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Yoongi parecía que iba a colapsar por la cercanía de Taehyung y Jungkook fue el primero en actuar, alejo al más alto del pálido y se paró en frente de él.
— ¿Que te pasa, Taehyung?
Jungkook casi gruño y Yoongi temía que el duque hiciera una locura, así que aprovechando la cercanía y tomo su chaqueta, apresándola en un puño evitando que se acercara más.
—Taehyung—llamo Seokjin y este lo miro luego de unos segundos de mirar a Yoongi. — ¿Los conoces?
—Yo... —miro el rostro aun asustado del menor y la confusión de Jimin, así que solo se rindió dando un paso lejos de Jungkook quien aflojo un poco las fuerzas en sus puños. —Los confundí, tengo amigos muy parecidos y hace tiempo que no se de ellos—rasco su nuca y les dio una sonrisa apenada. —Lo siento mucho, fui muy irrespetuoso de mi parte, mis disculpas—hizo una inclinación para ambos y escapo de allí para seguir saludando.
Lo que no le entraba en la cabeza a Seokjin y a Jimin, es que había dicho sus nombres como si en realidad los conociera, si tenía esos dichosos amigos de los que hablo, por lo menos los hubiera llamado por su nombre.
Nadie tenía el mismo nombre y la misma cara, era demasiada coincidencia.
El duque mantuvo su expresión seria mientras miraba a su primo hablando con un grupo de mujeres y dejo de pensar en aquella rara situación al sentir la mano de Jimin tomando la suya.
— ¿Quieres bailar?
A lo lejos escucho exclamaciones de asombro al notar con la confianza con la que le hablaba, pero suponían que —aunque fuese demasiado inusual— hacia esto porque eran prometidos y se sentían cómodos.
La suerte de algunos.
—Sería un placer, Lord Jimin
Con las manos unidas se guiaron a la pista de baile siendo acompañados por otras parejas, incluso de Jungkook y Yoongi.
— ¿Tu primo siempre fue así de raro?
—Hace un año que no lo veo—tomo su cintura y con elegancia bailaron con el ritmo de la canción. —Un día, hace 6 meses se volvió un poco más extraño, pero solo paso menos de 5 días y volvió al ser el mismo, según su padre es porque se iría a Japón y la noticia no le cayó muy bien—le dio una vuelta y lo acerco a su cuerpo para que pudiera bailar sin problemas, también en caso de que se equivocara podría ayudarle a seguir.
—Entiendo—simplemente dijo y disfruto del baile, apenas decían palabras sintiéndose demasiado a gusto uno junto al otro, pero era obvio que esa canción no era eterna, con una perfecta vuelta de ambos terminaron la canción sin querer soltarse, pero tuvieron que hacerlo porque era la hora de la cena.
Aunque Yoongi era un sirviente, no estaba atado a las absurdas reglas de la casa Park, por pedido de Jimin y por aceptación de la reina, Yoongi comió al lado de Jungkook quien estaba más que feliz de tenerlo a su lado, viendo que no era imposible de que eso fuese realidad incluso en su casa.
Porque haría hasta lo imposible para poder llamar a Yoongi suyo, su esposo.
A media comida había llegado el padre de Taehyung y entre anécdotas de los dos pasaron la cena, luego de charlar un poco más, hubo tiempo para el ultimo baile, el dichoso baile de cierre.
Ya la mayoría estaba bailando, incluso Taehyung pudo ver como Yoongi bailaba alegremente con Jungkook, se le veía avergonzado pero sus ojos brillaban de emoción junto con los del duque y sintió un dolor en su pecho.
Se veía tan feliz, así mismo cuando...
—Si tanto querías bailar, no deberías hacerte de rogar—sus pensamientos se detuvieron al escuchar una fastidiosa voz, Taehyung rodo los ojos y apenas volteo para ver aquel irritable marqués que había conocido al zarpar de Japón a Corea. — ¿No pensaste que te librarías de mí? Si tu padre me invito
Taehyung volteo hacia el otro lado para mirar mal a su padre quien al notarlo le dio una gran sonrisa.
Ese viejo... siempre de metiche.
