Fifteen
Despertó sudando, con la respiración agitada y sus ojos llenos de lágrimas. No podía respirar, sentía un nudo en la garganta horrible que se lo impedía. Sus manos temblando.
Jimin se despertó exaltado al escuchar a Jungkook llorar y murmurar cosas entre sueños, lo agarró por los hombros tratando de despertarlo, pero no lo hacía. Hasta que el castaño lo hizo por sí solo. Con la respiración agitada y llorando.
-Jung...
-La va a m-matar-Dijo entre lágrimas. Jimin frunció el ceño sin entender, iba a hablar, pero Jungkook se le adelantó-V-Va a matar a m-mi abuela, Jimin. ¡Va a matarla!
-Gguk, tranquilo-Murmuró tomándolo de las mejillas-Fue una pesadilla, nadie va a matar a tu abuela, ¿si, cariño? -Hablo dulcemente para tratar de tranquilizarlo.
Lo vio negar con la cabeza y salió de la cama hasta la sala de su departamento, Jimin fue atrás de él y lo vio tomar el teléfono inalámbrico. Sus manos seguían temblando y no podía apretar bien los botones.
Se acercó hasta él e intentó quitarle el teléfono, pero Jungkook le pegó a su pecho y negó con la cabeza.
-Jungkook, es tarde, tu abuela debe estar durmiendo... Háblale mañana.
-¡No!-Gritó-¡N-No quiero! Hyung, p-por favor...
Los ojos de Jungkook estaban rojos, hinchados y vidriosos por las lágrimas, sus mejillas húmedas. Estaba destrozado
A Jimin se le rompió el corazón al ver a su dongsaeng así, nunca lo vio de esa manera. Tan desesperado y... con miedo. Lo tomó de la mano y lo llevó hasta el sillón, lo hizo sentar sobre sus piernas, lo abrazó por la cintura y con su mano libre secó sus lágrimas, cosa que era algo inútil, pues Jungkook seguía llorando soltando pequeños hipos.
Besó sus mejillas y acarició su cintura para que esté más tranquilo al hablar con su abuela. Si es que le contestaba, ya que eran las cuatro de la mañana.
Jungkook marcó el número de la casa de su tía Taeyeon y colocó el teléfono en su oreja, esperando a que alguien conteste.
-¿Hola? -Se escucho la voz de una mujer mayor, somnolienta y algo ronca.
-Hola, abu...
La mujer sonrió-¡Ggukie! ¿Cómo estás? -Su sonrisa se borró y una sensación de preocupación se instaló en su pecho al escuchar un sollozó de su nieto-¿Qué pasa, cariño?
Jungkook se mordió el labio inferior-Y-Yo tuve una p-pesadilla y t-te pasaba algo a ti... N-No quiero que te pase a-algo.
Jimin rápidamente lo pego a su cuerpo repartiendo caricias por su cintura y besos en su cabello.
-Mi amor, a mí no va a pasarme nada, ¿si? Yo voy a estar contigo muchos años más. Solo fue un sueño, nada más. No llores, bebé... ¿Te cuento algo?
-¿Q-Qué? -Preguntó secando sus lágrimas.
-A fin de mes vuelvo a Seúl.
-¿De verdad?
-Sí, cariño. Estuve hablando con tu tía Sorn y Taeyeon y decidí que era hora de volver a mi casita, con mis plantas-Jungkook rió bajito-¡Espero que me las hayas cuidado, niño!
-Lo hice, abu.
-Me alegro. Todo esto va terminar, Ggukie, ¿si? Vamos a ir a juicio para que tu tío termine internado, es por su bien, ¿lo sabes, no?
-Lo sé, abu... Solo quiero que él y que tú estén bien...
-Lo vamos a estar, cariño. Te prometo que todo va a terminar bien... Bueno, hablamos mañana, ¿si? Ve a dormir y descansa. Te amo, Ggukie.
-Yo también te amo, abu. Descansa.
Jungkook colgó la llamada y dejó el teléfono en un almohadón, se acomodó en el regazo de Jimin quedando a horcajadas, lo abrazo por el cuello y ocultó su rostro en el hombro de éste. Cerrando sus ojos. El pelinegro envolvió con sus brazos su cintura, acariciando su espalda cariñosamente, dejando besos en su hombro.
No dijo nada, solo se quedó dándole cariño sin apuros, tenía sueño, sí, pero no iba a dejar solo a Jungkook en ese momento, todavía seguía sollozando y con pequeños hipos. Tenía algo en claro; no quería ver a Jungkook de esa manera nunca más.
Se quedaron así por varios minutos, Jimin dejaba caricias por toda la espada de Jungkook. Ya se había calmado, no sollozaba ni soltaba pequeños hipos, pero no quería soltar al mayor, quería seguir recibiendo mimos y besos. Sentía sus párpados pesados, poco o poco estaba cayendo dormido encima del pelinegro
-Ggukie...-Lo llamo en un susurró -Vamos a la cama, allá estarás más cómodo-Jungkook soltó un quejido y se pegó más al mayor. Jimin rió bajito y con cuidado cargo a Jungkook hasta su habitación, lo dejó suavemente sobre el colchón, lo arropó y fue a apagar la luz de la sala. Volvió al cuarto y se acostó a su lado, Jungkook se acomodó en el pecho del pelinegro y paso su brazo por su torso.
Jimin acariciaba suavemente los sedosos cabellos castaños de Jungkook hasta caer dormido poco a poco.
[...]
Jungkook se acomodó de espaldas a Jimin y se levantó su camisa dejando a la vista sus hoyuelos de venus.
Cuando la fotografía fue tomada, se levantó del suelo y caminó hasta la cocina para tomar un vaso de agua. Sintió los brazos de Jimin abrazarlo por la espalda y sus labios en su cuello.
-No tengo ganas ahora, Minie...
Jimin dejó un último beso en el cuello de Jungkook y apoyó su barbilla en su hombro-No pasa nada, Ggukie. ¿Te sientes bien?
Jungkook suspiró y apoyó sus manos sobre las de Jimin-Estoy un poco cansado, mi trabajo, el examen que es dentro de dos semanas... Estoy todo el día estudiando.
-Te entiendo, yo estoy un poco estresado -Murmuró-Ggukie...
-¿Mmh?
-¿Me haces un masaje en la espalda? Por favor-Dijo y Jungkook rió asintiendo con la cabeza.
Ambos chicos caminaron hasta la habitación del mayor, Jimin se quitó su remera y la dejó a un lado, se dejó caer en su cama boca abajo y la indicó a Jungkook donde estaba el aceite para masajes.
Sintió como su dongsaeng se sentaba arriba de su trasero y abría la botellita.
-¿En dónde compraste este aceite?- Preguntó pasando sus manos por la fuerte espalda de Jimin.
-Mmh, en el sex shop donde trabaja Hyoyong-Balbuceó.
Jungkook rió e hizo algo de presión en los omóplatos del mayor, pasaba sus delicadas manos por toda su espalda hasta sus hombros. A veces Jimin soltaba pequeños gruñidos de satisfacción y otro de dolor.
-Estas muy contracturado, ¿qué estuviste haciendo? -Preguntó Jungkook.
-Estuve sentado por horas editando las fotos de las sesiones y también tuve que ayudar en mi trabajo a descargar las cajas de comida del camión-Explicó-Tuve que llevar desde el camión hasta la bodega bolsas de papas, zanahoria y demás sobre mis hombros, agacharme cada dos por tres para tomar algo que se cayó al suelo, etc... Mmh, ¿cómo eres tan bueno dando masajes?
-Mi mamá me enseñó-Respondió-Y tú tienes que cuidarte. Tienes los músculos muy rígidos.
Jimin sentía que en cualquier momento se quedaría dormido, Jungkook tenía unas manos tan suaves.
Después de unos 40 minutos Jungkook finalizó el masaje, se bajó del trasero de Jimin y le dio una pequeña nalgada.
Jimin se dio la vuelta y Jungkook se sentó a horcajadas de él, acariciando su abdomen sin segundas intenciones.
-¿Te puedo tomar una foto?
-¿A mí? -Preguntó Jimin sorprendido por lo que dijo Jungkook.
- Sí, siempre me sacas fotos, ya sabes, las fotos para tu exposición y las... otras- Sonrió-Vamos, solo una foto.
-Okey, trae la cámara.
Jungkook sonrió feliz y salió corriendo de la habitación para buscar la cámara, Jimin rio bajito por lo tierno que se vio su menor. El castaño volvió con la cámara en manos y se sentó nuevamente en el regazo de Jimin.
Jimin vio que Jungkook tenía en sus manos una cadenita de plata, no dijo nada y dejó que la pusiera sobre su vientre, levantó un poco las caderas logrando que Jungkook enganche la cadena. Luego tomó la cámara y tomó la foto.
Jungkook sonrió y le mostró la foto. La fotografía mostraba su torso marcado con la cadena en su vientre, las rodillas de Jungkook se lograban ver a los costados de su cadera, el elástico de su ropa interior se asomaba de sus pantalones negros y las sábanas estaban algo arrugas debajo de su cuerpo. Era una muy buena foto.
Su moreno torso hacía un contraste con las pálidas rodillas de Jungkook y la cadena en su vientre la daba un toque delicado y fino.
-Wow, me gusta-Dijo Jimin-¿Dónde compraste está cadena?
-Me la regalo HyunnA-Respondió - Minie, las otras fotos, ¿dónde las guardaste?
-Las pase a un pendrive-Hablo posando una de sus manos en la rodilla del castaño. Estiró su brazo libre y agarró dos pendrives. Eran los dos iguales, pero tenían una marca de distintos colores para que Jimin pueda diferenciarlos más fácil-Este tiene las fotos para la exposición y éste tiene las más íntimas.
-Mmh, me siento más aliviado ahora- Murmuró.
-Ayer estuve editando y pasando las fotos para la exposición al pendrive, y ya tengo todas las fotos seleccionadas... Hoy fue nuestra última sesión.
-¿De verdad? -Preguntó con una mueca en su rostro.
Jimin asintió-La muestra es en cuatro días, Ggukie, tengo que editar las fotos de hoy y ya estaría todo terminado-Dijo -El martes tenemos que ir todos los estudiantes muy temprano a la universidad para terminar de ordenar todo. Vas a ir, ¿verdad?
-Obviamente que sí, te recuerdo que de las fotos soy yo además nunca me las mostraste! Solo dos veces desde que empezamos esto.
Jimin rio-Vas a ver las fotos en la exposición. Ahora tenemos que hablar de nuestra cita, que es mañana.
-Es verdad, ¿a dónde vamos a ir?
-No te voy a decir.
-Te odio
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Pobrecito mi Kookie 😞
Peroooo vamos a tener cita y la exposición uwuuuuuw
ⓒ LiaSunflower9
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