significar nada bueno, Hood se adentró junto con el misterioso hombre de niebla a lo que se podría considerar como un portal; para después desaparecer los dos de ahí en un instante, sin dejar un solo rastro...

Sin duda, pueden apostar que este suceso, en algún futuro, se convertirá en un gran problema para nuestro querido peliverde...
Y temo que deberá afrontarlo y superarlo a como de lugar... ya que después de todo, los fantasmas del pasado siempre te seguirán adónde sea que estés...
Pero depende de uno mismo si se está dispuesto a luchar contra ellos... O dejar que te arrastren nuevamente a la oscuridad...
________________________________________

Enfocándonos en alguna otra parte de la ciudad, en estos momentos, nuestro querido protagonista se encontraba en la cima de un edificio, lejano al lugar en donde se llevó a cabo su enfrentamiento con el peligroso criminal que le había arrebatado la vida a su padre, para poder cumplir finalmente su venganza; aunque al final, las cosas terminaron completamente diferente...

Una vez que regresó a la normalidad, Izuku utilizó su celular para llamar a la policía y, de manera totalmente anónima, les informó sobre el disturbio que ocurrió en la bodega abandonada; además de darles la ubicación exacta del lugar para que fueran a encargarse de Hood ellos mismos.

Y después de eso, se quedó observando la ciudad, en completo silencio, mientras se podía observar cómo es que algunas pocas lágrimas salían de sus ojos esmeralda; los cuales finalmente habían recuperado el brillo que se les había sido arrebatado...

Y entonces, en ese preciso momento, de pronto la hermosa amiga heroína de nuestro querido peliverde, Lady Nagant, apareció justo a un lado suyo; y se quedó contemplando la ciudad junto con Izuku durante algunos segundos, hasta que finalmente procedió a hablar...

Lady Nagant: Al final no lo hiciste, ¿cierto...?

Izuku: (negando con la cabeza) ...

Lady Nagant: ¿Y por qué?

Izuku: ... Traté... De verdad traté...
Quería acabar con él... Hacerle pagar por lo que me hizo...
Pero al final, no pude hacerlo...
Me di cuenta de que eso no era lo correcto... Y tampoco me haría mejor persona que él...

Lady Nagant: ... Ya veo... ¿Sabes? Lo que hiciste tuvo un gran valor...

Izuku: (volteando a verla) ...

Lady Nagant: Al final, hiciste lo que en verdad era correcto. No te dejaste llevar por tu deseo de venganza; y en cambio, ejerciste justicia sobre ese criminal; a pesar de que tenías todas las razones y motivos para poder matarlo...

Izuku: ...

Lady Nagant: Mira, hay varias cosas que nunca te van a enseñar sobre este trabajo... y a veces tendrás que aprender esas cosas por ti mismo; ya sea de buena o mala manera...
Pero algo que debes saber, sí o sí, es que el deber y el querer son dos cosas completamente diferentes... ¿Entiendes?
Tal vez querías matarlo, pero no era tu deber hacerlo... En cambio, demostraste que sí era tu deber atraparlo y detenerlo antes de que le causara más daño a gente inocente...
Y eso, a su vez, probó tu valor como persona y como héroe...

Izuku: (sonriendo melancólicamente) Eso suena justo como algo que, sin duda, me hubiera dicho mi padre...

Pero al darse cuenta de que Izuku estaba tratando de contener sus lágrimas, en ese momento, sin precio aviso, de pronto Lady Nagant se acercó a nuestro querido peliverde y le dio un cálido abrazo; sabiendo que él realmente lo necesitaba en estos momentos...

Lady Nagant: Estoy segura... de que si tu padre estuviera aquí ahora... te diría que está muy orgulloso de ti...

Izuku: (correspondiendo el abrazo) ... Gracias...

Por su parte, Izuku solamente se limitó a corresponder el cálido abrazo de su amiga; mientras se aferraba un poco a ella para tratar de ocultar su tristeza; la cual, sin duda, se encontraba al límite...

Y después de que ambos permanecieran así durante algunos pocos minutos, sin decir una sola palabra al respecto, los dos finalmente se separaron.