—Y yo no te quiero aqui, así que ve a su lado
—Yo quiero estar aqui—tomo su mano y empezó a arrastrarlo a la pista. —Parece que todas las cosas contigo tienen que ser a la fuerza—tomo su cintura y lo acerco hacia el dejándolos cara a cara. —Solo espero que tenerte en mi cama no sea de la misma forma, es lo único a lo que no me atrevería a hacer así—acerco su boca a su oído mientras los movía a ambos al ritmo de la canción—Espero que en ese momento haya ganado ese fuerte corazón tuyo—se alejó justo a tiempo para ver el sonrojo del menor y sonrió glorioso.
Por lo menos provocaba nervios en él, algo era algo.
Taehyung para no hacer un escándalo se mantuvo a su lado, con el plan de pisarle cada que pudiera para que el mismo dejara el baile, pero el marqués sabía que no se quedaría quieto, así que lo distrajo todo el tiempo poniéndolo nervioso causando que perdiera el ritmo y quien tuviera las riendas del baile fuera el, pegándolo a su cuerpo a gusto para guiarlo.
—Voy a partirte la cara, maldito descarado
—Y yo quiero besarte, aunque, si me preguntas también quiero partirte otra cosa—la cara de Taehyung se volvió más roja que el diamante que brillaba en el collar que tenía, el duque no se aguantó una más e iba a darle un puñetazo.
¿Como? No supo, ni quiso saber cómo, pero el divertido marqués le dio una vuelta que lo descoloco causando que se tropezara y justo como las actuaciones que vio en Japón estaba allí entre sus brazos, con la espalda inclinada hacia el piso con elegancia y con una gran sonrisa en frente suya.
La mayoría aplaudió, pero Taehyung no supo cómo reaccionar, dejo que lo volviera a tierra sin problemas y se alejó tan rápido como pudo.
—Estaré aqui, cuando quieras—canturreo.
—Vete a la mierda—articulo con una pequeña sonrisa y lo escucho reír, pero no se detuvo, volvió al lado de su padre con mala cara.
—Quita esa cara
—Fue un increíble baile—elogio la reina.
—Increíble baile—gruño Taehyung. —Ese marqués es un grano en el... en la nariz—se corrigió rápidamente.
— ¿Como se llama?
—No...
—Im Jaebum, vivía en Japón, pero decidió volver con nosotros porque quedo flechado con Taehyung
—Y tú me pusiste en bandeja de plata—acuso a su padre y este sonrió.
—En Japón te deje ser, pero ya estás en edad de casarte, si no es el marqués puede ser una linda jovencita o jovencito que veas, pero por mi parte es mejor el marqués
—Yo opino lo mismo—dijo la reina. —Había una chispa entre ustedes, como Jinnie con Jimin, hay algo en ellos que no dejas de verlos, son atrayentes y ustedes también lo son
—Me voy, no aguanto mas
Taehyung huyo de allí de nuevo con sus primos y sus parejas, ni loco se casaría con ese maniático atrevido.
La reina despidió a todos cuando se hizo demasiado tarde, excepto a Jimin por lo mismo Yoongi se quedaría y también estaba el marqués que por obra del más allá también la reina lo dejo quedarse.
—Eunhyuk, prepárenle habitaciones a los invitados y las habitaciones de siempre para Taehyung y Jungkook
—Si, Su Majestad
—Espero mi habitación este cerca a la tuya—le susurro Jaebum a Taehyung y este gruño.
—Yo espero que este en la Luna, imbécil
—Que gruñón—rio divertido y se alejó de allí para conocer al duque Seokjin quien dejo de ver a Jimin hablar con Yoongi cuando este se acercó.
— ¿Que tal el baile con tu esposo?—pregunto Jimin.
—Me gusta mucho, Jimin—susurro. —Y también tengo mucho miedo, ni siquiera su madre lo sabe ¿Y si se opone? Es normal que lo haga, solo soy un sirviente
—Si ama a su hijo y ve que tú también, dejara de insistir, en caso de que lo haga
— ¿Tú crees?
