Yoongi sintió a Jimin bastante pensativo.

Y tenía que admitirlo, no fue la mejor manera de tocar el tema, no fue la mejor manera de expresarse.

El castaño se encontraba haciendo el inventario, aunque no tenían mucho realmente no sentía preocupación. Estaban cerca del destino y en casos extremos recurrirían a las bases por un poco de abastecimiento.

Así que... Se mantuvieron toda una mañana caminando hasta el pueblo cercano y descansar en una biblioteca. Le dolían los pies.

Las bibliotecas estaban llenas de estantes por todos lados, así que incluso teniendo enormes ventanas, existían buenos sitios donde esconderse.

Lo único que se oía era el canto de los grillos fuera.

-Me encontré con algunos libros de jardinería aquí-Finalmente de atrevió a decir en voz alta, dirigiendo una insistente mirada sobre Jimin.

-Eso es bueno...

Él seguía anotando en ese viejo cuaderno de notas, su voz apenas le sonó como un balbuceo y Yoongi sospechó que probablemente ni siquiera estuvo prestandole atención.

Después de otro silencio, frunció los labios comenzando a gatear hasta él-¿Me estás ignorando?

-Espera.

Jimin levantó la mirada y detuvo cualquier acción, incluso callandolo a él.

-Jimin-

-¡Shhh!

Yoongi abrió la boca y quedó a gatas a medio camino, finalmente sentándose sobre sus propios talones, sintiendo una punzada de molestia por ser interrumpido en sus intentos de comunicarse de una buena vez-Esto es en serio, por favor deten...

De pronto Jimin se le abalanzó encima, provocando que caiga de espaldas con una mano apretandole los labios. Sus piernas quedaron flexionadas en el aire mientras tenía al chico encima.

-Cállate-Escuchó su susurro justo en el oído, Yoongi tenía ya la sangre hirviendo por el dolor en la espalda baja y se dedicó a mirarlo mal por esa brusquedad-Los grillos se detuvieron.

Estando tan pegados, fue capaz de sentir a detalle los latidos ajenos aumentando el ritmo conforme los segundos. Yoongi se mantuvo quieto con la vista pegada a la suya y todavia con los labios cubiertos, ambos expectantes de lo que podría pasar a continuación.

El silencio, irónicamente era inquietante. No solía traer buenas noticias consigo.

Incluso Holly, quien había estado durmiendo en otro pasillo, dejó de hacer ruido.

Sin embargo, lentamente el canto de los grillos se retomó, demostrando que no había nada cerca.

Jimin despego la palma de su boca, con cada mano al lado de la cabeza ajena, suspirando con demasiado alivio-Fue una falsa alarma.

-Por supuesto que sí, tonto. Estamos en una zona despejada.

Los bonitos ojos del castaño se cerraron, apoyando la frente en aquel pálido y cálido cuello, exhalando risas de total alivio-Por un momento, lo dudé...

-¿Ya se te quito el enojo?-Murmuró quedito, rodeándolo con los brazos y piernas para así evitar que se escape en caso de estarle recordando que estaba enojado antes de eso. No lo dejaría huir.

-Ahora que estoy muy comodo así, sí.

Descarado...

Se mantuvieron así por unos buenos segundos, la cálida respiración ajena en su cuello le provocaba un poco de escalofríos, así que fue Jimin quien riendo comenzó a soplar directamente a esa zona-Eso no es chistoso-Se quejó, pero aún así, se apartó dejando espacio.

Claramente, ante esa luz verde el castaño siguió haciéndolo. Hasta que directamente decidió apoyar los labios y besarlo.

-Jimin...-De pronto sintió algo húmedo y muy caliente, estaba lamiendo su cuello, hasta succionar lentamente. Podía oír y sentir a la perfección esos gruesos labios acompañados de chasquidos-¿A-aquí...?

-Déjame... Intentar-Jimin se detuvo un momento, inhalando para recuperar aliento por haberse centrado tanto tiempo en besarlo.

La única respuesta de Yoongi fue flexionar aún más las rodillas, colando las manos en su espalda y girar el rostro, directo al estante de libros en su costado.

Suponía que, finalmente iban a permitir al deseo ganar.

-Mhg-Las manos de Jimin también se colaron en su camisa, directamente a sus aureolas para frotarlas con los pulgares, antes de levantarla para tener todo a la vista.

Ni siquiera se lo quitó, pero a Yoongi poco le interesaba. Especialmente cuando no se demoró un segundo más para bajar el rostro y succionar su torso.

Se sentía tan bien, las cosquillas bajaban furiosamente por todo su vientre y se detenían directo entre sus piernas.

Yoongi le rodeó las caderas y apretó el agarre, ambos jadearon al unísono presionandose, Jimin impulsó más duro con tal de conseguir más de esa sensación.

-U-un segundo-Balbuceó el castaño, era delicioso pero definitivamente no suficiente, las piernas del chico lo estaban apretando tan fuerte que no podía apartarse-Necesito quitarte esos pantalones.