Lady Nagant: ¿Te sientes mejor?

Izuku: Sí, un poco... Gracias...

Lady Nagant: (asintiendo) No es nada.
Pero no deberías seguir haciéndote el fuerte. Está bien si deseas desahogarte y sacar todo ese dolor que llevas cargando contigo.

Izuku: (asintiendo un poco ) Lo sé... Pero... por ahora no quiero hacerlo...

Lady Nagant: (asintiendo levemente) Entiendo...

Izuku: (cambiando de tema) Bueno, creo que ya es tiempo de que regrese a casa... Supongo que te veré por ahí después; ya sabes, cuando salga a patrullar por las noches...

Lady Nagant: ... De hecho... Creo que esta será la última que nos vemos...

Izuku: (confundido) ¿Eh? ¿De qué hablas?

Lady Nagant: Después de la última plática que tuvimos hace algunas semanas, comencé a cuestionar varias cosas sobre mi vida como heroína profesional...
Y tras lo que ocurrió esta noche; con respecto a lo que hiciste, al tomar la decisión de no tomar venganza y hacer lo correcto con ese criminal; por fin tengo en claro lo que debo hacer para tratar de redimir las cosas...

Izuku: (sin tener una respuesta clara) Temo que no lo comprendo...

Lady Nagant: Descuida. Es algo personal; así que no busco que lo entiendas...

Izuku: (algo triste) Entonces... ¿Realmente ya no volveremos a vernos...?

Lady Nagant: ... No lo sé...
Creo que eso es algo que sólo el tiempo nos lo dirá a lo dos.
Pero por ahora... este es el adiós...

Izuku: (comprendiendo) Ya veo...

Lady Nagant: Pero antes de irme... Hay algo que he querido preguntarte desde hace tiempo... Y quiero que me respondas con toda honestidad...

Izuku: (asintiendo) ...

Lady Nagant: ¿Por qué es que quieres ser un héroe?

Izuku: (sorprendido por la pregunta) ...

Al escuchar la peculiar pregunta que le hizo la heroína de cabellera azul oscuro y rosa, nuestro querido Izuku se sorprendió al instante; ya que no se esperó que ella le quisiera hacer esa pregunta. Por otro lado, una vez que soltó la pregunta que tanto quería hacerle al peliverde desde hace tiempo, Lady Nagant solamente se quedó callada para esperar y escuchar atentamente la respuesta que le daría el chico.

Al principio, Izuku no supo exactamente cómo responder a dicha pregunta; ya que a pesar de ser una pregunta sencilla, la complejidad que abordaba era gigantesca; o al menos para él así era.

Pero luego de que transcurrieran algunos segundos, sin saber por qué, Izuku comenzó a recordar varios sucesos relacionadas con su pasado; y la mayoría se centraban en cómo él, desde muy pequeño, siempre se esmeraba en ayudar y proteger a otros niños de los bravucones o de chicos más grandes que ellos; a pesar de que siempre terminaba lastimado y perdiendo contra los abusivos...
Pero de todos modos lo hacía por dos razones; la primera, porque no le gustaba ver sufrir a otros y que se aprovecharan de ellos; y la segunda razón, se debía a que él quería llegar a ser como su ídolo, el gran héroe número uno, All Might; quien siempre derrotaba a los villano y protegía y rescataba a todo el mundo con una gran sonrisa que transmitía cáliz, confianza y esperanza; algo que Izuku en verdad admiraba bastante.

Justamente, ese sentimiento que lograba transmitir All Might a las personas, fue lo que hizo que hallara su vocación y forjara su sueño... Ser un gran héroe que siempre estuviera dispuesto a proteger y salvar a todos con una gran sonrisa; justo como All Might...

Y a pesar de que su sueño se vio en completo peligro el día en que lo diagnosticaron como un quirkless, él nunca se dio por vencido y tomó la firme decisión de esforzarse día con día, sin jamás rendirse, para llegar a cumplir su sueño de ser un héroe algún día...

Y ahora que finalmente tenía la oportunidad de poder hacer realidad su sueño, gracias al peculiar obsequio que le regaló el universo, Izuku no iba a desperdiciar la oportunidad...

