Chapter; .2.
Observaciones
Llamé a Bulma, tardó unos segundos para responder, pero cuando lo hizo inmediatamente le espeté,—Es un mal chiste de tu parte, ¿cierto?,—Aunque Bulma era mi científica, la mayor parte del tiempo nos peleábamos, o ella estaba histérica o yo estresado, uno de dos, a veces los dos en uno solo.
Así que esto -mirando a la hembra que volvió a sentarse al lado del umbral- debe ser un error a propósito de su parte.
—Chsss, me duele mi cabeza, —imaginé su ceño fruncido y aquel alborotado cabello azul acompañándola siempre,— escucha —inhala fuerte— ella es tu pareja.
Negué variadas veces, eso debe ser un error, un auténtico error.—No te creo.
—Es tal como la describiste en tus fantasías...
—Ella es todo lo opuesto a lo que yo imaginé,—miré en dirección a la muchacha que se encontraba mirando sus dedos con mucha curiosidad,—es muy pequeña para mí, Bulma.
—¡¿Qué?!—Alejé un poco el aparato de comunicación por su repentina subida de tono,— describela, haré un informe de tu caso.
Pasé mi mano por mi cabello e inhalando le respondí,—Me llega a la cintura, es muy delgada...—recordé cuando la sostuve de sus hombros y estas se enrojecieron fácilmente,— y débil, —escuchaba sus murmullos de "continua"— no tiene cola...
—Eso es muy curioso, hmm, sigue.
Caminé hasta la pequeña mujer e inclinarme sobre mis rodillas ante sus orbes oscuros observándome volviendo a sentir esa corriente en mi espina dorsal, reteniendo esa incomodidad para extender mi mano a su rostro y deslizarla, ella retrocedió su rostro, como si el simple tacto de mis dedos no fueran de su agrado.
—Su piel es suave, —añadí acercándome demasiado a su persona para olerla, cosa que causó muchos revoleteos en mi interior calentándolo y estremeciendolo,— huele delicioso.
Bulma carraspeo de repente y yo enarque una ceja,—Definitivamente no anotaré eso último y lo anterior.—Se escucha como si cerrara algo,—en unos días iré a tu domicilio para verificar si es tu entrega.
—¿Y qué hago con ella?—pregunté confundido.
—Conservarla temporalmente.—respondió fácilmente, sentí una irritación por sus palabras.—Tienen inteligencia propia Goku, así que no estarás con un bebé.—Bulma provenía de un Planeta lejano y por lo que me ha dicho, bebé aquí significa crio. Suspire pesadamente, mis ojos cayeron abajo de su cuello al ver la abertura de su vestimenta.
Bulma tenía eso, las pocas hembras que llegué a ver también tenían eso, pero esta chica los tiene muy chiquitos, sus montañas son apenas lomas que no evite mi curiosidad para tocarlos.
Ella emitió un sonido suave que logró mandar corrientes eléctricas recorrer por mi vientre hasta la punta de mis dedos.
—Sus...cosas...no son como las tuyas.
—¿A qué te refieres con sus "cosas"?
Tragar mi propia saliva fue bastante difícil pero no tanto como mis ojos no dejaban los suyos, repentinamente sus mejillas se volvieron de color rosa. ¿Era una especie de técnica nueva?.
—Lo que está en medio tuyo, esos bultos que dices que te molestan tenerlas, —le recuerdo.
La muchacha alza sus delgados brazos extendiendo sus manos hasta mi muñeca y envolverla, comenzó a retroceder y alejar mi mano de su casí invisible bulto, terminando por alejarlo por mi cuenta sintiéndome extraño al ver sus gestos incómodos.
—¿Le tocaste sus senos, verdad? ¡cielos, Goku!, ¡acaso no conoces la anatomía del cuerpo de una Mujer!.
Senos...
—Yo-yo, nunca pensé que debería saberlo, además sus existencia son pocas.
—¿No te dieron una información de lo que...oh cielos debí informarte yo.—escuché un leve golpe, ¿se golpeó sola?— te haré llegar unos papeles, ahí están todas las respuestas sobre tu pareja.
No es mi pareja, es una entrega muy equivocada.
—Lo que sea.—La llamada se cortó, coloqué el aparato a un lado de mí para sentarme frente a la pelinegra envolviéndonos el rotundo silencio de mi hogar, silencio que decidí romper,— ¿cúal es tu nombre?
Sus orbes oscuros volvieron a conectarse con los mios como una clase muy atrayente, sus ojos tenían algo que me atrapaban, quizás era por la oscuridad que albergaba en ellas no pudiéndose ver sus pupilas, o los brillos que le acompañaban, no lo sabía con claridad, pero, de alguna extraña manera, me gustaba.
Humedeció sus labios con su lengua, me sentía desorientado y muy confundido con cada mísero movimiento de su parte, era muy curiosa para mí, me encantaba descifrar para no quedarme con la duda.
—¿Qué es eso?—su voz muy suave fue un cosquilleo en mi interior.
Preguntó.
Y quedé mucho más dudoso que hace unos segundos, ¿ella no sabía que era un nombre?
••••••
Ja, ¿a qué extremo llegará la inocencia de nuestra chequeta? (͡° ͜ʖ ͡°)
Gocenlo❤
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