Dylan'S

Abrí mis ojos y me estiré en la cama, para luego apagar la alarma. Froté mis ojos, y me levanté lentamente.

Aquí va de nuevo, otro día común y corriente.

Fui hasta el baño, lavé un poco mi cara, y peiné mi cabello ha un costado.

-¿¡Mamá?! ¿¡ya hiciste el desayuno?! - hice una mueca al ver que nadie contestaba - ¿mamá? - dije yendo hasta la escalera.

Me extrañé cuando vi la luz de la cocina encendida, y caminé lentamente hacia allí.

-¿Cami? ¿Nolan? - dije entrando, y encintrandome con el vacío mismo.

¿Donde fueron todos?

-Dylan...

Su voz hizo que se me erizaran los pelos de mi nuca, y me giré rápidamente tomando un cuchillo, que había a un costado de la mesada.

-¡Sal ya de aquí Jordan!

Éste rió fuertemente y alzó sus manos - ¿qué? ¿ahora no me dirás más papá? - se cruzó de brazos - fueron tus primeras palabras, papá - dijo mirándome fijamente.

Asentí lentamente - si, y también fueron mis últimas. Ahora sal de aquí, antes que...

-¿Llamar a la policía? - rió - por favor Dylan, sabes que me tienen miedo, así que no malgastes tu tiempo - un brillo recorrió sus ojos, y sacó un arma.

Abrí mis ojos sorprendido - ¿¡pero que haces?!

-Yo te quería, pero echaste todo a perder, yo... - y dicho eso, apretó el gatillo.

-¡No! ¡papá! - dije teniendo mi abdomen, de donde no para de brotar sangre.

Mis manos comenzaron a temblar, y me arrodillé en el suelo.

-No te preocupes, me haré cargo de tu madre y hermanos. Confía en mí...

-¡No! - grité cerrando mis ojos.

Elizabeth'S

Un empujón de Dylan, hizo que me despertara de golpe.

-Dios, Dylan deja de moverte - dije frotando su hombro.

Unos murmuros de su boca, me llamaron la atención y terminé por abrir mis ojos.

-¿Dylan? - me preocupé cuando vi su cuerpo tensarse - estas soñando, tranquilo - dije mientras acariciaba su cabeza.

-¡No! - dijo levantándose de golpe.

-¡Ya! Mira estas bien, tranquilo - lo tomé de los hombros y lo abracé - ya pasó, ya pasó.

-Él... me disparó y luego dijo... mi mamá y hermanos, y la sangre - dijo tocando su abdomen.

Alcé mis cejas - fue un sueño, mira no tienes nada - dije levantándole la remera - ¿quien te disparó?

Limpió la transpiración de su frente y suspiró profundo - papá.

Hice una mueca - Jordan - al repetir su nombre, un sabor amargó me invadió.

Dylan asintió rápidamente y su respiración se hizo cada vez más acelerada - estamos perdidos Eli, el tiene razón, el tiene razón - dijo mientras tomaba su cabeza.

Lo miré preocupada - ¿en qué?

-En que va a ganar, no podemos vencerlo - se abrazó en mi cintura y apoyó si cabeza en mi pecho.

Fruncí mi frente y lo tomé de la cara - oye, mírame - dije captando su atención - él no nos va a hacer nada, y si lo intenta, sabes que lo detendremos, como hemos echo siempre ¿recuerdas? No dejaremos que se salga con la suya, nunca.

Asintió lentamente - está bien, está bien - me dio un rápido beso en mis labios - gracias.

Le sonerí de costado y acomodé su cabellos todo alborotado, para luego darle un beso en la frente - si, ahora ve y preparame algo para comer, ¡que tenemos hambre! - dije tomando mi vientre y tirandome sobre él.

-Me están asfixiando - dijo suspirando profundo.

Reí por lo bajo - no, pero en serio ve. Tengo hambre - dije sentándome y cruzándome brazos.

Dylan sonrió - como usted lo desee.

Le tiré un beso en el aire, antes de que se fuera, y luego me paré al frente del espejo.

Hice una mueca, y me puse de costado levantando lentamente mi camisón (camisa de Dylan)

incliné mi espalda hacia atrás, e infle mi panza - ¿tan gorda me voy a poner? Dios.

-¿Qué haces? - dijo Nolan desde la puerta.

Tapé mi vientre y me senté en la cama - nada.

Nolan frincio su ceño - si, estabas haciendo algo - bajó sus ojitos al suelo - ¿crees que puedo hablarle?

Su pregunta me tomó por sorpresa y acentí lentamente - claro, ven.

Nolan se puso al lado mío, y me miró ilusionado colocando sus manitos sobre mi panza - hola pequeño ser que crece dentro de Eli, ¿como estás?

Sonreí de costado al ver tanta ternura.

-¿Que hacen? - dijo Cami apareciendo por la puerta.

-Shh, estoy teniendo una conversación ¿que no ves? - dijo Nolan rodando sus ojos.

-¡Yo también quiero! - chillo Cami, mientras corría al lado nuestro, y ponía sud manitos en mi vientre también.

Abrí mis ojos y reí al ver como actuaban - ¿saben? En éstos momentos tiene mucha hambre, y no creo que hable - dije sonriendo.

-Oh, yo sólo le quería decir que cuando sea grande le voy a prestar mis pinturas, y mi pijama de unicornio - dijo Cami mirándome con una inmensa sonrisa.

-Si es una niña, sino le prestaré mi pistola de agua y mi disfraz de batman - dijo Nolan arrugando su nariz.

Largué una pequeños risa al verlos tan emocionados - creo que ustedes dos, van a ser unos tíos increíbles.

Cami me miró con asco - ¿tío? ¿como nuestra tía Beatriz? - abrió sus ojos desesperada - ¡no quiero hacerme vieja todavía!

-¡No! - dijo Nolan cerrando sus ojos.

Largué una carcajada - no bobitos, no se van a hacer viejos. Hey, ustedes no conocen, pero hay muchos tíos jóvenes en el mundo - me crucé de brazos - no se preocupen.

-Como sea, lo siento más como un hermanito - dijo Cami jugando con sus manos.

Sonreí de costado y les acaricié sus cabellos.

-¡El desayuno! - gritó Dylan.

Abrí mis ojos y me levanté - a comer niños, ya ya ya, ¡vamos! - dije alzando mis manos.

Nolan me miró raro - si comes mucho, te saldrá un bebé gordo.

-Apoyo lo de Nolan - dijo Cami caminando detrás mío.

-Chist - dije bajando las escaleras, y yendo hasta la cocina.

-¿De que hablaban? - dijo Dylan poniendo la mesa y los platos.

Rodé mis ojos - cosas sin sentido - los pequeños en miraron serios - suposiciones - dije sonriendo.

Dylan asintió lentamente con la ceja levantada.

-Buen día amores - dijo Sara entrando en bata.

-Buen día mami - dijo Cami comiendo de su tostada.

-¿Como amanecieron? - se acercó hasta mi - ¿mi nieto? - sonrió - decir esas palabras me hacen sentir vieja.

Sonreí de costado - espere a que le llame abuela.

-¡Oh Dios! - dijo riendo al igual que todos, caminó hasta Dylan y lo tomó del mentón, para luego darle un beso en la frente - estoy muy feliz por ustedes, quiero que siempre la cuides cariño, y nunca la traiciones - dijo con una sonrisa nostálgica.

-Nunca le haría eso, a ninguno - dijo mirándonos a todos.

Hice una mueca y caminé hasta ellos, para luego darles un abrazo - hay que ser fuertes Sara.

Ésta largó un zolloso, pero luego se limpió rápidamente sus ojos - no quiero que me vean llorar más - rió levemente - no se que hubiera echo sin ustedes chicos.

Cami y Nolan fueron hasta su madre y la abrazaron de la cintura, junto a Dylan.

Me crucé de brazos y vi la escena con mucha ternura, mi mentón comenzó a temblar, Sara tiene suerte de tenerlos.

-Bueno - dijo alzando sus brazos - hablemos de otra cosa ¿si?

-Bueno - dijo Nolan - Cami rompió mi patineta.

-Igual tu ni la usabas - dijo la pequeña encogiéndose de hombros.

Sara bufó - Cami, ¿que dijimos de romper cosas?

Ésta abrió sus ojos enojada - ¡pero él me había roto una barbie! Y me vengue - dijo de brazos cruzados y mirando hacia otro lado.

Dylan alzó una ceja - Cami, tenemos que hablar serio sobre el tema de las venganzas.

Asentí rápidamente - no son buenas.

Cami me miró pensativa - ¿y la vez que te ayudé a ponerle plasticola a la almohada de Dylan? Dijiste que era venganza, porque él te había escondido el tarro de nutella.

Abrí mi boca sorprendida y luego mire de reojo a Dylan, y quien me está fulminando con la mirada.

-¡Ese día mi cabello tenía nudos y olía horrible! Y además - se cruzó de brazos - de todas maneras no me ibas a convidar nutella.

Lo miré enojada - ¡con eso no se juega! ¿¡sabes la desesperación que me agarró?! había pensado que había sido Nicholas - sonreí recordando - tenia una cara de asustado cuando comencé a perseguirlo por toda la casa - reí por lo bajo - no se cómo, pero terminó en el techo del vecino.

Dylan movió sus manos - si, me acuerdo. Ese día fui a ayudarte para bajarlo. Lo habías perseguido con una rasuradora.