¿Estaban yendo muy rápido?, Ninguno lo metidaba, eran tan inexpertos que ni siquiera importaba con tal de sentirse bien y quitarse esa sensación de urgencia entre las piernas.

Apenas Jimin se deshizo de las prendas inferiores, le abrió aún más los muslos.

Por supuesto que, a pesar de jamás haber llegado tan lejos era consciente de que debía preparar a su chico para no hacerle daño. Así que para nada se abstuvo cuando comenzó a lamer dos de sus propios dedos frente a la mirada jadeante de Yoongi.

Para distraerlo, con la mano izquierda rozó tentativamente donde el vello estaba presente, acercándose a la zona más sensible, hasta apretar aquella mojada longitud en su palma. Sentía punzadas de solo ver al pálido temblar, con las caderas inquietas y los orbes nublados.

Las mejillas de Yoongi se sentían calientes a ese punto, o mejor dicho, todo su cuerpo le hervía.

Apretó sus ojos felinos, dedicándose a solo sentir. Sentir como la mano de Jimin bajaba y subía tan lentamente que eso debía considerarse algún método de tortura, sentir como sus otros dedos mojados y fríos lentamente frotaban el orificio entre sus glúteos, y presionaba.

La manera en la que comenzó a forzar delicadamente sus músculos, centímetro a centímetro, y el ligero ardor de tenerlo más profundo dentro, fue una sensación tan detallada que tanto Yoongi como su respiración quedaron en pausa.

Jimin admiró atentamente su rostro, como el sonrojó se expandía hasta el cuello, con los labios abiertos y sin atreverse a abrir los párpados. Cuando sus nudillos chocaron con su piel, fue cuando oyó el jadeo exasperado seguido de esas paredes calientes apretando fuerte sus dedos, casi exprimiendo.

Retomó el movimiento entre sus piernas temblorosas, centrándose en la rojiza y exageradamente sensible punta mojada de su sexo.

Yoongi lucía como si fuera a acabar en cualquier segundo. Especialmente cuando comenzó a mover los dedos dentro suyo.

-V-voy a gritar-Balbuceaba, con lagrimas en cada esquina de los ojos y espasmos en los muslos.

-No grites, o me detengo.

Contrario a sus palabras, Jimin bombeó los dedos rápidamente, hasta que Yoongi pudo oírlos entrar y salir a la perfección, los chapoteos eran tan obscenos.

-¿i-imaginas que-que grito y-y una de e-esas cosas nos descubre?-Yoongi intentó reír para molestarlo, aunque más bien sonó a quejidos,  moría de nervios internamente.

-No es momento para bromear así...

La yema de sus dedos se doblo ligeramente, frotando con tal intensidad que el cuerpo sudoroso del chico se arqueó, apretando las piernas alrededor de su antebrazo, Yoongi levantó las caderas en un movimiento desesperado por detenerlo.

Jimin solo quedó admirando ese escenario, frotando su dureza contra el suave y cálido pliegue en el interior de esos muslos después de apretarlo en un agarre y detener el movimiento de sus dedos, el pálido se retorcía tanto... Incluso si ya no estaba recibiendo placer.

Ni siquiera habían iniciado a hacerlo y ya estuvo por acabar.

Apenas pudo estabilizar su respiración, el castaño se inclinó contra él sosteniendo el interior de sus rodillas-Eres tan atractivo...

Yoongi volvió a colar las manos en la única prenda que Jimin tenía encima, la camisa. Con los dedos aferrados a su tibia espalda, específicamente donde creía que estaban los tatuajes.

Se le hacían demasiado sexys y definitivamente tenía que rasguñarlos mientras lo hacían.

Sintió algo más grande, resbaloso y suave presionando sus músculos anales dilatados.

Jimin se mordió el labio inferior, con sus pupilas fijas inevitablemente en aquella sucia y estimulante vista, empujando la pelvis con lentitud.

En cuanto entró, los dos inhalaron entre dientes.

Yoongi tanto calor, cosquillas y ardor de una manera tan confusa que se desquitó rasguñando su espalda, escuchando las maldiciones y jadeos que solo lograban ponerlo más.

Las caderas de Jimin se impulsaron débilmente al inicio, porque se sentía tan caliente y apretado alrededor de él que apenas mantenía las fuerzas en los muslos. Literalmente su chico podía sentirlo palpitando dentro.

Estaba golpeando algo sensible que hacia a Yoongi poner sus ojos en blanco, con cada estocada su piel se le ponía erizada y la sensibilidad entre sus piernas llegaba al punto máximo.

Las uñas se le hundían en la ahora sudorosa carne del castaño, sintiendo, y sintiendo, el estómago de Jimin se rozaba contra su dureza en cada movimiento, la mano sujetandole las caderas y el choque imparable entre pieles, era demasiado intenso para la primera vez y ese cosquilleo en el vientre se los hacía saber.

Por esta razón, Yoongi acabó llorando mientras manchaba su estómago en medio del acto, lleno de espasmos y acallando cualquier sonido que intentará salir.

Su interior exprimio tanto a Jimin, que apoyó todo su peso contra él, sin poder moverse y el calor a tope, lo llenó de hirvientes fluidos por dentro.

Apenas todo acabo, el castaño se tumbo al lado suyo, ambos tratando de recuperarse entre inhalaciones escandalosas-E-eso... Fue rápido.

Yoongi río tontamente, tenía razón. No aguantaban nada, algo normal considerando que nunca lo hicieron antes-Fue increíble...

Jimin asintió, enganchando el brazo a su cintura entre jadeos, finalmente el pálido también se volteó para sentirlo más cerca.

Dios, de verdad ocurrió. Yoongi tenía una sonrisa idiota, su corazón acelerado, al menos sus sentimientos compensarán el dolor de trasero con el que tendría que lidiar luego.

Al menos fue así hasta que cayó en cuenta de que llegaron tan lejos, y él seguía confundido.

No lo hablaron, ni siquiera solucionaron sus problemas, solo se habían dejado llevar como un par de tontos inmaduros.

Y Jimin fue capaz de notar ese abismal cambio en sus facciones, con un gesto confundido y tomándolo de los hombros, preguntó bajito-¿Pasa algo? ¿Te duele, te sientes mal?

Yoongi se relame los labios, pasando entre sus labios inflamados a aquellos orbes preocupados. Tenía la oportunidad de hablar, finalmente.

-Jimin, ¿Hiciste esto... porque hay algo más, o solo lujuria?

Él pareció tan confundido que se tardo varios segundos en responder-Ambos-Fue una palabra rotunda y sin pensar, tanto así, que sintió pánico por aclararse en cuanto vió un brillo herido en los ojos de Yoongi-¡E-es decir! Me gustas. En serio, me gustas. Y al mismo tiempo, claro que también me sentía alborotado por hacerlo contigo. Pero... Si no hubiera algo especial, jamás me habría atrevido a llegar tan lejos. Tengo mucha confianza en tí, incluso para compartir mi primera vez contigo.

Yoongi exhala una risa incrédula y absurdamente feliz, de total alivio-Y-yo... Dios, debí hablarlo desde antes. Debí... Debí atreverme para así ya no sentir como si solo estuvieras aprovechando que tenias a alguien dispuesto a experimentar...

-Nunca quise hacerte sentir así, lo siento tanto...

El pálido se llenó nos pulmones, sintiéndose como un verdadero tonto-También lo siento-Se mordió el labio inferior, mirándolo a los ojos-Soy un inmaduro, hice muchas cosas que te hirieron, cosas que pudieron solucionarse con una simple charla. Cosas estúpidas e irresponsable, que bien pudieron acabar muy mal...

-También lo soy-Jimin se acercó a él, tomando un paño para pasarlo cariñosamente contra su estómago. Un poco avergonzado de que la calentura ya se haya ido, Yoongi se cubrió la zona púbica y le permitió acercarse, comenxaba a tener frio-Yo... Simplemente asumí que ibas a entender mis acciones. Que tendrías mis mismos pensamientos, que no necesitaba palabras. Pero solo era yo, mostrándome como un inmaduro que solo piensa con las hormonas-Se rió, algo apenado-De cierto modo lo soy, y yo también debí decírtelo de frente.

-Si te pones a pensar-comienza, dejándose rodear por sus brazos cálidos-El mundo se acabó para nosotros cuando éramos demasiado jóvenes, estas experiencias... Estos errores, debimos cometerlos hace mucho tiempo.  Prometo que haré mi mayor esfuerzo por mejorar...

-También lo haré, Yoongi.

Dejar de vivir una vida normal no es algo que se hayan buscado. Aún así, no utilizarían ese arrebato como una excusa para no aprender, especialmente de sus propios errores.

-En el fondo, sigo sintiendo que algo me falta, que todavía soy un crío en la secundaria-Confiesa, con una voz tan baja que Jimin apenas pudo oírla.

-Me siento igual, creo que estuve estancado hasta que te conocí-Lentamente, el castaño recuesta la espalda en los estantes polvorientos, con un suspiro-Pero... Está bien. De ahora en adelante seré muy claro con mis sentimientos, quisiera que seas mi pareja, Yoongi.

-De ahora en adelante, no volveré a guardarme las dudas que tenga-Los esponjosos labios del pelinegro acabaron sobre los suyos un breve instante. Yoongi aprieta un poco sus labios, feliz con la declaración-También me gustas y sí quiero serlo. Así que ahora podemos agregar un segundo motivo de porque mantenernos vivos, ¿no?.

Jimin asintió, al fin se habían quitado un peso de encima.

De pura flojera no editaba ni subía este capitulo 😔😔