Entonces... una vez que terminó de recordar todo esto, Izuku finalmente habló para darle una respuesta a la pregunta de Lady Nagant...

Izuku: (con una pequeña sonrisa decidida) Quiero ser un héroe... porque quiero proteger y salvar a todos aquellos que no puedan protegerse por sí mismos; siempre con una sonrisa que pueda transmitirles seguridad y paz; pero sobre todo, que pueda proteger sus sueños y esperanzas...
Sin embargo, sé que habrá veces en las que la oscuridad será mucho más fuerte... Y es por eso... que he decidido convertirme en un faro de esperanza que pueda guiar a las personas a través de la oscuridad; sin importar las adversidades que haya en el camino...
Y además... es sólo por el simple hecho de que sé que eso es lo correcto que yo, en verdad, quiero y deseo convertirme en un gran héroe... para crear un mundo mejor para todos...

Lady Nagant: (impresionada) ...

Una vez que nuestro querido protagonista dio su respuesta, el ambiente se quedó en completo silencio durante unos pocos segundos; pero se pudo apreciar que Lady Nagant tenía una pequeña y bella sonrisa en su rostro, la cual reflejaba que se hallaba totalmente feliz y satisfecha con la respuesta que escuchó del peliverde; ya que pudo notar que él en verdad habló con completa honestidad, desde lo más profundo de su corazón.

Lady Nagant: (en voz baja, con una pequeña sonrisa) En verdad eres real...

Izuku: (sin haber escuchado lo que dijo) ¿Huh? ¿Qué fue lo que dij...?

No obstante, en ese preciso momento, Izuku se quedó totalmente callado al recibir de pronto un beso en la mejilla por parte de Lady Nagant; cosa que lo dejó estupefacto y lo sonrojó bastante, ya que nunca se esperó que ella llegara a hacer algo como eso en algún momento.

Izuku: (sonrojado) ¡¿E-Eh?!

Lady Nagant: (mostrando una sonrisa) Sin duda, serás un gran héroe algún día. Así que, prométeme que seguirás esforzándote para alcanzar tu meta; y que jamás te rindas.

Izuku: (sorprendido) Y-Yo... L-Lady Nag...

Lady Nagant: Ya no me llames más por ese nombre.

Izuku: (confundido) ¿Eh?

Lady Nagant: Mi verdadero nombre es Kaina Tsutsumi.

Izuku: Y-Ya lo sé, pero...

Lady Nagant: Si algún día nos volvemos a ver, quiero que me llames por mi nombre real.

Izuku: (perplejo) ...

A pesar de que Izuku ya sabía el verdadero nombre de Lady Nagant; debido a que lo había investigado con mucha anterioridad a causa de su fanatismo por los héroes profesionales, y además porque ella también ya se lo había dicho en una sola ocasión; esta era la primera vez que la mujer rechazaba que la llamaran por su nombre de heroína; y en cambio, ahora pedía que la llamaran por su nombre real; o al menos en un futuro.

Y por su parte, la petición que le hizo su amiga fue algo que Izuku tampoco vio venir; ya que él nunca imaginó que ella le pediría algo como eso. Pero sobre todo, para el chico, este suceso era algo sorprendente; ya que sería la primera vez que una mujer le pide que la llame por su nombre...

En fin... Una vez que Lady Nagant dijo eso último, esta se dio la vuelta y sacó una de sus granadas de humo de su cinturón; no obstante, antes de activar la granada de humo, volteó a ver una última vez a Izuku y le regaló una sonrisa más; la cual ruborizó y cautivó un poco al peliverde en ese momento, ya que antes no le había dado mucha importancia, pero ahora por fin se dio cuenta de lo hermosa que en verdad era ella...

Lady Nagant: (con una sonrisa) Nos vemos... Izuku.

Y habiéndose despedido finalmente del peliverde, al decir su nombre por primera y última vez, al menos de momento, Lady Nagant soltó la granada de humo que traía en su mano y en un instante el lugar se llenó de espeso humo; el cual una vez que se dispersó, se pudo apreciar ahora que la heroína profesional había desaparecido completa y misteriosamente de ahí; dejando a nuestro querido protagonista completamente solo en ese lugar...

