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Capitulo 9 El despertar de Jade


Dedicado a @DayanaSmith5     Y   @ValeriaMinLOL 

Pov Jade

Confieso que cada vez que escuchaba sobre esto, no entendía porque tenían que buscar una compañía para pasar este calor de acoplamiento. Pero hoy entiendo y comprendo la necesidad que desprende tu cuerpo, esas feromonas que atraen a otros hacia ti.

Cuando otro ramalazo de calor pasó por mi cuerpo, el gran hombre junto a mí se inclino para besarme. Sus labios se acoplaban con los míos como si fueron diseñados el uno para el otro, me deje llevar respondiéndole con la urgencia que corría por mis venas queriendo absorbe todo de él. Su aroma llenaba mis fosas nasales embobando mi sistema era como una especie de tranquilizantes. Deseo a Axell como nunca he deseado a ningún hombre, y esto me asusta demasiado.

Sus manos acariciaban mi cabello, mientras nuestros pechos se rozaban y provocaba una corriente de placer que llegaba a mi centro deseando sentirlo dentro de mí.

Su boca fue descendiendo hasta llegar a mis senos, el dolor menguaba convirtiéndose en placer cuando su toque y su boca hacían contacto con mi piel. Una de sus grandes manos amasaba mi seno izquierdo mientras su boca succionaba mi seno derecho, chupaba mi pezón que se tensaba en placer.

Sus escurridizas manos viajaron hasta mi centro, acaricio mis muslos mientras solo podía sentir lo que hacía en mí y no podía evitar los sonidos que se escapaban de mi boca. Sus dedos se engancharon en mis bragas haciendo presión rompiéndolas en el acto, sus movimientos me testificaban su estado sentía lo mismo que yo, aunque no se en que escala.

Con su pulgar froto mi eje húmedo y mojado, arquee mi espalda por el placer que sentí cuando acaricio mi clítoris. Su dedo se abrió paso comenzando una dulce tortura, otro se unió a la fiesta sentía cierta incomodidad pero luego el placer pulsaba dentro de mí.

- Quiero que sepas que no abra penetración. Solo te daré placer.

- Si, si sigue.- no entendí que me dijo pero que me importa con tal de que siga.

Todo pensamiento coherente murió cuando su habilidosa boca se poso en mi centro, comenzando una dulce agonía. Lamia y succionaba mi eje como si no hubiese un mañana, era demasiado intenso y todo mi cuerpo comenzaba a calentarse, una presión caliente se poso en mi bajo vientre como si comenzase a producirse un fuego que poco a poco fue expandiéndose hasta que explote desparramándome en la cama mientras succionaba esa sustancia cremosa que escurría.

Me sentía como que si hubiera corrido una maratón. Mi pecho subía y baja tratando de apoderarse del aire que tanto necesitaba en estos momentos. Cuando enfoque mi vista en el me di cuenta que su miembro estaba duro, intente ayudarlo pero detuvo mi avance.

- No, jade. Si me tocas no podre detenerme.

- Quien dijo que quiero que te detengas.

- Es lo mejor Jade. No creo que tengas mas efectos hasta más tarde.- dijo para salir dejándome sola, después de haberme dado un maravilloso orgasmo y sin poder devolverle el favor.

Estaba enojada con él y conmigo misma, está comprometido el tiene una mate y aquí estoy yo traicionando mis principios. Pero sobre todo estoy enojada porque quería mas, no, quiero mas y el no quiere lo mismo. Es que eres tonta el solo te ayude en lo que es tu primer calor del acoplamiento.

Siempre he escuchado que el primero es el peor, porque el dolor de follar es demasiado intenso en algunas ocasiones te deben sedar para que no sufras tanto. Y en uno de estos fue que mi madre marco a mi padre.

Lo que no entiendo que me hizo entrar en el calor del acoplamiento, si mi lado lobuno es muy débil. Ni siquiera puedo transformarme en loba, ni adquirir algunos rasgos solo ciertas habilidades, como la audición, olfato y esas cosas aunque no tan desarrollados como un lobo puro pero si mas que un humano.

Dejo de intentar encontrar una respuesta razonable, me ducho con agua fría para luego colocarme otra prenda para dormir. Esta vez no tengo que esperar mucho para recurrir al sueño.

Me despierto bañada en sudor, sintiendo los mismos efectos de anoche el inquietante calor, la presión en mi vagina, la humedad que empapa mis muslos y el punzante dolor de mis senos queriendo atención. Me pongo de pie y un mareo detiene mis pasos, me aferro a lo primero que encuentro todo mi cuerpo se siente pesado. Roce sin querer mi seno acción que desprendió de mis labios gemidos de placer y como Déjà vu Axell penetro a la habitación, aunque esta vez no tuve que rogarle me tomo en sus brazos.

- Rodéame la cintura con tus piernas.- hice lo que me pidió, me llevo al baño y dentro de la ducha abrió la llave. Me presiono en la pared mientras el agua nos empapaba, sus labios presionaron en mi cuello lamiendo y succionando esa área, mis jadeos eran incontenibles.

Estaba más deseosa que anoche y más receptiva con su toque, no podía poner un dedo en mí sin que estuviera gritando, jadeando o gimiendo su nombre. Solo de pensar que esto puede durar una semana o dos me lleva a excitarme más.

Mis caderas presionada con su cuerpo, podía sentir nuestras partes unidas separadas por mi bragas y su pantalón, aunque eso no era impedimento de que pudiera sentir su dureza. En mi nubla de deseo empecé a frotarme con su miembro, mientras su boca hallaba mi seno empezando a darle la atención que pedían todo esto me catapulto a un poderoso orgasmo que dreno todas mis fuerzas, gracias a la diosa que él me sostenía.

Fui consciente de su dulzura y amabilidad, me despojo de mi bata y mi braga se tomo el tiempo en ducharme. Gentilmente seco mi cuerpo y se dio a la tarea de vestirme.

- Debes descansar tu cuerpo necesita recuperar fuerzas.- beso mi frente cuando me deposito en la cama, arropó mi cuerpo con una sabana fina y salió dejándome tan confundido.

"Jade no caigas, Si que eres tonta, ya caí en su encanto"

Después de unos minutos apareció con una bandeja de comida y con otros pantalones pero deleitándome con su abdomen que me dan deseos de lamer sus biceps.

- Aquí tienes, te traje tu dosis de cafeína dijiste que no eres muy amable en las mañanas sin esa cosa negra.- sonrío porque el odia el café pero se tomo la molestia de prepararlo para mí. ¿Cómo no enamorarme si es tan dulce? Alguien que me dé el truco.- come tranquila iré a correr.

- Axell gracias.- digo apenada siendo consciente que estoy colorada sabiendo que él me ha visto desnuda, no tan solo eso su boca a estado ahí abajo.

- No tienes nada que agradecer, para mí no es un sacrificio. Quiero que sepas que te respeto y no me aprovechare de tu vulnerabilidad.- con esto salió antes de que pudiera pronunciar palabras coherentes.

- Esto es tan extraño.

***

Sonrío sintiéndome feliz después de un sueño reparador. Bajo la bandeja con los platos vacios, me percato de la hora y me sorprendo de cuanto he dormido. Me dispongo a lavarlos y pensar que cocinare. Decido hacer una lasaña ayer vi todos los ingredientes, y puedo hacer suficiente para que sea la cena también porque no sé si tenga fuerzas o esté en condiciones para cocinar mas tarde.

Seguí todos los pasos de la receta familiar que mi abuela me había enseñado, la coloco en el horno justo en el mismo instante que mi celular suena.

En la pantalla en letras grandes aparecía el nombre de mi tía, suspiro antes de tomarlo

- Hola mi princesa.- su estridente voz sale por el altavoz.

- Tía qué bueno que llamas, por fin te dignaste a devolverme la llamada. Aunque siendo tu no lo haría hasta que tuviera una excusa viable.- todo mi enojo se desborda en el tono que empleo.

- Ay pero sí que está enojada mi princesita ¿Por qué razón?

- ¿¡En serio me preguntas eso!?

- Pero es que no...

- Tía dime ahora mismo que pretenden ustedes o de lo contrario hablare esto con mi tío. No lo he hecho porque te amo, pero si no me cuentas la verdad tendré que hacerlo. – su silencio ensordecedor llena la línea.- ¿te imaginas si mi tío se entera que dejaste su sobrina preferida en una cabaña con un hombre lobo en celo?- odio tener que recurrir a esto pero necesito saber que traman.

- En serio serias capaz de eso Jade.- no me gusta discutir con mi tía, se cuando se enoja y en este momento lo está porque me llamo por mi nombre sin decirme el apelativo que me ha dado "princesa"

- Quiero saber no me gusta estar en la ignorancia.

- Está bien te diré. No nos gusta la mate de Axell, vimos el interés que tiene por ti y actuamos a consecuencia.

