Capitulo 24 Preparativos de la boda
Jade
Dicen que el día más importante de una mujer es el día de su boda, pero no sé qué hay de malo en mí. Cada día que se acerca más estoy menos ilusionada. Sí, quiero casarme con Axell, pero no me ilusiona la ceremonia.
Axell últimamente se la pasa de aquí al territorio de Surtdamm ayudando a Luc a adaptarse. Sé que para él es difícil tomar un poco de distancia, si toda su vida ha pensado y trabajado de manera conjunta será una transición un tanto difícil para ambos. Pero sé que lo lograran.
Termino de medirme un vestido pero no me encuentro con él, las personas que están conmigo se lo encuentran el vestido perfecto. Lo siento demasiado elaborado para mi gusto, al pasar para el vestidor veo el vestido que me gusta pero que según mi tía es muy sencillo por lo que no es apto para una princesa.
Y es que de esta forma se ha reducido mi boda, todo es cuidadosamente elaborado por mi tía y su hermana, la única que vive incluyéndome en los asuntos es mi suegra. Me siento como una muñeca que pretenden vestir, y alguien equis que no puede opinar mucho respeto a su boda.
Si aun no la mando a volar es porque no quiero hacerlas sentir mal, pero me siento asfixiada. Y una idea loca recorre mis pensamientos.
Cuando salgo me percato que ya mi tía ha pagado por el "vestido perfecto", sin duda ese es el que voy a usar.
- Te sientes bien querida?- mi suegra me saca de mis pensamientos.
- Sí, estoy bien.- le miento y por su mirada sabe que no es cierto.
- ¿Por qué no las mandas al diablo?
- Uhh.- su pregunta me descoloca.
- Sabes de que hablo. Ellas están preparando todo sin pedir tu opinión, y aquí la única opinión que debería contar es la tuya.
- Ella no lo hacen por mal.
- Lo sé, y no digo eso. pero no te veo ese brillo de las novias en camino al altar. Aquí lo que importa es tu felicidad y la de Axell, que importa que seas una princesa no tienes que seguir el protocolo si no lo deseas.
- No se me hace justo que...
- Justo? Esto no es justo. Si dejas que ellas te armen la boda como ellas quieren, toda tu vida tendrás esa espinita en tu corazón de ¿por qué no hable? Tenía que rebelarme y hacer lo que quería. Tu eres la protagonista, no ellas. Ya tuvieron su momento, ahora les toca a ustedes.
- He intentado hablar con mi tía, pero no me escucha.
- Pégale dos gritos y veras que funciona. Te confesare algo, yo siento que tu tía hace esto porque a ella no se le dio a elegir, tu abuelo organizo todo porque era al único hijo que vería casándose y quería lo mejor. Ahora siento que esta frustrada en hacer una boda como ella quería, pero no tienes que pasar lo mismo.- suspira.- te apoyare si decides que sea una ceremonia familiar, o si quieres escaparte. Y ese vestido que tanto te gusto, yo te lo regalare.
- No sé qué decir.
- Solo que pensara en lo que te he dicho. Estoy de tu lado.
- Gracias.
- No tienes que agradecer, muy pronto serás oficialmente mi hija. Porque así te miro.- me abalance a abrazarla, sus palabras me llenaron de fuerza y me hicieron llorar.- Vámonos antes que nos maten.
Llegamos al territorio con el parloteo de mi tía, quien no paraba de decir todas las cosas que estaba viendo para la boda. Cuando llegamos me fui directo a mi habitación, pasando por el umbral de la puerta escuche el agua de la ducha cesando.
Me senté en la cama esperando que Axell saliera, se acerco a mi depositando un beso en las comisuras de mis labios. Aun con su toalla amarrada a su cintura.
- ¿Sucedió algo amor?- cuando termina su pregunta lo miro con mis ojos aguados.- ¿te pasa algo? Cariño.
- Es que ya no aguanto Axell.- su ceño fruncido me daba a entender que no sabía de lo que hablaba.- toda esta situación de la boda...
- ¿No quieres seguir en pie con los planes de la boda?
- No es eso amor. Es que ninguno de los dos figuramos en la organización, nuestra opinión no es tomada en cuenta. Y eso me molesta, ni siquiera puedo elegir el vestido que quiero.
Se sienta a mi lado en la cama.- ¿Por qué no me lo dijiste antes? Pensaba que habías delegado esa función a mis tías.
- No, ellas tomaron la iniciativa al principio pensaba que solo serian orientaciones. Pero no, me han desplazado de todo.
- ¿Por qué no le dices como te sientes?
- Es que no quiero que se ofendan.
- No tienen por qué. Es nuestra boda, ya habíamos hablado como queríamos nuestra boda.
- Sí, pero poco a poco fueron tomando el control. Al principio pensaba que solo serian orientaciones, porque ya ellas se han casado y yo no sé mucho sobre esto pero ahora hasta de mi vestuario se han hecho cargo.
