Cada persona tiene hermosos momentos, momentos en los que te debes de encargar de disfrutar al máximo, no se sabe cuando será la última vez que lo podrás hacer y es que de un día para otro ya no estas y te arrepentirás de no haber hecho o terminado lo que quisiste. Estaba sentada en la arena viendo a Camila, la hermosa morena bailaba dentro del mar, levantaba sus brazos y giraba como si eso dependiera su vida, verla así llena de vida me llena a mi de ella. Y es que estaba loca por eso morena de la morena con la que me tope en el parque, no en un momento muy cómodo pero gracias al destino me la encontré, ella llegó y cambió toda mi perspectiva, yo no creo en el destino, pero teniendo a Camila a mi lado ahora puedo decir que si, puede que si exista el señor destino.

Apenas llevamos dos horas o menos acá en la playa, no quería que el tiempo se terminará, quiero hacer algo para tenerla siempre a mi lado, para que nadie me separe de ella, la quiero y siento que me estoy enamorando de ella, de su sonrisa tan contagiosa, de sus ojos esos ojos que habrán por ella, de su rostro tan perfecto, de su suave y deliciosa piel y es que toda ella es hermosa y perfecta, no le encuentro ninguna imperfección.

Seguía observando como bailaba, como se divertía con las olas del mar, era como una niña pequeña que la han llevado a un parque de diversiones. Sonreí al ver como una ola la hizo caer, ella solo se levantó e hizo un pequeño puchero que fue la cosa más adorable que he visto en toda mi triste vida. Moriría si me despertara un día y me dijeran que todo esto solo fue un sueño, y si es un sueño no quiero despertar por que es el más hermoso sueño que he tenido en mi vida.

--¿En que piensas, ojitos? -- Camila me saco de mis pensamientos, la vi y sonreí.

--Pienso en lo hermoso y tierno que eres... -- al momento de terminar de decirle eso ella se sonrojo y mordió su labio.

--Eres tan linda, Lolo, me encanta estar contigo -- la tomo de la mano.

--Siéntate conmigo --
Con una sonrisa pícara obedeció.

Lo siguiente que hizo me sorprendió mucho, ella si se sentó, pero sobre mi, ella estaba sentada en mi regazo. Sabía que por estar pensando así de ella y su hermoso y gran trasero estaba pecando, pero... Mierda no lo puedo evitar, podía sentir su muy firme trasero, esto era lo más maravilloso del mundo... LAUREN, DEJA DE PENSAR ASÍ DE ELLA, DEBES RESPETARLA. Me dije y trate de enfocarme en algo más, su mano se acercó a la mía y entrelazo nuestros dedos.

--Eres cómoda, Lolo.

--Vaya, eso no lo sabía -- sonreí y la abrace, por detrás.

--Tus abrazos son lo mejor del mundo.

Cerré mis ojos y disfrute de tenerla así, cerca de mi cuerpo, con su cuerpo perfecto. Ella se hizo hacia atrás, más cerca de mí y recostó su cabeza en mi hombro, haciendo así que su nariz rozara mi cuello, mis bellos se erizaron al sentir su respiración tan cerca. Trate de calmarme, debo quitar los pensamientos impuros con ella, no debo pensar de ella de esa forma, debo respetarla. Nos quedamos así por mucho tiempo
Y lo disfrutaba mucho, siento como que cada minuto que paso con ella lo debo y tengo que disfrutar y así debe de ser ya que no sabemos cuando será la última vez que nos veamos.

Observe a Camila, ella estaba con los ojos cerrados, supongo que se durmió, verla así de tranquila me llena de alegría, porque sé que ella no ha pasado la mejor vida de todas, con la muerte de su padre y luego eso que su madre la está obligando a casarse con él imbécil ese que hasta le puede hacer daño, me hierve la sangre al saber eso, al pensar que ese estúpido hasta le puede hacer daño a Camila, mi hermosa morena que no es tan mía. Observo cada parte de su hermoso rostro y pues si que tiene un hermoso rostro sus mejillas tan rosadas y sus labios. Dios, los labios son lo más maravilloso de todo. Con Camila no quiero algo a medias lo quiero todo con ella, siento que ella es mi mundo, mi todo se que es rápido para sentir esto pero es inevitable al tener a la morena a tu lado.

Si es la vida me hubieran dicho que vendría a sufrir y luego me encontraría a alguien que me ayudaría a olvidar lo malo, elegiría mil veces esta vida, porque se que tal vez en otra vida no la volvería a tener. Acaricie su brazo mientras miraba el mar, estos momentos tan maravillosos solo pasan una vez en tu vida, así que debemos disfrutar. Mi padre siempre dice que lo bueno estar por llegar, pero eso no lo creía antes, yo pensaba que lo decía solo por de ir que eso nunca pasaría, pero luego de eso llego Ally, mi pequeña mejor amiga. Ella me sacó de mis malos hábitos que no quisiera que volvieran, esa vida ya esta atrás y muy atrás. Ally me ayudo en los malos momentos que pasaba en mi vida, luego llego el momento de decirle que era lesbiana, ella lo tomó a bien, yo tenía miedo por su reacción y ella lo tomó a bien, nunca olvidaré sus palabras. "Óyeme, nadie debe juzgar a nadie, todos en esta vida somos iguales, nadie es más que nadie, tu, si tienes diferentes gustos, pero eso no debe decir que eres menos que los demás, recuerdalo".

Ally ella es un sol con todas las personas que se encuentra, pero eso sí cuando se meten con las personas que ella tanto amo, esa mujer es el diablo andante. Hace días cuando le comenté que Camila me había rechazado ella echaba rayos y quería salir y buscar a la morena, la tuve que detener y se tranquilizo, pero aún tiene ese recelo con Camila, yo le rogué que eso no afectará con la publicación de su libro, y lo que Camila me dijo de su libro estaba más que feliz con Ally. Algo que Camila no debe saber es que gracias a mi Ally tomo la decisión de publicar su libro, desde un inicio le dije a ella que le diera una oportunidad y así lo hizo y no me arrepiento de nada, se que la morena llegara a mucho con eso. Volviendo con lo de papá, lo que dijo de que lo bueno está por llegar, si, ahora lo comprendo ya que si era cierto, la vida me colocó a Ally en mi camino y me ayudó a cambiar para bien, pero luego más adelante nadie me dijo que el destino tenía algo más preparado y es ahí donde entra la hermosa morena que ahora está a mi lado, no es tan mía pero si que el destino la puso por algo.

Sentí como Camila se movió un poco, en mis brazos y la observe y vi que ella ya estaba despierta y todo el tiempo que estuve divagando ella me estaba observando a mi, era tan tierna. Sonreí y ella me devolvió el gesto.

--¿En que piensas? --

--Nada, solo son divagaciones... -- le acaricie el rostro y ella metió más su rostro en mi cuello.

--Tu olor es muy delicioso, ¿Sabias? --

--No, no lo sabía... Pero gracias, supongo -- escuche una carcajada de parte de Camila, yo estaba nervioso por lo que estaba diciendo.

--Que rápido te pongo nerviosa, Lolo -- y no sabes de qué otra forma me pones... PERO QUE MIERDA ESTOY DICIENDO.

--Yo... --

--Te ves más hermosa así, cuando estas nerviosa -- dijo y luego se mordió e labio.

Me quedo observando sus labios y supe que ella tenía tres diferentes motivos por las que ella muerde su labio, y eso la hace más tierna y sexy a la vez. Ella sonrió al nota que me perdí en sus labios.

--¿Que tanto ve, señorita Lauren? --

--Que siempre te muerdes el labio, por diferentes motivos --
Ella me observo con atención

--¿Así?... Dime, ¿cuales son? --lo pregunto con una sonrisa pícara en su labios.

--Son tres... La primera es cuando estas concentrada, te muerdes el labio no tan fuerte -- cuando le termino de decir eso le acaricio su labio, ella sonríe.

--¿Y la segunda? --

--Es cuando estás nerviosa, te lo muerdes un poco fuerte --

--Sigue --

--Y la tercera... -- me acerque y acaricie su labio con mi pulgar. -- Es la más sexy de todas... Cuando algo te gusta o quieres conseguir algo, lo haces muy sexy y este lo muerdes un poco más fuerte --

Sonrió y lo hizo, se mordió el labio, lo hizo tan lento que sentí morir ahí mismo, es que a su poca edad Camila era una chica súper hermosa y sexy cuando ella lo quiere, me acerque más a ella y atrape su labio con mis dientes ganandome un suspiro de su parte, luego la bese muy suave.

--Hummm... Vaya... -- me dice después que me separe de sus labios.

--Eres la chica más hermosa y sexy que conozco, Camila -- ella se sonrojo y su mirada cambió a una más oscura.

--Tu también me pareces sexy, muy sexy... --

No me dio tiempo de reaccionar cuando sentí ella ya estaba encima mio, estábamos muy cerca de la otra.

--Camila... -- su nombre salio de mi boca como un suspiro.

--sshh... -- puso su dedo en mis labios.

Ella mordió su jodido labio otra vez y me beso, este beso estaba lleno de amor, pero a la vez estaba lleno de pasión. Ella me devoraba, así lo sentía pues sus labios estaba destrozando los míos, la acerque más a mi cuerpo, mientras ella me seguía besando. Sentí como Camila metía su mano bajo mi camisa y acariciaba mi piel, me estremecí al tacto de sus caricias. Yo no me quedé atrás y metí mi mano bajo su blusa y recibí un supuesto de su parte. Sabía que esto estaba mal, aún nos estábamos conociendo y no encontraba que era el momento ni el lugar para seguir con esto, me aleje un poco y la vi.

--No creo... No creo que sea el momento -- ella cambio su cara a una de asombro.

--¿Por qué?... No te parezco suficiente, es eso verdad -- no era una pregunta era una afirmación. Me levante rápidamente con ella aún en mis piernas.

--Oye, no, no, no, si lo eres... Pero no creo que sea el momento indicado yo lo quiero tanto como tu, pero no creo que sea el lugar y momento... --

No dejo que terminará ya que se levanto con enojo y camino hacia el auto, supongo, me levante rápidamente y la seguí, sabía que estaba molesta pero era cierto no era el momento y mucho menos el lugar indicado, yo quería tener mi primera vez con ella en un lugar hermoso, pero debemos esperar. Llegue hasta donde estaba, se quedó quita esperando algo.

--Camz, yo... --

--Llévame a casa, Lauren --
Dijo de la forma más seca que me había hablado antes.

--Camila, yo lo siento... --

--Por favor, llévame a casa --

Me quede un momento observándola, ella tenía su mirada gacha y vi que se le escapo una lágrima, estaba iba por su mejilla. Suspire, sabía que la había regado, que esto era mi culpa. Camine hasta la puerta del conductor y la abrí luego quite el seguro de la otra puerta, al los minutos ella se subió, se notaba triste y a la vez enojada, esto es una completa mierda no sabia como arreglarlo, no quiero que se aleje de mi solo por una tontería. Me quedo un momento pensando aún no ponía en marcha el auto, le di un mirada y ella estaba aún con la cabeza baja.

--Camila, solo dime ¿que te molesto? -- dije casi en un susurro.

--Solo... Llévame a casa por favor --

--No, debemos de hablar, dime que te molesto -- ella estaba sollozando y lo podía escuchar, aunque ella evitada hacerlo fuerte.

Acerque mi mano a su rostro y lo levante y si, estaba en lo cierto ella estaba llorando, me sentí la persona más idiota del mundo por hacerla llorar. Ella evitaba mi mirada.

--No llores, cariño... Dime que te molesto -- ella no me miraba.

--Soy tan... Tan estúpida... -- dijo con unos sollozos.

--No, la estúpida acá soy yo... Yo te entiendo -- ella por fin me dio una mirada, sus mejillas estaban rojas.

--Me siento tan tonta... Por forzar así las cosas --

Dijo y ahí me di cuenta, ella estaba molesta con ella misma, también estaba nerviosa y con vergüenza por lo sucedido, acaricie tu mejilla, limpiando así algunas lágrimas.

--No, no lo eres... Yo también me dejé llevar... Créeme quiero que eso pase, pero no aun --

--Es que... Yo... -- me acerque y le di un beso en su mejilla.

--Te quiero, Camila y no pienses que no eres suficiente para mi, tu eres mucho para mi... -- su mirada estaba llena de cariño.

--Yo también te quiero, no quiero que pienses que solo para tener relaciones te quiero... -- dijo esto con un tono con vergüenza y sonreí al verla tan tierna.

--No, no lo pienso así cariño, te creo... Quiero que nuestra primera vez sea especial --

--Es que eres sexy y es inevitable no hacerlo -- escuche como sonrió aún con lágrimas es sus ojos.

--Lo sé, tu también me pareces sexy, muy sexy... Pero debemos esperar --

--Okey... Me conformo con tus besos -- dijo y tomo mi quijada y me beso.

--Okey... -- mordí mi labio y pase mi lengua entre mis labios -- ¿Donde quieres ir? --

--Tenemos unas horas más  así que... --

--¿Quieres comer pizza y ver una película? -- le pregunte.

--Si, eso estaría genial --

Le sonreí y nos pusimos en marcha hacia una pizzería, el clima estaba muy mal, se notaba que lloverá nuevamente. En todo el camino Camila fue callada, pero el silencio entre nosotras era cómodo, sabía que lo que había sucedido anteriormente había sido tan difícil, ya que me siento aún tan estúpida, yo deseo a Camila, la deseo pero no aun, yo la quiero pero no solo para el sexo, la quiero para tenerla toda la vida, sonreí y la observe de reojo, me encanta estar con ella.

--Oye, ¿podemos pasar por mi hermana al colegio? -- dijo ella después de unos minutos.

--Si, esta bien, por mi no hay problema, solo dime donde --

Ella me iba indicando donde estaba el colegio, ya había visto a Sofia, su hermanita tan linda con la morena, su hermanita el día en que la conocí dijo que mis ojos son tan lindos con el lago que ella había visto en la casa de su abuelos, eso me pareció lo más tierno del mundo, Camila me dijo que ya estábamos cerca.