- ¡Por la diosa tía!- exclamo sorprendida. ¿A caso juegan a ser la diosa luna? Ya tiene una mate destinada, infiernos. ¿Te hubieras sentido bien si tu padre no había aceptado a mi tío y te lleva a estar sola con otro hombre que no es tu mate en el calor del acoplamiento?

- Jade dime que no sientes nada por él y te juro convenceré a mi cuñada y mi hermana de desistir de esta estupidez.

- Te juro tía que no siento nada por Axell.

- Eso ni tú misma te lo crees.

- Crees lo que quieras tía. Adiós.

- Adiós princesa.- cuelgo después de la despedida.

Todo esto es demasiado. Cuando mi tío se entere se va a cabrear, aunque si ha de enterarse no será de mi parte. No quiero que sufran y se digan cosas en el calor del enojo.

Axell

Todo se está saliendo de control, me siento frustrado cuando las cosas no salen como quisiera. No me arrepiento de tocar a mi luna, lo que hubiera deseado que todo fuera diferente.

Siento como si me estuviese aprovechando de ella.

Nunca había olido un aroma que me llamara y me hipnotizara como el suyo. Nunca había experimentado un deseo tan grande, estuve a punto de reventar mis pantalones por la excitación. Nunca había pensado que tocar a alguien fuera tan especial, que sintieras tanto placer al tocarla, al sentirla tuya, al besar su cuerpo, al observar su mirada perdida de placer.

Tuve que luchar con toda mis fuerzas para no poseerla como quiero. Anoche casi pierdo la fuerza de voluntad, casi cedía a la tentación de sus curvas, de ella. y esta mañana, el roce de nuestros cuerpos y el choque de nuestras partes debilitaron el muro que había levantado para no ceder. Solo que al ver su delicado rostro, y ver su confianza en mi trajo de vuelta la conciencia y mi propósito.

En ese momento se trataba de ella, no de mí. Siempre pondré su necesidad, su bienestar, su salud por encima de la mía. La diosa luna me confío una piedra preciosa para que aprecie su valor y para que mantenga su luz. Soy consciente que ella puede brillar conmigo o sin mi yo no soy esa luz que la hace iluminar, esa luz cohabita dentro de ella.

Suspiro dándome cuenta que no podremos evitar caer en las redes del acoplamiento, su cuerpo me llama como se que el mío llama el suyo. Y es que estoy casi seguro que fue mi lado lobuno que despertó sus instintos de loba y la empujo al calor. Recuerdo vagamente una clase donde el profesor dijo que cuando un mestizo o alguien que tenga rasgos débiles si encuentra su mate este pueden despertar sus instintos, que ese lado lobuno reconoce a su mate aunque la persona no sea capaz de reconocerla.

Sé que por lo débil de su lado lobuno ella no me reconoce como su mate, pero mientras más se vea envuelta en el calor sus instintos se fortalecerán.

Vuelvo a la cabaña, no sin antes vestirme después de auto complacerme. He estado la tarde completa en el bosque, salvaguardando la distancia para no caer. El olor a lasaña invade mis sentidos. Como siempre que llego encuentro la mesa lista.

- Qué bueno que llegaste. Puedes sentarte. Tuve que calentarla no llegaste a comer.

- Huele delicioso.- le digo mientras ella rehúye mi mirada, debe estar avergonzada por lo que hemos hecho. Un gruñido de frustración sale de mí, mi lobo está dolido por la situación.

Su cara espantada me escudriña. Se sienta a mi lado, comenzamos a comer por primera vez en silencio. Hay una tensión en el aire, se siente incomodo todo. Cuando termina de comer se retira a su habitación, sería un mentiroso si digo que no me afecta. Me duele sobremanera su comportamiento, me siento rechazado.

Una vez termine de comer y lave los platos, desanimado subí a mi habitación hasta el deseo se me había pasmado. Pero sé que se activara hasta que vuelva su deseo.

Aunque tampoco fue como que hice mucho para sacarle conversación. Trato de animarme de alguna manera. Me despojo de mi ropa y me voy a duchar.

Coloco shampoo en mis manos y comienzo a fritarlo en mi cabeza, voy a despejar la espuma con el agua cierro mis ojos cuando escurre por mi cuerpo. Es cuando escucho su voz dulce que endurece mi cuerpo para ella.

Siento sus manos en mi espalda.- Axell, volvió. Cada vez es más fuerte.- logra articular entre jadeos.

