Luego de haber recolectado las cajas en carretillas y traerlas, nos pusimos inmediatamente a revisarlas y aquí nos encontrábamos en el medio de la sala rodeados de miles de cajas  repletas de carpetas que parecen ser archivos con información de personas.

Estábamos ojeando los uno por uno, detalladamente sin perdernos nada y así estaríamos por horas.

– Joder , esto va a requerir de un magnífico café para poder seguir –nos sugiere Caleb, asentimos y sale directo a la cocina.

Levanto una de las cajas para empezar a revisarlas pero se abre de la parte de abajo causando que todas las carpetas dentro de esta se desplacen por el suelo. Mierda, pienso.

Me agachó a recoger todo lo que se me ha caído, mientras Oliver se para rápidamente posicionándose a un lado mío. En un momento nuestras manos se tocan por querer agarrar la misma carpeta, una electricidad pasa por estás haciendo que mí corazón se acelere, a la vez que nuestras miradas se conectan. Para mí ya no era sorpresa que sus ojos me atrajeran de manera impresionante, aunque fueran unos simple color marrón claro, pero desde el primer día sentí esa pequeña atracción, que cada vez iba aumentando.

Baja su vista a mis labios, inconscientemente hago su misma acción quedan a pocos centímetros de distancia. No duro mucho ya que Caleb interrumpe el momento.

– Chicos, creo que hay que comprar una cafetera nueva –nos sonríe inocentemente, me paro con rapidez, posicionándose a un lado de Caleb para que me entregué mí café, mientras tanto Oliver lo asesina con la mirada– ¿Y ahora que hice? – le susurra, este solo rueda los ojos.

Lo que también había notado de las cajas es que cada una tenía una fecha escrita en uno de sus lados, la que yo había agarrado tenía escrito en tinte negro Marzo de 2002 , el cual era el año en el que yo había nacido.

Apilo las carpetas sobre la mesa, abro la primera encontrándome lo siguiente..

Nombre: Morana Foster

Nacimiento: 16/03/2002

Hospital: IRDES

Había más y más información sobre ella y su familia, seguí pasando las hojas hasta que halle su foto. La tomo entre mis manos y la examinó, era una niña de unos 2 o 3 años, su rostro me parecía bastante familiar. Esto ya me está hartando ¿Por qué no puedo recordar de dónde conozco un rostro?.

Lo curioso es que nací un día después de ella y en el mismo hospital.

– Morana – digo en voz alta, volteando la foto para que la logren ver los chicos– ¿No les parece conocida? –Caleb inmediatamente se tensa al ver la foto y escuchar su nombre, por sus ojos pasa un destello de tristeza y preocupación, su vista se dirige a Oliver, el cual tiene su misma expresión solo que está solo se puede ver la preocupación.

– No –largan a la misma vez en tono seco.

– Está bien, no era para que se pongan así – digo no muy convencida de su respuesta.– Un nombre muy original ¿No creen? – estos solo asienten.

– Iré por un vaso de agua – se retira  el oji verde.

No le tomo importancia volviendo a mí tarea, agarro la siguiente carpeta, la abro y procedo a leer internamente la siguiente información.

Nombre:  Nisha Gray

Nacimiento…

Un estruendo interrumpe mí lectura, proveniente de la cocina, me paro al ver que Oliver ni sé inmuta. Me adentro a la cocina encontrándome a Caleb mirando el suelo dónde yace un vaso destrozado.

– Mierda, soy muy torpe, ahora tendré que pagar una cafetera y un vaso – niego con la cabeza con una sonrisa de lado. Si, la verdad era un poco torpe al igual que yo.

– Descuida no pasa nada, ahora volvamos, tenemos mucho trabajo que hacer – apunto con mí cabeza la puerta, la cuál pasamos para dirigirnos a la sala.

Me siento en mí lugar correspondiente a seguir con lo que estaba antes de la interrupción. Abro nuevamente el archivo.

Nombre: Tiziano…

Miro de manera rara el archivo, definitivamente no era el que yo tenía en manos unos minutos antes ¿O sí?. Me volteo para agarrar la pila que había dejado pero está ya no estaba.

¿Qué mierda? Quiero creer que no me estoy volviendo loca.

– Oliver, ¿Dónde están los archivos que se encontraban justo aquí? –le pregunto apuntando a un lado mío. El me mira de manera extraña y responde.

– Ahí no se encontraba nada Kali ¿De que hablas? – me mira como si estuviera loca.

– Cómo que no. Estoy cien por ciento segura de que los deje aquí y este no es el yo estaba leyendo –alzo la carpeta que sostenía en mí mano.

– No Kali allí nunca dejaste nada –esta vez habla Caleb– Creo que el café te hizo mal – se burla. Idiota, pienso al mismo momento que ruedo los ojos.

Repasó sus rostros buscando alguna seña de que están mintiendo, pero estos solo se mantienen con su expresión de extrañeza.

– Iré al baño –aviso y me levanto.

Subo las escaleras y me adentro al baño que se encontraba en el fondo del pasillo. Luego de hacer mí necesidades, me pongo frente al espejo, repasó mis facciones y abro el grifo sin despegar mí vista del espejo.

¿Me estaré volviendo loca?

Me lavo las manos, las acuno de forma que pueda acumular agua en estás, bajo mí cabeza y me mojo el rostro con la fría agua de mis manos, refrescándola y relajándola. 

Me seco con la toalla las extremidades mojadas, largo un suspiro y salgo. 
Camino por el pasillo con lentitud, con mis energías bajas. Creo que debería irme a dormir, pienso.

Pero una luz me detiene, una puerta la cuál tenía escrito Oliver,  se encontraba entre abierta. De ella desprendía una luz, que supongo se habrá olvido de apagar.

La curiosidad me gana y decido entrar, no antes primero mirar si los chicos todavía se encontraban abajo. Una vez echo, abro con lentitud tratando de hacer el mínimo ruido.

Entro satisfecha por no haber cometido ningún error, mí vista pasa por toda la habitación pintada de un color gris, perfectamente ordenada lo cual me sorprende. Mis ojos se detienen en un collar, me acerco, lo agarro entre mis manos y paso unos de mis dedos, 0015 tenía grabado.

Una cosa más capto mí atención, una punta marrón desprendía debajo del colchón, lo levanto un poco para lograr sacar aquello que se encuentra allí y de ahí logro sacar unas carpetas.

Los archivos, pensé.

Era seis los cuales se encontraban escondidos. Abro el primero.

Nombre: Morana Foster

Lo cierro rápidamente y abro el siguiente con rapidez.

Nombre: Nisha Gray

Me mintieron, carajo.

Estúpida, me regaño a mí misma.

Abro el siguiente llevándome una gran sorpresa.