Un mes después.

Narra Mystoria.

Me parecía una locura ver lo que mi visa había cambiado en tan solo un mes, suspire algo nervioso mientras esperaba que Écarlate entrará a la habitación con la noticia, últimamente me había estado sintiendo mal, así que después de que Écarlate me comentara de la estupenda noticia de que su ex había terminado una carrera de medicina, cosa rara para un omega, le pidió revisar mi malestar, aunque ya sabía cual era la razón, me ponía bastante nervioso el reaccionar de él.

Mystoria: a ver, a ver, vamos a calmarnos, después de todo esto era lo que quería ¿cierto? - me pregunte nervioso, para después escuchar cómo la puerta se abrió, dejando ver al Écarlate que con una sonrisa se acerco corriendo para abrazarme.

Écarlate: Si, lo logramos - me dijo sonriendo.

Mystoria: ¿Entonces si? - le pregunte, el se separó para después asentir con una gran sonrisa, dirigió si vista hasta mi vientre, para después abrazarme a esa altura, escondido su rostro ahí, susurrando una cosa que me hizo sonreír.

Écarlate: hola pequeño o pequeña cachorro, yo soy tú papá, te espero con muchas ansias. Te juro que seremos una familia muy feliz - aseguró sonriendo.

Mystoria: jeje, estoy seguro que así será Écarlate, no tienes porque decírselo - le dije sonriendo.

Écarlate: claro que hay que decirlo, si escuchar esas palabras te hace feliz a ti cómo su mami, también lo hacen feliz a él o ella porque siente todo lo que tú y es mi obligación encargarme de que se sientan bien y cómodos - aseguró mientras yo unicamente sonreí al escucharlo.

Me parecía bastante tierno el hecho de que se encargará de hacer hasta lo imposible por hacerme sentir bien, tranquilo, seguro y protegido a su lado, la verdad era que cada vez me sentía mucho más tranquilo con la idea de haberme dejado marcar por él. Mis pensamientos se vieron interrumpidos al escucharlo toser, por lo cual me separe un poco, dejandolo descansar su cabeza sobre mi regazo.

Écarlate: Cof, Cof, Cof...

Mystoria: Écarlate ¿te encuentras bien? - pregunte preocupado mientras lo veía, el por su parte unicamente sonrió, para después responderme.

Écarlate: claro que si estoy bien Mys... únicamente me sentí un poco mal, me dolió un poco el pecho - me respondió mientras yo, preocupado únicamente comencé a tomar su temperatura con el dorso de mi mano.

Mystoria: pues... no tienes temperatura, que extraño. ¿no quieres que te revise también el medico? - pregunte preocupado, el rápidamente negó, para después tomar mi mano entre las suyas, dejando un beso en el dorso de esta, haciendo que me sonrojara un poco.

Écarlate: hm... no. Los médicos del castillo son exclusivamente para cuidarte a ti y nuestro cachorro ahora - aseguró sonriendo.

Mystoria: no seas tonto, tienes que cuidarte tú también, ¿que haremos nosotros si algo malo te sucede? - pregunte intentando ocultar de manera estúpida mi sonrojó.

Écarlate: nada me va a pasar tranquilo, no tienes porque preocuparte por mi, por cierto... te vez hermoso con esos sonrojos tan agresivos golpeando tu rostro - me dijo haciendo que yo del nerviosismo que comencé a tener, lo empujará lejos de mi regazo, haciéndolo caer al suelo.

Me di la vuelta aún sentado en la cama, completamente nervioso, aunque lejos de esperar el típico regañó por haberlo tirado, únicamente lo escuché reír desde el suelo, por lo cual me voltee levemente, encontrando me con su mirada, cosa que me hizo volver a voltearme mientras el reía más por eso, aunque no pudimos seguir más con nuestro pequeño "juego" porque Aspros entró a la habitación sin haber tocado la puerta antes.

Aspros: lamento mucho interrumpir su momento privado, pero príncipe Écarlate, él consejo solicita su presencia de manera inmediata - pidió, haciendo que Écarlate se levantara del suelo rápidamente.

Continuará...