CAPÍTULO 7:
Eve

Luego de regresar observé como mi hermana subió a su habitación con una sonrisa finjida, la conocía lo suficiente.  La seguí pero cerró la puerta con rapidez sin saber que iba por detrás.

Suspiré decidiendo dejarlo para el día siguiente y fui a mi habitación.

Al recostarme revisé dos mensajes.

Selena: ¿que le sucedió a Amy? 😕

Yo: no lo sé, hablaré con ella mañana

Selena: de acuerdo 😔.     ✔✔

Luego fui al siguiente que me sorprendió un poco.

Jeremy: ¿Amy está molesta conmigo? 😔

Yo: eso deberías saberlo tu 🙄

Jeremy: no responde mis mensajes 😔  ✔✔

Eso me sorprendió, así que muy posiblemente su problema era con Jeremy. Cosa que me sorprendía aún más ya que al llegar estuvieron como siempre.

Al día siguiente desperté tarde encontrándome solo con mi desayuno.

—Buenos días mamá —saludé frotándome los ojos.

—Buenos días —me sonrió

—¿Los demás? —pregunté sentándome para desayunar

—Amy en su habitación y Ryan fue con tu padre a la empresa —terminó de limpiar.

—Pero es sábado

—Revisará unas cosas y luego saldrán un momento, ya sabes un día de chicos —rió levemente —en la noche podríamos hacer algo en familia

—Claro

Luego de desayunar fui hasta la habitación de Amy para tocar levemente recibiendo su aprobación del otro lado.

Al entrar la noté pensativa con una hoja en blanco y un lápiz en mano.

—¿Que haces? —me acerqué.

—¿Nada? —me miró y luego a su móvil que se había encendido pero lo ignoró.

—Amy, ¿que sucedió anoche?

Divagó un poco con la mirada por mi pregunta.

—¿A que te refieres?

—Tu reacción, ¿sucedió algo con Jeremy?

—No, ¿porque habría? —suspiró. —solo quería regresar para que papá no nos buscara —sonrió levemente.

—No me convences...

—Ya encontré un pasatiempo para estas vacaciones... —interrumpió —quiero aprender a dibujar, he visto a muchas personas hacerlo de manera magnífica. Y quiero hacerlo.

—Creo que solo evitas la conversación

—Claro que no...

Mostró la pantalla de su móvil donde reproducía un tutoríal de dibujo.
Asentí aceptando su respuesta pero sabía que no era así y no podría ocultarlo por mucho tiempo, ella misma me lo contaría en su momento.

Crucé a mi habitación para escribirle a Selena.

Yo: al parecer temía que papá fuera por nosotras 😅

Selena: ¿segura? 👀

Yo: si 😆 ¿que harás hoy?

Selena: saldré con Sarah y luego iré a casa de mis padres ☺

Yo: de acuerdo.  ✔✔

Estábamos en vacaciones pero no tenía ánimos de salir, todos estarían ocupados y Amy estaba en lo suyo. Bajé cuando escuché el automóvil de mi padre y también era la hora del almuerzo.
Escuché reír a Ryan mientras subía a su habitación.

—¿Que es lo gracioso? —se detuvo.

—Que eres tonta —siguió su camino.

Ese chico a veces me perdía completamente el respeto.

—¿Saldremos a cenar? —escuché a mi hermana mientras tomaba su lugar en la mesa.

—Si, a un restaurante muy agradable —respondió mi padre dedicándome una sonrisa al verme —hola hija...

—Hola papá —me acerqué para abrazarlo.

—Agradable y bonito, conocerán donde me pidió matrimonio —expresó nuestra madre con emoción. —aun lo recuerdo como si fuese ayer...

—Como olvidarlo —continuó

—Jamas me cansaré de escuchar su historia —agregó Amy con un brillo en sus ojos.

—Eran tiempos diferentes, pero como les dije cuando eran niñas. Ustedes tienen prohibido casarse —dijo con seriedad nuestro padre tomando su lugar mientras nuestra madre comenzaba a servir la comida.

—¡Ryan! —gritó Amy

A los pocos segundos se escucharon sus pasos bajar las escaleras y sentarse a su lado.

—Entonces, ¿como les fue anoche? —preguntó mamá con interés.

—Bien, agradable. No hubo nadie que no conocieran —anticipé.

—¿Amy? —papá la miró con atención.

—Bien —asintió con una leve sonrisa.

—Nos divertimos mucho... —continué contando ante su mirada.

Era curioso ya que siempre era la más reservada al contar nuestras cosas, Amy era más efusiva y siempre era quien lo contaba. Por un momento sentí que cambiamos roles.

La noche había llegado y nos vestimos sencillos pero elegantes, según nos dijeron era un restaurante muy bonito pero de sociedad así qué debíamos mantener la imagen.

Llegamos a un bonito y lujoso restaurante que hasta el momento no habíamos visitado, al menos con mis hermanos.

—Cada año tiene cosas nuevas —mencionó mi madre observando el lugar.

—Es cierto, pero no mucho. Después de todo eso lo hace especial —agregó mi padre

Esperamos nuestros pedidos mientras observábamos el enorme salón, no había muchas personas y las que había tenían mesas un poco alejadas, en sí cada mesa tenía su espacio y privacidad.

—¿Aquí le propusiste matrimonio a mamá? —preguntó mi hermano mirando con atención a nuestro padre.

—Si, en este restaurante... —pensó un momento —pero el lugar en específico fue en el segundo piso —sonrió

—Jamas olvidaré ese día... —nuestra madre liberó un suspiro nostálgico por lo que sonreímos.

—Al parecer papá era muy romántico... —continuó Amy y ambos rieron.

—En realidad aprendí a serlo... —negó levemente —pero se lo contaremos en otro momento.

La cena transcurrió tranquilamente entre plática, risas y otras cosas de familia.

—Eve, vamos al baño... —susurró por lo bajo Amy e hizo lo mismo con nuestra madre.

—Es por ese pasillo —respondió del mismo modo.

Nos levantamos y fuimos, mientras la esperaba me remojé las manos y acomodé un poco mi cabello.

—Es un bonito lugar, ¿no crees? —sonrió mirándome por el espejo e imitar mi acción.

—Lo es, ya viste a mamá a veces tengo mucha curiosidad por su historia... —suspiré —sé que no nos dijeron todo, solo lo bonito de esto

—Son nuestros padres Eve, solo nos dirán lo que consideren bueno para nosotros aunque su historia creo que lo sabremos pronto. Como tu misma lo dices, ya no somos niñas

—Tienes razón

Ambas estábamos bastante animadas hasta que regresamos a la mesa donde se encontraban la familia Walker. Amy borró su sonrisa al instante y suspiré con paciencia.

Nos acercamos para saludar.

—Hola tío Adam, tía Olivia... —me adelanté a mi hermana para abrazarlos levemente

—Hola a las hermanas más hermosas —respondió el mayor como si fuéramos niñas pequeñas.

—Tio Adam... —se quejó Amy con un poco de vergüenza

—Es increíble el parecido entre ustedes, es cierto que las pueden confundir con gemelas... —siguió Olivia —pero Amy es tan adorable, yo no te confundiría. Eve es más parecida a Thomas

—Así es —concordó nuestra madre —somos pocos las que las diferenciamos así.

—Adelante, unanse a nosotros —ofreció nuestro padre.

No dijeron mucho pero al parecer estaban en el mismo lugar. Jeremy se sentó al lado de Amy como de costumbre y Lily a mi lado.

—¿Pelaeron? —me susurró con discreción.

—¿Quiénes? —pregunté del mismo modo, entonces miró con la misma discreción a la dirección de nuestros hermanos.

Jeremy intentaba entablar conversación con Amy pero ésta sólo asentía o negaba sin mirarlo.

—Hoy estuvo a esto... —hizo una pequeña seña con sus dedos —de llorar porque no respondía sus mensajes

Ambas reímos levemente.

—No conocen la discreción, escuché todo —nos detuvo Ryan.

—Metiche —lo regañé.

—Creo que todos las escucharon —encogió los hombros.

Miré a nuestros padres que nos observaban discretamente excepto por la otra pareja que estaba en lo suyo, por no decir “ignoración olímpica por parte de Amy”.
Ambas volvimos a reír por lo bajo haciendo que Ryan suspirara con fastidio.

Ambas familias salimos del lugar para ir sus respectivas casas.

—¿Quieres que te lleve? —preguntó Jeremy a mi hermana.

—No —respondió casi de inmediato.

Los Walker se sorprendieron por la respuesta al igual que mi madre, en cuanto a mi padre y hermano solo sonrieron discretamente con orgullo.

—Quiero decir, no gracias... —dijo con calma —ve con cuidado —sonrió levemente.

Nos despedimos de ellos para regresar a nuestra casa.

Aquello quedó ahí hasta los próximos días, nuestros padres habían ido a trabajar juntos, debían asistir a una reunión importante o eso dijeron.

—Amy... —entré a su habitación.

—Claro, entra cuando quieras —ironizó, nuevamente estaba con aquella hoja.

—¿Podemos hablar? —me senté en la cama.

—Quieres saber sobre mi actitud con Jeremy, ¿cierto? —me miró —¿tambien te fue a llorar? Lily no deja de insistir con eso, que le vaya a llorar a Sandra —dijo lo último en un murmuro fastidioso pero lo suficientemente entendible.

—¿Que tiene que ver Sandra en esto?

—Se besaron —respondió de inmediato dejando el lápiz con impaciencia —se besaron —repitió bajando la mirada.

—¿No que no te gustaba? —intenté burlarme.

—Eve... —se quejó.

—De acuerdo, ¿pero en que momento sucedió? —me interesé

—La última vez, cuando salieron ¿recuerdas que pregunté por el baño? —asentí —los vi en la parte trasera... —frunció levemente el ceño.

—Chris también había salido, ¿estás segura de eso?

—Era su chaqueta, y... —se frotó un poco la frente —bueno, eso creo

—¿Que intentas decir? —fruncí el ceño.

—No los distinguí, es raro —se frotó las manos

—Jeremy con Chris son completamente diferentes, ¿que dices?.

—No los distinguí, y no es la primera vez que sucede. Supongo que es por estrés del ingreso a la universidad. —volvió la atención a su hoja.

—¿Qué dijiste Amy?

Me ignoró por un momento, colocándose los audífonos, aún así no dejé de mirarla inquisitivamente.

—Nada... —suspiró —sólo olvídalo.

—Pero lo que dices es...

Alguien tocó la puerta interrumpiendo la conversación.

—Adelante —respondió al instante

Ryan abrió la puerta, asomando la cabeza con una sonrisa en su rostro.

—Papá y mamá llegaron, deberían bajar...

—Vamos Eve...

Sonrió levantándose y salir junto a nuestro hermano. Lo que había dicho me dejó preocupada, ambas teníamos una buena memoria y que no diferenciara el rostro de una persona que conoce toda la vida era preocupante. Quizá podría ser como lo dijo, estrés por el ingreso a la universidad. También me sentía estresada pero no me sucedía aquello.

¿Que estará pasando aquí?
（＾～＾）