A la mañana siguiente

Había sonado la primera alarma para que los reos salieran de sus celdas, todos estaban curiosos por saber qué putas había pasado anoche y de quién fueron esos horribles gritos de agonía. Los primeros en entrar a las duchas se quedaron horrorizados al ver semejante festival de sangre seca y sesos esparcidos por todos lados; Uno de los reos no pudo evitar salir corriendo del lugar y vomitar en una esquina afuera del pasillo por la impresión en que la escena tan grotesca le afectó. 

El murmullo y la aglomeración de recursos era tanta que los guardias tuvieron que ir hasta las duchas para sacarlos a todos; estos ya sabían que había pasado, obviamente, pero también se impresionaron al ver el salvajismo con que uno de sus compañeros, fue asesinado de esa manera tan atroz.

Los guardias, al sacar a los reos del lugar, tuvieron que llamar a un equipo especial para que retiraran el cuerpo de SukJun y limpiaran el lugar  debido a que ya llevaba muerto varias horas y el cadáver se encontraba en estado de descomposición y el fétido olor en el ambiente era verdaderamente insoportable.

La noticia se esparció por toda la prisión en minutos, todos sabían que Taoki fue el causante de tal barbarie. ¡Carajo! limpiar ese cuarto de duchas sí que sería un trabajo arduo para poder quitar el olor y todo rastro de sangre y residuos de ese pobre infeliz.

Llegadas las 8:00 am los presos fueron al comedor por sus desayunos. Taehyung y Jungkook fueron los primeros en pasar, una deliciosa tortilla de huevo y carne, con jugo de mora para tomar, fue la comida de ambos, luego Yoongi con Jimin pasaron por sus bandejas, era lo mismo, con la única diferencia de que en lugar de jugo, a ambos les fue servido un delicioso y humeante café expreso moca; Todos se fueron a la mesa y comenzaron a desayunar.

—Oye, Taoki, mira quién apareció —Habló Yoongi, haciéndole una seña con la vista hacia la fila donde los reos esperaban su turno para comer, el rey enfocó su vista en Hoseok, se veía bastante demacrado. ¡Dios, ¿tanto le afectó el cambio de celda?!  

—Parece que no ha dormido en meses.

—¡Pelirroja! —Gritó el mandamás, llamando la atención de Hoseok, quien volteó a mirarlo.

—Ven

La pelirroja frunció el ceño extrañado, ¿para qué lo estaba llamando el rey? Joder, de paso tenía al imbécil de Jungkook sentado a su lado.

—¿Sí? -Dijo con indiferencia al llegar a la mesa.

—No tienes por qué esperar con los demás reos, tonta, pasa adelante y el cocinero te dará el desayuno, me encargue para que recibas lo mismo que nosotros, además, puedes venir y sentarte a comer acá.

—No pretendo estar en la misma mesa con ese maldito idiota que tienes al lado. Gracias por la invitación, pero prefiero comer solo.

—Como quieras —respondió Taehyung y continuó con su desayuno, le daba igual lo que hiciera honestamente, más bien debería agradecer que le estaba dando un trato especial al darle también un buen desayuno a ese tonto. Hoseok se dio la vuelta e hizo lo que Taoki le indicó, es decir, fue hasta el cocinero para que le hiciera entrega de su comida, se sentó justo a una mesa al lado de ellos, en esa mesa casi nadie se sentaba pues estaba al lado de la del rey y nadie se atrevía a estar cerca de ese hombre; Así que Hoseok aprovechó que iba a estar solo y se acomodó en ese lugar para al fin desayunar.

No pudo evitar ver durante todo ese rato fijamente a Jungkook, de haber podido le habría partido la jodida cara en ese momento, sentía tanto odio y rencor en su corazón por ese maldito ladrón de hombres que solo lo quería ver muerto.

—¿Será que tu estúpida novia celopata desteñida, cabeza de zanahoria, dejará de verme con esa ridícula mirada asesina en algún momento? —Se quejó Jungkook mientras se degustaba el ultimo bocado de su desayuno.

—¿Novia? —le preguntó el rey frunciendo profundamente el ceño. —Nunca lo fue, ni lo será en realidad.

—Si claro, hagamos como que te creí —Dijo rodando sus ojos y limpiando su boca con la servilleta.

—Qué? Lo digo en serio, solo lo usaba para follar, ya sabes, la carne es débil y a mi polla le gusta su lengua.