—Yoongi, cuando te vea seguro se enamora de lo lindo que eres—sonrió enternecido al ver sus mejillas. —Ya verás, ahora vamos por primera vez voy a dormir fuera de esa casa
Ambos fueron guiados por dos sirvientes y se prepararon para dormir, ambos ya tenían su camisón y compartieron cama aun cuando en la habitación había una para cada uno.
Pasaron unos minutos en los que Jimin espero hasta escuchar la respiración suave de Yoongi a su lado.
—Yoongi—lo llamo y se volteo un poco para verlo aun en la oscuridad. —Yoongi
Al ver que no respondía se levantó de la cama con cuidado y lo arropo antes de salir con cautela de no ser cachado por ningún sirviente nocturno, en caso de que hubiera, o un guardia por el pasillo.
No podía dormir por la extraña actitud del primo de su prometido, había algo que no cuadraba, algo demasiado familiar, pero a la vez raro en él.
Estuvo caminando sin rumbo hasta que vio a alguien recostado de un balcón, era aquel duque de cabello grisáceo que rondaba en su cabeza. Taehyung estaba allí mirando la Luna en todo su esplendor.
— ¿Ni siquiera puedo tener un momento privado a esta hora? —Taehyung esperaba que fuese aquel molestoso marqués, pero se encontró al pelirrosa con la misma vestimenta que él, el dichoso camisón de noche mirándolo desde el marco del ventanal. — ¿Que hace despierto a esta hora, Lord Jimin?
—Tu no me dejas dormir—dijo sin pensarlo. — ¿Por qué reaccionaste así al vernos? ¿Amigos parecidos? ¿Se llaman también Yoongi y Jimin?
—Fue la sorpresa, me disculpe antes por eso
—Hay algo que me sigue sin cuadrar, parecías conocer demasiado a Yoongi y él ni siquiera sabía de tu existencia
— ¿Podemos dejar de hablar de eso?
—No—sentencio y se acercó hasta estar a su lado. — ¿Quién eres, Taehyung?
—Soy el duque Kim Taehyung y aunque seas el prometido de mi primo, no te permito que me hables como si me conocieras—su voz era seria, casi rayando a lo tajante. —Le pido que me deje solo
—Y una mierda, ¿Quién eres?
Taehyung golpeo la encimera del balcón y miro al pelirrosa insistente.
— ¿Dejaras de joderme si te digo quién soy?
—Puede ser
—Eres peor que ese maldito marqués—gruño y pensó unos segundos que decirle, tal vez si le contara se iba a reír y se iría de allí, ¿Quién creería esa estupidez? —Hace un año y 6 meses llegue a este lugar, tengo el mismo nombre y el mismo rostro, solo que este Taehyung era más tímido que yo
Jimin no reacciono, se limitó a solo parpadear mientras lo escuchaba porque todo empezaba a tener más sentido, según Seokjin tenía 1 año en Japón y 6 meses antes de eso se comportó extraño y si Taehyung le decía la verdad, tenía a alguien de otro siglo allí.
—Es una tontería, solo vete a dormir y déjame solo
— ¿Quieres dejar de botarme? Estoy tratando de entender—Taehyung lo observo y suspiro, empezaba arrepentirse de contarle. —Okay, hace un año y 6 meses, ¿Antes de venir aqui me conocías?
—Eras un amigo muy especial para mí, nunca podre ocupar el puesto de Yoongi en tu vida, pero estuve allí siempre que pude, estábamos en la misma escuela e íbamos a entrar a la misma universidad, pero ese día paso algo y desperté aqui
Jimin se quedó callado y luego de pensarlo lo miro, estaba entre triste y sorprendido.
— ¿Tu y Yoongi fueron pareja?
—Si, por años—Taehyung se quedó callado al ver los ojos de Jimin llenarse de lágrimas.
— ¿Eres tú, Tata? ¿Eres el mismo estúpido que se desapareció sin decir nada?
— ¿Minnie? —Jimin no se aguantó más de ver una cara conocida y que también lo conocía, se lanzó abrazarlo siendo recibido por unos cálidos brazos. — ¿Mi Minnie?
—Si, idiota no sabes lo mucho que Yoongi y yo te odiamos por no decir nada, Yoongi estaba destrozado
—Yo nunca me quise ir—susurro y ambos se quedaron callados, sumergidos en un abrazo triste pero fortalecedor para ambos, estaban felices de saber que no estaban solos en esa época. —Cuéntame—dijo luego de unos minutos y se separaron para hablar. — ¿Como llegaste aqui?
