Habían pasado dos meses desde aquella trágica batalla en la que el sujeto conocido como "Muerte" causó una masacre que terminó por eliminar a la mitad de las fuerzas sublevadas. Desde aquél entonces, los rebeldes comenzaron a cambiar de estrategias para recuperar el terreno perdido, por lo que comenzaron a reclutar a más ciudadanos para recuperar su país. La estrategia funcionó parcialmente, ya que los sublevados lograron reconquistar varios pueblos y ciudades que fueron ocupados por el enemigo soviético; sin embargo, faltaría mucho por hacer, ya que la mayor parte del territorio norteamericano seguía siendo ocupado por los rusos.

La sorpresa del lado enemigo fue aún más grande: Las fuerzas del Ejército Rojo y sus aliados del Bloque del Este, que eran muy superiores en número y equipo a los rebeldes anti-comunistas, habían perdido a dos terceras partes de sus hombres, lo cual pondría a los comunistas y a los sublevados en un nivel "parejo" (por así decirlo), y así pelearían al mismo nivel; lo cual era, en realidad, una estrategia de Muerte y sus aliados, para reajustar la situación.

Mientras, en Los Ángeles (una de las ciudades devastadas por Muerte), se encontraba uno de los perros de rescate escarbando cerca de unos escombros en lo que alguna vez fue una escuela. Este perro tenía un aspecto un tanto singular a otros, ya que tenía un pelaje de color morado con orejas color verde claro. Lo más peculiar es que este perro podía hablar, así que serviría de ayuda para encontrar gente perdida. Ese perro se llamaba Spike.

- ¡Eso Spike, sigue escarbando! - dijo uno de los rescatadores.

- ¡Wofh Wofh! Por supuesto que si ¡Wofh Wofh! - responde Spike.

En eso, Spike encuentra señales de vida de personas sobrevivientes, para después encontrar gente sepultada, pero viva en los escombros de edificios caídos. A Spike le felicitan para luego llevarlo a la base donde recibe una condecoración por haber encontrado la mayor cantidad de personas. La mayoría de esas personas eran asiáticos que habían combatido junto a los rusos durante la invasión a E.U.A., en 1989. De entre ellos habían chinos, mongoles, coreanos, vietnamitas, camboyanos, laosianos y hasta alguno que otro nipón integrante del denominado "Ejército Rojo Japonés".

Cuando Spike va a dormir, empieza a soñar con todo lo que pasó durante el ataque de Muerte a la ciudad de Los Angeles: Prácticamente fue una batalla en donde los soldados (tanto ocupantes como resistentes) trataban de dispararle a Sawing pero éste sacaba fuego por la boca, a modo de ráfaga que quemaba todo a su paso. Muchos soldados fueron incinerados bajo un ardiente escenario de dolor y terror absoluto. El perro morado se encuentra con Sawing, pero este hace nada. Spike le gruñe y se pone en pose para atacar mas desaparece. No obstante, todo resultó ser un sueño terrible para Spike.

- ¡Spike! - le contesta Twilight - ¿Está bien? -

Spike se despierta repentinamente y le contesta: - Sí, estoy bien. Sólo tuve una pesadilla. -

- No tengo duda, nuestras fuerzas ahora están equilibradas. - pensó Twilight.

Mientras tanto, en las costas de Malibú, una tripulación naval soviética llega con aviones y helicópteros VTOL para su asalto. Un hombre solitario, que no estaba participando en el asalto, se limitó a quedarse con los brazos cruzados. Era el capitán Serguéi Mager, era un hombre algo intimidante, a pesar de que rondaba los cincuenta. Su unidad de combate, formada en su mayoría por estadounidenses adoctrinados, habían demostrado ser buenos en algo y habían dado victorias rápidas y contundentes. Y ahora era su turno de agregar otra victoria más a su lista.

Tanto los estadounidenses como los rusos que estaban bajo su dirección, sabían que debían ocupar la ciudad, ahora que se había quedado en ruinas, por lo que no había mucha duda de que los sublevados no podían vencerlo después de que tuviera éxito en su misión. Sus pensamientos fueron interrumpidos por un oficial que se acercaba a él y lo saludó, ya que conocía bien al hombre.

- Tranquilo, camarada comandante. - el capitán le habló a su amigo.

- Capitán, todos los vehículos están listos y lanzaremos el asalto en cuestión de minutos. -

El Capitán asintió con la cabeza y dijo: -Bien. Vamos a ver este espectáculo en el camino. -

Cuando el vuelo de los setenta y cinco aviones sobrevoló la ciudad, el teniente Iván Averin revisó su rifle por última vez cuando se abrió la puerta lateral, así como también la puerta de carga trasera del avión. Cuando la luz sobre la puerta se volvió verde, Iván fue el primero en salir. Fue seguido rápidamente por otros paracaidistas, así como por varios tanques BMD y BTR. A los jets de apoyo de aire cercano se les asignó la tarea de golpear la posición antes de que los hombres aterrizaran, para ablandar las defensas del regimiento de la Guardia que se encontraba allí.

El teniente pronto se percató de que varios tanques sublevados consiguieron derribar a varios aviones SU-24 y SU-27. Cuando su pelotón estaba en el suelo, inmediatamente comenzó a organizar los escuadrones en su asalto. El resto de la compañía debía asegurar el resto de la ciudad, ya que su pelotón tomaría el sector sudeste. Las otras unidades en la división de aproximadamente 3.000 hombres que acababan de aterrizar cerca de la ciudad establecerían defensas alrededor de la ciudad, respaldarían a la compañía de asalto y proporcionarían apoyo si fuera necesario.

Mientras Iván guiaba a sus hombres por las esquinas de las calles, se aseguró de no dejar a sus hombres expuestos ante una posible escaramuza rebelde. La seguridad de su AKS-74 estaba apagada, por lo que recargó para prepararse. Estaba sorprendido de que los rusos no tuvieran encuentros con los guardias chinos y coreanos que supuestamente mantenían la ciudad tan completamente segura, pues la mayor parte de las fuerzas chinas y coreanas se unieron a la Guardia Nacional como nuevos refuerzos para los rebeldes.

Inmediatamente, vio un escuadrón de tropas de la Guardia Nacional, las cuales estaban siendo dirigidas por Flash Sentry y Sunset Shimmer. No reforzado por completo, Iván observó con una sonrisa al par de soldados que pasaban por ahí.

- Con que usted debe de ser Sunset Shimmer. - dijo Iván a ella - ¿Pero no se suponías que estabas de nuestro lado? -

- Estaba. - respondió Sunset - Pero ahora estoy del lado de la libertad, de los verdaderos americanos que sí aman a su país. -

Iván comenzó a reír y continuó: - Ilusa, recuerda que seguimos siendo superiores en número y equipo. Ni se te ocurra levantar tu arma contra nosotros, traidora. -

- Traidora para ti. - contesta Flash molesto - Porque ella ahora está del lado correcto. Así que le pido humildemente a ti y a tu unidad, que se rindan ahora; de lo contrario, abriremos fuego. -  

Iván tenía un granadero y ametralladora preparando sus armas, ya que sabía que esa era la forma más efectiva de eliminarlos. Una vez que Flash y Sunset se percataron de su verdadera ambición, ambos se arrastraron por la esquina para que nadie los viera, apuntaron y dispararon contra Iván y su unidad. Éste respondió usando un GP-25 que hizo un ruido lo suficientemente fuerte como para llamar la atención, lo que llevó a Iván a pedir dos ametralladoras en diferentes tejados, para cubrir su posición.

Flash y Sunset estaban aterrados, ya que pronto se percataron de que se acercaba un pelotón, en cada lado. 

- Estamos en problemas, Flash. -

- Eso ya me lo temía, Sunset. -

Ambos estaban siendo superados en número, pero eso no le importó a Iván, quien rápidamente llamó a su posición a todas las demás unidades que estaban en éste lado de la ciudad. En cuestión de minutos, los ametralladores ya habían comenzado a disparar, pero les toma un tiempo a los morteros disparar.

A medida que más hombres comenzaron a abrir fuego, Flash y Sunset sacaron un arma secreta que estaba frente a ellos: Una súper-ametralladora de última generación, un arma de alta tecnología denominada DX-4, o más informalmente "la vaporizadora". 