- Debes decirles.
- No puedo no quiero herir a mi tía, ella no tuvo voz ni voto en su boda y...- la interrumpo.
- Igual que pasara contigo sino le haces un stop. Y si no lo haces tú lo hare yo y no seré condescendiente.
- No, yo hablare con ellas.
- Yo solo quiero lo mejor para ti.
- Lo sé amor.- me beso para ir a ponerse ropa, mientras me infundía animo para darle una charla a mi tía sobre cómo me siento.
Cuando estaba bajando me encontré como mi tía que iba subiendo las escaleras.
- Quería hablar contigo Jade.
- Yo también.
- Antes que nada, perdón. Me he comportado muy mal, no te he permitido organizar tu boda. Idaira me conto de lo mal que se te ve, no quiero eso mi vida. ¿Por qué no me lo dijiste?
- Porque no quería herirte.
- No lo ibas hacer. Pero ¿qué tal si empezamos de nuevo?
- Está bien
- Pero hay que apurarnos quedan pocos días para la boda.
-Está bien tía.
En toda la tarde lo único que hicimos fue reorganizar la boda como Axell y yo la queríamos, sería una ceremonia intima donde solo serian participes nuestra familia. Ya más adelante haríamos una fiesta donde celebraríamos nuestra unión con toda la manada, y esa fiesta si permitiría que la organizara mi tía a su gusto.
Axell
Estos días han sido muy estresantes para mí, no sabía que mi luna estaba triste por los preparativos de la boda. Si, la notaba triste pero cuando le preguntaba siempre tenía alguna razón.
Cuando me acerque al jardín, me percate que todo había vuelto a su cauce y ese brillo volvió a adornar los ojos verdes de mi preciosa luna.
Salí del territorio para ir a visitar a Luc, quien ya se había mudado hace dos días a su nuevo territorio. Nunca imagine que después de mi cumpleaños número 22 mi vida daría un giro de 360 grados. Ahora tengo a mi mate y mi gemelo será el nuevo alfa pero de otra manada.
Estoy feliz por él, porque si pensaron en él como el mejor candidato para este puesto, es por todas sus características.
Llego a la nueva casa de mi hermano, quien construyo desde cero. Porque él se rehusaba a vivir en la misma cuatro paredes que lo hizo Michael, y esa casa está siendo restaurada para ser una oficina.
- Hola Luc.
- Hola hermano. ¿Viniste a ayudarme?
- Me ofende la pregunta, si casi vivo aquí ayudándote.
- Si claro.
- Aunque vine para que vayas conmigo a comprar el traje.
- Qué bueno que me acuerdas eso, tenía muy lejos esa boda.
- Solo espero que no se te olvide y...
- Axell- escucho la voz de una joven llamarme, cuando la miro.- ¿podemos hablar un momento?- dice Kendra mientras mi hermano se excusa y se va.
- Sí, claro.- le señalo una silla donde toma asiento, su actitud denota nerviosismo.- y ¿de qué querías hablar?
- Quiero dejar claro algunas cosas.
- Adelante.- le animo al ver que se queda callada.
- No sé si te molesta, porque...
- No, tranquila es necesario que le demos un cierre a nuestra historia.
- Si, y eso es lo que quiero. Yo no tuve nada que ver con el hechizo, cuando viniste hablar con mi familia me sorprendí que tuviera tanta suerte. Y te vi como un escape, no sentía esa atracción a pesar de que eres atractivo. Pero no movías nada en mí.
- Yo...
- Deja terminar por favor. En esta manada no he encontrado alguien que me agrade, todos se creen y le han inculcado que las mujeres somos objetos para decorar su casa. Viví con un seguidor a muerte de el alfa y no quería eso para mí. Y por eso me alegre cuando dijiste que era tu mate.
- Lo siento.
- No, no fue tu culpa. Sentí un alivio cuando pude testificar contra ellos, siempre espere un momento como ese y por fin se me hizo. Eres un buen hombre y seguiste tu corazón, bien acertado al terminar conmigo para estar con tu verdadera mate. Y espero de corazón que seas feliz.
- Gracias Kendra. Yo no quería jugar con ninguna de las dos, mis instintos se volvían locos cuando tenía a Jade a mi lado y por eso decidí cortar antes de involucrarme con ella. Y tu nivel de madurez me sorprendió, si hubiese sido otra no lo hubiese tomado como tú. Yo también espero seas feliz y encuentres a tu mate.
- Gracias Axell, ¿puedo darte un abrazo?
- Claro que si.- nos pusimos en pie y nos abrazamos. Se separo y se fue.
Ahora siento que respiro mejor, ya he cerrado completamente ese ciclo. Qué bueno que vino hablar, ahora se lo necesario que era. Es una joven que merece ser feliz y sé que la diosa la premiara por ser tan comprensible y a fin de cuentas ella fue otra víctima más de esos tres desaprensivos.
CelesteFer✍
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro