Jimin caminaba junto con HyunnA por el centro de la cuidad, le había prometido a la chica que saldrían los dos para pasar tiempo juntos.

HyunnA iba a su lado comiendo felizmente un helado. Hacía un poco de calor por lo tanto ella vestía con un pantalón de tela negro, un top blanco, converse negras y una camisa de color coral con algunas flores dibujadas con su cabello negro atado en una coleta alta algo despeinada. Se veía linda.

-¿Cómo va todo con Dawn? -Preguntó Jimin dándole un sorbo a su Sprite.

-Bien-Respondió-Hoy estamos viendo si nos podíamos ver para cenar.

-Que lindo. ¿Y el trabajo para la exposición?

-Ya lo estoy terminando, ¿y tú? -Dijo con cara pícara.

Instantáneamente la imagen de Jungkook montándolo después de la cena de anoche llegaron a su mente, sonrió.

-Muy bien... -Murmuró y HyunnA soltó un "Uhhh" para después reír. Jimin pasó su brazo derecho por los hombros de Kim y la pego a su cuerpo-Querida Hyunnie, tú me dijiste que tu novio trabaja en un sex shop, ¿cierto?

-Sí, querido Jim-Respondió llevando la cuchara de helado a su boca.

-¿Puedes llevarme, Hyunnie? Por favor -Rogó haciendo un puchero y ojos de cachorro para convencerla.

-¿Qué gano si te llevó hasta el trabajo de Hyo?

-Ehh, cada vez que nos veamos te voy a dar una bolsa de gomitas de osito- Negoció.

-Hecho.

Jimin rió y abrazo más a la chica, esta se quejó para que la suelte, pero Jimin hizo oídos sordos y la siguió abrazando, no tan fuerte como para lastimarla sino para molestarla. Ni siquiera la soltó cuando HyunnA tiró el pote de helado vacío a un tachó de basura, y así estuvieron por la calle, abrazados hasta el local donde trabajaba Hyoyong.

Jimin abrió los ojos al estar enfrente del lugar, era enorme. HyunnA abrió la puerta del local y corrió hasta el mostrador, se lanzó a los brazos de su novio y le sonrió dulcemente.

-¡Dawnie!

-Hola, Hyunnie -Dijo el chico dándole un beso en la mejilla-Hola, Jimin.

-Hola, Dawn-Saludó Jimin con una mini sonrisa-Oye, yo me preguntaba... si me dejabas ver tu mercancía.

-Claro, mira lo que quieras y si algo te llama la atención dímelo.

Jimin agradeció con una sonrisa y se alejó de la pareja perdiéndose entre los pasillos del gran local.

Hyoyong se acercó a su novia, la abrazo por la cintura y acercó sus labios hasta su nuca empezando a repartir besos.

-Dawn... -Advirtió la chica.

-¿Qué?

-Aquí no, pueden entrar personas y hay cámaras. Suelta.

-Te tengo que recordar que estás hablando con el hijo del dueño de este lugar, tengo todo el acceso a las cámaras de seguridad y cuando Jimin termine de comprar, puedo cerrar el sex shop y... ya sabes-Murmuró sobre la piel de HyunnA -Además... me entró mercancía nueva...

HyunnA trató de no soltar un gemido cuando la mano de su novio bajó hasta su entrepierna, su cuerpo tembló y mordió su labio para que nada raro salga de su boca. Agradecía estar detrás del mostrador.

-B-Bien, pero suéltame. Ahora no- Murmuró y cuando Hyoyong la soltó pudo respirar bien. Quiso darle un golpe al verlo sonreír de esa manera. Y lo hizo.

Por otro lado, Jimin miraba los distintos juguetes de los gabinetes del lugar, habían demasiados, distintos colores, tamaños y diseños. Estaba perdido, no sabía cuál llevar o cuántos. Lo único que tenía en la canasta era una caja de preservativos y dos botes de lubricante, uno normal y otro con sabor, de una de las estanterías tomó un vibrador color violeta y siguió recorriendo la tienda.

Había de todo, de juguetes normales hasta más masoquistas, disfraces, esposas, incluso velas aromáticas y aceites para masajes, de los aceites tomó uno de vainilla y un par de esposas negras de hebilla. También había tomado una especie de correa, era de cuero, en la parte de adelante y atrás tenía un corazón de metal, la correa iba enganchada con un ganchito en el corazón de atrás... Sonrió malicioso.

No encontró nada más que desee llevar, así que volvió al mostrador.

-¿HyunnA?-Preguntó entregándole las cosas a Hyoyong.

-En el baño-Respondió pasando las cosas por el código de barra. Dawn le dijo el precio de los productos y mientras Jimin buscaba su tarjeta el rubio guardaba todo en una bolsa de cartón negra-Mira, HyunnA me paso tu número de teléfono y aquí está el mío. Cuando me entre nueva mercancía te mando un mensaje.

Habló dándole un papel con su número de teléfono escrito.

Jimin sonrió-Me caes bien.

Hyoyong rio-Créeme, tu novio y tú van a disfrutar más que nunca-Le guiño el ojo y está vez el que rio fue Jimin despidiéndose del chico mientras salía de la tienda. Sabía que HyunnA se iba a quedar con Hyoyong.

<<Novio... Lo será en un futuro no muy lejano>>

Mientras caminaba por las calles para llegar a su casa algo llamó su atención. Era una tienda de lencería y en la vidriera había un maniquí con una lencería negra de encaje más una bata del mismo color de seda. Sin pensarlo mucho entró a la tienda y enseguida una mujer de pelo rubio, morena y con algunos tatuajes se le acercó con una sonrisa.

-Buenas tardes, mi nombre es Hyolin, ¿en qué puedo ayudarte?

-Oh yo... Me gustaría saber el precio del... conjunto negro de la vidriera-Dijo con las mejillas rojas-La bata solamente...

La mujer rio por la ternura que le daba el chico.

-Claro-Hyolin fue hasta donde estaba el conjunto y se fijó el precio en la etiqueta -La bata sola serían 40 mil wones. ¿La llevas?

-Mmh, sí, sí... -Hyolin sacó al maniquí de la vidriera y con cuidado le empezó a sacar la bata para guardarla en una caja y entregársela a Jimin.

Jimin salió de la tienda de lencería una vez pago por la bata y caminó hasta su departamento.

Tenía que armar todo para su sesión de fotos de hoy.

[...]

Jungkook tenía sus brazos en el cuello de Jimin y éste sobre sus caderas mientras tenían sus bocas ocupadas en un sensual y lento beso.

Jungkook mordió ligeramente el labio inferior de Jimin haciéndolo jadear, metió su lengua en la boca del contrario, moviendo su lengua contra la del pelinegro.

-Ggukie... -Lo llamó una vez se separaron del beso-Tengo algo para tí.

-¿Si?- Jimin asintió y tomó la bolsa donde estaba la correa y la bata. Jungkook tomó la correa entre sus manos y sonrió-Wow, que... inesperado. Me gusta, ¿quieres que usé esto para las fotos?

-Sí, te verías muuy lindo-Murmuró besando la piel de su cuello. La respiración de Jungkook se volvió un poco pesada por esos labios sobre su sensible tez.

-Lo usaré-Ante la atenta mirada de Jimin se despojó de su remera, quedando con su torso desnudo, el mayor se mordió el labio inferior y sin poder evitarlo subió su mano hasta las costillas de Jungkook. Con cuidado se colocó la correa y miró al mayor-¿Y bien? ¿Cómo me veo?

-Jodidamente sexy- Jungkook sonrió.

Se bajó de su regazo y se sacó su pantalón, quedando en ropa interior, tomó la bata negra y se la colocó atando el cinturón. La bata le llegaba hasta un poco más arriba de las rodillas, las mangas eran algo anchas y tenía algunos detalles de encaje. Se veía jodidamente bien.

Jimin le indicó que se recostara en la pared, Jungkook aflojó un poco el cinturón de la bata y la abrió un poco dejando ver su muslo. Tomó la correa del collar y tiró un poco de está.

Luego, fueron hasta la habitación. Jungkook se sentó en el medio de la cama de rodillas de costado y con la bata cayendo por su hombro, su brazo izquierdo estaba detrás de su cuerpo y su brazo derecho entre sus piernas. Después se inclinó hacia delante, sosteniéndose de sus manos y sacando su respingado trasero.

Jimin saco la foto, se acercó a la cama dejando la cámara a un lado y tiró a Jungkook sobre el colchón comiéndole la boca.

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Uuffff
No me esperaba lo del sex shop KSKSKSK

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