CAPÍTULO 48
CAPÍTULO 48
Había pasado una semana y me sentía totalmente recuperada, el señor Rogers hizo caso omiso de la situación el día del incidente y continuamos como siempre.
—¿Ya te sientes al 100%? —me preguntó el señor Rogers, luego de una breve reunión.
—En ningún momento dije que no lo estaba, pero lo estoy. —sonreí.
—Perfecto, entonces quiero que te prepares para mañana. Iremos a la empresa de tu padre para discutir algunas irregularidades, ¿Estás de acuerdo?
—Mi opinión no importa, debo ser profesional y favorecerlo a usted, según la situación. —caminamos hasta el estacionamiento.
—Eres una gran profesional, y muchas veces más de lo que deberías. Piensa en ello, nos vemos mañana.
Sin más se fue, dejándome totalmente confundida por sus palabras. ¿Acaso mi sentido de profesionalismo estaba mal?
Negué ante la pregunta, cuestionando lo que pasaba por la mente de las personas en esos momentos.
En cuanto llegué a mi departamento recibí un mensaje de un número desconocido.
**********: Lily, ¿Estás lista para lo que se viene? ❤️
—¿Xavier? —solo él escribía y decía esas cosas, y lo hacía para molestarme. —No tengo tiempo para ti. —bloqueé el número mientras me dirigía a tomar una ducha.
Al día siguiente estaba en el elevador con el señor Rogers, camino a la reunión que tendría en la empresa de mi padre. Al llegar saludamos y tomamos nuestros lugares, ante la mirada de los presentes.
—¿Su hija no trabaja con usted? —preguntó un hombre que no había visto hasta el momento, dirigiéndose a mi padre.
—No, decidió tomar otro rumbo y la respeto.
Evité mirarlo, pero presté atención a la reunión que se llevaría acabo. Básicamente trataba de un posible acuerdo con el presente y mi padre me presentó como su sucesora ante él.
—¿Esto es necesario? —pregunté, sin ánimos de molestar.
—Claro que si, ahora mismo no trabajas conmigo, pero todo esto te pertenece y en caso de aceptar el acuerdo quiero que lo firmes tu.
—¿Y que le hace pensar que lo firmaré? No tengo tiempo para ocuparme de éstas cosas y firmar algo de lo que no me ocuparé o en todo caso, del cual no sé de qué se trata, definitivamente no es mi estilo. —lo miré con seriedad y luego al otro presente. —Y con todo respeto, su acuerdo no me convence. Tiene muchas faltas que no se arreglarán en el proceso, exijo una presentación adecuada aunque la rechace.
Tanto el señor Rogers como Ryan permanecieron en silencio, pero el segundo dibujó una leve sonrisa en sus labios.
—Es como dicen los rumores. —sonrió con nerviosismo.
—No sería propio llevarse por los rumores, pero si se refiere a mi arrogancia. Todos afirman eso.
—No me refería exactamente a eso, en realidad dicen que nadie debe molestarla. —desvió la mirada. —Estoy de acuerdo con sus puntos, pero esto fue improvisado. He esperado tantos meses para ser recibido y tratar este tema que no sirvió de nada.
—Entonces esfuercese más.
—Lily. —me detuvo mi padre.
—Como sucesora respondo como debe ser, y como asesora legal, me niego a aceptar. No era mi intención molestarlo, señor Walker. —lo miré nuevamente y retuvo sus palabras.
—Ya que nos compete a ambos... —habló Ryan. —posterguemos esta reunión para otro momento.
—Estoy de acuerdo. —respondió mi padre y salimos de la sala.
Tanto él como Ryan quedaron cruzando algunas palabras con aquel hombre, mientras con el señor Rogers nos dirigiamos al elevador.
—Es cierto... —mencionó buscando entre sus cosas. —Lily, ¿Podrías ir con Ryan y pedir unos documentos? Ya debía tenerlos listos.
—Está bien.
—Nos vemos en la empresa.
Caminé rumbo a su oficina, toqué, pero no respondió. Suponía que aún no había regresado y no respondía mis mensajes, así que pasé para esperarlo. No podía tomar cualquier documento entre la pila que tenía en su escritorio, y mientras tomé un portarretrato con una fotografía de él con Max.
De pronto escuché abrirse la puerta y como acto automático, por no decir “inutil” me oculté debajo del escritorio. Ese acto tenía una explicación, pero no podía salir sin más, aún cuando lo escuché hablar con alguien.
