Narra Aioria:

Desperté en un lugar desconocido pero a su ves algo familiar para mí, mire a mi alrededor y no había nada más que oscuridad; hasta que escuche el sonido metálico de unas cadenas inconcientemente toque mi cuello quede en shock total al sentir al rededor de mi cuello una correa me desespere e intenté varias veces el quitarme aquella cosa pero no podía ni siquiera usar mi cosmos para contactarme con alguien. Estaba cansado pero no quería ceder ante la simple idea de que estaría atrapado en esta inmensa oscuridad, de golpe sentí que tiraban de la cadena haciendo que valla hacía adelante intenté inútilmente evitar el ir hacia donde tiraban la cadena pero no logré ni siquiera retroceder más de la cuenta; de un momento al otro mi cuerpo entero quedó inmóvil por lo que pude notar era una soga al igual que note que tanto la cadena como la correa ya no estaban pero también note que mi vestimenta era como similar a las que usaba cuando era un niño con excepción de que eran de mi tamaño.

Estaba tan sumido en mis pensamientos y el intentar no solo de soltarme sino que también buscar alguna manera de escapar de este lugar tan oscuro pero ahora mismo solo dónde estaba atado había algo de iluminación, no podía escuchar nada ni siquiera podía saber en qué lugar estaba o como llegué aquí; empecé a hacer memoria de que ocurrió antes de despertar en este extraño lugar. Comencé a recordar de apoco todo lo ocurrido desde que se supo del falso intento de matar a la diosa Athena hasta que ella uso su cosmos divino para salvar a Saga de aquel maligno cosmos, después de eso me ordenaron el llevar a Saga de regreso al templo del patriarca para que descansara después de eso algo más paso; al recordar bien que sucedió después de que deje a Saga en la cama negué varías veces ya que el me había besado al igual que podía sentir que algo me sofocaba como si un cosmos muy maligno me rodeaba y me inmovilizaba después todo se volvió oscuro.

¿?:al fin te das cuenta...

Aioria:(esa vos es de...) sa-Saga dónde estoy??

¿?:Jajajaja, te equivocas cariño yo no soy Saga...

Aioria:claro que eres el, reconozco tu voz...*algo inquieto*esto no es gracioso Saga, suéltame y déjame ir ahora...

¿?:*molesto*que no soy Saga...*se acerca*

Aioria:claro que eres Saga...

¿?:que no me llames Saga...*agarra de los cabellos ajenos*y solo te lo diré una vez, mi nombre no es Saga...

Aioria:aah, duele suelta mis cabellos...

¿?:*sonríe con malicia camuflada*se que me parezco a mi contenedor o como tú lo llamaste Saga, pero no soy el y dónde estamos ahora es dentro de tu mente; obviamente que si se ve oscuro es porque yo te tengo prisionero pero descuida que pronto sabrás que es lo que quiero hacer contigo...

No sé porque pero esos ojos y esa sonrisa por alguna extraña razón se me hacían familiares, tampoco se el porqué no solo sentí vergüenza sino que también sentía un gran miedo hacia el; como si ya lo conocía al igual que me dió un gran terror con eso que había dicho antes. Si el no es Saga porque se le parece además porque me mira así y porque siento que quiero alejarme de él es como si algo dentro de mi me gritaba que escapara de el pero como hacer eso sí dijo que estaba encerrado en mi propia mente.

Aioria:dime qué es lo que quieres de mi??

¿?:de ti? lo quiero y más...

Aioria:a qué te refieres con eso??

¿?:para serte honesto, primero quiero que abandones para siempre el santuario y que te lleves contigo tu armadura dorada...

Aioria:que? Eso jamás, soy un caballero al servicio de la diosa Athena y no...*es callado por un fuerte agarre en sus mejillas*

¿?:solo te doy dos opciones y más te vale que elijas correctamente...*mira fijamente al contrario*o mejor dicho te irás del santuario por las buenas o por las malas, tu elijes...

Aioria:a qué te refieres con eso??*sorprendido mira fijamente al contrario*(porque siento que algo malo me va a pasarme...)

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