Reí pero luego sacudí mi cabeza - bueno, pero eso no es el punto, niños la venganza no es buena.

Nolan se cruzo de brazos enojado - me confunden, Dylan tu una vez le habías...

-¡No importa! No se fijen en nosotros - dijo sonriendo nervioso - ustedes, no tienen que hacerlo más.

Alcé mis cejas - y nosotros tenemos que tratar de dejarla - dije asintiendo.

*¿A quién engaño? Amo el dulzor de la venganza*

Cami alzo su ceja - osea que nosotros no podemos vengarnos, ¿pero si ayudándolos a ustedes?

Sara nos miró atentos todo este tiempo mientras bebía de su café - mejor cambiemos otra vez de tema.

-Bueno - dijo Nolan - Cami rompió mi...

-Otro tema - dijo rápidamente Sara.

Gael'S

Rodé mis ojos por cuarta vez - Milo te dije que no hace falta ésto - dije sacando el cuchillo debajo de su almohada.

Éste me miro desesperado - pero ¿y si vuelven por mí?. No quiero volver a la correccional. Gael, habia hombres muy malos allí, que me golpeaban y se reían por mi debilidad. No quiero que me traten así nunca más. Tengo miedo.

Acaricié su cabeza - estas a salvo aquí, y no dejaré que nadie te haga daño ¿si?. Ni a ti, ni a tu hermana.

-Pero - dijo con sus ojos vidriosos - yo confesé, y dijeron que si hablaba, me iban a matar. Aun no se si estoy cien por ciento a salvo.

Sacudí mi cabeza - Fue hace dos meses Milo, y no ha pasado nada. Tranquilo - dije abrazandolo por los hombros - ahora duerme, lo necesitas.

Le di una suave sonrisa, y salí lentamente de la habitación cerrando la puerta a mis espaldas.

Suspiré profundo, y guardé el cuchillo en el cajón de la cocina.

-¿Y eso? ¿otra vez? - dijo Rosa detrás mío.

Cerré mis ojos y me giré hacia ella - aún esta muy traumado, pero lo va a superar. Necesita tiempo.

-Ay que hacerlo ver Gael. Está siempre a la defensiva, y muy alterado - dijo Rosa seria - no es el Milo de antes.

Me cruce de brazos - y no lo será - señalé la puerta de su habitación - ese niño pasó por mucho, y está tratando de sobrevivir a ello. Tenemos que ayudarlo, no ahogarlo. Lo último que necesita es que lo hagamos ver. Rosa, se va a sentir encerrado si le hacemos eso - suspire profundo - se le va a pasar con el tiempo.

Rosa se cruzo de brazos enojada - ¿y como sabes eso?

La miré de reojo - porque así lo supere yo, con el tiempo.

Ésta aflojó su postura y se me acercó - lo siento, yo no quise...

Alcé mi mano - no quiero hablar de ello - le sonerí para tranquilizarla.

Aunque no puede evitar sentir que un vacío me volvía a ahogar. Los recuerdos comenzaron a pegarme de lleno, y con un asentimiento, me encerré en el baño.

Mojé mi cara, suspiré profundo.

-Tranquilo Gael - me susurré a mi mismo.

Una lágrima rebelde se resbaló por mi mejilla. Y la limpié con furia. Fue hace cinco años, y no había pensado mas en ello, hasta ahora. Esos meses que estuve secuestrado con uno de mis compañeros, da bronca pensar que nos habían dicho que la misión seria sencilla.

Si con sencilla se referían haber estado siete meses en un sótano, comiendo pan y agua, no me hubiera quejado.

Cerré mis ojos cuando recordé el disparo, que fue directo a mi compañero, el cual murió en mis brazos.

Si, es por eso que a partir de ese día, decidí trabajar sólo.

Rosa tocó la puerta - ¿Gael? ¿estás bien? Bruno dice que quiere hablar contigo.

Sobé mi nariz y abrí la puerta de par en par, y tomé su celular.

-¿Si?

-Necesitamos vernos, ¿cuando puedes? - dijo Bruno.

Me encogí de hombros - mañana a la tarde.

-Genial, mañana en el parque central. Estarán Jake y Zed también.

-No hay problema, allí estaré - dicho eso corté.

-¿Que ocurre? - dijo Rosa con sus ojos abiertos.

-Nada, quieren hablar conmigo, mañana. ¿Tu...

-Tranquilo, estaré con Travis, y cuidaremos de Milo.

Asentí lentamente - bueno, me voy a dormir - dije rascando mi cabeza.

-Si, yo igual - frotó mi hombro - que descanses.

Le sonerí de costado - tu también.

Caminé hasta mi cama, y me acosté mirando fijamente el techo. Tengo la impresión de lo que me quieren hablar conmigo.