Con Mystoria.

Suspiró al mismo tiempo que se puso de pie, para después descender de aquella carroza que lo había llevado, quien le siguió fue Dégel, para después ver ambos omegas el imponente castillo delante de ellos.

Mystoria: el castillo escarlata - susurró.

Dégel: vaya que es grande - susurró sorprendido.

Xx: oh vaya, así que ustedes son los omegas que mi hermano e Izó enviaron para educar a los príncipes ¿verdad? - preguntó mientras se acercaba.

Mystoria y Dégel únicamente dirigieron su mirada al alfa de cabellos azules y tez blanca que se acercaba.

Mystoria: ¿y tú eres? - preguntó.

Xx: Aspros Polux, miembro del consejo real y también consejero del rey, es un gusto poder conocerlos - dijo sonriendo mientras se acercaba a ellos.

Dégel: sinceramente no confío en él - susurró.

Mystoria: ya somos dos - aseguró.

Aspros: por favor siganme, los llevare con los príncipes, entre más rápido empiecen con las clases será mejor - aseguró para después darse la vuelta y comenzó a caminar, ambos omegas rápidamente comenzaron a caminar detrás de él.

Mientras tanto.

Guardia Real.

Después de encontrarse con él caballero personal del príncipe y su jefe para molestia suya sonrió, se acerco con bastante burla y le hablo.

Izó: ¿Que ocurre Gestalt? ¿No lograste convencer a su alteza? - preguntó.

Gestalt: ese chico es un verdadero caso, le pedí al príncipe Kardia hablar con él para convencerlo, espero pueda hacer algo - aseguró mientras sacudía un poco su cabello.

Izó: no te preocupes Gestalt, muy pronto ya no tendrás que preocuparte por eso - aseguró.

Gestalt: aunque confíes en tú omega Izó, no creo que debas subestimar al príncipe, créeme. Si no le agrada lo fastidiara hasta hacerlo irse por su propia cuenta - aseguró mientras Izó río.

Izó: oh, si, si... mi omega, no debes preocuparte, lo tendra todo bajo control - aseguró sonriendo.

Volviendo con Mystoria.

Para su sorpresa ambos fueron llevados por caminos diferentes, Aspros se llevó a Dégel a conocer al príncipe que necesitaba aprender de matemáticas y a él por su parte, lo llevaban con él que necesitaba clases de todo.

Mystoria: este trabajo será duro - susurró aburrido, el soldado que lo acompañaba le indico.

Xx: aquí es joven - dijo mientras el peliceleste asintió, para después suspirar, se preparo para lo que sea que estuviera esperándolo ahí, así que decidido a todo entró a la habitación.

Para su sorpresa cuando entró, todo estaba en silencio por lo cual se asomó un poco, grande fue su sorpresa al ver que en esa habitación, solo había una mesa, un cuaderno, una pluma y varios avioncitos de papel.

Mystoria: ¿Hola? - preguntó confundido mientras caminaba - ¿Dónde esta? - susurró mientras veía hacia todos lados de la habitación, ni rastros del príncipe.

El omega de 20 años suspiró, para después acercarse a la mesa y colocar ahí sus libros, aunque grande fue su sorpresa al escuchar un "auch" provenir de debajo de la mesa y sin darle tiempo a reaccionar, vio cómo debajo de la mesa, una cabellera rojiza comenzó a asomarse. Abrió sus ojos con bastante sorpresa al toparse con una mirada verde brillante mirarlo fijamente y claramente apenado, vio cómo el joven después de suspirar, aún masajeando su cabeza se sentó sobre la mesa y dijo.

Écarlate: perdón si te asuste, se me había caído el lápiz al suelo y estaba recogiendolo - aviso mientras ponía el objeto sobre la mesa.

Mystoria no podía despegar su mirada de aquel joven, sin duda alguna, no era lo que había esperado de su primera impresión, si era sincero, él menor por su parte al ver que él omega no respondió confundido preguntó.

Écarlate: ¿ocurre algo malo? - preguntó.

Mystoria: ¿eh? A no, no perdón... es solo que me tomaste por sorpresa - respondió para después darse la vuelta, dejando confundido al alfa, por su parte el omega solo pensó una cosa - es tan Kawaii, no me espere algo así, es un alfa adorable - fue lo que pensó mientras sus mejillas se sonrojaban, pero después lo vio por encima de su hombro - ¿por que hablaran de él cómo si fuera un irrespetuoso? No lo ha sido desde que llegué - fue lo que mentalmente se dijo.

Écarlate: em... ¿tú serás mi maestro entonces? - preguntó haciendo que el omega rápidamente reaccionará.

Mystoria: a, si, si, perdón... me quedé pensando en algo, si yo soy tú maestro, un gusto conocerle su majestad - dijo mientras le daba una pequeña reverencia.

Écarlate: puedes llamarme Écarlate, "su majestad" me parece demasiado exagerado - pidió.

Mystoria: entiendo... - respondió.

Écarlate: ¿Eres un omega sin marca no es así? - preguntó mientras el peliceleste nervioso sonrió.

Mystoria: ¿se nota mucho? ¿O por qué eso es relevante? - preguntó.

Écarlate: porque será muy peligroso para ti estar en este castillo repleto de alfas una vez entres en celo - respondió.

Mystoria: no deberías preocuparte por eso, si no tomo un supresor no vendre en esos días - aseguró sonriendo.

Écarlate: ¿Aspros no te ha explicado las reglas? - preguntó.

Mystoria: ¿reglas? ¿De que hablas? - preguntó.

Écarlate: por seguridad, tú y tú otro compañero se quedarán viviendo aquí hasta que ya no sean necesarios, Kardia le pidió a Aspros específicamente aclararles eso antes de dejarlos entrar ¿no se los dijo? - preguntó mientras veía cómo él omega preocupado lo veía.

Mystoria: ¿Que? - preguntó.

Mientras tanto.

Con Dégel.

Dégel confundido pasaba su mano frente a los ojos del alfa que había quedado prácticamente estático en su lugar después de verlo entrar. Aspros únicamente los veía de brazos cruzados desde la puerta, aguantado sus ganas de reír.

Dégel: ¿hola? ¿Hola? ¿Estas bien? - preguntó.

Aspros: Kardia no te quedes así cómo idiota mirando dile algo a tú profesor - dijo mientras Kardia únicamente parpadeó un poco, para después restregar sus ojos.

Kardia: perdón, perdón... es que... sentí algo raro - respondió mientras Dégel confundido vio el leve color carmesí que habían tomado las mejillas del alfa frente a él, ¿estaría enfermo?

Aspros: bien, los dejo para que se conozcan, iré a ver cómo va Écarlate, es el que más nervioso me tienen si me permiten confesar - dijo para después retirarse de la habitación, dejando a ambos chicos solos en aquella habitación, Kardia unicamente veía a Dégel que después de un momento preguntó.

Dégel: ¿tengo algo en la cara o por que me vez así? - preguntó molestó mientras él peliazul lo veía incrédulo.

Continuará...