—Para follar dices, pero bien que te cabreabas si alguien quería robártelo —Interrumpió Yoongi. —Pero claro, ahorita dirás «es que nadie toca lo que es mío»> —Dijo haciendo el ademán de imitar la forma de hablar de Taehyung, en forma de burla, cosa que a Jimin le causo mucha risa y casi escupe el café que se estaba bebiendo en ese momento. No pudo evitar carcajearse al ver a Suga imitar al mandamás, es que lo imitaba de forma idéntica.

—Ya cállate, imbécil.

—Sabes, tenia que ir a hacer algo, pero como te gusta tanto imitarme.....— Hablo con énfasis y un deje de molestia en su voz. —... harás el trabajo por mi.

—¡Ay, no jodas! No seas aguafiestas ¡No aguantas nada —Se quejo.

—Y ahora qué quieres que haga? —Averigua quien de los guardias es el tal Kang Junho, el pequeño acá... —Dijo tocándole la mejilla a Jungkook con la punta de su dedo.— ... quiere tener una charla con él y acabar con ese cabrón. 

—¿Tu? —Yoongi lo señalo y lo miró confundido.

—Ajá. Ese hijo de puta pagará por lo que me hizo.

—Bien dicho. —Habló Jimin en apoyo a lo que Jungkook acababa de decir.

—No hay nada mejor que la venganza, es un plato que se sirve frío, o bueno, eso dicen. —Se encogió de hombros y le dio un sorbo a su café. 

—Bien, te tendré una respuesta al medio día, y ya no me molestes, coño —Gruñó el rubio rodeando a Jimin con su brazo por la cintura y acerc susando sus labios a su oído para susurrarle unas palabras.

—Vamos a mi celda, bebé.

Jimin se sonrojó al escuchar la forma tan provocativa en la que Yoongi le hablo para pedirle que fueran a la celda, sabía perfectamente bien para qué era que quería ir y por su parte también quería lo mismo, para que nos engañamos, él también quería follar. ¡Carajo! Tenía tantas ganas de sentir a Suga dentro de él y que lo hiciera morder la almohada y gritar su nombre en un gemido.

A Jimin se le esbozó una ligera sonrisa pícara en los labios y de inmediato se puso de pie al mismo tiempo que Yoongi, quien lo tomó de la mano y caminaron con sus dedos entrelazados.

—¿No es muy temprano para que estén pensando en follar? —les preguntó el mandamás antes de que se retirasen de la mesa, al verlos tomados de las manos de una forma tan romántica y acaramelada.

—Deja la envidia, que Jungkook no te haya dado el culo y tus bolas estén sufriendo no es mi culpa —sonrío triunfante.

Serás cabrón intentó ponerse de pie para patearle el culo pero este ya había corrido lejos junto con Jimin, burlándose de él en el camino.

Jungkook rio para sus adentros y le dio un sorbo a su jugo pero aún sentía un peso encima de sus hombros. Era Hoseok, quien no dejaba de verlo. ¿No se cansa? Joder! Ya se estaba fastidiando de ese idiota, pero si tanto quería mirarlo, entonces le iba a dar un espectáculo muy bueno, algo realmente digno de ver.

Jungkook miró de reojo a Taehyung y lo observó por unos segundos, un tanto pensativo, mientras tenía su vaso con jugo en mano, aprovechó que estaba distraído y se acercó a él como gatita en celo, trepándose en su regazo  y sujetándose de sus fuertes brazos hasta unir sus labios con los de él.

Estaba seguro que ese tal Hoseok estaba viendo la escena, por lo que aprovechó para no solo darle un simple beso al rey sino que lo profundizo, besándole con ganas los labios a Taoki, que por cierto estaba más que sorprendido. Era la primera vez que Jungkook se le acercaba para darle un beso de esa forma. ¿Por qué lo hizo?

Jungkook miró de reojo a La pelirroja y una casi imperceptible sonrisa se le dibujó al ver a este con la boca entre abierta y con ganas de ir corriendo hasta donde estaban ellos y apuñalarlo tantas veces como fuese posible.

Taoki pudo darse cuenta de la situación. ¿Así que lo estaba usando para darle celos a la pelirroja, no? Bien, hora de divertirse..

El mandamás tomo de la barbilla a Jungkook y la alzó levemente para darle otro beso. Pero esperen, ¡eso no era lo que había planeado!