—Las ganancias aumentarían un 30% en un mes y eso es gran avance. —escuché al mismo hombre.
—Uno magnífico, en estos días que el mercado está en alza es mi deber hacer lo mejor posible en esto y que no decaiga.
—Claramente aunque...
—¿Quiere decirme algo más? Lo he visto titubear desde la reunión.
Me acomodé en aquel diminuto lugar para poder escuchar su respuesta.
—Lo que quiero saber es sobre su socia, luego de que Walker la presentara y pronto será nombrada como sucesora muchos no estuvieron de acuerdo y tampoco lo estarán. Aunque está forjando su propio perfil, nadie la conoce y tampoco la reconoce, muy diferente a su hijo mayor, pero ya no está aquí. Todos se preguntan si la chica podrá hacerlo, esto es una gran responsabilidad tanto para la familia Walker como para los Rogers...
—Sé qué se refiere a la asociación directa de Rogers Empire con Walker y qué eso podría causar problemas, pero... —escuché sus pasos acercarse. —no debe preocuparse, creo que ella tiene la aptitud y actitud suficiente para el trabajo y ante cualquier problema estoy para resolverlo. Sin embargo, debo confesar que ella misma tiene esa actitud al no sentirse cómoda con la idea de ser la sucesora.
—¿Es así?
Se sentó en su silla balanceándose un poco hasta que sus piernas chocaron conmigo. Claramente lo sintió y se inclinó para observar, lo primero que hice fue fingir y pedirle que guardara silencio.
—Lo es... —me miró de mala gana para regresar la vista al presente. —Todos saben de nuestra sociedad y que pasarán directamente a nosotros, es por eso que cualquier acuerdo o inversión nos compete a ambos y a nadie le molesta. Después de todo, ¿Quién no querría trabajar con potencias como lo somos?
Hice una mueca de desagrado mientras lo imitaba, había sonado tan arrogante que quise golpearlo en ese momento.
—Es por eso mismo que me gustaría un acuerdo con ustedes, realmente espero que podamos trabajar juntos.
—Discutiré esto con la señorita Walker y programaremos una reunión futura. —se levantó para despedirlo y en cuanto escuché la puerta, me levanté. —¿Que se supone que haces aquí? ¿Quién está jugando contigo? —se acercó.
—¿Jugando?
—Pareces una niña jugando a las escondidas. —pasó hasta su escritorio para tomar asiento.
—No estoy aquí por gusto, tu padre me envió a buscar un documento qué, debían estar listo.
—¿Y creíste que los tenía debajo del escritorio? —lo miré mal y buscó lo pedido. —Está bien. —sacó dichos documentos de uno de los cajones. —Son estos.
—Bien —los tomé. —Ahora me voy.
—Espera, ¿Cuando podemos reunirnos para platicar?
—No lo sé, y al ser por mismo de la reunión, no me apetece.
—Está bien. Nos pondremos acuerdo luego. —tomó algunas carpetas para trabajar, ignorándome completamente.
Salí de allí dispuesta a irme hasta que recordé la tarjeta y lo que le debía preguntar a mi padre.
Toqué la puerta de su oficina hasta recibir su aprobación y poder ingresar.
—¿Lily? Creí que te habías ido. —me miró con curiosidad.
—Como puedes ver, no lo hice. Solo te haré una pregunta. —me acerqué luego de que asintiera.
—Dime.
—¿Quién es George Walker? ¿Tiene alguna relación con nosotros?
—¿Por qué la pregunta?
—Tengo curiosidad.
—Puedes ser curiosa, pero preguntarlo de ese modo no es algo común, ¿Lo encontraste en algún lado? —frunció el ceño.
—Puede ser...
—George Walker... —interrumpió. —es un hombre con el que jamás deberías relacionarte, en mi juventud trabajamos juntos, pero ya no más. No tenemos ningún tipo de relación y será mejor que no te involucres con él. Aunque por juzgar por su edad, no pensé que seguiría con vida. —murmuró lo último, aunque pude escucharlo con claridad. —¿Entendido?
—Creo que si me involucro o no, no dependerá de mí. Ahora me retiro señor Walker.
Sin esperar respuesta salí, con más dudas que respuestas, ¿a qué se refería con lo que dijo? ¿Era un hombre peligroso? Quizás, pero, la implicancia de mi persona o de los demás no dependía de mi; como lo había mencionado. Al parecer ese hombre buscaba algo de nosotros, o eso se podía interpretar de su visita al empleado de Rogers Empire.
¿Alguien sabe quién es George Walker?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro