Este es uno de esos días de tu vida que te despiertas y te levantas de la cama y dices "no quiero hacer nada", pero uno debe levantarse y seguir su única y verdadera rutina. Me levante sin ganas de nada, este día era Domingo debía buscar trabajo, pues ya no quería depender más de mi padre o de los demás. Camine hacia la habitación del baño, necesitaba una ducha.

Cuando salí del baño y me dirigí hacia mi armario donde busqué lo más apropiado y a la vez cómodo para poder salir. Me puse una camisa negra y unos pantalones negros rasgados, y obviamente mi chaqueta de cuero, este día no vería a Camila, pues ella me dijo que su mamá quería que salieran como una familia que nunca fueron, aunque su mamá diga eso yo se que algo está tramando ya que desde ese día que vino no la he visto más. Tome mis cosas y salí de la casa, entre al auto y tome el camino, Ally me había dicho que cerca se encontraba un lugar que necesitaban a una mesera, era un café. Después de un largo camino encontré un café que afuera tenía un letrero que decía que necesitaba una mesera.

Entre al local y vi que no estaba tan lleno de personas solo habían como tres personas. Me acerque a una chica que estaba en la caja y ella estaba terminando de guardar el dinero que le habían dado.

-Buenos días, ¿necesita algo?.

-Emmm si, bueno en realidad vengo por el puesto de mesera.

Ella salio de su lugar y me observó de arriba abajo, eso me incomodo un poco, luego de eso se dio la vuelta y camino a una puerta, a los minutos de esta salió una señora de unos 50 años e hizo lo mismo pero esta vez era cómodo, me regalo una sonrisa.

-Bueno hija ese puesto ya está ocupado.

-Oh, bueno gracias - me di la vuelta maldiciendo en lo bajo.

Salí de ahí y me dirigí a casa de mi mejor amiga, Ally, necesitaba estar con alguien pues no sabía que más hacer, ella me ayudara a encontrar algo para mi. Me subí al auto y me puse en camino a su casa, en el camino puse música un poco de rock, no era una chica que le gustaba mucho ese género pero era lo que había. Me que un momento esperando a que el semáforo cambiará. Extrañaba a Camila lo hacía demasiado pero sabía que hasta mañana la vería, el semáforo cambió y continúe conduciendo.

Llegue a la casa de la pequeña Ally y salí del auto, sacando de este unos chocolates y unas rosas, ella aun estaba molesta conmigo y esperaba que así me perdonaría un poco, con ese poco me conformo. Me acerque a la puerta y trataba de ordenar mis ideas y palabras para disculparme con ella pero no encontraba la forma de ordenar esto, toque el timbre y de esta salió ella con sus lentes de lectura puestos, se cruzo de brazos al solo verme y tenía una expresión seria en su rostro, respire profundamente, llenando mis pulmones de oxígeno y tomando valor de hablar.

- Lo siento, pero estoy ocupada.

- Oye solo... Perdón si, no debí actuar así, pero...

- Lauren, te digo por segunda vez, estoy ocupada.

-Ally, por favor, solo escucha y si después de esto no me perdonas me iré y ya no te buscaré. - Ella suspiro y se quito sus lentes.

-Okey, habla.

-Muy bien... Se que no debí ir en busca de ella, lo sé bien, pero ese día estaba mal, tu lo sabes... La situación de mi familia y lo de Camila, yo pensaba que ella se había acostado con su novio, eso me lastimo más y por eso cometí esa idiotez, Ally solo te pido que me perdones, te juro que no lo haré más... --- Me quede un momento en silencio, ella no decía nada ni cambiaba su expresión. --- Joder Ally, eres mi única familia y lo sabes, por favor, te pido otra oportunidad, te quiero demasiado, eres mi mejor amiga, mi hermana y también algo parecido a mi madre.

Nos quedamos en silencio, ninguna de las dos hablaba, ella solo miraba un punto atrás de mi, y yo no dejaba de verla, la verdad era que si la necesitaba ella era algo parecido a la madre preocupada y amorosa que nunca tuve y ella lo sabía, ella desde pequeña estaba a mi lado, ella a me sacó de la casa de Verónica y me trajo a su casa y me reprendió por mucho tiempo y desde ese día aprendí a no hacer eso de las droga, todos necesitan a una persona así, una persona que esté a tu lado a pesar de todo, a pesar de tus defectos, alguien con quien contar para todo y eso era Ally, en ese pequeño cuerpo habitaba una gran mujer con un hermoso corazón, ella te daba todo lo que tiene y no le importaría quedarse sin nada ella, contal que tu estuvieras bien ella lo hace.

Una lágrima salió de mi ojo, y odio eso, odio que las personas me vean llorar, pero esta vez no me importa que ella me viera pues ella ya me había visto así, siempre me decía que era mejor llorar a que te lo guardaras, eso te dolería más adelante. Bajo mi cabeza y me limpie mi mejilla, me di la vuelta, ya todo estaba perdido, ella no me perdonaría, lo sabía bien ya que alguna vez me había dicho, que si yo volviera hacer eso que me olvidara de ella y de su amistad para siempre, baje las gradas pero ella fue rápido y hablo.

--Entra, llorona... Quiero esos chocolates.

Me di la vuelta y la vi con una sonrisa en su rostro, yo no detuve la mía, camine y la tomé en mis brazos, sentir sus brazos eso necesitaba ella era todo para mi, no podía imaginar estar sin ella.

--Allycat, eres tan linda.

--Ya, ya dejame... Arruinaras mis chocolates y las rosas.

--Eres tan tierna...

-- Sí lo vuelves hacer, Lauren te olvidas de mi okey.

--Lo prometo.

Entramos a la casa y nos sentamos en el sofá, en la mesa se encontraba su ordenador y unas hojas de papel, todo estaba desordenado, sabía que Ally estaba demasiado ocupada con su nuevo libro y también con la editorial. Ella fue a la cocina supongo que a traer más café para seguir trabajando, observe las hojas y eran bocetos de portadas, supongo que era para su nuevo libro, ella se sento a mí lado y me entregó una taza de café, y se sentó, ella siguió escribiendo yo me quedé en silencio, pues un escritor quiere silencio y también quiere concentración.

Le di un sorbo al café y revise mi celular tenía un mensaje era de mi mamá, eso era extraño ya que tenía días, semanas sin importarle, ni como estaba ni mucho menos que hacía con mi vida. Lo abrí.

Señora Clara.

Te quiero el día de mañana en la casa okey, se hará la fiesta de cumpleaños de tu tío y él quiere que estemos todos.

Era más que claro que no iría a esa fiesta, pues no les importo a ninguno de mi familia, y no creo que de un día para el otro ya me quieran cercar. Me guarde el celular, pero cuando lo estaba haciendo el celular volvió a vibra, era ot o mensaje.

Taylor.
Debes venir mañana Laur, por favor, no me dejes sola con estas personas, además tengo días sin verte hermanita...

Bueno eso no me lo esperaba, Taylor era mi hermana, la única que me quería a su lado, la única normal en esa bola que tontos e ignorantes que se hacen pasar por mi familia. Si, iría solo un rato para poder ver a mi hermana y de paso a mi padre, le contesté a Taylor con un "si iré". Apague el celular y lo guarde.

-¿Como va todo con Camila?.

-Mmm... Pues hasta el momento bien, el viernes fuimos a un hermoso bosque, y luego me presento a su abuela...

-Vaya, eso es rápido... Y veo que estas muy tonta por esa morena -- me dijo con un tono de voz burlona.

-Si lo estoy, es obvio... Pero sabes que quizá para ella solo es un juego todo esto.

-No digas eso, quizá ella quiera algo más contigo...

-Pero dime, ¿como seremos algo más si ella está en una relación con Shon? --ella dejó de escribir y me puso atención.

-No, eso no se puede, pero igual el amor que tienen ustedes dos es más fuerte que cualquier cosa -- Toco mi mejilla y dejo una caricia ahí.

-¿Que escribes? -- trate de cambiar el tema ya que eso me ponía triste.

-Es una nueva historia... Se llama "tormentas de ayer".

-Está genial el nombre - Trate de leer un poco pero ella cerró rápidamente el ordenador.

-Nunca hagas eso, a mi no me gusta que lo vean antes de que este terminado.

-Ay que gruñona... Mira fui al café que me dijiste...

-Si, ¿y que paso?.

-Pues que ya había alguien ocupando el puesto.

-Oh vaya, que mala suerte... Pero tu padre aun te está ayudando.

-Si pero sabes que no me gusta depender de nadie... Además necesito hacer algo con mi vida.

Nos quedamos nuevamente en silencio, este era cómodo, ella se levantó y se fue a la cocina. Mi mirada estaba en un punto fijo en la hoja de papel que estaba en la mesa, lo observe y pensé en eso en el dibujo aún sin terminar y aún no estaba bien formado, lo tomé y lo observe de cerca, era un dibujo con intento de montañas con nubes grises o eso pude descifrar. Y entonces una idea loca se me vino a la cabeza, aunque era buena idea también era algo sin sentido ya que aún no era una profesional en nada. Ally se sentó a mi lado y frunció un poco el ceño y miraba mi mano donde tenía el dibujo.

-Te sonara raro, pero tengo una idea.

-Ajá... ¿Que idea?. --
Sonrei y le di una mirada aún con el dibujo de nuestra mi mano.

-Pues todos necesitan ayuda, verdad, ya sea en su vida también en su negocio...

-Solo dilo.

-¿Y si tu me das algún trabajo en la editorial?.

Nuevamente el silencio se hizo presente, ella solo miraba mi rostro, su miraba mostraba confusión y a la vez se notaba que estaba pensando, la entendía era absurdo lo que le pregunté ya que yo no tenía un título en algo, y aún no tenía experiencia en nada. Suspire, espero que si se pueda que ella me pueda ayudar con eso. Luego de una minutos ella se levantó y fue directo a su habitación, bueno eso quiere decir que no le encontró coerencia a mi pregunta. Luego de unos minutos largos para mi gusto, ella apareció con una libreta y una caja, las coloco frente a mi en la mesa y ella se sentó a mi lado.

-Pero...

-Dibuja algo alusivo referente a mi titulo de mi libro.

-Pero... Bueno.

Tome la caja y observe los millones de colores y tres lápices, tome uno y me quede pensando en algo que refleje bien el titulo de el libro, era difícil, ya que nunca habia echo algo así, me concentre un poco y pensé en el nombre. Comencé con un árbol y con hojas alrededor de este, el viento se reflejaba bien en las ramas del árbol y así lo termine, era algo simple pero se miraba más clara así. Le entregué la libreta a Ally y ella al verlo no reaccionaba solo mostraba seriedad y un poco de asombro, bueno eso me decía que lo hice mal, vaya voy a volver a buscar más lugares para trabajar.

-Lo siento, se que no...

-¿Por que te disculpas?.

-No es genial el...

-Me encanta, esta super genial, este dibujo muestra una parte de lo que hablara mi libro, tu sin saber de lo que trata lo pudiste reflejar. -- No podía creer que le había gustado.

-Pero es un simple dibujo.

-A veces lo más simple es lo que más llama la atención... Te daré un trabajo en la editorial, John; el de portadas necesita ayuda sabes y tu eres la indicada.

-Vaya, gracias Ally, te amo, eres la mejor.

La abrace, pase mis brazos atrás de su cuello y la acerque más a mi en un abrazo lleno de agradecimiento y de cariño, ella me ayudo bastante en mi vida y aun lo sigue haciéndolo a ella le debo demasiado. Nos separamos y seguimos hablando del trabajo ese, yo debía hacer bocetos de los títulos de los libros que llegaban a la editorial, y John haría el diseño en computadora, no era mucho lo que haría pero aún así era genial, estaría haciendo y trabajando en algo que a mi me gusta.

Esa noche me despedí de Ally y me fui a mi casa, antes debía pasar comprando algo una tontería para mi tío, si no llevaba nada la señora Clara se enojara y comenzará a hablar mierdas de mi. Pare en una tienda donde siempre pasaban a comprar los alimentos que faltaban en mi casa, era una tienda pequeña. Me acerque a la estantería donde habían vinos, tomé uno y lo llevé a la caja, donde me lo entregaron en una bolsa y pague el producto, sabía que a mi tío le gustaba beber así que, que mejor regalarle el vino. Salí de la tienda y no se que me dio pero mi mirada se dirigió a la esquina de la tienda, ya que atrás de esta había una gasolinera y vi una pareja que se estaban besando muy animadamente. No le tomé importancia y camine a mi auto, deje el vino en la parte de atrás de este y abrí la puerta del copiloto iba a entrar cuando escuché una discusión mire a la pareja y vi que esta estaban discutiendo, al ver al chico note que era Shawn y no podía creer, la chica con la que estaba era Emma, o sea que se estaban besando, vaya eso no me lo esperaba y más de ella, de ese imbécil si pero de ella no. Me acerque a ellos y le di un golpe a Shon, ya que él estaba tratando de golpear a la chica.

-Pero que... Vaya eres tu...

-Forma de tratar a las chicas, eso no se debe hacer imbécil, ¿Camila sabe que te pasas besando con otras?.

Le di una mirada a Emma, estaba estaba con la cabeza gacha, luego mire al el tonto ese, él aún estaba en el piso, tocandose el labio notando así que le estaba sangrando.

-No, ni tu ni yo se lo diremos y ni esta estúpida. -- Se levantó e hizo que tomaría el brazo de Emma, pero me puse en medio y lo detuve.

-No debes tratar así a las chicas, debes decirle a Camila o se lo diré yo.

Él se acerco peligrosamente a mi, tenía a milímetros su tonta cara, sentí su aliento, olía a alcohol puro, este estaba muy ebrio.

-No, nadie se lo dirá, si no quieres que la lastime mantendrás esa hermosa boquita cerrada.

Se dio la vuelta y se fue en su auto, me quedé viendo como el estúpido se iba, como lo odiaba, era tanto el odio que pegaba con solo pensar las maneras en como podía morir en ese auto rojo. Saque esos pensamientos y me dirigí a mi auto, dejando a la chica ahí parada.

-Lauren yo...

-No digas nada - Ella estaba atrás mio.

-Lo siento, él...

-Sube, te llevare.

Ella lo dudo pero luego de unos minutos ella subió a él asiento. Nos quedamos en silencio en todo el camino estaba decepcionada de ella, no podía entender aún el porqué de hacer eso, si la madre de Camila o la misma Camila supiera esto ella perdería su trabajo. Emma en todo el camino llevaba su cabeza gacha debía ser así, debía tener vergüenza de lo que estaba haciendo anteriormente. Ya sabía donde ella vivía ya que varias veces la he dejar en su casa, al llegar ella se quedo viendo la entrada de su casa y luego su mirada estaba en mi.

-Yo... Se que estuvo mal pero...

-No debes darme explicaciones... Solo dime ¿por que? ¿Por que ese estúpido?.

Ella se quedo en silencio y yo estaba enojada con ella, por que sabía bien que era por envidia, sentía enviá por la morena ella me lo había insinuado más de un ocasión. Pero quería que lo admitiera, frente mío.

-Tengo envidia, pues ella lo tiene todo y yo nada, ella tiene a millones de chicos a su alrededor, esperando ser novios de ella y yo nada, nadie... Y ella tiene un novio... -- Me quede en silencio solo miraba al frente, los autos pasaban. --Y ella te puede tener a ti...

Al terminar de decir eso ella se acerco un poco más a mi rostro, sentí su aliento tocar mis labios cerré los ojos por inercia pero no sucedió nada, escuché como la puerta del auto se cerro y abrí los ojos, ella estaba entrando a su casa. Me sentía mal por ella, siendo tan linda y pensando así, no creo que no haya nadie a su alrededor que quiera estar con ella.

Encendí el auto y me puse en marcha a casa. En el camino iba reflexionando de lo que me había pasado este día, había tenido momentos malos luego momentos felices y al final volví a los momentos malos y también triste. Deje el auto en la cochera y tome la botella y entre a mi casa, me dirigí a la cocina donde deje la botella. Luego busque algo de comer, me hice dos sándwich de pollo o eran intentos de sandwiches, me serví un poco de sumo de naranja y camine hacia la mesa, deje el plato y el sumo en este. Camine a mi habitación para quitarme la ropa y ponerme algo cómodo, un trueno se escucho por toda la casa y comenzó a llover, era una tormenta de esas que piensas que el cielo o tu casa se caería.

Me puse unos shorts muy cortos y una camisa de manga corta, camine hacia la puerta de mi habitación cuando todos se volvió negro, genial se había ido la luz eléctrica, busque como pide mi celular y lo encontré en el piso casi le pongo el pie encima. Con este en mano me guíe hacia la mesa donde estaba mi cena, cuando llegue escuché un ruido, pero era como un llanto, este venía de la puerta de cristal que llevaba hacia el jardín, me acerque con cuidado y abrí la cortina, atrás de la puerta había un gatito color gris con blanco, estaba muy mojado y asustado.

-Oh pequeño, ven.

Abrí con cuidado la puerta y lo tome en mis brazos, él se resistía ya que tenía miedo, lo acaricie y trate de tranquilizarlo un poco. Luego de un tiempo él se tranquilizó y entre con él a dentro, lo coloque en el sofá.

-¿Estas solo como yo?. - Me sentía como una idiota hablando con el gato, aunque los animales también entienden -- Ya no más, estarás conmigo.

Comimos los dos y luego de eso la lluvia no paraba. Ya estaba en mi cama, a mi lado tenía al señor gato, si, se que es un tonto nombre pero no tenía cabeza para elegir su nombre. Me quedé viendo el techo, tratando de tener sueño un poco no podía dormir con todos esos pensamientos que rondaba mi cabeza. Luego de un tiempo me terminé durmiendo.

...........

Desperté con una humedad en mi rostro, cuando abrí mis ojos tenia encima mío a él señor gato, estaba pasando su lengua áspera por mi rostro, me daba cosquillas.

-No señor gato... Déjeme...

Me levante y lo puse en mis piernas, y lo acaricie él ronroneaba, eso me pareció tan tierno, yo no era mucho de gatos pero más de uno me gustaba y este era super hermoso.

Luego de tanto tonteo me bañe y me prepare para ir a el colegio, no tenia ganas ya que este día debía ir a casa de la señora que se hacía llamar madre donde haría una fiesta. Le dejé un poco de agua a él gato ya que no tenía comida, cuando saliera del colegio le pasaría comprando un poco. Subí a mi auto y me puse encamino a mi destino.

Las calles estaban muy solas y pues el clima estaba bien, había sol, lo raro era que había sol ya que ayer llovió demasiado. Cuando llegue al estacionamiento vi que ya era tarde ya que los alumnos entraban corriendo. Salí del auto y saque mis cosas. En la entrada estaba Mani y Dinah con una sonrisa.

-Hola, Laur.

-Hola Dinah, ¿y esa sonrisa?. -- Cuando termine la pregunta las dos chicas se sonrrojaron, vaya esto era nuevo.

-Nada, no seas tonta vamos que es tarde.

Caminamos hacia nuestra clase que era historia. Entramos al aula y busque con la mirada a la morena y no estaba, eso era raro, ella siempre era la primera en llegar acá. Me senté en los asientos de atrás, saque mi libreta y mi lápiz, hoy no quiero hacer nada, me puse a dibujar. Me preguntaba por qué Camila no había venido, ella nunca faltaba a clases. El profesor hablaba pero yo solo ponía atención a mi dibujo, la morena no se presentó en toda la mañana y eso me tenia preocupada.

En la cafetería la pase ajena a la conversación de mis amigas, estaba triste este no era un buen día, ya que Camz no estaba y desde el sábado ella no me manda un mensaje, eso me preocupa más. Luego de desayunar me fui a las gradas a fumar un poco, a las siguientes clases no entré, pues no tenia ánimos. La hora de salida se acercaba, lo note e mi celular y tampoco tenía ni un mensaje ni llamada de Camila, saque otro cigarrillo y lo encendí, ya era mi tercer cigarrillo, sin la morena el tiempo pasaba lento y eso me estresaba, ya quería salir de acá, ir a buscarla y saber de ella.

A las horas el timbre de la salida sonó, tome mis cosas y sin esperar nada salí del colegio, me subí a mi auto. Quería ir a casa de Camila pero si iba su mamá me sacaría de ahí, así que pensé en que hacer, aun estaba en el estacionamiento cuando vi que Dinah se acerco a mi ventana.

-Vaya, no nos esperarte...

-Tú...

-Si yo, ya deja de ser tonta.

-¿Sabes donde esta Camila?...- Ella me miraba confusa y algo preocupada. Oh no.

-Pues ayer me mando un mensaje diciendo que no vendría hoy, también me dijl que irían a visitar a su familia.

-Si eso lo se, pero ella no me mando mensaje hoy. -- Agache mi cabeza.

-No estés así, tal vez no hay conexión o se descargo su celular, esos lugares donde esta su familia casi no llega la señal.

-Bueno, gracias... ¿Quieres que te lleve?.

-No, me iré a comer con alguien.

Su mirada era de nervios y estaba sonrojada, asentí y puse en marcha el auto. No podía dejar de pensar en la morena, no podía pasar tiempo sin ella, encendí el auto y me puse en camino a casa. Este día terminaría mal lo podía presentir, pues no había visto a mi hermosa morena y también poco iría a casa de mi madre.