POV JEON JUNGKOOK

Joder!, no soporto más que la puta de Jung continúe mirándome, parece que aún no entiende que no pretendo ni quiero quitarle para nada a su hombre, ni siquiera puedo disfrutar de mi desayuno por su culpa. ¡El peso de su ridícula mirada sobre mi me fastidia! Pero, ¿él quiere verme, cierto? Okay, pues entonces le voy a dar algo más interesante que ver, que mi cara al desayunar, a ver si asi me deja comer en paz, ¡quieres show cabeza de zanahoria  desteñida, pues entonces prepárate y que comience la función.

Me acerqué con lentitud a Taehyung para besar sus labios de una manera muy provocativa, hubiese preferido besar una babosa pestilente que a ese tonto, pero bueno... el idiota de Hoseok se lo busco

Mire de reojo al imbécil de La pelirroja y reí para mis adentros orgulloso al lograr lo que quería. Su cara fue épica. Se notaba tanto su enojo y las ganas que tenia de asesinarme después de haberme visto besar a su hombre que me quería morir de la risa. En fin, eso era todo lo que quería lograr pero... Un momento. ¡Taehyung me ha rodeado la cintura con su brazo y continúa besándome! Maldita sea, ¡¿qué se cree qué esta haciendo?!

—Oye, espera —intente separarme de sus labios, pero me sujetó con fuerza. Okay, creo que no fue buena idea comenzar esto. —¿Qué? ¿A caso ya no quieres darle celos a Hoseok? —Mierda, ¿cómo lo supo?

—Solo sigo tu juego, conejito —Sonrió ladino y continuó el beso, haciéndolo cada vez más húmedo e intenso, ¡joder! quería detenerlo pero... Ese estúpido besa demasiado bien, se siente como tocar el cielo con las manos, es una sensación totalmente indescriptible la que produce en mi cuerpo cada vez que me toca y es tan increíble para mi que no pueda resistirme como antes con otra personas lo hacia que he comenzado a contemplar la posibilidad de que muy seguramente hay algo muy defectuoso en mi cabeza. Sí, eso tiene que ser.

No fue brusco al besarme, al contrario, lo hacía con dulzura y eso me encantaba mas, el roce de sus grandes manos y sus dedos acariciando los costados de mi cintura me hicieron suspirar. ¡Dios, ya basta! Estaba perdiendo la cordura y él lo sabía, me estoy derritiendo como una paleta al sol con sus caricias, ¡Dios qué será lo que tiene este hombre que no me puedo controlar!.

Se aprovechó del momento y me levanto de donde estábamos sentados para después cargarme entre sus brazos y no me quedo de otra que rodear su cintura con mis piernas para no caerme a la vez que lo sujetaba de su cuello y continuaba besándolo. Me sentía casi que volando entre sus brazos, ¡era una experiencia surrealista!

Me cargo entre sus brazos como si fuese un koala, caminando así conmigo hasta que llegamos a nuestra celda. ¿En qué puto momento llegamos aquí? Estábamos en el comedor ¿No? Tan sumergido estaba en el abismo de sus caricias y besos que ni cuenta me di hasta que ya era demasiado tarde y ya estaba tumbado en su cama con él aun besándome. ¿Y ahora? ¡Santa Mierda! Taoki tuvo cuidado en no lastimar las partes de mi cuerpo que aún estaban magulladas y llenas de moretones. La verdad, en ese momento ya ni me dolía tanto, sentí de todo estando sobre esa cama menos dolor, además debo reconocer que la crema que estuve usando ayer me ayudó mucho.

No sé por qué me dejé llevar por sus caricias, sus besos y su maldita mirada pero estaba por enloquecer, el sonido de su respiración acelerada me estaba volviendo realmente loco... Joder, lo odiaba; pero también lo estaba disfrutando demasiado.

Taehyung, sin dejar de besarme, posó su mano por debajo de mi camisa y toco mi abdomen, acariciándolo muy suavemente, era tan malditamente delicado conmigo que yo cada vez me derretía un poco más con su tacto en mi piel.

Poco a poco me subió la camisa hasta la altura de mi pecho, el muy infeliz pasó de besar mis labios para ahora besar y chupetear mi cuello,fue entonces donde solté un profundo suspiro al sentir su lengua recorrer mi piel delineándola hasta llegar a mi clavícula y luego pasó directamente hasta mi pezón derecho. ¡Dios! No se sentía sucio ni morboso, sus caricias eran tan dulces, se sentían tan bien que todo parecía tan correcto, era como si mi cuerpo hubiese sido creado para ser acariciado solo por él; La manera en que lamía y dejaba pequeñas mordidas en mi pezón era arrebatadora así que no pude evitar soltar leves jadeos por la sensación y estoy seguro que él se rió por eso. Con su mano acariciaba mi otro pezón, dando cada tanto suaves pellizcos en el ¡joder! eso me estaba calentando demasiado..

El maldito no solo sabía besar bien, sino que también sabía cómo tocarme y excitarme, trate en vano lo más que pude de no soltar algún gemido muy alto cuando sentía su lengua moverse en círculos.

Taoki gruñó bajito y se hizo un poco hacia atrás para quitarse la camisa. ¡Carajo, santos mártires y gusanitos! ese hombre tiene un cuerpo en verdad envidiable. ¿No será pecado ser así de perfecto? Supongo que fui muy obvio al deleitarme viendo su perfecto abdomen, creo que hasta me relamí los labios porque ese tonto me miro a los ojos y sonrió pervertido al ver mi rostro.

No tardó mucho y se posicionó nuevamente encima de mí, besando con propiedad mis labios y su lengua jugueteando con la mía. El muy pervertido llevó su escurridiza mano hasta tocar mi miembro por encima de mi pantalón y... No puedo creer con lo que se encontró.

—Estás muy excitado, conejito travieso. —Susurro en mi oído mientras tocaba mi ya endurecido miembro. ¡Mierda! no pude evitar soltar un suspiro. 

—C-Callate, Idiota —Dije con la respiración entrecortada, no puede ser, quería que siguiera tocándome y que hiciera más que solo eso. ¡Santa mierda, al carajo todo!.

Taehyung no se conformó con tocarme encima del pantalón, sino que metió su mano dentro de mi boxer hasta sujetar mi pene, un profundo gemido se escapó de mi garganta cuando comenzó a hacer sobre el, lentos movimientos de vaivén con su mano. El cabrón me estaba masturbando y yo no podía y tampoco sabía si quería resistirme.

Clavó su mirada en mis ojos y se divirtió viéndome tan excitado... Con su mano libre bajó mis prendas hasta las rodillas y como por inercia le ayudé alzando un poco mi caderas. ¿Estaba yo consciente de lo que hacía? ¡Se supone que debía empujarlo para detenerlo o algo así, pero no! Yo me estaba dejando llevar como un tonto y estúpido adolescente hormonal de 15 años.

¿Quieren saber qué hizo luego ese pervertido de Taoki? Pues bien, dejó de masturbarme para bajar su pantalón y bóxer, dejando a la vista esa monstruosidad que tiene entre la piernas. Si él creía que iba a meter esa cosa en mi estaba muy equivocado, era enorme, parecía una Nimbu Z500 edición mamba negra (un enorme consolador,  el más grande del mercado) ¡me partiría en dos!

Lo vi a los ojos y su mirada estaba llena de lujuria, sé que él llevaba tiempo queriendo profanar mi culo ¿y ahora se iba a dar la oportunidad? ¡Mierda y mas mierda!

Apegó su cuerpo de nuevo contra el mío a la vez que sostenía su miembro y el mío con sus manos, haciendo movimientos de arriba hacia abajo, llevó sus labios a mi oído y pude notar su respiración más que acelerada.

—Hazlo tú —Me susurró con su voz ronca producto de la excitación y le dio una obscena lamida al lóbulo de mi oreja. Q-Qué? ¿Quería que yo hiciera eso?

Y como si mi mano tuviera vida propia, hice lo que él me ordenó. Sostuve su pene y el mío con la mano y debo confesar que la fricción de ambos miembros fue una sensación increíble.

Taoki movía su cuerpo y rozaba su piel contra la mía, no dejaba de devorar mis labios con gula y pasaba a mi cuello para marcarme con leves mordidas, ahogaba sin éxito sus jadeos en su garganta y escucharlo estaba por acabar de enloquecerme.

—Solo un poco más —Dijo mientras yo continuaba con la masturbación de ambos miembros, acelerando cada vez más el ritmo de mis manos.

—¡Ahh...!T-Taoki... —Gemí mientras sentía estar a punto de correrme, ya no iba poder aguantar por mucho más

Solté un grito con su nombre y pasó lo inevitable, me corrí y manché mi abdomen con mi propio semen a la vez que arqueaba un poco mi cuerpo. Taehyung tampoco tardó mucho y llegó al tan anhelado orgasmo, así que mojó mi mano y abdomen con su tibia esencia, también se manchó así mismo y ambos intentábamos calmar nuestras respiraciones. Lo que hicimos fue algo indescriptible y... Un momento. ¡No! ¡¿Por qué putas hice esto?! Joder! ¿Qué mierda me pasa por la mente? ¿Acaso soy idiota?

El rey se levantó, o mejor dicho, se tumbó a mi lado y llevó su mano hasta la gaveta de la mesita de noche al lado de la cama, sacó de allí unas toallas húmedas y se limpió todo rastro de su orgasmo, luego lo tiró en el tacho de basura, fue gentil y también me dio una toallita para que me limpiara mientras que él se subía el pantalón y se ponía de pie.

—Recupérate pronto, niño. No creo poder aguantar por mucho tiempo mas.

¿Aguantar qué? ¿Follarme? Eso ni de chiste. Al muy estúpido se le esbozó una sonrisa pervertida en el rostro y de inmediato le clavé la mirada.

—¿Quién dijo que voy a follar contigo? Idiota. Lo de ahorita solo fue... ¡No sé qué fue! Pero ni creas que pasará de nuevo, estúpido. —Dije un tanto alterado a la vez que bajaba mi camisa.

—Si tú lo dices. —Rodó sus ojos y tomó su camisa para luego colocársela.

—Por cierto, ¿Qué harás cuando Suga encuentre al otro guardia que te violó? 

—No lo se. Respondí mientras lanzaba la toalla sucia al tacho de basura y subía mis pantalones.

—Con una muerte rápida me basta.

—Qué aburrido.

—Oh, disculpe usted señor por no querer hacer una tortilla con los sesos de Kang —Dije en forma burlona haciendo que Taoki se riera, más no dijo o preguntó otra cosa, caminó hasta la salida de la celda y estiró sus brazos, yo mientras, seguía en la cama, trataba de organizar mis putas ideas y me repetía a mi mismo que si volvía a suceder algo como lo que acababa de pasar iba a buscar, no sé de dónde, una soga y me ahorcaría.

Ese mismo día, 2:48 pm

—¿Estás seguro que es él? —Preguntó Kim, mientras levantaba una gran pesa de quién sabe cuánto kilos, a un Yoongi de pie a un lado de este junto con Jungkook, quien se consiguió al rubio por el camino.

—Qué extraño —dijo alzando por última vez la pesa y colocándola en el tubo de metal.

—Habría jurado que ese guardia tenía otro nombre. —Se incorporó en el lugar, secando el sudor de su frente.

—El muy cabrón no da su nombre verdadero, me costó un poco averiguar quién era pero ya ves, para mi nada es imposible.

—Buen trabajo, ahora ve con la rubia y dile que vaya más tarde a mi celda, tengo un trabajo para él.

—¿Trabajo? ¿Ahora qué harás? No lo metas en problemas, Kim Taehyung.

—Callate. No le pasará nada a tu zorra, pero si no queremos levantar sospechas él es el indicado para ayudarnos.

Yoongi soltó un bufido y metió sus manos en los bolsillos de su pantalón para luego darse la vuelta e ir tras Jimin, Jungkook se quedó cruzado de brazos, esperando a que el rey le dijera algo de lo que planeaba hacer su horrible cabecita.

—¿Y bien? ¿Listo para lo que se viene mañana? —Preguntó Taehyung levantándose del asiento.

—Aún no me dices qué planeas.

—No son mis planes, son los tuyos.

—Si, pero ¿Cómo haré para que no me agarren los demás guardias? 

—Será sencillo, Vamos a las duchas, te explicaré en el camino.

Jungkook le siguió el paso al mandamás mientras caminaban por los pasillos para llegar a las duchas y darse un baño, durante el trayecto le fue explicando lo que se vendría para el día de mañana y mala idea no le pareció, se sentía ansioso por tener ya a ese hijo de puta frente a él y matarlo a sangre fría.

Ese día pasó.

 Ya Taehyung había hablado con Jimin y le dijo exactamente lo que tenía que hacer para mañana, las cosas en Konapus aun estaban un poco tensas por lo ocurrido en la madrugada del día anterior y no es para menos, tener que vivir con un reo con tanto poder dentro y fuera de la cárcel era una jodida pesadilla para muchos, sentían pavor de imaginar que algún día alguno de ellos pudiera quedar como ese guardia masacrado en las duchas...

Continuará...