A medida que los rusos seguían ametrallando, los integrantes de la Guardia Nacional no se molestaron en apuntar su DX-4 hacia los hombres, quienes simplemente comenzaron a correr, al percatarse de su presencia, pero ponto serían borrados de su existencia por esa poderosa arma.

- Lo logramos, eliminamos a estos indeseables. - dijo Sunset.

- Esta poderosa arma nos dará la victoria. - dijo Flash.

El teniente Iván, quien había salido vivo de esto, ordenó a las demás unidades sobrevivientes, que continuaran limpiando el sector y lamaran a más soldados para disparar a cualquier miembro de la Guardia Nacional que estuviera a la vista. De tener éxito, la ciudad de Los Ángeles serguiría bajo ocupación soviética.

Los demás refuerzos soviéticos habían aterrizado en la costa de Long Beach, sus T-80 y T-72 ya pasaban libremente por las zonas de San Pedro, Pasadena, Anaheim, Burbank, y el centro de la ciudad. Otra ofensiva había sido llevado a tierra por helicópteros pesados ​​y vehículos anfibios. 

La batalla por Los Ángeles había sido ganada por los soviéticos, o bueno, eso es lo que ellos creían, ya que sus fuerzas tendrían que moverse rápidamente para explotar completamente todas las zonas y así poder asegurar la ventaja que actualmente tienen sobre sus enemigos. 

Sus órdenes eran simples; atacar a todos los miembros de la Guardia Nacional que se encontraban en el lugar, por lo que se movilizó al pelotón de Averin para capturarlos a todos. El pelotón se agruparía, para después dirigirse hacia el resto de su división que estaba por moverse hacia el este de la ciudad inmediatamente, y serían asistidos por cinco BTR y un Mi-24 para cubrir el aire, si la situación lo requería.

Habiendo recibido estas órdenes no cinco minutos después de tomar la mayor parte de la ciudad, Averin comenzó a movilizarse hacia el este. Pero en general, fue una operación simple. Averin no tenía dudas de que sus hombres podían llevar a cabo la tarea. Estos hombres nunca le habían fallado en Afganistán, y ciertamente no le fallarían ahora, que estaban por someter a unos rebeldes americanos.

Veinte minutos después, al llegar a la zona de San Bernardino, las tropas de Averin ya tenían a las defensas enemigas a la vista. Sin embargo, ninguna de las unidades que lo seguían se percató de algo: Se oyeron el ruido de los disparos que golpeaban los lados de los Transportes blindado de personal (TBP), haciendo que la mayoría de sus soldados se bajaran de vehículos, y comenzaron a darse cuenta de que las tropas que el enemigo los habían seguido en este tiempo, y usando camuflaje.

Los combatientes que sorprendieron a Averin y compañía no eran otros que varias milicias sublevadas, comandadas por Rarity y Twilight Sparkle, que ahora eran consideradas como combatientes armadas y peligrosas.

- Es momento de que se rindan, cariños colorados. - dijo Rarity.

- Por más que quieran vencernos, no lograrán hacerlo. - dijo Twilight.

El TBP devolvió el fuego. Su pesado cañón de 25 milímetros comenzó a destrozar los contingentes rebeldes que habían intentado disparar contra ellos. En respuesta, los rebeldes lanzaron cañonazos con armamento químico, golpeando a todas y cada una de las tropas rusas. Afortunadamente, todas las tropas soviéticas se habían preparado para enfrentarse a las armas químicas y vestían sus trajes tipo ABQ. Las fuerzas rebeldes, que también usaban trajes ABQ, contraatacaron con un arma DX-4 que encontraron, eliminando así a la mitad del contingente soviético en un abrir y cerrar de ojos.

Esto enfureció al teniente y a sus hombres, y procedió a luchar con una ira aún más agresiva, mientras sus médicos intentaban ayudar a los hombres que quedaron expuestos al material químico. Los soldados soviéticos comenzaron a atacar repetidamente con sus RPG, mientras que Averin pidió dos unidades con helicópteros, uno para evacuación médica, y otro para él y sus unidades más leales. Todavía sabía que su pelea no había terminado, ni siquiera por la noche.

A medida que la ciudad de Los Ángeles poco a poco queda arrasada por los ataques aéreos, marítimos y terrestres, más integrantes de la Guardia Nacional se dirigieron a la ciudad para protegerla a ella y a sus habitantes de los constantes ataques de los rusos. La estrategia de Shining Armor les costó caro, ya que no les daba ninguna posibilidad de victoria, a menos que contaran con el DX-4.

El pelotón de Averin intentó cortar las entradas de la Guardia cuando el batallón acorazado lanzó el ataque frontal. Pero Twilight y Rarity sorprendieron al enemigo, poniéndole un gran freno que comenzó a desgastar a las unidades soviéticas. La artillería rusa golpeó la ciudad, incluso cuando las unidades rusas se acercaban a ella para someter a los rebeldes, causando numerosos daños materiales a su paso.

Los sublevados intentaron defenderse, infligiendo solo cantidades menores de daño en algunas unidades de infantería, ya que estas unidades fueron dañadas, otras las cubrirían. Estaban rodeados; un pelotón contra una división, pero para ellos no importaba; Celestia les había ordenado que aguantaran, y lo harían con sus vidas, incluso si no había esperanza para ellos.

El teniente apuntó a la mira de su rifle y vio lo que parecía ser un tipo de comandante, y aparentemente estaba liderando una unidad que se acercaba en dirección contraria. 

-¿Qué tipo de tácticas primitivas usan estos tipos? - Iván pensó para sí mismo mientras sacaba a su portador de color; esto, mientras que uno de los comandantes de las milicias civiles que defendían la ciudad, atacara una unidad completa por sí solo.

No parecía que los rebeldes se molestaran siquiera en organizarse en este asalto, y parecía que no habían peleado una batalla en sus vidas. Era obvio por qué, para los soviéticos, si lo hubieran hecho, no estarían allí para luchar contra ellos. 

A pesar de que la batalla parecía ser una victoria fácil para los rusos, Averin se dio cuenta de que la victoria estaba fuera de su alcance. Para él, sólo había una solución simple, en lugar de dejar de luchar para obtener municiones y dejar a sus hombres sin un comandante, sacó su pistola y se dirigió directamente a la zona de batalla, donde le esperaba una muerte segura. Inmediatamente, toda su unidad procedió a hacer lo mismo.

- ¡Maldición! - murmuró el Mayor Alaxander Frolov para sí mismo - Son demasiados rebeldes. -

Averin y su unidad comenzaron a entusiasmarse y se animaron a realizar una acción suicida, digna de cualquier kamikaze japonés; inmediatamente, tanto él como su unidad, comenzaron a ser rafagueados instantáneamente con varios DX-4s.

- Jaque mate, rojillos. - dijo Twilight.

- Así es, que muerdan todo el polvo. - dijo Rarity.

- Muy bien amigas, misión cumplida. - dijo Sunset.

- Y ahora, hay que seguir haciendo polvo a esos rusos. - dijo Flash.

Inmediatamente, se acercó cerca de la ciudad cuatro bombarderos Tu-160. Mientras tanto, los soviéticos se preparaban para vaciar la bahía con muchas bombas (pues sabían que este ataque salvaría muchas vidas, ya que mostraría a los agresores de pony el poder de la Unión Soviética y evitaría que los ejércitos chocaran) y esperar a que recibieran la orden de soltar las bombas. Cuando los aviones pasaron volando, muy pocos rebeldes los consideraron una amenaza, ya que empezaron a usar sus DX-4 para reducir a cenizas a los bombarderos. Impactados, las fuerzas soviéticas emprendieron la retirada, ya que temían ser aniquilados en su totalidad por las fuerzas sublevadas.

- Lo logramos, ganamos otra vez. - pensó Twilight al ver cómo los atemorizados rusos corrían desesperados ante el arma secreta de los rebeldes.

- ¡Guau! ¡Qué lindo! - se expresaba Rarity mientras saludaba a todos los combatientes del ejército sublevado.

Sin embargo, no toda la división de la Guardia Nacional se había quedado de brazos al ver cómo sus enemigos se retiraban; había al menos un batallón aéreo que había logrado derribar toda la poca flotilla soviética que hasta aquél entonces dominaba el espacio aéreo americano. Sin embargo, y a pesar de haber logrado la victoria, los rebeldes pronto se dieron cuenta de que les faltaba mucho para poder recuperar a su país, y no estaban todavía con las condiciones para igualar su fuerza con las fuerzas soviéticas.