35: sangre y furia
Zeldris y Akemi por fin ya estaban reconciliados, el peli-negro no dejaba de hacer sonrojar a la chica con las cosas que le decía o le hacía, pero la preocupación de Akemi de saber cómo se encontraban sus amigos fue muy grande, así que le pregunto a Zeldris que había pasado cuando fue secuestrada.
-en estos momentos no tengo idea de cómo se encuentren- comentó Zeldris -la idea era que los pecados pelearán con el rey dragón y yo fuera para rescatarte-
-los 7 pecados capitales lo enfrentaron?- preguntó la chica a lo que Zeldris asintió -crees que están bien?- lo mira preocupada
-puede ser, pero tenemos que ir con ellos o por lo menos con Merlin, ella se encargaría de tomar tu poder para devolvértelo- mientras se levantaba del suelo -pero no estoy seguro de que vayamos ahora mismo- dijo pensativo
-de que hablas? Hay que ir ya- se levanta la peli-azul
-tu herida aún no a sanado y siendo una humana eres muy delicada- dijo con firmeza el verdugo
-oye! No soy delicada- lo mira haciendo un puchero
Zeldris camino hacia a ella quedando frente a frente, Akemi lo miró confundida por desconocer sus intenciones, el verdugo toco el centro de su herida a lo que Akemi se estremeció de dolor.
-ay! Eso duele!!- lo mira con enojo
-ves? Lo mejor será que tu herida cierre- comentó el verdugo
-pero quiero ir con mis amigos ya- se cruza de brazos y desvía la mirada haciendo un puchero
Después de que Akemi insistiera tanto para que fueran de inmediato, el verdugo terminó por acceder pero se irían cuando él sol caiga para no ser vistos por los demonios.
La noche callo, era la hora perfecta para partir, Zeldris mantenía a Akemi en brazos para irse volando, ningún demonio los descubrió, cuando dieron vuelo, Akemi miro el reino de Camelot casi destruido por los demonios, le preocupaba Arthur, temía que algo le fuera a pasar, el peli-negro pudo notar la preocupación de la chica a lo que le fastidio un poco pero decidió dejar sus celos aún lado.
-tranquila, veras que todo estará bien- dijo con tranquilidad sin mirarla
La chica lo miro y después sonrío con delicadeza, rodeó el cuello del demonio para frotar su mejilla con la de él causando un leve sonrojó en las mejillas del verdugo.
No muy lejos de ahí, los pecados capitales se encontraban frente al rey dragón quien estaba encerrado en el Perfect Cube de Merlin, el rey estaba inconsciente y muy mal herido, pues su poder no era lo suficientemente fuerte para derrotar a los pecados capitales. Merlin estaba pensando en una forma de quitarle el poder de Akemi, tenía que pensarlo rápido aprovechando que estando inconsciente sería más sencillo arrebatarle el poder.
-oye, y si lo matamos?- preguntó Ban mirando a sus compañeros -estoy aburrido~- se queja alzando su mirada
-deja de quejarte tenemos que estar alertas por si despierta- lo regaña Hawk
-ay maestro, pero que no ves que no es rival para nosotros? Además gracias a Escanor un solo golpe lo noquea- comentó el zorro
-siempre y cuando no despierte en este momento- comentó el rubio mirando al león del orgullo en su forma débil -acaba de oscurecer-
-ha-hay posibilidades de que despierte ahora?- preguntó asustado Escanor
-si se despierta estará muy enojado y desatara su ira contra nosotros!!- comentó muy asustado Kazuki
-Ka-Kazuki-dono n-no diga eso!- se asusta más
-con el escándalo que tienen si despertara!- los mira con fastidio la gigante
-Merlin-sama, ya sabes cómo recuperar el poder de Akemi?- preguntó Elizabeth mirando a la maga
-si, pero para eso Akemi deberá estar presente- comentó Merlin
-creen que Zeldris la aya encontrado?- preguntó Elaine preocupada
-ese bueno para nada solo le dará dolor a la pobre de Akemi-chan!-ante ese comentario, Kazuki recibió una patada del verdugo siendo lanzado lejos
-cuida tus palabras- dijo con fastidio
-Akemi! Estás bien!- Elizabeth, Elaine y Diane la miran con gran alivia
-chicas!- les sonríe con alegría
La peli-azul se separó del demonio para dirigirse a sus amigas y abrazarlas.
-dejen los saludos para después- interrumpió Merlin -será mejor que te prepares para recuperar tu poder Akemi- le dedica una sonrisa a la chica
-v-vale, estoy lista- dijo decidida
Los presentes retrocedieron por órdenes de Merlin, y empezó hacer su trabajo, el cuerpo del Takemaro empezó a rodearlo una llama indicando el poder de Akemi, lentamente esta se extendió al cuerpo de la chica, al tener contacto la llama empezó adentrarse poco a poco en el cuerpo de Akemi. Pero los ojos del dragón se abrieron de repente, soltó un gran rugido y trató de liberarse del perfect cube, gracias a su despertar la conexión fue cortada impidiendo que Akemi siguiera recibiendo su poder.
La chica se encontraba en el suelo mareada por el repentino suceso, Zeldris la sostuvo de los hombros mientras mantenía la vista en el rey dragón.
-que lastima despertó, a menos que esté lo suficientemente débil podré seguir- dijo la maga mientras ponía sus manos en su cintura
-no puede quitárselo al instante?- preguntó Akemi recordando cómo Estarossa logró arrebatarle su poder con solo tocar su frente
-solo si tengo contacto con el, pero si me acerco me matará- bajo la mirada con los ojos cerrados manteniendo una actitud despreocupada
-sate sate sate, pelearemos con el para dejarlo inconsciente entonces- comentó el capitán
-eso me parece bien! A pelear!- dijo Ban sacando su tesoro sagrado
Una presencia se apareció entre los pecados capitales, encima del perfect cube se encontraba Estarossa quien tenía la misma sonrisa de siempre. Los presentes se sorprendieron al verlo, Zeldris se posición frente a Akemi de forma protectora.
-acaso no has aprendido?!- grita el verdugo mirándolo con un gran enojo
Estarossa soltó una pequeña risa, de repente Merlin sintió un gran dolor en su cuerpo, de la nada aparecieron heridas graves por el dolor que no podía controlar se destruyo el perfect cube, el rey dragón fue liberado y no dudo dos veces para lanzarse al ataque.
Meliodas, Zeldris, Ban peleaban contra Estarossa y el resto contra Takemaru, Elizabeth y Escanor ayudaron a Merlin para retirarse a un lugar seguro junto con Hawk, Kazuki , Akemi y Elaine. Akemi dejó de correr y miro a Zeldris, estaba preocupada por el pero parecía que tenía bajo control todo.
Pero algo andaba mal, Takemaro llamaba la atención de Meliodas y Ban, Estarossa y Zeldris peleaban sin parar.
El verdugo recibió un golpe de Estarossa apartándolo, este intento seguir con la pelea pero una materia oscura le impidió moverse, Melascula apareció detrás de él un poco alejada. Meliodas intentó ayudarlo pero Takemaro se lo impedía.
-e-estaba planeado- dijo Merlin con debilidad al ver la situación -Estarossa quiere acabar con Zeldris-
Akemi asustada y preocupada buscó con la mirada a sus amigos para que pudieran ayudarlo pero ellos estaban mal heridos y el rey dragón no los dejaba acercarse.
Un gran grito de dolor se escuchó, la peli-azul miro como Zeldris fue atravesado por una de las 7 espadas que Estarossa invocó, Zeldris no podía liberarse por el tremendo dolor de que uno de sus corazones fueran destruidos, el resto de las espadas apuntaban a las partes donde se encontraban los demás corazones.
-me decepcionas Zeldris, traicionaste a tu propia sangre por una simple mujer- dijo con frialdad -... siempre... siempre es una mujer- frunció el ceño con enojo
Las espadas fueron lanzadas a gran velocidad hacia el verdugo, Zeldris se paralizó por completo al igual que el resto de los pecados, no podían creer lo que avía pasado.
-Akemi- pronunció el verdugo
Akemi estaba abrazando a Zeldris cubriéndolo con su cuerpo, las espadas estaban atravesadas en la espalda de la chica. Akemi alzó su mirada con debilidad manteniendo una débil sonrisa.
-Z-Zel-dris.. e-estas bien?- preguntó con esfuerzo mirando el rostro del demonio con gran alivio de ver que seguía con vida
-idiota! Por qué lo hiciste?!- grito con sus ojos cristalizados
-t-tu siempre me salvas... e-era mi... turno-
El agarre que los mantenía juntos se fue debilitando, el cuerpo de Akemi callo al suelo mientras que unas últimas lágrimas salieron de sus ojos después de ser cerrados antes de tocar el suelo. Los puños del verdugo se apretaron con tanta fuerza al grado de temblar y que se hiera con sus uñas, sus ojos estaban fijados en el cuerpo de su amada, las 6 espadas atravesando su espalda, la sangre que se escapaba por sus heridas y el rostro pálido con unas cuantas lagrimas en sus mejillas.
-que más da, tenía pensado matarla después de todo- dijo Estarossa con frialdad
-A-Akemi- habló Diane con la voz quebrada mientras que varias lágrimas recorrían sus mejillas al ver a su amiga en ese estado
-era de esperarse- comentó el rey dragón -alguien tan inservible como ella terminaría muriendo por un sentimiento tan estupido-
-malditos-
Las enormes alas de Takemaro fueron cortadas por un rápido movimiento de espada causando un grito de dolor de parte del dragón, Melascula notó que el verdugo que mantenía atrapado en su materia oscura no estaba, Estarossa miro detrás de su hombro y vio al demonio peli-negro cargando el cuerpo de su amada, aferrándola a su cuerpo.
Las lágrimas callejón en el rostro de Akemi, una materia oscura empezó a rodear el cuerpo del verdugo, un enorme poder se pudo percibir, los ojos oscuros miraron a Estarossa, la marca demoníaca empezó a extenderse por su frente y mejilla, un terrible escalofrío se apareció en el mandamiento del amor.
-lo pagaras con tu vida-
Espere tanto tiempo para poner esto XD..............
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