Capitulo 6
La señor gotou puede llegar a ser un amante de los niños....cuando estaban dormidos, no lo jodian, no lloraban por todo y lo fastidiaban, ese era su gusto por ellos cuando los cuidaba, solo había un niño que no lo jodia tanto y al menos lo consolaba, ese era Kamado Rokuta, el menor de los Kamado, el ya estaba enterado de los insistentes ocurridos, de hecho ya muchos padres igual.
Por muchos que la mayoría, obviamente exceptuando a Rokuta, lo jodian, se aliviaba de que todavía no fuera hora de que sus niños se fueran a la academia Kimetsu Gakuen, ya que la escuela está perdiendo poco a poco su reputación, todavía se mantenían en pie por ser una de las mejores que ha dejado bien futuro a muchas celebridades de hoy en día, pero todavía se le está dificultando las cosas.
Ya han habido 7 estudiantes muertos.
2 maestros desaparecidos al igual como un estudiante siendo ese Kamado Tanjiro.
El azabache no podía estar más asustado que triste, no negaba que le alegraba te era a Kamado aquí a veces para ayudarlo con los niños, pero ahora le entristecía que ya no estuviese aquí, igual Rokuta ya no era el mismo de antes y todo lo que hacía era sentarse mirando el piso triste.
Gotou: Vamos Rokuta, pronto será la hora de dormir.
El pequeño no le contesto y solo se sentó en el suelo agarrando la mantita de la escuela para dormir, elas alto solo soltó un suspiro y tomo al no para llevarlo a dónde estaban los demás y apagó la luz para que pudieran descansar en paz por está tarde.
Sin saber que ya estaba afuera alguien esperando por su próximo rehen.
Gotou: ¿Mh? Parece que va a llover – al asomarse por la ventana para ver arriba pudo ver cómo las nubes se empezaron a acumular, pero al momento de volver hacer su labor sus ojos al dar una vista a lado vio un hombre de casi 2 metros con lentes de sol y un coche lujoso alado de la entrada de la escuela – ¿Que hace el señor Tengen?
Bien sabía que el era el famoso maestro de artes más extravagante que había, pero se le hacía raro que estuviese afuera de la escuela, y más con lo que parecía ser una ¿Sonrisa?
Gotou: Es raro tener una sonrisa cuando un mejor amigo desaparece – había susurrado el cuidador –
Por alguna razón apretó sin querer un poco más a Rokuta contra su cuerpo quién se quejo un poco por el acto de su maestro.
Gotou: Oh...lo siento Rokuta, mhh volvamos con los demás para la siesta.
Se le hacía raro, muy raro.
*Ring*
Gotou: Vaya, quien...
.
.
.
Tener que recordarlo una y otra y otra vez le jodía a Sanemi, no podía sacarlo de su cabeza, enserio quería joderlo, joderlo un montón, DEMASIADO, Genya a sido una increíble perra, le encantaba y amaba a su hermano menor pero había alguien quien igual quería llevarlo a cuatro.
(¿Enserio creían que iba a pasar por algo lo del primer capitulo? "2 profesores más, uno de cabello negro y otro como la nieve!!!)
Asi es, Shinazugawa tenía los ojos igual en Kamado, tener que ver a ese pelirrojo le causaba náuseas, pero al ver cómo Rengoku y Tomioka se interesaban en el, solo decidió verlo pero solo pudo perderse en su cara, su cuerpo, su trasero, quería eso, lo quería, pero tenía igual a Genya, no sabía a cual de los 2 escoger.
Pero luego recordó que era Shinazugawa Sanemi y esas cosas se la pasa por el culo, se quedaría con los 2.
Y sabía que Genya le encantaría la idea, que mejor que una sola perra, mejor 2.
Shinazugawa estaba ahora mismo donde Hakuji estaba amarrado, con una sonrisa burlona lo miraba, mientras tenía los brazos cruzados y un pie pegado a la pared, la clásica imagen de recargando se en la pared con una pose "genial".
Tenía al joven Hakuji quién estaba en una silla de madera del lado contrario, con las manos para adelante amarradas de las muñecas con una cuerda y sus pies encadenados de las patas de la silla.
