Volviendo a la actualidad.

Templo del patriarca.

8:20 AM

Camus y Milo subían al recinto del patriarca gracias a su llamado, estaban confundidos y un poco preocupados, más Camus, lo más probable era que llamaban a Milo para una misión, y con lo de su estado ahora, no creía que fuera conveniente.

Camus: ¿realmente te sientes bien?

Milo: ya te voy diciendo más de mil veces que si, Camus, solo fue un mareo es normal.

Camus: ya lo se, pero eso no quita el hecho de que sea preocupante - le indico mientras ambos se arrodillaban delante del trono del pontífice, donde Athena y Shion los esperaban.

Shion: le dije que no iba a venir solo, Camus ahora se le a pegado como chicle a Milo y no se porque - informó.

Athena: ¿todo en orden caballeros? - preguntó mientras ambos chicos levantaron su rostro para verla.

Camus: esa es una excelente pregunta y la verdad es que si señorita, estamos mejor que nunca.

Athena: eso me alegra mucho - indico sonriendo.

Milo: ¿cuál era el motivo de su llamado? - preguntó a lo que Athena lo vio.

Athena: Milo necesito ayuda, hay algo que esta ocurriendo en una dimensión alterna a la nuestra, y la Athena de ese lugar pide nuestra ayuda.

Milo: ¿en serio? - preguntó sorprendido.

Athena: - asintió - Milo, te mande a llamar a ti específicamente, porque este tema te involucra tanto a ti como a Camus.

Milo: ¿y eso como por que?

Athena: ¿recuerdas a Eris? - preguntó a lo que Milo asintió.

Milo: como olvidar a esa bruja, fue el peor desastre que me ocurrió en mi vida pasada. Pero... ¿que tiene que ver ella en todo esto? - preguntó.

Athena: Eris esta intentando intervenir entre el tiempo y el espacio, esta intentando hacer que ustedes dos... pero allá, jamás terminen juntos, y el problema es que si lo logra. Muy probablemente haga lo mismo con ustedes aquí - les dijo haciendo que los otros dos se vieran preocupados - es por eso que me urge que vayas allá y puedas detenerla, el primer paso ya fue dado, allá ustedes al parecer no están juntos y hasta cierto punto creo que se odian, a si que tú tarea será juntarlos de nuevo - indico pero antes de que Milo hablara Camus lo hizo.

Camus: señorita Athena, con todo respeto. No creo que Milo este en las condiciones adecuadas para enfrentarse a la diosa de la discordia - dijo mientras Milo lo vio molesto.

Milo: Perdona - le dijo mientras lo veía.

Athena: ¿condiciones? ¿A que te refieres? ¿Acaso esta enfermo? - preguntó mientras veía al peliazul.

Milo: no, no claro que no... - se apresuró a decir.

Athena: ¿entonces? - preguntó.

Camus: perdóname Milo, realmente no creí que diría esto ahora pero... Milo esta esperando un hijo mío - informó dejando sorprendida a la diosa.

Sin embargó Shion al escucharlo se quedó quieto en su lugar, para momentos después caer desmayado al suelo mientras que Athena al verlo rápidamente fue a asegurarse que estuviera bien.

Athena: estará bien, solo se desmayo - aseguró mientras suspiraba calmada - par de irresponsables, ¿como se les ocurre decir eso así? Van a matarlo de un infarto.

Milo: Perdón... - dijo mientras Camus solo veía todo confundido, como Shion despertaba de su desmayó instantáneo.

Athena: pero bueno, me alegro mucho por la noticia, aunque después de resolver el asunto importante le daremos la bienvenida que merece - indico mientras levantaba a Shion que mareado veía hacia todos lados.

Camus: pero señorita Athena...

Athena: se que te preocupa Camus, a mi también, sin embargo el es la única solución para eso... tú eres muy frío para decir todo así que creo que no nos servirias mucho allá.

Camus: Athena disculpe que siga insistiendo, pero no pienso dejar que Milo se vaya sólo, yo tomaré su lugar - dijo mientras Athena se acercó.

Athena: Camus no tienes nada de que preocuparte, Milo estará bien si en dado caso algo malo llega a pasar, lo traeré de inmediato - le explicó.

Camus: pero señorita Athena, estoy preocupado Milo es una persona que necesita muchos cuidados ahora y... - Athena interrumpió.

Athena: escucha para que estés más tranquilo les daré esto - le dijo mientras le daba dos pequeños espejos compactos uno a Milo y él otro a Camus.

Milo: ¿Y esto? - pregunto.

Athena: esto les ayudará para mantenerse en contacto ahora que estarán lejos, tranquilos todo estará bien - dijo mientras ambos se vieron - escucha Milo, no será gran cosa lo que harás allá. Tú trabajo, solo será de encargarte de acercar a sus versiones alternas lo más que puedas, ayuda los, son ustedes así que no creo que haya problema con eso ¿verdad?

Milo: si, no se preocupe señorita Athena, siempre me e preguntado como seria hacer el trabajo de cupido - informó mientras sonreía, la chica por su parte solo respondió.

Athena: será muy divertido, pero no te preocupes. Tú solo trata de mantenerte fuera de los ojos de Eris, la Athena de ese lugar deberá ayudarte también ¿okey? - preguntó a lo que Milo asintió.

Camus aún no estaba seguro pero Milo con una sonrisa le ánimo a aceptar lo que haría, y así Athena abrió un portal al que Milo entro rápidamente para después desaparecer del recinto del patriarca.

Camus: te deseó mucha suerte amor - susurró preocupado, pero sintió que alguien lo empujó levemente, para su sorpresa solo vio a una pequeña bola de cabellos naranja que entró al portal que se cerro detrás de él - ¿pero que?...

Athena: por favor dime que ese no era Kiki - pidió ella preocupada, mientras veía el lugar donde esos dos habían desaparecido.

Tiempo después...

En la otra dimensión.

Un pequeño dolor en su cabeza fue lo que lo hizo estar consciente, pero no despierto, a lo lejos escuchaba que alguien llamaba a su nombre, esa pequeña voz... ¿la conocía no?

Kiki: Milo - llamaba mientras lo movía un poco.

Milo: ¿Kiki? ¿Eres tú? ¿También estás aquí? - preguntó mientras abría sus ojos, la luz del sol le hizo cerrarlos rápidamente.

Kiki: el maestro Mü me va a matar en cuanto Athena le cuente lo que sucedió, vine sin el permiso de nadie - explicó mientras Milo se sentaba - ¡ay!... - grito asustado.

Milo: ¿Que rayos pasa? - le pregunto molesto.

Kiki: t-t-t-tú... - tartamudeo mientras que a Milo solo le basto con bajar su mirada para darse cuenta de lo que sucedía.

Milo: a caray... - susurro sorprendido.

Continuará...