|"Aunque la jaula sea de oro sigue siendo una jaula"|

Situación del Reino: Fuera del campo de guerra.

Sonic's Perspective.

Adaptarme a este papel en la vida de la realeza no es tarea fácil, especialmente cuando debo permanecer inmóvil en un trono durante horas interminables. La presión es abrumadora y la nostalgia por mi hogar se hace presente constantemente. No puedo evitar preguntarme cómo estarán mis amigos, si están teniendo alguna genial pelea contra Eggman y si Amy creerá que la he dejado plantada.

Sumido en mis pensamientos, no logré percibir la presencia de mi leal caballero, Lancelot. Aunque su semblante serio y su actitud respetuosa me recuerdan a Shadow, ahora, en lugar de ser mi enemigo, parece admirarme.

—Su alteza... ¿Qué lo tiene tan preocupado? —preguntó con tono de preocupación.

—Ya te he dicho que no me llames así, aún no me acostumbro. ¿Está bien? —respondí reprendiéndolo, el título de "Su alteza" definitivamente no encajaba con mi estilo.

—Sonic, me preguntaba por qué te veías tan consternado —insistió.

—Y yo me pregunto por qué tantas formalidades —respondí con una sonrisa juguetona mientras me levantaba.

Aprovechando su gesto de arrodillarse, lo empujé suavemente al trono.

—¡Su alteza! —exclamó sorprendido.

—Allí te queda mejor que a mí, ¿no crees? —bromeé soltando una carcajada.

—Esto es una deshonra a mi título, si alguien nota que estoy aquí... —se levantó apresuradamente y se acercó a mí con seriedad—. Te pido con humildad que no lo hagas de nuevo...

—Eres un aburrido, Lance, admito que me recuerdas a un compañero.—comenté antes de salir de allí, con una punzada en el pecho, que hacía llamativa mi nostalgia.

¿Podría ser este caballero un buen amigo después de todo?

---------------------------------------------------

Nunca tomé en cuenta que la soledad me consumirá tan rápido, mirando los meses pasar, el otoño tocaba la puerta y yo solo podía pudrirme en mi trono.

Estar rodeado de gente pero sentirme tan desolado ¿No era igual antes? No... Antes todos eramos iguales, no me alababan solo por existir, si no por mis hazañas, llevo meses sin mover un solo dedo, no literalmente, pero asi lo siento yo.

Incluso he adaptado ese lenguaje tan formal, debo cuidar mis palabras y es bastante molesto, pues toda palabra tenía peso y podría terminar con mi reputación.

Recuerdo que solia hacer pijamadas constantes con Tails, me encantaba acurrucarme con mi hermanito y hacer planes contra Eggman, realmente, comienzo a extrañar esos pequeños momentos...

Ahora, ni siquiera puedo acercarme a él. Estamos separados por millones de años luz. Y su otra versión… bueno, no es lo mismo realmente. No puede llenar ese vacío.

Me mantenía abrazando una almohada amarilla durante varias noches pensando en mi pequeño hermano, algunas veces solo me quedaba pensativo y otras lloraba desconsolado.

Finalmente decidí que necesitaba a alguien dispuesto a estar conmigo, por lo menos una sola noche, pues si seguía en tal soledad moriría internamente.

La versión de Blaze se encontraba custodiando el castillo al igual que aquel Knuckles, había una opción viable.

Lancelot, quien cuidaba mi puerta durante la noche.

Limpié mis ojos llorosos con un paño cercano y salí de la habitación para encontrarlo en su deber, se le miraba agotado ¿Realmente solo dormía 2 horas al día? Ya entendía el porqué de su amor al café.

-Su majestad... ¿Requiere algo?- me preguntó, se veía claramente como resistía un bostezo.

-Requiero tu presencia en mi habitación Lance.- respondí despreocupado, intentando tomar su brazo y arrastrarlo adentro.

-¿Para que?- Rápidamente su sueño desapareció de su mirar.

-Quiero hacer una pijamada- le dije entusiasmado, casi tirando de el para lograr mi objetivo.

-¿Una que?- se escuchaba confundido o quizás solo perdido por la falta de sueño.

-¡Solo entra!- tomé su mano y lo obligué a entrar.-Quítate la armadura.-

-¡Pero Su Majes...!- lo interrumpí.

-Llamame Sonic ¿No te quedó claro, Lance?-

-¡Esto no es apropiado, Sonic! Yo solo soy su caballero, no puede verme indefenso y desarmado.- Evitó contacto visual y miró el suelo con pena, parecía alguien totalmente distinto, vulnerable.

-Entonces te lo pido como tu Rey, quítate la armadura.- asintió y se retiró lo antes mencionado.

-De esta manera no podré cuidar de usted apropiadamente.-

-No me importa, puedo defenderme solo ¡Yo vencí ejércitos de robots gigantes!- Eso pareció llamar su atencion.

-Es cierto, usted es fuerte, al igual que rápido- dijo fascinado - ¿Pero que son robots?- dijo para si mismo y en voz bastante baja.

-¿Sabes? De donde yo vengo hay personas increíbles ¡Incluso uno se parece a ti!-

-¿En serio? ¿Es igual de leal?- dijo con cierto brillo en sus ojos.

-En realidad somos algo asi como enemigos...- su cara se volvió a una de desagrado.

-¿Con su majestad? Que inconsciente.-

-En realidad allá soy solo un chico más.-

-No puedo creerlo...- luego de esas palabras soltó un bostezo.

-Ven.- me acosté en mi cama y le hice un espacio.

-Espere... No puedo, si requiere mi presencia puedo dormir en el suelo.-

-Te dije que vengas, esto es lo que yo hacía con mi hermano, solo quiero recordar esos momentos.- se acostó bastante incomodo.

Lo abracé fuerte y mantuvo mi cabeza en su pecho.

-Tails...- Solté algunas lágrimas y después tomé la mano de Lancelot. -Buenas noches Lance.-

-Buenas noches, Su majestad, espero tenga un buen sueño.-

Me dormí al lado de mi caballero.

<--------------------------------------------------------->

Después de un par de días similares a los anteriores surgió una idea en mi cabeza.

Una pelea cuerpo a cuerpo en contra de Lancelot.

Antes de que el saliera de la habitación con su armadura nuevamente ensamblada (esos días también había dormido conmigo) Le hablé para informarle sobre mi caprichosa petición.

-¡Quiero una pelea contra ti!- Grité emocionado, el me miró curioso.

-Pero mi señor... Eso va en contra de lo que todo lo que debo hacer, debo cuidarlo, no enfrentarlo ¿Recuerda?- Me tomó del brazo.

-No te preocupes Lance, necesito acción, estoy cansado de solo estar sentado ¿De acuerdo?-

Salimos del castillo, justo al amplio jardín.

No le di tiempo de hablar, solo me abalancé a el con un spin-attack.

Me esquivó.

Analicé cada uno de sus movimientos.

Volví a atacar aunque ahora de una manera más básica, aunque mi velocidad era grande el me esquivaba en cada movimiento.

Contra atacó con su espada, el tenia su ventaja y yo la mia.

El sudor bajaba por mi frente, mis piernas se movían agilmente.

Fue una ardua batalla, ninguno ganó, 5 horas de pelea consecutiva me habían dejado agotado.

------------------------------------------------------------

Me di un baño, el aún me escoltaba, en ese lugar, en aquel momento.

Frotaba mi cuerpo con el jabón en barra, tenia una esencia a lavanda.

-Hey Lance, ayúdame a frotarme la espalda.-

Se acercó y tembloroso aceptó hacerlo, era cauteloso, suave, incluso llegaba a ser relajante.

Mis puas se erizaron por el contacto qie teníamos.

Se arrodilló y me vio a los ojos.

-Señor, tiene jabón en la mejilla.-

Me dejé limpiar por el, sinceramente lo disfruté.

------------------------------------------------------------

Lo hice pasar en mi alcoba, el venía cabizbajo, no me veía a los ojos.

Al cerrar la puerta solo me tiré en el suelo.

-Te declararé el ganador de esa pelea, realmente me dejaste muerto.- Quizá solo era el cansancio, llevaba meses sin correr, sin enfrentarme a un enemigo... Sin un verdadero propósito.

No quería llorar, pero necesitaba consuelo, uno muy grande para aliviar esta pena que me consumía día tras día.

-Abrazame, Lans.- Abrí mis brazos, esperando una acción.

El corrió hacia mi, apretandome, podía sentirlo suspirar en mi cuello, sus dedos recorrer mi cintura, no me sentí incomodo en lo absoluto era agradable de cierta manera.

-Vamos a la cama...- Lo escuché decir agitado, de alguna manera necesitado, pero, no indague y solo obedecí.

------------------------------------------------------------