Ahora mismo el pelinegro estaba con cinta en la boca y miraba con recelo al albino quien no quitaba esa mirada tan jodidamente molesta, alerta cuando empezó a caminar hacia el y le quita de una la cinta que termina lastimando lo.
Hakuji: Maldito hijo de-
Había recibido un tremendo golpe en su mejilla antes de poder acabar su insulto, y no solo eso sino que empezó a recibir golpe tras golpe empezando a dejar su mejilla y frente con hematomas por la hinchazón del daño recibido por parte del cicatrizado.
Sanemi: Oí, oí, tus papis no te enseñaron a respetar a los que son tus superiores?
Hakuji: Pu..pudrase! Usted ya ni merece ser un maestro maldito hijo de tu perra madre!!!
Sanemi: Tsk! – agarrándolo fuerte del cabello lo miro con recelo pero luego divertido le lamió la sangre que salía de su nariz causándole aún más asco al joven – que? Acaso te doy asco?, pero que niño más grosero.
Hakuji: Es un maldito loco...ya pensaba que lo era en la escuela pero lo es enserio en demasiados sentidos, da asco... maldito ENFERMO!!!
Sanemi: Kotuki es bonita sabes?
Hakuji: ¡Con ella no te metas! ¡SI TE ATREVES A PONERLE A UNA MANO ENCIMA A LA MUJER QUE AMO JURO QUE ESTAR BAJO LA TIERRA!!!
Sanemi: Ja! Ya, ya, ya, ya, que no le haré nada aún, solo necesito que me digas donde está el Kamado y ya todo esto termina.
No sabía que pensar, este tipo estaba más loco que antes, ¿Que le habrá hecho el maldito de Uzui para hacer que terminara así? Ese tipo era toda una amenaza, debía de matarlo a toda costa, pero no sabía que hacer.
El mayor lo agarro de su cabello con fuerza, y lo acercó a el, veía sus ojos que parecían mostrar la misma muerte, si tan solo pudiera quitarse estás molestas cuerdas y estás jodidas esposas de la silla.
Sanemi: No hablaras?
Hakuji: Tengo una mejor idea, ¿Que tal si te quitamos esto?
Salto impulsando un poco la silla para adelante, pero lo suficiente como para que su boca alcanzará la oreja izquierda del peliblanco y terminara por arrancarse la, los gritos de furia y dolor del albino no tardaron en escucharse, se quitó la camisa y se la puso en la oreja para parar la hemorragia, Hakuji vio su oportunidad y aunque esto terminará adoliendole cómo el infierno se arriesgo y ya que Shinazugawa había caído a suelo dejo caer una navaja que tenía con el, posiblemente para hacerle daño sino hablaba o peor, matarlo.
Por la forma en como estaban amarradas sus manos le era imposible llegar a la otra para cortarlo y por como tenía el filo agarrado pues solo se le ocurrió una cosa, metió como pudo el filo con ayuda de sus dedos apuñalando se un poco la muñeca junto con la mano derecha, que es donde tenía la navaja.
Gracias a la sangre pudo resbalar un poco y zafarse de un extremo de la cuerda, y así cortar el del otro extremo, Sanemi se abalanzó contra el para matarlo pero fue golpeado en la cabeza un el mago de la navaja, rápido rompió la silla con sus puños y los grilletes de sus pies aún los tenía pero ya no eran un problema sino estaban cerca de esas patas de la silla.
El mayor empezó a golpear hasta dejar noqueado al mayor en el suelo, sintió como una presencia atrás de el estaba por hacerle daño pero no está vez, pues resulta que Genya estaba atrás de el para clavarle una aguja en el cuello para adormecer lo de nuevo.
Hakuji: CARAJO TU YA DEJA DE MOLESTAR.
Agarró su cabeza y la azotó contra la pared dejándolo inconciente, pero al parecer no se midió y le empezó a sangra la cabeza al más joven, que más da, le vale si se muere.
Hakuji salió del lugar y se encontró con varios hombres, se trono el cuello y se preparo, esto sería divertido.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro