CAPÍTULO 16
CAPÍTULO 16
Dos días fueron iguales, como había dicho anteriormente no hubo diferencia debido a que no tenía relación con mis compañeros. Solo iba a mi lugar y tomaba notas de la clase hasta el tercer día.
—Muy bien alumnos, quiero que realicen un resumen informativo de la psicología general... —dijo la profesora mostrando algunas imágenes —o pueden escoger un tema en particular, será según su elección. Lo único que pido es que sea grupal, tres personas por grupo.
Aquello lo tomé como una sentencia pero no debía desanimarme, miré a mi compañera de asiento que asintió de inmediato.
—Estoy dentro, busquemos a alguien más... —se levantó ante mi mirada incrédula.
No estaba segura de que fuera la misma chica del primer día de clases pero se mostraba muy sociable. Luego de un momento regresó con un chico con una sonrisa amable.
—Soy Jackson. —extendió su mano presentándose —y soy un desastre... —dejó escapar una pequeña risa.
—Soy Amy —la tomé —y pretendo no ser un desastre.
Me solté para mirar a la tercera.
—Es increíble que nos presentemos luego de este tiempo... —bufó fastidiada. —soy Milena
—Bonito y sutil nombre para alguien que parece ruda —agregó Jackson colocando las manos en los bolsillos.
—¿Quieres probar mi sutileza? —sonrió con ironía.
—Si, quizá luego. Ahora hablaré con ésta señorita que parece muy amable —me señaló.
—¿Como haremos el trabajo? —ignoré lo dicho.
—¿Nos centramos solo en psicología general? —continuó Milena tomando su asiento.
Imité su acción mientras Jackson pasaba por delante para mirarnos como si fuese un profesor.
—Podemos hacer eso, y algo introductorio de alguna rama psicologica para no ser tan tediosos en eso... —sugerí mirando a Jackson que tenía la mirada clavada en mi. —¿porque demonios me miras así? —cuestioné molesta.
—Vaya, me equivoqué al decir que eras amable. —sonrio divertido. —solo pensaba que no te he visto estos días, de otro modo te recordaría
—Soy demasiado amable cuando quiero, pero me estabas mirando como si fuese un bicho raro —fruncí el ceño.
—Lo lamento —levantó las manos dejando en claro que no era su intención.
—Si quieres otro tipo de cosas con ella tendrás que esperar hasta finalizar el trabajo —agregó Milena sorprendiéndonos a ambos.
—No, no... —reí. —ya estoy con alguien —dije rápidamente.
—Muy bien —asintió. —¿nos pondremos de acuerdo y lo hacemos aquí o buscamos otro lugar?
—¿Quien tiene departamento? —siguió el chico. —tengo uno pero no creo que querrían ir.
—Oh no, ¿Amy? —Milena me miró esperanzada.
—No vivo muy lejos, así que aún estoy con mis padres —sonreí levemente.
—No iremos a tu departamento —miró al chico —demonios tendré que limpiar el mio —suspiró
—¿Intercambiamos números? —pregunté con duda.
—Claro —Milena me entregó su móvil para que anotara el mio. En cuanto se lo devolví me percaté de un tatuaje de una estrella en su cuello.
En ese momento recibí un mensaje suyo para poder guardar su número.
—Toma... —Jackson me extendió el suyo. En su fondo de pantalla tenía un gato.
Lo anoté y se lo devolví, también lo observé lo suficiente para notar que tenía una pequeña cicatriz en la mano pero a la larga sería complicado encontrarla.
El día había finalizado, al regresar todo fue normal reconociendo las voces de mi familia y antes de dormir tomé una hoja en blanco para dibujar aquello que había llamado mi atención de Milena y Jackson, ya que de a poco comenzaba a desaparecer.
Al día siguiente desperté animada por alguna razón.
—Mamá, olvidé decírtelo pero haré un trabajo grupal luego de clases. Iremos al departamento de una compañera... —avisé terminado de desayunar.
—¿Estás segura? —se preocupó al igual que Eve.
—Si, las llamaré a alguna para que vayan por mi. Por favor no te preocupes, estaré bien.
Salimos y mi hermana condujo con prisa ya que íbamos unos minutos tarde.
—Sabes que si papá descubre esto te quitará la licencia, llaves, tarjeta de crédito... —comencé a enumerar
—No lo sabrá mientras tu no se lo digas —frunció el ceño.
—¿Me crees capaz de algo así? Que feo —negué cruzando los brazos con indignación.
No dijo más hasta que llegamos a la universidad y cada una fue en su dirección, por mi lado debía cruzar el campus y vi a una pareja moviendo la mano. No estaba segura de que lo hacían por mi pero se acercaban en mi dirección.
—Hola Amy, ¿como estás? —sonrió el chico con una bonita sonrisa.
—Hola... —quedé pensativa rebuscando su voz en mi memoria.
—¿Bromeas? Creí que sin Jeremy no serias tan bromista —habló la chica. Entonces los reconocí, su voz al decir “Jeremy” me fastidió lo suficiente.
—Chris... —sonreí al verlo asentir —y Sandra —la miré un poco inexpresiva.
Si, mi semblante cambió automáticamente del uno al otro por el mal rollo que me había montado tiempo atrás.
—Supimos de tu accidente, ¿como estás? —siguió el chico.
—Estoy bien, no tuve ninguna fractura muy diferente a Taylor por su brazo —me lamenté —¿y ustedes? No los he visto estos días.
—Es cierto, en cuanto a nosotro es difícil que nos crucemos. Los salones están en diferentes direcciones —señaló a ambos lados y por un momento me desorienté un poco.
—Es cierto —sonreí desviando la mirada —¿has hablado con Jeremy últimamente?
—La última vez fue hace dos días, está muy ocupado...
—Ya veo
—¿No sabe de tu accidente? —preguntó Sandra
—No —fruncí el ceño. —preferí no preocuparlo.
—¿Estás segura de que estás bien? Hace un momento parecías no reconocernos —siguió.
No le tenía la suficiente confianza para decirle sobre mi condición pero por un momento quise hacerlo, por otro lado Chris también era mi amigo pero al decirlo él haría lo mismo con Jeremy. Por eso opté no decir nada.
—No es eso, solo que no dormí muy bien anoche y cuando sucede es normal andar en modo zombie, estoy segura que también les sucede —sonreí con normalidad.
—No lo podemos negar —concordó Chris en un vaivén para chocarla levemente.
La chica negó un poco avergonzada hasta que otra pareja se acercó.
—Amy, casi es hora de la clase —el chico miro su reloj.
Noté que tanto Sandra como Chris lo analizaron con la mirada, aquel chico vestía casual pero del tipo casual que le quedaba extremadamente bien.
Desvié la mirada hasta su mano donde reconocí la cicatriz.
—Jackson... —dije repentinamente casi asustando a los demás presentes —y Milena
—¿Porque me confundes con esa chica? —se ofendió siguiendo su camino.
—¿Porque estaría con Milena? —continuó él. —ella es mi vecina y estudia medicina —se refirió a la chica.
—Oh —me lamenté en tono bajo. —bueno presentación rápida, Jackson él es Chris un buen amigo y su novia Sandra. Chicos él es Jackson, haremos una presentación junto a Milena —dije rápidamente para poder despedirme. —nos vemos en otro momento
Seguí mi camino seguida por mi compañero.
—Por un momento creí que él era tu novio —mencionó a mis espaldas.
—En todo caso no te interesa —intenté no molestarme.
Llegamos a nuestro salón para encontrarnos con nuestra compañera, Jackson pasó de largo a su asiento mientras que por mi parte observé disimuladamente el cuello de Milena para estar segura.
—Buenos días —saludé de buen humor motivada porque los ejercicios dieran resultado.
—Un poco más y quedaban fuera de la clase —tomó su libro.
—Lo sé...
La clase marchó con normalidad, como se debía.
—¿Leyeron algo de los temas en cuestión? —preguntó Jackson acercándose antes de que terminara la hora.
—No, estuve limpiando el departamento —respondió Milena acomodando sus cosas.
—Propongo leer algo por nuestra cuenta y luego discutirlo —agregué —así nos reuniríamos mañana.
—Por mi estaría bien, así no cancelaré mis planes —estuvo de acuerdo el chico.
—Una pobre chica caerá en tus redes hoy, la compadezco —Milena fingió lamentarse y los miré un momento.
Si hubiese sido en otro momento los habría molestado y dicho que había algo de tensión entre ellos pero sinceramente no me interesaba la cuestión, solo quería hacer bien la presentación.
Mensaje
Yo: no te vayas sin mi, esperame un segundo 😒
Eve: ¿Que? Se suponía que irías luego 😑
Yo: le avisaré a papá 😣
Eve: esperaré 2 minutos, tarda y te irás caminando ✔✔
Al leer el mensaje me levanté de inmediato, sabía perfectamente que lo haría.
—Lo siento. Debo irme ahora mismo, nos vemos mañana —salí prácticamente corriendo.
No tendría problemas con la clase ya que había finalizado la hora.
Pude distinguir el automóvil y a ella dentro con una mirada desafiante, haciendo saber que se iría.
—¿Realmente pretendías dejarme? —la miré.
—No, ya tenía planes —suspiró emprendiendo viaje.
Eve muchas veces era inexpresiva y desafiante, eso la hacía casi idéntica a papá o eso decía nuestra madre.
Luego de cenar subí a mi habitación y lejos de hacer lo yo misma había propuesto tomé una hoja que estaba guardada hace días. Nuevamente no tuve el valor para llamar a Jeremy y en su lugar busqué una fotografía para continuar con algo que había comenzado hace meses; pronto lo terminaría.
¿Que hará tanto? ( ̄ε ̄ʃƪ)
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