CAPITULO 23
👑NARRADOR OMNISCIENTE🌟
La rutina se ha asentado en la vida de Chloe y James. Todos los días, ella sale a sus últimas clases de la universidad, él la sigue discretamente, pero ella lo siente cerca siempre. Luego de clases, Chloe regresa a casa, almuerza con James y en ocasiones con su madre y termina sus trabajos finales. Hacia las cinco de la tarde, James y Chloe salen hacia el bosque para entrenar. Luchan entre sí, usan sus poderes y aprenden el uno del otro, aunque Chloe apenas empieza a comprender la fuerza que la embarga al haberse convertido en lobo.
No han sufrido más atentados. Todo ha en relativa calma y este fin de semana, regresan a Mageía para que Chloe active su otra parte licántropo, el tigre. Salen nuevamente de su casa, a través del portal que abre James, y el ritual de la semana pasada se repite.
El anillo de aguamarina para detener su parte sirena, el brazalete de ágata blanca para contener toda la magia que fluye por sus venas, un nuevo objeto, cornalina para su fénix interior y adularia, la piedra lunar, para que su loba siga dormida hasta la siguiente luna llena. Éstas piedras se colocan al norte, sur, este y oeste de la barrera protectora, para potenciar su función y evitar complicaciones.
Sus manos y cuello, adornados con las piedras más poderosas en la historia de Mageía, le dan a Chloe la imagen de reina. Portando las joyas simbólicas de su mundo. Todos los presentes la observan y admiran el impresionante parecido con los retratos de Asteria.
La transformación de Chloe empieza al atardecer, con el último rayo de sol del día. Igual que la semana anterior, sus huesos empiezan a romperse uno a uno, y, aunque James intenta absorber su dolor lo más que pueda, los gritos de dolor invaden el campo de los fénix. Luego de un par de horas, su transformación se ha completado, y una imponente figura se levanta del suelo.
Al igual que su loba, su pelaje es de un blanco brillante, las rayas negras que cruzan su espalda le dan un aire de elegancia al caminar. Sus ojos anaranjados brillan en la noche. Un rugido sale de ella y sigue caminando en círculos, lentamente, alrededor de la barrera. Algunos de los presentes se alejan, intimidados por la figura que se cierne sobre ellos. Los tigres siempre han sido más salvajes y temerarios que los lobos y Chloe no es la excepción.
Minutos después, su forma humana regresa y James entra al círculo con una manta para cubrir su cuerpo desnudo. El calor se hace presente, y tiene que respirar profundo varias veces para ocultar lo que su cuerpo hace sin permiso de su razonamiento.
Ambos regresan a la casa de Chloe el domingo. Duermen y cuando el lunes llega, las actividades se repiten.
Chloe ya no tiene clases. Está a dos semanas de graduarse de la universidad y ahora tiene que presentar sus últimos exámenes. Esta semana es complicada, pero termina exitosamente. Con excelentes calificaciones y seis meses antes de lo esperado, Chloe está lista para graduarse.
Pero la graduación es el menor de sus problemas en este momento. El siguiente fin de semana, Chloe y James regresan a Mageía. El mismo ritual, brazalete de ágata blanca, collar de cornalina, anillo de adularia y otro de zafiro.
Hoy, su parte sirena vendrá a la vida y el ritual es mucho más complicado. Las estrellas alineadas en la constelación de Hércules, provocan el aparecimiento de Tetis, la primera ninfa marina, la primera sirena.
Una mujer de ojos celestes intensos, cabello azul marino, piel blanca cubierta con un vestido largo azul que se une con las olas del mar en Mageía. Su silueta de agua toma la forma humana de la ninfa que guía a las sirenas.
Los presentes hacen una pequeña reverencia ante la mujer y ésta, a su vez, realiza una reverencia ante Chloe, quien se sorprende por el gesto.
La presencia de Tetis hace que el ambiente cambie, las olas del mar no aparecen más y ella se acerca a Chloe. La toma de la mano y caminan mar adentro. James no puede seguirla esta vez, pero su vínculo aún le permite sentir su dolor e intentar apaciguarlo.
La ninfa toma la cabeza de Chloe con suavidad y deposita un beso en su frente.
De repente, algo la toma por los pies y la lleva al fondo del mar. Su cuerpo toca la arena y Chloe intenta salir, pero Tetis aparece nuevamente y presiona su pecho, haciendo que suelte el aire que acumulaba.
Empieza a respirar sorprendida de lo que puede hacer. Más sirenas se hacen presentes, haciendo una reverencia ante Chloe, la ninfa Tetis, extiende su brazo y abre su mano, liberando pequeñas burbujas que viajan hacia la reina, que mira todo con sorpresa. Las burbujas entran a sus pulmones y un dolor dentro de ella hace que se doble hacia adelante. Un cosquilleo dolorosamente intenso recorre sus brazos y piernas. Siente como los huesos de sus piernas se unen y una especie de tejido aparece en sus antebrazos.
Cuando el dolor desaparece, abre los ojos, sin ser consciente de cuando los cerró, y repara en sí misma. Su torso está desnudo, pero una especia de capa de escamas cubre todo su cuerpo, no demasiado, ya que su silueta se encuentra muy marcada, igual que una segunda piel. Su mirada viaja hasta llegar al inicio de sus caderas, en donde, la capa de escamas se vuelve de un celeste intenso y se alarga mucho más allá de lo que ella normalmente mide. Su cola termina en una abertura grande y compuesta de dos o tres capas del mismo tejido que se presentó en sus brazos. Sus ojos se vuelven tan azules como los de la ninfa que observa orgullosa la figura de su reina y unos colmillos finos y puntiagudos brillan como perlas. Sus ojos son un poco rasgados y sus orejas terminan en leves picos, perdiendo su forma redondeada. Tetis la toma de la mano y la lleva por el mar, enseñándole a nadar con su nueva anatomía, cómo ver en las fosas más profunda y oscuras y cómo ubicarse en kilómetros de agua inquieta. En la superficie, las olas han vuelto y la ninfa Tetis se levanta junto con Chloe y se acercan hacia la orilla. James vuelve a aparecer y cubre de nuevo su cuerpo desnudo con una manta. Su forma humana volvió y ahora todas las transformaciones están completas. Pero esto apenas ha empezado, y nada será tan fácil.
En otra parte del mundo, alejados totalmente, Tristán regresa a la casa donde ha estado viviendo, a comunicar que la reina ha encontrado a su pareja. Le exige a su jefa que le dé una solución ante esto. Ella le prometió que ambos estarían juntos, pero no cumple su promesa. Si no lo hace pronto, matará al augur entrometido. Sale enojado. No fue una amenaza, fue una promesa y la va a cumplir, así sea lo último que haga en su vida.
La jefa de Tristán, en cambio, sonríe con triunfo. Su plan está avanzando justo como ella quería y esas pequeñas transformaciones que les dan un poco de esperanza a los Asterianos, pronto van a ser su peor pesadilla cuando ella intervenga y los papeles se inviertan. Ambas reinas lucharán con uñas y dientes por sus puestos, usarán todos sus recursos y la línea que divide el bien y el mal empezará a distorsionarse a favor de ambas.
Ha pasado tiempo desde la actualización.
Quisiera decir que todo ha ido bien pero pues todo el mundo tiene altibajos y eso.
En fin, les dejo un nuevo capítulo.
Espero que lo disfruten.
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