Hijita de mi corazón, mi dulce Mariafé;  te voy a presentar a la hermana o mejor aun, debería ser la pareja, la novia del esfuerzo.

Si el esfuerzo se casa con la perseverancia, el hijo, definitivamente es el éxito y ésa sería una familia muy consistente.

La perseverancia se puede definir como la firmeza o constancia en el proceso de desarrollo de algo.

La firmeza proviene de un buen fundamento, y esto no sólo se aplica a objetivos por lograr, sino a ideas,creencias, políticas, profesiones y sentimientos.

Mantenerte firme en una idea o creencia que profesas o en lo que sientes y mejor aun en lo que prometes, lo cual te convierte en una persona que tiene palabra , sin necesidad de jurarlo, esto actualmente es poco común pues ya las promesas tienen poco valor.

Algunos dicen que tampoco es cuestión de mantenerse o entercarse en algo que nunca se dará pues sería como perder o gastar energías vanamente; sin embargo esto se asocia a la convicción o certeza de la cual en otra epístola te lo enseñaré más.

Todo lo que hacemos lo deberíamos hacer por convicción , sin permitir que alguien o algo externo influencie en esto, que debe ser muy personal.

Tu fe, tu vocación y tu compañero para toda la vida tiene que partir de tu convicción y desde lo más profundo de tu corazón.

Cuando estés segura de algo y lo emprendas a parte de tu fe y tu esfuerzo no olvides la paciencia para esperar el tiempo de Dios.

Todo es un proceso, cuando siembras una semilla, no puedes esperar que esta brote al instante, el pescador no puede esperar pescar ni bien lanzó el anzuelo, todo tiene un tiempo y muchas veces por no esperar lo perdemos ya que , nos gana la impaciencia.

No te debe importar que los demás pierdan la paciencia o no sean constantes, aunque ya ni haya nadie, si tú crees en lo que esperas , mantente hasta el final.

El éxito se basa en una pisca de esfuerzo pero en un 99 porciento de perseverancia, una gotera de agua puede perforar la piedra o estructura más sólida pero no es la cantidad de agua porque si lanzamos un cilindro lleno agua a esa estructura, no produciría ningún daño, sin embargo ese mismo cilindro gota por gota destruiría esa estructura.

Espero que entiendas lo que trato de enseñarte, si es tu convicción persíguelo hasta conseguirlo ese es el real límite; no es hasta que te canses sino hasta lograrlo.

De eso se trata y consta la vida de aquellos que renunciaron a sus sueños, metas, objetivos y a vivir ; y de los que siguen luchando y lo lograron, tu esfuerzo te hará diferente de los demás sin embargo tu perseverancia o constancia te hará única.

Solamente que, aunque suene redundante, lucha y persiste solo por lo que creas que realmente lo vale.

Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió.
Hebreos 10:23

Que Dios te bendiga.

Tu papito