Gracias a dios y mamá no había vuelto a encerrarme en esa horrible habitación.

Había vuelto a retomar mí vida de antes, Yoongi seguía trabajando con su padre, mientras que yo acostumbraba a verlo en sus horas laborales. Todas las tardes después que él terminaba de trabajar íbamos a ver a Kwan al hospital, mí niño había despertado hace un par de días, y mí corazón no podía sentirse mejor.

Sentía que poco a poco volvía a cobrarle el sentido a mí vida, nuevamente sentía que todo estaba marchando como antes. Pero con solo una diferencia, Park Chanyeol había vuelto a nuestras vidas, bueno, más a la mía. Nuestros padres no estaban enterados de eso y esperaba que se mantuviera así hasta que el me dijera que tenía planeado hacer de ahora en adelante en el pueblo.

—Jimin, te dije que me esperaras en tu-

—Casa, lo sé mí amor..—sonreí como un niño malcriado al momento de ser regañado—Ya no debería sorprenderte que me escape para venir a verte Yoon..

Se acercó a mí, con una sonrisa entre sus rosadas mejillas.

—¿Aún sabiendo lo que podría hacer tu madre? Sabes que no me gustaría que estuvieras en problemas por venir a verme solcito.. tu madre nunca entenderá esto, nunca sabrá asumir lo que somos, lo que eres.. lo sabes ¿No?.

—Lo sé, ¿Y que con eso?—me acerqué a él, sin quitarnos los ojos de encima—Soy feliz ahora Yoongi, Kwan despertó.. mamá no volvió a encerrarme, mí hermano por el que siempre esperé volvió y tengo al chico del que siempre estuve enamorado conmigo, eres mí novio.

Una sonrisa se plantó en sus labios.
Como me encantaba verle sonreír.

—Soy tu novio cachorro...—me abrazó y escondió su rostro entre mí cuello, refregando su nariz en el, como queriendo impregnarme con su aroma.

Rei bajito.

—¿Qué haces cielo? No es necesario que me marques así bebé..no es necesario, nadie se acerca a mí más que Seokjin Hyung y Taetae..—pero aún así no se detuvo.

—¿Te había dicho cuánto me encanta tu aroma a vainilla y limón?..es que cachorro..es un aroma tan delicioso, me vuelve loco..—un cosquilleo se plasmó en mí estómago, pero de pronto se detuvo.

—¿Qué sucede Yoongi-ah?..

—¿Estas en celo?—le mire divertido, mí celo no entraría hasta dentro de dos semanas, pero a juzgar por su semblante podría estar hablando enserio—¿Lo estas mí vida?..

—N-no Yoongi, he estado al pendiente de mí calendario y no debería llegarme hasta dentro de dos semanas cielo..

—¿Y porque demonios me siento tan atraído.. a ti? A tenerte entre mis brazos, T-tú..hueles, demonios tu aroma se ha intensificado, cualquier Alfa inmoral podría sentirte en estos momentos..—de pronto su ojos se oscurecieron.

—Mí vida, no estoy en celo, mí calendario no miente Min celos Yoongi—reí ante ese repentino comentario.

—Lo creas o no, no te dejaré sólo Jimin. Ahora...¿Vamos a ver tu hermano?—asentí emocionado. Él debería estar esperándome, tal y como le había prometido ayer por la tardé.

—Por supuesto, vamos.

Seokjin.

Ya había perdido la cuenta de cuantos ramos de flores me habían llegado, desde aquélla bochornosa tardé que me junte con Jeon Jungkook para hablar, él creyó que mandándome flores se arreglarían un poco las cosas entre nosotros, pero no era tan fácil, no era simplemente correr y lanzarme a sus brazos a la más mínima muestra de interés, habían muchas cosas detrás de sus buenas intenciones, según dice él.

Hay muchas cosas de las cuales aún no me he podido olvidar, cosas que debemos aclarar y solucionar antes de siquiera llegar a pensar en una segunda oportunidad de volver a comenzar.

—¿Qué harás con ese ramo tan bonito cariño?—mí madre estaba aquí, ella había salido a recibir el ramo que Jeon Jungkook me había enviado con una nota adjunta—Con ese serían trece ya.. y la verdad ya me da cosita tirarlos a la basura, son tan bonitos..

"Espero que este día sea dichoso para mí dulce dulce omega, con cariño, Jeon Jungkook".

Al diablo, ¿dulce dulce omega?.
¿Acaso este ya había perdido la razón? ¿Cómo se atrevía a proclamarme su omega después de todo lo que causó?.

—No lo se madre.. sabes que no quiero nada que venga de ese Alfa.. sólo es qué..—mí cabeza era un torbellino de pensamientos, estaba confundido.

—¿Solo es que aún lo amas verdad?..—la respuesta era obvia.

—Lo amo.

—Tienes el pero ahí mí niño..—sonrió divertida—Pero..

—Pero no puedo volver con él, no así, no en estos momentos mamá..

—Lo entiendo Seokjin..tampoco estoy siendo muy partidaria de que vuelvas con ese chiquillo que lo único que hizo fue manchar tu honor y hacerte sufrir..—mamá a veces solía asustar cuándo estaba enfadada—Pero no puedo entrometerme en ese asunto, sí tu crees que es momento de hablar con él y perdonarle, estas en todo tu derecho..

—Mamá..

—Independientemente de la decisión que tomes, te apoyaré sin duda alguna bebé..—se acercó a mí y acarició con lentitud mí mejilla, en donde poco a poco iba descendiendo una lágrima—Shh..no llores mí niño hermoso.. ¿Eres fuerte no es así?..—asentí—Siempre te he dicho lo muy fuerte que eres corazón, siempre con la frente en alto ante cualquier situación..no dejes que esta situación sea la excepción Seokjin.

No lo haré, quizás eso fue lo que tuvo que haber salido de mis labios, pero sólo suspire con pesadez, en un intento de acallar mis propios llantos.

—Iré a ponerlos en agua, ¿Te parece bien?—asentí.

Tomó aquél ramo de flores y salió en rumbo al patio, quizás las dejaría para después plantarlas junto a las que eran de ella, mamá amaba las flores. Gran parte de su tiempo lo dedicaba única y exclusivamente a sus adoradas flores.

Me deje caer en el sofá, todos mis músculos tensaban y lo único que quería era tomar un largo baño para después irme a descansar a mí cama.

Quería olvidarme por un momento que Jeon Jungkook había vuelto, quería olvidar que algún día me enrede con ese atractivo Alfa de ojos encantadores.

Pero muy dentro de mí quería olvidar que alguna vez esto paso y poder decirle al oído lo muy enamorado que estaba de él, y lo mucho que me encantaba verlo y tenerlo de vuelta en mí vida otra vez.