¿Será posible que en algún futuro ellos dos vuelvan a reencontrarse...?

Bueno, eso es algo que sólo el tiempo decidirá...
________________________________________

Luego de que nuestro querido protagonista se quedara contemplando por un rato más el paisaje desde la cima del edificio en el que se hallaba; y pudiera digerir un poco todo lo ocurrido con respecto al asesino de su padre; hasta que finalmente decidió regresar a casa...

Por lo que justo ahora, él se encontraba subiendo por las escaleras de incendio de su condominio, para llegar a la ventana que daba a su habitación; y una vez que llegó hasta ahí, Izuku silenciosamente abrió la ventana y entró a su cuarto...

Pero para terror del peliverde, al momento de entrar a su habitación, en ese mismo instante, se quedó completamente paralizado al ver que su querida madre se encontraba también en su habitación; sentada en el borde de su cama, con los brazos cruzados y con una mirada que reflejaba totalmente su enojo y decepción.

Aunque por fortuna para nuestro muchacho, su traje de vigilante podía pasar fácilmente desapercibido por ropa deportiva; por lo que ahora mismo podía inventar una muy buena excusa para esta situación.
Y gracias al cielo, no traía puesta su máscara; porque de ser así, definitivamente las cosas se habrían complicado a niveles catastróficos...

Izuku: M-Mamá... ¿Q-Qué estás...?

Inko: (enojada) ...

Pero sin decirle ni una sola palabra a su hijo, Inko se levantó de la cama y salió de la habitación; lo cual hizo que Izuku rápidamente la siguiera, en silencio. Y una vez que los dos llegaron a la sala, fue entonces cuando Inko finalmente comenzó a hablar...

Inko: (enojada) Hace unas horas, fui a tu habitación para saber cómo estabas; ¡y adivina cuál fue mi sorpresa al no verte por ningún lado!

Izuku: Mamá...

Inko: (enojada) Luego, te llamé toda la noche; y no respondiste el teléfono. ¡No me hagas eso...!

Izuku: Mamá...

Inko: (enojada y alterada) ¡Llamé a cinco estaciones de policía! ¡A CINCO! ¡Y ninguna supo resolver el problema!

Izuku: (serio) ¡Mamá...!

Inko: (enojada y alterada) ¡Luego, y-ya no supe qué más hacer! ¡No sabía a quién más llamarle, porque no tienes ningún amigo!
¡Mitsuki tampoco sabía dónde estabas!
¡Y entonces pensé que te había pasado algo malo y yo...

Izuku: (medio molesto) ¡Mamá, ya relájate, ¿sí?! ¡Estoy bien!

Inko: (enojada y consternada) ¡YA DEJA DE MENTIR, IZUKU! ¡Deja de mentirme...! ¡Deja de mentirte a ti mismo...! ¡Sé que no estás bien! ¡Yo tampoco estoy bien!

Izuku: (atónito por el comportamiento de su madre) ...

Inko: (consternada) Sé que no has asistido a la escuela... Sé que te la pasas todo el día en la calle; haciendo quién sabe qué cosa... Sé que nos has comido ni dormido bien...
Y ahora sé que sales de casa en las noches... Eso no se hace...
¡Izuku, ya no puedo soportarlo más!
¡Tienes qué decirme qué está sucediendo! ¡Tienes que decirlo ya! ¡POR FAVOR!

Izuku: (con la cabeza agachada) ...

Sin decir ni una sola palabra... en ese momento, nuestro muchacho simplemente se acercó a su madre y la abrazó con fuerza... y con el corazón roto... al fin dijo aquello que tanto dolor le provocaba... y que se negaba a admitir hasta ahora...

Izuku: (llorando profundamente) Murió papá...

Finalmente... Izuku ya no pudo soportarlo más y terminó rompiendo en llanto; mientras se aferraba aún más a su madre, quien también comenzó a llorar mientras también abrazaba con fuerza a su hijo...

Ambos ya no podían seguir ocultando más su dolor... por lo que solamente se quedaron ahí parados durante un tiempo... llorando y consolándose mutuamente por la pérdida de Hisashi... mientras sentían que el dolor que había en sus corazones iba aumentando; en señal de que finalmente lo estaban dejando salir... sin temor alguno...
________________________________________

Izuku: (mirando el amanecer) ...

Han pasado unos pocos días desde aquella noche, en la que nuestro querido protagonista encontró al asesino de su padre y posteriormente tomó la decisión de perdonarle la vida, al darse cuenta de que la venganza no iba a solucionar nada...

Y ahora, en estos instantes, nuestro muchacho se encontraba observando atentamente el amanecer de un nuevo día; en la playa llena de basura, donde comenzó su entrenamiento, la cual ya casi no tenía nada de suciedad gracias a su duro trabajo y esfuerzo...

Pero luego de que pasaran algunos minutos, bajó su mirada para observar ahora el extraño dispositivo alienígena que tenía adherido a su muñeca izquierda; y su expresión cambió a una de odio total...

Izuku: (furioso) ... Todo esto es por tu culpa...
Si no te hubiera encontrado, ¡nada de esto habría sucedido y mi padre aún seguiría aquí!
¡DESEARÍA QUE NUNCA HUBIERAS APARECIDO EN MI VIDA!

Estando totalmente furioso en ese momento, y con una ira indescriptible, Izuku sujetó el Omnitrix con fuerza y comenzó a tirar fuertemente de él; con el claro afán de poder quitárselo de encima...

Pero entonces... en ese preciso momento, de la nada, sintió una mano posarse sobre su hombro derecho; por lo que rápidamente, volteó detrás suyo para ver quién lo estaba interrumpiendo... Y cuando lo hizo, se quedó en completo shock al ver a alguien que nunca pensó que volvería a ver... A su padre...

Izuku: (en shock) ¿P-Papá...?

Hisashi: (con una gran sonrisa) ...

Sin saber cómo era posible este suceso, y sin querer hallar una explicación lógica para lo que estaba sucediendo, Izuku no esperó más tiempo e inmediatamente abrazó con fuerza a su querido padre; estando sumamente feliz por volver a verlo...

Izuku: (con algunas lágrimas) Papá...
Por favor, perdóname... Tenías razón en todo... Me confié demasiado con el poder... Creí que sería capaz de demostrarle al mundo que en verdad puedo ser un héroe...
Pero me equivoqué completamente...
Y mira lo que pasó... ¡Soy un estúpido...!

Hisashi: (separándose del abrazo y sujetándolo de los hombros) Ey, Ey.
No digas eso. No puedes seguir culpándote por lo que sucedió esa noche, hijo... Lo que me sucedió no fue tu culpa. ¿Entiendes?

Izuku: (limpiándose las lágrimas) ...

Hisashi: Además... yo también me equivoqué con lo que te dije aquella noche... Y lamento mucho no haberte apoyado desde un principio, hijo... En lugar de aconsejarte y guiarte para hacer las cosas bien, terminé dejando que mi preocupación echara todo a perder...

Izuku: ...

Hisashi: Mira... Entiendo por qué es que estás haciendo todo esto...
Y no te culpo.
Ahora que tienes el poder para ser un héroe, era lógico que querrías usarlo inmediatamente para hacer el bien; y eso me parece excelente... Pero aún no es el momento para que lo uses...

Izuku: (escuchando atentamente a su padre) ...

Hisashi: Créeme. El momento para que finalmente utilices tu poder llegará muy pronto. Pero tú no elijes el momento... el momento te elegirá a ti...

Izuku: ...

Hisashi: Y no olvides que, ante cualquier duda o inseguridad que tengas, las respuestas siempre estarán aquí...

Al decir eso último de manera muy sabía, el padre del peliverde señaló el pecho de su hijo; queriendo darle a entender que siempre debe confiar en lo que dicte su corazón para hacer lo correcto...

Y sin nada más que decir, Hisashi en ese momento abrazó fuertemente a su hijo, el cual también abrazó con fuerza a su padre; y después de que transcurrieran algunos segundos, los dos comenzaron a derramar algunas lágrimas; tanto de felicidad como de tristeza, al saber de alguna manera que esta sería su última despedida...

