La sala de golpe se encuentra en silencio, y Harry siente la emoción burbujeando en la boca de su estómago. A pesar de que la noche iba a ser junto a Iris, la idea de tener a Louis solo para él ahora no suena para nada mal.

—Hey abuelo, al parecer nos hemos quedado solos -Louis dice con una sonrisa divertida dejando el bol de palomitas sobre la mesita de café.-

Harry lo mira, y se muere por besarlo, por acariciar su cabello castaño y descubrir si es tan suave como parece, se muere por entrelazar su mano con la de Louis y quedarse así eternamente. Pero sin embargo, se limita a sonreír. Había algo en lo cómodo que se sentía con el castaño que hacía que Harry quisiera sentarse en su regazo y besarlo durante horas, quizás hasta que el sol saliera y las estrellas fueran invisibles.

—Eso parece -Susurra mirándolo con un leve sonrojo por sus propios pensamientos, y agradece que la única luz que hay en la sala sea la del televisor.-

—¿Quieres que me vaya? -Louis le pregunta y Harry niega rápidamente-

—No, quédate.

Louis sonríe y Harry podría jurar que sus ojos azules se iluminan en la oscuridad de la noche.

—Si me lo pides así no puedo negarme -Harry sonríe, enseñando sus dos hoyuelos- ¿Seguimos viendo la película? Sorprendentemente me está gustando bastante.

—Te emocionas con unos nuggets de dinosaurios, ya nada me sorprende -Dice divertido a lo que Louis rueda los ojos-

Harry pone de nuevo la película, sentándose un tanto alejado de Louis y comenzando a jugar con las mangas de su suéter un tanto nervioso. Siente la mirada de Louis sobre él, pero no se atreve a mirarlo de vuelta, tan solo mantiene su mirada clavada en la película y pretende que su corazón no está desbocado.

—Ven aquí -Louis dice en un susurro haciendo que Harry finalmente lo mire.-

Louis abre levemente los brazos y deja un hueco a su lado para que Harry pudiera tumbarse con él, y el corazón del rizado parece detenerse de golpe. Sonríe nervioso antes de acercarse hasta Louis, tumbándose con cuidado justo a su lado.

Louis no parece muy satisfecho, así que coloca su brazo por debajo del cuerpo de Harry y lo pega más a él. Seguidamente toma una de las mantas que se encuentran esparcidas por el sofá y tapa al rizado, dejando un beso en su frente antes de abrazarlo.

Harry siente cómo todo su cuerpo se llena de calor ante eso, y tiene una sensación tan agradable en su pecho que quiere taparse el rostro con una almohada y gritar de la emoción. Eso era lo que Harry siempre había anhelado, sentir ese cálido sentimiento en su pecho que gritaba "esto es todo lo que buscabas, así es como se siente"

—¿Estás bien? -Louis pregunta en voz baja, mirándolo con ojos brillosos. Y Harry siente las malditas mariposas revolotear sin cesar de un lado a otro-

—Sí -Susurra mirándolo a los ojos-

—Bien -Asiente con una pequeña sonrisa-

Louis vuelve a dirigir su atención a la película, pero Harry no puede concentrarse en nada más que no sea él. En Louis abrazándolo, en su aroma y en cómo se veía tan tranquilo viendo una estúpida película para niños.

Harry podría quedarse horas observándolo, tan solo analizando cada pequeña parte de él.

—Louis -Lo llama entonces en un murmuro que apenas puede escucharse sobre el sonido de la televisión, pero Louis lo mira-

—¿Si? -Pregunta, poniendo ahora toda su atención en el rizado-

Hay tantas cosas que Harry quiere decir, tantas cosas que desea que Louis sepa. Pero ni siquiera sabe por dónde empezar.

—Me alegra que estés aquí -Es lo que termina diciendo, intentando hacerle saber que realmente aquello era importante para él.-

Una enorme sonrisa se dibuja en los labios del castaño, y Harry se muere por besarlo.

—A mi también.

—¿Dirías que está siendo una buena cita? -Pregunta un tanto tímido pero con una pequeña sonrisa divertida en su rostro-

—Diría que está siendo la mejor cita que he tenido nunca -Afirma levantando su mano para apartar uno de los rizos de Harry fuera de su rostro-

—No debes de haber tenido citas muy buenas entonces -Responde entonces, con las mejillas rojizas ante el acto-

Louis lo mira falsamente ofendido antes de negar.

—Para tu información, he tenido citas increíbles.

—¿Y esta es la mejor de todas? -Pregunta levantando una ceja-

El castaño frunce levemente el ceño mientras asiente.

—Claro, en las otras no había nuggets de dinosaurios

Aquello le arranca una risa sincera al rizado, que rápidamente oculta con su mano.

—Supéralo -Le dice aún con una grande sonrisa-

—Nunca, pero si me dejas hacer la cena en nuestra próxima cita puedo intentarlo.

"Nuestra próxima cita" Las palabras se graban a fuego en el pecho del rizado, su corazón se acelera rápidamente. Las palabras se sienten como la brisa más agradable una tarde de verano, como llegar a casa y preparar tu comida favorita, como bailar bajo la lluvia mientras ríes.

Louis realmente quería otra cita con él, quería cocinar para él. ¿Cómo podría Harry negarse a ello?

—Acepto. -Sonríe ampliamente-

—No te arrepentirás.

Harry está seguro de eso, de que no podría arrepentirse de nada que tuviera que ver con Louis.

—¿Cómo era eso de que no sabías cocinar? -Pregunta con diversión, haciendo que Louis ruede los ojos-

—Cállate, va a ser la mejor cena de tu vida.

—Mientras no termine en el hospital todo irá bien. -Se burla, y Louis lo fulmina con la mirada-

—Pequeña mierda -Susurra-

Harry entonces deja un rápido beso en su mejilla y dirige toda su atención al televisor, con el leve rubor bailando en sus mejillas.

✧.*˗ˏˋ꒰ ⚽️ ꒱

Cuando la película termina, ninguno parece tener la intención de moverse. Los créditos de la película aparecen dejando la sala aún más oscura, y Harry sigue pegado al pecho de Louis mientras el castaño lo abraza por encima de las cálidas mantas.

En silencio, ninguno se mueve, ninguno quiere alejarse del otro.

—¿Tienes sueño? -Louis entonces pregunta en voz baja, a lo que el rizado niega levemente-

—Quiero un té -Susurra, y Louis sonríe-

—Hagamos té entonces.

Cuando entran en la cocina, Louis se apoya en la encimera cruzándose de brazos con una pequeña sonrisa, observando cómo el rizado se mueve de un lado a otro para preparar el té.

Coloca el agua a hervir para seguidamente sentarse sobre la encimera mientras espera, y Louis entonces se acerca a él. Harry se muerde levemente el labio, y por puro instinto abre sus piernas dejando que el castaño se coloque entre ellas, con una sonrisa satisfecha dibujada en sus labios.

Su corazón baila en su pecho y las mariposas parecen enloquecer dentro de él.

—Hola -Louis susurra, cortando bastante del espacio que les separaba-

—Hola -Dice de la misma forma, con brillo en sus ojos-

—Estas precioso -Susurra, y las mejillas de Harry explotan en colores rosados mientras su corazón enloquece-

¿Cómo pudo haber huido de este sentimiento por tanto tiempo? ¿Es esto de lo que todos los libros hablan? ¿Así es como se siente?

—No digas eso -Pide con la mayor sonrisa en sus labios-

Louis parece confundido de repente.

—¿Por qué no?

—Porque suena demasiado bien cuando tú lo dices, y podría acostumbrarme.

—No hay problema, puedo repetirlo todos los días.

Harry no aguanta más. Tiene a este chico frente a él, mirándolo a los ojos como si fuera la mejor cosa en el universo, mientras le dice lo precioso que se ve y simplemente no puede más. Así que toma el rostro de Louis entre sus manos y lo acerca suavemente para besarlo, para finalmente volver a tener sus labios sobre los suyos.

Es un beso lento, pero que expresa todo lo que Harry no podía decir con palabras. Un beso tranquilo, pero Harry siente cómo todo su cuerpo se prende en llamas.

—Tu también estás precioso -Susurra, pegando su frente con la del castaño una vez se han separado, uniendo sus respiraciones levemente agitadas.- Increíblemente bonito.

Louis sonríe y coloca sus manos en la cintura del rizado.

—Estaba tan preocupado, de que te arrepintieras de lo que pasó la otra noche. -Confiesa, a lo que Harry frunce levemente el ceño-

—No me arrepiento de nada, la otra noche fue increíble. -Dice con sinceridad mientras acaricia las mejillas de Louis-

—Ciertamente lo fue, aunque estaba malditamente nervioso porque no quería que pensaras que estoy loco.

—Oh definitivamente pienso que estás loco -Se burla, a lo que Louis rueda los ojos-

—Ambos lo estamos.

—Claro señor de los doscientos cupcakes en mitad de la noche. -Louis abre la boca sorprendido, apretando levemente la cintura de Harry-

—Yo solo quería ayudar a un bonito chico -Harry se muerde el labio-

—¿Si? ¿Y ayudas a todos los chicos bonitos con problemas de repostería o debería sentirme especial?

—Definitivamente siéntete especial, no me verás haciendo tantas malditas magdalenas por nadie más en mi vida.

Harry tiene que morderse el labio en un intento de no sonreír ampliamente ante las palabras.

—¿Entonces soy especial?

—Por supuesto, cariño.

Louis suelta una pequeña risa al ver el evidente rubor en las mejillas del rizado, y Harry quiere hacerse pequeño y desaparecer porque no puede ocultar todos los sentimientos que de golpe lo envolvían.

Finalmente terminan preparando sus tazas de té y Harry ríe mientras Louis le cuenta una historia sobre sus hermanas y como terminaron maquillándolo a las dos de la madrugada. Se siente tan doméstico, y terminan hablando en la cocina durante lo que parece ser una eternidad. Hablan de todas esas cosas que nunca habían compartido entre ellos. Porque a pesar de que se sentía como si se hubieran conocido durante años y hubieran pasado por todo juntos, la realidad era que no sabían realmente mucho el uno del otro.

Harry quería averiguarlo todo, desde las cosas más simples hasta las más complejas. Quería saber si a Louis le gustaba el café o si podría vivir sin el, cuál era su restaurante favorito, que discusión podría hacerlo explotar y si siempre dormía de la misma manera o cambiaba de posición cada noche.

Todas las pequeñas y grandes cosas de Louis, quería cada último detalle.

Y lo hizo, en la tranquilidad de su cocina mientras la luz de la luna se colaba por la ventana y entre tazas de té, ambos comparten hasta los más mínimos detalles de sus vidas. Y Harry siente que nada podría ser mejor.

✧.*˗ˏˋ꒰ ⚽️ ꒱

Terminan la noche de vuelta en el sofá, en la televisión están poniendo un reality show que Louis critica seriamente mientras que Harry se ríe por sus comentarios. O al menos eso hacen hasta que el rizado comienza a quedarse dormido encima del castaño.

—Harry -Lo llama en un susurro, pero Harry está tan cómodo con su cabeza en el pecho de Louis, que simplemente lo ignora- Cariño te estás quedando dormido.

—No -Responde en un susurro adormilado-

—Sí, amor -Louis dice comenzando a acariciar el cabello de Harry con cariño-

Harry sonríe, aferrándose más al cuello de Louis, abrazándolo con más fuerza ante sus palabras que desatan caos en su interior a pesar de estar medio dormido. Quiere quedarse allí eternamente, sobre el pecho de Louis, sobre su sudadera verde de Adidas que huele a perfume y cigarrillos, quiere quedarse eternamente con las manos tatuadas de Louis abrazando su cintura mientras le dice sobrenombres como aquellos.

Quiere todo y más.

—Te estoy viendo sonríe -Louis dice, y aunque no puede verlo, Harry sabe que también está sonriendo- Vamos cielo tienes que ir a la cama.

Harry gruñe levemente y se aferra más al ojiazul.

