Punto de vista de Sunwoo:

Cuando llegamos a mi casa, ayudo a Eric a bajarse de mi moto y le acompaño a mi habitación. Todavía parece distanciado y no ha dicho nada. Es tan extraño verlo así.

Mentiría si dijera que no escuché su conversación con Cami. Era difícil entender lo que decía, porque lloraba y hablaba muy bajo, pero no era completamente inaudible.

Quiero saber porqué tiene tanto miedo de que su padre quiera verlo. Sin embargo, no puedo saberlo ahora mismo.

Se sienta en mi cama y le doy algo de ropa, asegurándome de entregarle también una sudadera con capucha. "Toma, deberías cambiarte el uniforme, esto es más cómodo."

Sus movimientos son lentos, lo cual es inusual. Asiente con la cabeza y agarra la ropa, caminando hacia el baño.

Mientras él se cambia, arreglo mi cama y agarro un vaso de agua. No ha almorzado, pero no sé si tiene ganas de comer ahora. Dormir podría ser una mejor opción, o al menos acostarse.

Honestamente, no estoy seguro de qué hacer en este momento en lo absoluto. Probablemente debería haber dejado que Cami lo recogiera, pero verlo llorar me golpeó el corazón de una manera extraña. No tengo ni idea de porqué se asustó, así que no sé exactamente cómo ayudarlo. Nunca he consolado a alguien antes.

Vuelvo a mi habitación y lo encuentro sentado en mi cama, mirando a la pared. Está perdido en sus pensamientos. Sus ojos tienen una mirada vidriosa, se ven tan diferentes de lo normal. Por lo general, sus ojos son brillantes y juro que puedo ver destellos en ellos. Ahora parecen vacíos.

Algo en ello hace que me duela el corazón.

"¿Quieres algo de agua?" le tiendo el vaso.

Lo acepta lentamente y bebe un largo trago, dejándolo en la mesita junto a mi cama cuando termina. Su teléfono vuelve a sonar y se limita a mirarlo en el suelo, sin levantarlo.

"Quizá no deberías revisar eso." le digo.

Él asiente y se frota la cara, mirándome por primera vez desde que salimos de la escuela. "Gracias, Sunwoo." se acuesta y cierra los ojos.

Intentando no molestarlo, me dirijo a la puerta, pero de repente siento una mano en mi brazo. Me vuelvo hacia Eric. Él retira la mano, mirando al suelo. "Por favor, quédate." dice suavemente, jugueteando con sus dedos.

Quizá me estoy volviendo blando, pero no puedo decirle que no. Sólo ha dicho tres palabras, pero puedo escuchar una eternidad de dolor detrás de ellas. Asiento con la cabeza y me dirijo a la cama, sentándome en el lado opuesto al suyo.

Se acuesta de nuevo y esta vez se queda dormido. En lugar de irme, me acerco sigilosamente a su teléfono y lo agarro. Con todo el cuidado que puedo, coloco su dedo en el botón de inicio y miro el mensaje que recibió.

Tu padre quiere verte.
¿Eres demasiado bueno para responder a tu tío ahora?

Esto me cabrea, pero no hago nada. Vuelvo a poner su teléfono donde lo encontré, decidiendo esperar a que esté despierto para preguntarle.

Vuelvo a sentarme, pero no consigo relajarme por mucho tiempo, porque Eric empieza a murmurar.

"¿Eric?"

Sus palabras son inaudibles.

"¿Eh?"

Se detiene por un segundo, pero luego se sienta de repente, gritando. "¡Para!"

No sé qué hacer, así que espero a que se calme antes de moverme. Me mira y noto que las lágrimas caen silenciosamente por su cara.

Todavía sin saber qué hacer, me inclino en la cama y lo atraigo lentamente hacia mí, abrazándolo y acariciando su pelo.

Se deja caer sobre mí y se queda ahí, durmiéndose así. Me acuesto lentamente, todavía abrazado a él, y al cabo de un rato, yo también me duermo.

Cuando me despierto, Eric está mucho más cerca de mí, tiene sus brazos alrededor de mi estómago y su cara enterrada en mi pecho. Quiero moverme, porque no me gusta estar tan cerca de él, pero no quiero despertarlo.

Al mirarlo, pierdo el aliento por un segundo. Se ve tan bonito mientras duerme.

Coloco lentamente mi mano en su mejilla, antes de retirarla rápidamente. ¿Qué diablos estoy haciendo?

En su lugar, muevo la mano hacia su cintura... espera, esto es peor. Vuelvo a retirar la mano y la dejo en mi costado, esperando a que se despierte.

No tarda mucho en abrir los ojos, mira lentamente a su alrededor y una vez que se da cuenta de dónde está, se aleja rápidamente de mí.

Una parte de mí echa de menos el calor.

"Lo siento." murmura, sentándose. No se levanta, simplemente se queda sentado.

"Eric, me estás preocupando. No tienes que dar explicaciones ahora mismo si no quieres, pero realmente no sé cómo ayudar porque no sé cuál es tu situación."

Eric no responde, ni siquiera levanta la vista, ni muestra que haya escuchado lo que dije en absoluto.

Suspiro. "Eric..."

Antes de que pueda terminar mi frase, Eric se levanta. Se quita la sudadera con capucha, dejando al descubierto sus brazos por primera vez, o al menos a mi alrededor. Me sorprende más de lo que debería, ya que puedo ver cicatrices por todos sus brazos. Algunas parecen palabras grabadas en su piel y otras son simples líneas rectas, en las que claramente se ha clavado un cuchillo en su piel.

No se detiene, se quita la camisa también, dejando al descubierto algunas cicatrices de aspecto más fresco y vendas envueltas alrededor de su estómago. Abdominales también, pero eso no es importante ahora.

No me mira en todo el tiempo. Se gira en mi dirección, pero su cabeza está agachada. No sé cómo hablarle así, por lo que me acerco y me pongo delante de él, le agarro la barbilla y le levanto la cabeza para que nuestros ojos se encuentren. Parece asustado y eso me hace querer ser su seguridad.

"Eric."

Una lágrima recorre su mejilla.

"¿Tu papá te hizo esto?"