Di la vuelta encontrándome con una Jade desnuda ante mí, un charco de ropa se encontraba a un lado. La alce en mis brazos sin tener que pedirle que envuelva sus piernas en mi cadera, lo hizo automáticamente. Dejo que mis labios y mis manos vuelvan a conocer el cuerpo de mi luna.

Mientras ella gritaba y gemía mi nombre, lo que me encendía más. Sus manos recorrieron desde mi cabello, mi cuello y mi espalda sosteniéndose allí clavándome las uñas cuando succione más fuerte su seno. Mi mano fue a parar a sus muslos donde los apreté y recorrí su trasero sosteniéndola mejor. Sus manos volvieron a mi cuello aproveché para llevar mi otra mano hacia su clítoris donde pude apreciar lo húmeda que estaba, su deseo floreciente por mí.

Me estaba costando todo mi mayor esfuerzo hasta que sus palabras y acciones me rompieron.

- Axell por favor hazme tuya.- dijo entrecortadamente mientras su boca lamia y mordía mi cuello para luego dirigirse al lóbulo de mi oreja.- por favor.

- No quiero...

- Olvídate de tu maldita moral y solo siente y deja que te sienta en mí.

- No quiero hacerte daño Jade.

- No lo harás, confío en ti.

- Pero eres.

- ¿Y? todos en algún momento lo fueron, te juro Axell que si no lo haces encontrare alguien que lo haga.- mi lobo aruño en mi pecho intentando tomar el control para hacer lo que su hembra exigía.

- Si es lo que quieres.

- Claro que es lo que quiero.- me beso con toda la ansias que poseía, y me deje llevar.

Cerré la llave y nos saque de la ducha, aun mojados y empapados nos deposite en la cama. Seguí poseyendo su boca, mi lengua jugaba con la suya. Mis manos recorrían su cuerpo, mis dedos redescubrieron otra vez el camino a su centro aparto su boca de la mía para gemir.

-Por favor, ya no puedo más.- grita mientras el éxtasis la recorre.

Beso para acallar sus gritos, cuando siento que está preparada me posicione en su entrada empujando suavemente dentro de ella. Sentí su incomodidad, su estrechez envolvió mi eje bese sus labios tratando de distraerla. Continúe hasta que sentí que la capa fue rota, su cara de dolor me incito a besar sus labios, su nariz a cada parte de su rostro.

Acaricie su sedoso cabello, sus piernas se engancharon otra vez a mi cintura y el vaivén de nuestros cuerpos empezaron a crear sonidos indescriptibles, nuestros movimientos era una pura coreografía sexual creada para complacer los cuerpos hambrientos de deseos de dos amantes capaces de sentir amor.

Todo lo que podía ver esa su rostro consumiéndose en el puro placer, esa sensación de ser el primero expandió mi pecho y la resolución de ser el único lleno mi ser de una determinada fuerza.

Se corrió gritando mí nombre esa emoción de sentirla y escuchar mi nombre de sus labios sello mi destino, derrame mi semilla dentro de ella marcándola con mi olor.

Nuestros cuerpos sudorosos yacían en la cama, me incorpore para no aplastarla con mi peso nos moví de manera que ella estuviera tan cerca de mí como fuese posible. Su agitada respiración chocaba en mi pecho, su mano acariciaba mis abdominales y sentí mientras desplegaba su sonrisa.

Mis manos no querían dejarla ir, agarraba su cintura y acariciaba su cabello, suspiro relajados salían de sus labios y pude sentir como su respiración se iba normalizando mientras se quedaba dormida.

Aproveche cada momento, intente robarle algunos suspiros y caricias al tiempo tratando de enviciar su cuerpo con mis toques que siempre desee estar abrazada a mí. Sé que mi plan ha sufrido algunos cambios, pero no su resultado final. No me importa que haya desbaratado mi itinerario para conquistarla, que nos hayamos saltado citas, besos robados debajo de la luna o del sol, que aun no le he pedido que acepte ser mi mujer si al final ella va a estar conmigo.

Nada debe cambiar, voy a seguir conquistando su corazón. Esas citas, esos besos y esa conversación que nos debemos a sinceridad aun hay tiempos para esos detalles.

Siento una plenitud recorrer mi cuerpo, me siento totalmente completo. Todo gracias a la mujer que yace a mi costado. Beso su cabeza y dejo que mi mente siga el curso de mis pensamientos, esas imágenes de un futuro me desbordan, cierro mis ojos para verlos con más claridad.

***

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CelesteFer

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