—Las camas están sobrevaloradas, a partir de ahora te usaré a ti como colchón -Dice, sabiendo que se arrepentirá mañana de sus palabras. Pero ahora, en la comodidad de la noche, después de un cálido té y en los brazos de Louis, a Harry no le importa divagar-

El castaño suelta una pequeña risa que hace retumbar su pecho, y Harry se muerde el labio para ocultar su sonrisa.

—No me molestaría cariño, pero por ahora tengo que volver a mi apartamento y tú debes descansar.

Suspira, porque Louis tenía razón. Pero en aquel momento todo se sentía tan bien, que simplemente no quería apartarse y que el sentimiento desapareciera.

—No quiero que te vayas -Dice con sinceridad-

—Ni yo irme, pero nos veremos pronto.

—¿Lo prometes?

—Por supuesto, tenemos otra cita pendiente.

Harry finalmente asiente, apagando la televisión para seguidamente levantarse de mala gana mientras se frota un ojo con cansancio.

—¿Te acompaño? -Louis le pregunta una vez ha terminado de ponerse su chaqueta vaquera, a lo que el rizado asiente-

—Sí, por favor.

Louis sonríe levemente y entrelaza su mano con la de Harry para comenzar a caminar hasta la habitación del ojiverde, que se encuentra al fondo del largo pasillo. Se detienen en la puerta y Harry no quiere soltar la mano de Louis que encaja tan bien con la suya, como si hubieran sido hechas para ser entrelazadas.

—Buenas noches, precioso -Louis dice dejando un casto beso en su frente que hace que Harry sonría con cansancio-

—Buenas noches Lou, gracias por venir -Susurra, mirándolo con brillo en sus ojos-

—Gracias por invitarme

Harry se acerca para dejar un pequeño y corto beso en los labios del castaño.

—¿Sabrás salir? -Le pregunta una vez se separan, a lo que Louis ríe levemente-

—Creo que no me perderé -Dice divertido.-

—Más te vale que no porque tendrás que dormir en el suelo. -Louis lo mira falsamente ofendido, frunciendo el ceño levemente-

—¿Ni siquiera tengo la opción del sofá? -Pregunta dramáticamente, a lo que Harry rueda los ojos con una pequeña sonrisa-

—Bobo

Louis sonríe y se acerca para dejar otro pequeño beso sobre sus labios.

—Nos vemos pronto, bonito.

✧.*˗ˏˋ꒰ ⚽️ ꒱

Las fuertes gotas de lluvia en las ventanas despiertan a Iris, quien no tarda en levantarse de la cama para tomar una manta y ponerla encima de sus hombros. Sale de su habitación y sonríe mientras camina hasta la de su padre, recordando que anoche fue la cita con el entrenador Lou. Cuando llega a la habitación de Harry, abre levemente la puerta para encontrarlo durmiendo plácidamente en su cama.

La niña entonces sonríe antes de volver a cerrarla y corre hasta la cocina, donde el teléfono de la casa se encuentra encima de la encimera. Iris se sube a una de las altas sillas que se encontraban frente a la encimera de mármol y toma el teléfono para marcar aquellos números que ya se sabía de memoria.

—¿Sí? -La voz adormilada de Niall le responde al otro lado de la línea-

—Buenos días tío Niall -Saluda con una sonrisa, moviendo sus piernas de un lado a otro-

—¿Iris? -Pregunta confundido- ¿Está todo bien?

—Todo bien, todo genial -Asegura-

—Sabes que amo hablar contigo cariño, pero son las seis de la mañana -Dice el rubio en un suspiro-

—Papá tuvo la cita con el entrenador Lou anoche -Es todo lo que dice, como si aquello fuera más que justificación suficiente para llamarlo a esas horas-

—Lo sé -El rubio sonríe a pesar de que Iris no puede verlo- ¿Lo pasaste bien?

—Nop, me fui a dormir.

Hay un silencio que dura varios segundos, hasta que Niall finalmente dice;

—Estaré allí en veinte minutos.

La pequeña sonríe satisfecha y asiente para sí misma.

—¿Pancakes? -La pregunta a su tío con emoción-

—Cuenta con ello.

***

N/a: ea, capítulo para vosotros<3 Espero que os encante y lo disfrutéis, mil gracias por leer :*