—Yoongi me llevo a que le leyeran su futuro, ahí conocí a esa bruja y en la fiesta de Sunmi caí de espaldas a la piscina, fue extraño era como si yo mismo me hubiese empujado, al despertar estaba aqui, ese Yoongi que abrazaste no es el Yoongi que conocemos, como se conocieron es casi parecido e incluso el mismo padre de nuestro Yoongi es el padre adoptivo de este Yoongi, es bastante enredado
—Por lo menos tenías una cara conocida cerca, yo estaba tomando una tina para irme a dormir, decidí sumergirme unos segundos, pero unas manos evitaron que saliera, me desmaye y desperté aqui, con caras demasiado extrañas, luego hable con la bruja y he estado esperando a la dichosa luna morada para volver
—En 3 años
—Por lo menos no espero solo—sonrió y tomo el rostro de Jimin entre sus manos. —Sigues siendo tierno y enano
—Enano lo que te cuelga
—Así lo tienes tu—ambos rieron y se acordaron de la hora que era así que bajaron el volumen. —En serio me alegra que este aqui, entonces ¿Te casaras con mi primo?
—Al principio no quería, me conoces sabes que nunca me quise casar, pero estoy conociéndolo y decidi hacerlo, me casare con él mientras ayudo a este Jimin a detener lo que sea que quiere su familia llena de víboras
— ¿Eso es lo que viniste hacer? Yo vine a evitar el suicidio del padre de este Taehyung, no tenían una buena relación y este Taehyung iba a irse a Japón solo, luego de 3 meses recibiera la noticia del suicidio de su padre y también se suicidaría por la culpa, así que en un año y 6 meses he mejorado su relación, es más metiche que mi padre, pero es divertido
—Aqui está mi padre, abuso de este Jimin por mucho tiempo y también está mi tía Irene con otro nombre, pero no me conoce, soy un hijo ilegitimo y tengo víboras como hermanos, hay algunos que son buenos, pero parece que jugamos todos a no ser desechados y mi madrastra es un grano en el culo
— ¿Te ha tocado?
—Trato de hacerlo 2 veces y no creo que vaya a detenerse, pero algo me dice que la estúpida de Lore y Yoonsuk —los padres legales de este Jimin— lo saben, pero no hacen nada, así que nadie me creería o no les importaría, así que estoy tratando de arreglarlo a mi manera
—Entiendo—susurro y se quedaron callados unos minutos. — ¿Yoongi lloro mucho?
—Demasiado, se negó a tener pareja para que no le pasara de nuevo y te odia, pero también quiere saber cómo es que despareciste que ni tu padre dice nada
—Desde que llegue aqui, no sé nada de allá—suspiro. —Veo que Jungkook pretende a Yoongi
—Ambos se gustan mucho
—Y me alegro—suspiro y lo miro. —Me alegra volver a verte, pero en esta época son muy mojigatos así que ve a tu habitación, yo también me iré y mañana podemos seguir hablando
—Ya lo se—ambos se alejaron del balcón y se unieron en ultimo abrazo. —Gracias por estar aqui, Tae
—Tú también, Minnie—dejo un beso en su coronilla y tomaron caminos diferentes.
Estando a 3 puertas de llegar a su habitación escucho pasos y murmullos acompañados de una luz, suponía que eran velas, acercándose hacia él.
Asustado se detuvo y pensó en actuar como sonámbulo, pero una mano lo jalo dentro de una habitación, en la oscuridad pudo ver los ojos brillantes del duque Seokjin y trago seco.
¿Por qué siempre lo encontraba en esas situaciones?
— ¿Estaba muy cómodo en los brazos de mi primo, el duque Taehyung?
La suave pero filosa voz del duque lo estremeció, también el hecho de que estaba con la espalda pegada a la pared al lado de la puerta, sus cuerpos estaban juntos y el duque aun sostenía su muñeca sin querer soltarla.
— ¿También me dirá que no es asunto mío?
—Estas confundiendo las cosas
— ¿Y qué mierda se supone que debo de pensar al ver a mi prometido siendo abrazado y tocado como yo quiero hacerlo? —un suspiro de asombro se le escapo al no estar preparado para escuchar aquello. — ¿Por qué estaba entre los brazos de alguien que acaba de conocer mientras yo muero por tenerlo en mis brazos?
—Duque...
—Estoy harto—gruño. —Estoy harto de ser paciente y esperar, hare lo que se me pegue la gana
— ¿De qué hablas? —susurro mirando como se acercaba y apenas alcanzo a pestañear cuando sus cuerpos estaban aún más juntos, su mano libre se hizo espacio entre la pared y su cintura rodeando esta para quitar cualquier espacio entre ellos. —Seokjin
—Voy a besarte, Jimin y no voy a detenerme
Sus labios se entreabrieron para recibirlo, quiso hacerlo pasar como si hubiese estado sorprendido, pero no se alejó ni se quedó quieto al tener sus bocas juntas, él también estaba deseoso de ese beso.
Ambos se derritieron en brazos del otro, habían soñado ese beso desde que se conocieron, Jimin desordenaba su cabello a gusto mientras que Seokjin aprovechaba la poca tela que tenía la ropa de dormir para acariciar su cintura y su espalda sin ser más atrevido.
En la habitación se escuchaban los chasquidos de sus labios, suspiros y las respiraciones agitadas de ambos, apenas se separaban para tomar aire y poder besarse con más ganas.
Querían derramar todas las emociones que tenían por el otro, los celos que tenía el duque al ver a Jimin en brazos de otro y el deseo de dejar esos labios gruesos irritados como tanto quería Jimin.
La puerta de su habitación fue tocada y Jimin iba a separarse, pero el duque no lo dejo, el hecho de ser descubierto se volvió más exquisito y no dejo que su oportunidad se escapara de sus manos, no sabía cuándo volvería a besar esos dulces labios así que lo apreso entre sus brazos y con la mirada le dejo saber que no serían descubiertos si eran silenciosos.
Del otro lado de la puerta estaban dos sirvientas que habían escuchado sonidos raros detras de la puerta del duque, hijo de la reina, así que querían asegurarse de que todo estaba bien.
Una de ellas abrió la puerta un poco y acerco la vela para ver hacia la cama del duque, había un bulto cubierto de las sedosas sabanas así que supusieron de que era el duque quien dormía sin problemas.
—Tal vez lo imagine, ya no se escucha nada—dijo en voz baja una de ellas y salieron de allí cerrando la puerta con cuidado.
El corazón de Jimin latía con fuerza, la adrenalina que sintió su cuerpo se convirtió en excitación porque en ningún momento dejaron de besarse, no supo explicar cómo habían acallado sus respiraciones, pero no se alejaron hasta después de que ninguno escucho los pasos de las sirvientas.
—Fue mejor de lo que soñé—dijo el duque y Jimin sonrió.
— ¿Soñaste conmigo?
—Mas de lo que quiero admitir, te soñé y te imaginé muchas veces
— ¿Quién diría que el serio duque Kim sería tan atrevido?
—Aun no conoces lo atrevido que puedo ser—susurro y Jimin se mordió el labio, quería descubrirlo, pero ambos habían pasado una línea que estaba pintada de rojo carmesí así que debían caminar con cuidado hasta el matrimonio. —Debo dejarte ir, pero déjame besarte de nuevo
— ¿Debo cobrarte por mis besos?
—Cárgalo a mi cuenta, te deberé la vida si deseas
—Hazlo entonces, Seokjin
Ambos se sonrieron y olvidando todo lo demás se volvieron a besar.
Y entre besos se despidieron, los dos tenían una gran sonrisa cuando cayeron cada quien, en su cama, con el corazón rebosando de satisfacción.
Jimin toco sus labios y sintió una pequeña herida dentro de su labio y sonrió, el duque era una bestia y eso que apenas se habían besado.
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Solo una persona acerto a lo que pasaba y muchas gracias por comentar, amo leer sus comentarios.
¡Ya por fin estos dos se comieron la boca!
Gracias por leer, los amo. Cuidense mucho.
—Kim ♪
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