Hisashi: (orgulloso de su hijo) Te amo, hijo...

Izuku: (llorando) Yo también te amo, papá...

Y mientras esto ocurría, los dos poco a poco empezaron a desvanecerse lentamente; hasta que finalmente, desaparecieron por completo de ahí...
________________________________________

En estos momentos, nos encontramos en la habitación de nuestro querido protagonista; donde podemos observar que él se hallaba profundamente dormido; pero después de algunos segundos, poco a poco comenzó a abrir los ojos, hasta que se despertó completamente. Y tras estar unos pocos segundos acostado sobre su cama, finalmente se levantó para luego quedarse sentado en la orilla; recordando el sueño que había tenido hace unos instantes...

Izuku: Al final... Fue tan solo un sueño...

Y a pesar de que tan solo fue un simple sueño, para Izuku, fue el mejor sueño que ha tenido en toda su vida...

Y entonces, en ese momento se quedó mirando el Omnitrix, mientras recordaba todo lo que había sucedido dentro de su sueño; y no pudo evitar que las lágrimas salieran por un momento...

Izuku: (limpiándose las lágrimas) Snif... No te decepcionaré, papá... Te prometo... que me convertiré en un gran héroe... Lo prometo...

Esa sin duda... era una promesa que provenía desde lo más profundo del corazón de nuestro muchacho...

Y esa era una promesa llena de voluntad y determinación que nuestro querido peliverde estaba totalmente dispuesto a cumplir...

No volvería a dejar que nadie más saliera herido... Nunca más...
________________________________________

Cinco meses y medio después...

Desde aquel día, en el que Izuku se hizo la promesa de convertirse en un gran héroe que siempre ayude a las personas, combata el crimen y les dé esperanza, muchas cosas cambiaron para nuestro muchacho...

Por ejemplo, dejó de ser tímido y se volvió más seguro consigo mismo; al igual que también dejó de murmurar como de costumbre; y dejó de permitir que alguien lo volviera a humillar o a molestar en la escuela.

Y por el lado físico, su altura aumentó bastante; llegando a medir cerca de 1.80 m; al igual que su musculatura aumentó considerablemente, ganando así una mayor fuerza y resistencia física; lo cual dejó impactado al peliverde al lograr este gran cambio en tan poco tiempo...

¿Será que el Omnitrix tendrá algo que ver con todo esto; y que eso explicaría el repentino aumento de su metabolismo...?

Bueno, esa pregunta tendrá que ser para después; ya que no es algo por lo cual preocuparse.

También otra cosa que sucedió, es que finalmente logró terminar de limpiar la basura de absolutamente toda la playa; sin dejar ni una sola basurita tirada; dando así por concluido su entrenamiento...

Pero lo impresionante de todo esto... y para asombro del peliverde... es que durante los últimos días de su entrenamiento... ¡logró desbloquear un nuevo alienígena!
Y este evento sin duda tuvo un gran e importante significado para el chico, ya que esto sólo podía significar que podría obtener otros cientos más en el futuro; cada uno con nuevas y únicas habilidades, lo cual abría un nuevo camino hacia infinitas posibilidades; cosa que emocionó exponencialmente al peliverde al imaginarse la nueva cantidad de aliens que podría llegar a tener...

...

Pero... dejando eso de lado por un momento... otro cambio importante que sucedió con nuestro querido protagonista... fue que aprendió algo verdaderamente importante... lo cual plasmó como la última anotación de su bitácora secreta; concluyendo así su investigación acerca del Omnitrix...

Y esa anotación decía lo siguiente:

"Desde que encontré este extraño reloj alienígena, han ocurrido varios cambios en mi vida... Pero también, he aprendido algo verdaderamente importante; lo cual puedo resumir de la siguiente manera...

"Un gran poder... conlleva una gran responsabilidad... Y grandes consecuencias si algo sale mal..."

... No sé si fue por obra del destino, o simplemente una coincidencia que el Omnitrix haya llegado a mí...

Pero de algo estoy completamente seguro...

Usaré este poder para siempre hacer lo correcto... Para hacer el bien... ¡Y para ayudar y proteger al inocente! ¡Sin importar qué!

Y para cumplir esta promesa, debo volverme más que un simple héroe...
Debo volverme un faro de esperanza...
Debo volverme... El héroe número uno.

No digo que el camino será fácil; pero todo lo que ha sucedido hasta ahora le ha dado un gran sentido a mi vida... Y daré mi máximo esfuerzo para lograr alcanzar esa meta...

Porque sé que eso es lo que mi padre hubiera deseado... Y porque también sé que eso es lo que en verdad deseo..."

...

Sin duda, nuestro querido protagonista había aprendido una muy importante lección y sabía ahora la enorme responsabilidad que cargaba consigo; por lo que no volvería a tomar a la ligera ni su poder, ni sus acciones...
________________________________________

Y hablando de él, justo en estos momentos, nuestro querido peliverde se encontraba arreglándose para salir; ya que hoy era un día sumamente importante para él...

Hoy era el día en que finalmente entraría a la mejor academia de héroes del país... La famosa "Academia U.A."

Izuku: (apurado) ¡Rápido, rápido!
¡Se me hace tarde! A ver, ¿ya tengo todo? Veamos; uniforme, sí; corbata, sí; lápices, sí; bolígrafos, sí; borradores, sí; mochila, sí; cartera, sí; llaves, sí; celular... ¡Ah, mi celular! ¿Dónde lo dejé?

En eso, Izuku comenzó a buscar rápidamente su celular por toda la habitación; hasta que lo encontró detrás de su computadora, en el escritorio.

Pero antes de tomar su celular, se detuvo para contemplar por un momento una fotografía que había en su escritorio; en la que salía él, de pequeño, junto a sus padres;
hace un par de años atrás...

Izuku: (con una pequeña sonrisa) ... Papá...

Inko: (desde el otro lado de la puerta) ¡Izuku, date prisa, o llegarás tardes a tu primer día de clases!

Izuku: ¡Ya voy!

Tras decir eso, Izuku dejó con cuidado la fotografía de vuelta en su escritorio y tomó su celular para después guardarlo en la mochila y posteriormente colgársela para salir de su habitación y dirigirse a la entrada de su hogar para colocarse sus zapatos, antes de salir a la calle...

Inko: (llegando junto a él) ¿Ya tienes todas tus cosas?

Izuku: (asintiendo) Sí.

Inko: ¿Seguro que no se te olvida nada más?

Izuku: (terminando de ponerse los zapatos) Sí, mamá, ya no se me olvida nada. Ya debo irme, nos vemos más tarde.

En eso, Izuku ya estaba a punto de marcharse de su hogar; pero antes de irse, rápidamente su madre lo detuvo un momento para decirle algo...

Inko: ¡Izuku!

Izuku: (volteando a verla) ¿Sí?

Inko: (con pequeñas lagrimas en sus ojos) Sólo quiero decirte que... Estoy muy orgullosa de ti...

Izuku: (sonriendo) ...

Al escuchar aquellas palabras por parte de su madre, en ese momento nuestro muchacho se acercó a ella y le dio un gran abrazo...

Izuku: (sonriendo) Gracias, mamá...

Inko: (muy feliz por su hijo) ...

Izuku: (separándose del abrazo) Ya me voy.

Inko: (con una gran sonrisa) Cuídate mucho, mi pequeño héroe.

Luego de aquel bello momento entre madre e hijo, Izuku finalmente salió de su hogar para después comenzar a dirigirse rápidamente hacia la academia U.A...

Izuku: (pensando con determinación) ¡Muy bien! ¡Academia U.A, sólo espérame!

Y de esta manera, nuestro querido protagonista había dado inicio a su primera etapa para alcanzar sus objetivos y llegar a convertirse en un gran héroe algún día...

Sin duda, este sería un gran comienzo para la nueva etapa de la vida de Izuku Midoriya...

Y por si no lo saben todavía, esta es la historia sobre cómo un chico sin superpoderes, ¡se convertirá en el mayor héroe de todo el universo!

Fin de la tercera y última parte de la OVA.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro