Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Mi Querida Anoréxica

Tu eres la narradora. O si eres hombre convierte en trapo por unos segundos.

¡Hola!

Soy ______, vivo en una ciudad hecha de cartón y tiza, con harapos rotos colgando en alambres, vivo con mi novio Katsuki Bakugo en una casa cerca de un terreno baldío, ahí se juntan los mosquitos que son un regalo de su amor.

Lo conocí en un cine porno, donde el agua sabe a alcohol puro que enamora a las Lolas, recordaría tantas veces que un misionero deseo que diera un paso a mi Katsuki.

Mi novio es el hombre de la casa, mantiene todo cuerdo en el lugar, todo lo que diga yo lo cumplo aunque caiga con estos tacones rojos que tengo. Yo apechugo el sacrificio del cual pertenezco.

Mi madre y amigas me habían aconsejado a ser aguantadora en la relación, debo tener cuidado con otras mujeres, sin embargo, es inevitable.

Me hace suya, sin palabra que diga o sangrado sin dolor, que pueda de dejar su flor de pétalos azules en este tacho de mierda, soy su chica y cada llamado que me hace seré domesticada con mi lazo que está en mi cuello.

Mis ojos estarán negros por la leña verde que me expongo, agradezco que me rompa y mis labios reventados por sentir sus manos. Mi mentón es una piedra rodante con alambres que pone Bakugo en mis dientes.

Soy leña en su fogata de la divina vida, su voz es un fantasma que recorre en mis oídos hasta la abertura hacia el infierno.

Me pregunta qué quiero, lo pienso de forma distinta o igual a él, nací para este agradable sacrificio.

No puedo hacer nada en contra o levantar mínimo la voz, ya que me echaría de la casa y quiero seguir siendo su flor de pétalos negros, me empuja y me levanto con mis muñecas rotas por mi corazón agrietado.

Le gusta que ponga mi rostro de diva pornografica, me quedo saboreando sus suelas por ratos, como la fresca loca que me volvería si no estoy atada a los pies de Bakugo.

Su amargura hace crecer un arbusto seco, me hacer sentir esto cuando hacía con las hermanas de otros, pero no le gusta que le hagan a su hermana, como él lo hace, mis anillos son mis raíces que rompen mis dedos de las manos.

Falta algo en mi corazón, cortarme el cabello o usarme, que cuente su hazaña sexual y esté en su mente agresiva.

Quiero que me haga sentir como la sumisa que soy, tenía razón mi madre de aguantar esto y tiene su recompensa como arrodillarse por mi Bakugo, un dulce que me deja amarrada en las patas de la cama y no tener tanto énfasis.

Me dará mi premio como la mascota y novia que soy, si tiene estrés se puede desahogar conmigo ya que tengo los brazos abiertos para él.

Necesitaba una mujer para saciar su codicia, tenerme en las cadenas con mis hijos en la casa de la normalidad, debe saborearme y desecharme como su buena flor de pétalos azules.

Me arrastró en el basurero y en una maleta, donde había amor me dieron unas fracturas amorosas, donde quieras que lo veas con mis pechos tentadoras, jugaré al trapo debajo de sus piernas y pulgares.

Me da la sopa en el piso de esos muros de papel, todos necesitan ayuda con sus robles.

Mi novio de cabello ceniza podrá contar sus hazañas, quiero que demuestre lo fuerte, lista para que me conduzca en su dirección resplandeciente, cortando mis esperanzas y pesadillas para que sepa dónde estaré.

Mi nombre podrá estar en las memorias callejeras, mi piel se vuelve un plástico más oscuro, las gafas del cirujano japonés que me inyecta un extraño líquido verde, con eso no podré olvidar a mi amado Bakugo.

Rosa, púrpura, azul celeste, verde, rojo y azul en mi cuerpo lleno de heridas que se abren al oír la voz de Katsuki.

Desnudar las piernas en los periódicos con ojos tachados de marcador, y rayas en mi boca con el arma.

Deja que quede aquí en su manto de hierro oxidado o en la luz de una cruz de fuego, puedes dar luz en el odio donde siempre hubo romance.

Los policías limpian mis brazos de sus surcos, usada, desechada y no hagas que me vuelva perder. Escucha con atención mis tobillos... ¿Lo puedes oir?... piden más de tu ira, se sonrojan al verte con el cinturón.

Mis mejillas suavizarán tus puños en cuando los lagos de plástico se quede seco ¿No es así? Los ángeles son tan repugnantes que funden nerviosismo y miedo en los corazones de bellos demonios, que buscan a una persona para saciar sus vastas intenciones.

Siento que cada hora puede ser el cielo visto por unos ojos mentirosos, los hilos de mi rostros cierran una breve relación amada, mi razón puede ser múltiple de no dejarlo.

Pone su mano en esta boca sucia y labios holgazanes. Que me de escupitajos en mi nariz por tocar y salir sin su permiso, seré su mayor hazaña que nunca le haya pasado.

Buenos... Me despido.

¡Adios!

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro