Capítulo 21
Este día es donde te levantas y piensas en todo lo que te paso el día de ayer, tanto malo como bueno pero siempre lo piensas. Sonríes cuando lo recuerdas, o a veces te pones triste por su fue algo malo, pero igual los recuerdos vienen. En mi vida siempre había tenido días malos y muy tediosos, pero como dicen después de la tormenta viene la calma, ¿o como era?, bueno se que me entienden. Mi calma es y siempre será la hermosa morena que esta a mi lado, no siempre pero lo está cuando la necesito y eso es todo los días pero como no todo en la vida es posible, te tienes que acostumbrar es lo que hay.
Estaba aún acostada en mi cama viendo algún punto de mi techo y es que este día me sentía feliz y muy bien, solo con el echo de recordar a Camila "hermosa morena" cabello, es la única que saca muchos suspiro, ella saca mis mejores sonrisas y pues todas son de ella. Dirán ¿pero como se termino enamorando de un día para otro?, pues déjame decirte que ni yo lo sé, solo paso, y si, me estoy enamorando de ella ; y aún siento que no debería ya que de esto la que saldrá lastimada seré yo, ya que ella ya está formando su futuro, pero nada ni nadie me detendrá siempre estaré con ella. Vi la hora en celular y ya era hora de levantarme y arreglarme para ir a la escuela, hoy tenía planeado algo para la morena y yo, la llevaría al mejor lugar del mundo, quería pasar más tiempo con ella, la morena se merece lo mejor del mundo se merece más que eso.
Entre a la ducha, el agua hoy estaba más fría de lo normal y eso me gustaba, así despierto más. Sentía como todas las gotas golpeaban mi piel y todo mi cuerpo se estremecía con cada una de estas al caer en mi. Luego de un tiempo salí y busqué ropa, quería ir cómoda y a la vez quería verme muy bien, tome un pantalón de cuero color negro, que encajaba a mis piernas y mi figura también tomé una Camisa blanca y mi chaqueta de cuero que nunca debe faltar. Bajo a la cocina, tenía unos minutos para llegar así que tome el desayuno que consistía de un emparedado y un poco de jugo de naranja, y se preguntaran de donde saqué comida, pues mi papá me ayuda con eso, pero eso no será siempre ya estoy en busca de trabajo. Luego de terminar el desayuno, que por cierto es saludable tomarlo, salí de mi casa y camine hasta mi auto.
Mientras conducía puse música de Ed Sheeran, me encanta las canciones de él, son tan lindas, pues algunas cuentan mi vida. Hoy me sentía de buen humor sabía que todo saldría bien. Me pare en un semáforo mientras esperaba le mandé a Camila un mensaje de buenos días. Sonreí al momento de que ella me contestó.
Camz a las 6.30am
Buenos días ojitos hermosos, espero que también haya dormido bien, no aguanto más para verte
En estos momentos tenia la sonrisa más tonta que jamás haya tenido, y pues ella podía ponerme así de tonta con tan solo un mensaje. Ya faltaba poco para llegar a la escuela, pero yo quería llegar ya nunca pensé decir eso, ¿que me estas haciendo Camila Cabello?. Cuando llegue estacione rápidamente mi auto, tome mis cosas y salí todos estaban con cara de no haber dormido bien otros estaban muy amargados, y yo que tenia la sonrisa más grande del mundo. Entre y fui directo a mi casillero en el camino a este me encontré con Mani, seguí caminando con ella a mi lado lado hasta que llegamos.
--Buenos días, Mani, ¿no sientes que es un buen día? -- dije sonriendo mientras sacaba mis libros.
--Vaya, ¿y a ti que te pasa? -- me respondió con otra pregunta mientras sonreía.
--Camila Cabello, eso me pasa -- cerré mis ojos mientras suspiraba.
--Lo suponía, es genial saber que este así... --
--Lo se, gracias --
--Pero debes tener cuidado, tu sabes por que -- esto lo dijo en un tono serio y con miedo.
--Si lo se, no te preocupes --
Le indique que fuéramos a clases y es que hoy entregaríamos el trabajo que hicimos ayer. Caminamos y llegamos al aula yo estaba impaciente más de lo normal, cuando camine hasta mi asiento vi como la hermosa morena entraba y todo a mi alrededor de detuvo y a la vez desapareció, solo eramos ella y yo, al verme me regalo la sonrisa más hermosa del mundo, la que nunca podrá existir por que solo ella puede darla. Se acercó a mí y nos quedamos viendo por unos minutos.
--Hola, Ojitos -- sonríe al escuchar ese apodo.
--Hola hermosa morena -- al momento que lo dije se sonrojo y mordió su labio.
--No pues si quieren siéntense juntas, yo me sentaré con mani -- salí de mi trance cuando escuche a Dinah, ¿Cuando es que había llegado?.
--No se... --
--Esta bien, Lolo -- dijo la morena y sonreí.
Los asientos en esta aula eran de dos, osea que eso significa que estaré más cerca de ella y podía decirle lo de mi plan. Luego de sentarnos no dijimos nada ya que yo estaba nerviosa con tremenda mujer a mi lado como que no, no me malinterpreten lo dijo de forma buena no en mal sentido. A los minutos el profesor de historia entró y los pidió los trabajos. Mientras los revisaba nos dio tiempo libre y eso era genial así podría hablar más con la morena. Lo bueno de que su novio estúpido no estudiará acá era que tengo para mi a Camila y él ni nadie podrá cambiar lo que siento por ella.
Vi que ella estaba escribiendo en su cuaderno, estaba muy concentrada lo se por que cuando lo esta ella suele toca su labio y eso me parece lo más tierno y sexy del mundo, quisiera ser yo quien toque esos labios y también quisiera besarlos. Camila aún seguía en lo suyo.
--¿Que haces? --
Le pregunte.
--Solo escribo ideas para mi nueva historia --me contestó sin quitar la vista de su cuaderno.
--Te ves muy sexy cuando estás concentrada, ¿Sabias? -- me sonrojo al pensar en lo que dije y ella se sonrojo también.
--Vaya... Yo no lo sabía -- dijo y me regalo una sonrisa tímida y con un poco de picardía.
--Pues ya lo sabes... -- ella puso nuevamente su atención en sus escritos y se mordió el labio.
--Pero la más sexy aquí eres tu... -- lo dijo casi en un susurro, pero si lo escuche.
--¿Puedo leer lo que escribes? -- deje de tontear un rato.
--Si, claro, aún no lo termino pero igual... Toma -- me entrego el cuaderno.
Lo tome y comencé a leer y es que me cara era de asombro, era tan genial y bueno a la vez, es de esos escritos que con solo leer el título ya sabes que será un hermosa historia.
"If I Stay"
"Todos se preguntan, ¿a que venimos a la vida?, algunos lo saben otros no, otros ni se toman le tiempo de pensar en eso y es verdad, nadie debería hacerlo ya que se debe vivir en grande como si fuera tu única oportunidad de hacerlo. No hace mucho alguien me dijo que si no vives hoy no lo podrás hacer después. Si me quedo será por ti, por cada parte de ti, por tu mirada, pero si no me das razón de quedarme no sabré que hacer, si me quedo..."
Dios, era lo más hermoso que había leído, y aunque no soy profesional en esto pues dijo que ella será una profesional en estos, Camila es muy talentosa. Le entregué el cuaderno y le sonreí.
--No soy tan buena, lo sé --
Dijo bajo su cabeza.
--Camila, eres buena, me encantó fue lo mejor, espero con ansias el día que lo puedas publicar -- acaricie su mano y bese su mejilla, ni me importa que todos nos vean.
--Grasias, sabes, ya publicaron mi historia, la primera --
--Camila eso es genial, lo tengo que comprar -- se sonrojo y con un asentimiento.
--Si, debes... -- yo sonreí.
--Quiero escaparme contigo hoy... -- ella se volteo a mi rápidamente y tenía una mirada de confusión.
--¿Como? --
--Después de esta clase quiero que nos escapemos, ¿que dices? --
No quería presionar las cosas, pero necesito estar con ella, no puedo vivir ni un día sin ella.
--Yo... Esta bien, confío en ti --
Le regale una sonrisa, le explique que solo seria una salida, no era como si la fuera a secuestrar o algo por el estilo, aunque de escaparme con ella sería genial así viviríamos cada día a lo grande, juntas sin nadie que nos prohíba nuestro amor. Ella siguió toda la hora escribiendo y yo pues me puse a dibujar, y si adivinaron estaba dibujando el rostro de Camila, la verdad es que desde que se cruzo en mi camino no es dejado de dibujarla y nunca lo haré, quiero llevarla en mi mente, corazón y también en un dibujo. Luego de que la hora terminará le indique que me siguiera y así lo hizo.
Caminamos por todo el pasillo, nos escaparíamos por la parte de atrás, ya que no podríamos por la parte de enfrente. Le ayude a saltar la malla de hierro y caminamos hasta encontrar mi auto. Metí nuestras cosas en la parte de atrás y nos pusimos en marcha. Donde la llevaría era un lugar único, donde me encanta pasar la mayoría del tiempo.
--Esto parece como un secuestro, ¿sabes? -- la miré y le sonreí.
--Lo quisiera, pero aún soy joven para estar en la cárcel... -- ella reía.
Luego de tantas risas ella puso música y es que fue solo unos minutos cuando sentí el grito de ella, me tomó un segundo en racionar el por qué y era por qué estaba saliendo canciones de Edd Sheeran y recuerdo que ella comentó que era su artista favorito. Todo el camino lo pasamos cantando a todo pulmón.
Casi estábamos llegando a nuestro destino y lo sabía por la cantidad de árboles y como le sol comenzaba a pegarme en el rostro. El viento soplaba mientras las palmeras se mueven, si, estábamos llegando a la playa, no era la una playa a la que transitaba demasiada gente y por eso me gustaba este lugar, vi a mi lado la morena estaba dormida y pues nos tardamos demasiado en llegar ella se había quedado dormida. Me estacione cerca de una palmeras, lo que acá abundaba era la sombra y era otra cosa que me encantaba de este lugar.
Apague el motor y contemple unos momentos más a la hermosa morena que estaba ami lado, cuando duerme se ve tan débil, tan frágil, tan inocente y muy tierna. Toque su brazo y la moví un poco, debía despertarla.
--Camz, llegamos -- no había señal de ella, sonreí -- Camz, oye Camz --
--No, mamá cinco minutos más...-- reí al escuchar esto.
--Hermosa, Camz, despierta --
Ella abrió un ojo primero después otro y al verme se sonrojo.
--Oh, hola --
--Hola, llegamos --
Ella vio hacia el frente y su expresión fue digna de grabar, se notaba sorprendida y muy alegre, cuando me di cuenta ella no estaba a mi lado, frunci el ceño y vi que ya estaba cerca del mar, sonreí y salí rápidamente. Corrí hasta donde ella estaba, todo estaba tan hermoso y lo mejor que no había nadie cerca, solo éramos el hermoso mar, Camila y yo, esto no podría ser más perfecto. Me acerque a la morena y la abrace por la espalda ella río y tomó mis manos.
--Me encanta la playa... -- dijo y tenía tantas ganas de decirle que a mi me encanta ella, pero aún no era el momento.
-- A mi igual, y más si tu estas acá --
Se dio la vuelta quedando así cerca de mi, más cerca nuestra narices se rozaba, sentí como suspiro, la acerque más a mi ella pasó sus brazos alrededor de mi cuello, apreté más mi agarre de su cintura. Nuestras frentes estaban juntas, era totalmente maravilloso, todo esto, tener a esa persona cerca de ti poder sentir cada suspiro, cada latido de su corazón.
--Eres tan hermosa, Camila --
--Tu eres más hermosa, ojitos... No hay nada en este mundo que se compare con tu belleza -- me perdí en esos hermosos ojos marrones, eran tan hermosos.
--Digo lo mismo contigo... --
Vi sus labios, ella al momento que lo hice mordió su labio, ella lo quería como yo. Pase mi lengua por mis labios y me acerque más, sentí que todo se detuvo a nuestro alrededor. Acaricie su labio con mi pulgar y la bese, sus labios son la mejor delicia que he probado en toda mi vida. Mordí su labio y seguí besándola sin prisa y sin pena alguna, quería sentirla cada parte de ella quería sentirlo. La acerque más a mi cuerpo, nuestros cuerpos emanaban un calor inexplicable era tan caliente que pierdes hasta lo sentidos. Camila si aviso metió un poco la punta de su lengua en mi boca, sin pensarlo mucho abrí mi boca dejando que ella deslizará su maravillosa lengua por mi boca, nuestras lenguas bailaban como si ya se conocieran desde antes. Con cuidado metí un poco mi mano por debajo de su blusa y acaricie su suave piel al sentir este acto ella se estremeció, sonreí en el beso.
Con ella estaba experimentado nuevos sentimientos que no había tenido antes, encanta toda ella, y es que no me veo en un futuro sin ella, sin sus besos, sin esas miradas que dicen más que mil palabras. Mordió mi labio se alejo mientras dejaba libre mi labio, puse mi frente contra la de ella y suspire, aún no sacaba mi mano.
--Tus labios... Son tan adictivo --
--Digo lo mismo, Cariño -- acaricie su espalda, un poco, me gane un suspiro de su parte.
--Que no daría por haberte conocido desde antes, Lolo --
Sin más la bese nuevamente, sus labios eran como mi droga, eran tan adictivos, tenía razón si nos hubieras conocido desde antes solo seríamos las dos, pero siempre tendríamos el problema de su mamá. Nos quedamos así por mucho tiempo. El amor es más fuerte que cualquier adversidad, nadie nos separaría estaba muy segura ya que el nuestro es más fuerte que cualquiera. Pero en esta vida estamos solo una vez y debemos pone más atención en algunas señales que te da la vida, que a veces se convierte en pruebas del destino.
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