Capítulo 19
Ya era de mañana, después de la pequeña escena de celos que me dio Yoongi en pleno patio de mi casa, Taehyung estuvo conversando un par de minutos con él antes de irse a su casa.
Yoongi se quedó un rato más, quería aprovechar el tiempo conmigo antes de que mamá regresará, desde que fue esa tarde a casa de los Acacias que, ahora va casi todas las tardes, que digo casi, todas las tardes a la misma hora se desaparece de la casa para ir hacía allá.
Poco de que la noche cayera, Yoongi debía volver a su casa, sus padres debían estar preocupados por él por lo que muy a su pesar, beso con mucho amor y afecto mis labios, ya me había hecho tan dependiente de sus besos, tan adicto a ese elixir que un día sin ellos ya era algo terrible para mí, era así. Prometió venir a verme hoy apenas terminará sus horas laborales, mientras que yo ahora me encontraba preparando el almuerzo para mis hermanos y yo.
Mamá había salido otra vez, y papá como todos los días se había ido al taller. No quería sacar mis propias conclusiones, para todos era extraño que mamá saliera tan seguido de casa cuando normalmente ella no es así, rara vez ella salía más de la cuenta, quizás cuando llegue tomaré el valor de preguntar el porqué de sus continuas salidas de la casa, pese a lo que pase.
—Jimin Hyung....tenemos hambre—reprochó Suk sentado en la mesa, apoyando sus brazos en ella mientras dejaba descansar su cabecita allí.
—Que ya voy suk-ssi..—dije mientras giraba las tortillas en el sartén, no era muy bueno que digamos, pero esto me queda fenomenal, y no es por presumir.
Suk-ssi había estado toda la tardé recordándome que su compañerito vendría a casa hoy, y quería que todo estuviera perfecto. Al parecer también vendría a almorzar con nosotros, para así tener más tiempo que pasar con él.
¿Acaso no se les hace adorable?
Porque a mi sí, ver que un niño de 10 años tenía tanta ilusión con un niño, me enternecía ver la manera en la que se preocupaba por cada detalle, asomándose cada cinco minutos por la ventana para ver si aquél muchacho venía a tocar la puerta, era adorable.
—¡Está listo pequeñines!
Segundos después de aquél llamado, ambos niños se sentaron con una buena disposición a mi orden, Kwan sonreía mientras Suk-ssi movía con frenesí sus manos, sabía que estaba ansioso, lo podía notar con sólo olerlo.
—Hyung..—llamó—¿P-podemos esperar unos minutos? Y-ya son las 14:30, él dijo que estaría aquí a las 14:30 Hyung..tiene que estar por llegar—decía cada vez más ansioso, le sonreí divertido.
—Claro, podemos esperar unos minutos, no te preocupes corazón.
Me sonrió y dejé que volviera a ponerse de pie, Kwan sólo se quedó mirando confundido, ignorante a lo que pasaba con su hermano mayor.
Habrían pasado unos diez minutos cuándo Suk-ssi llegó corriendo a mi lado, con una sonrisa en sus labios, diciéndome que aquél muchacho ya estaba aquí, pero que su hermano mayor quería hablar conmigo, por términos de seguridad creía yo, era normal.
—Vamos Hyung...él nos está esperando..—decía emocionado.
—Voy detrás de ti corazón—reí.
Suk-ssi abrió sonriente la puerta, dejando a la vista a dos chicos, detrás del menor había un chico, cabello negro azabache al igual que el pequeñín.
—Hola, ¿Tú debes ser el hermano de Suk no?—preguntó y yo asentí.
—Ese soy yo, Me llamó Park Jimin, un placer.
—El placer es mío, Soy Jung Hoseok, Mm me gustaría saber hasta que hora estarán trabajando en esta maqueta..
Le mire confundido, Suk-ssi no me había comentado algo sobre la hora.
—Um..¿Suk-ssi?..—el menor me miro, confundido, pensativo, quizás buscando una hora prudente para decirle.
—¿Q-quizás hasta las 18:15? ¿Crees que esta bien esa hora Hyung?—me preguntó, le sonreí acariciando su cabello.
—Bueno, lo haz escuchado—ambos sonreímos—No te preocupes, que tu hermano esta en buenas manos, aquí estarán bien—le asegure, viendo como lucia algo nervioso y desconfiado.
Y lo entendía, era primera vez que su hermanito venía a nuestra casa y era de esperarse que él sintiera desconfianza.
—Ok, bien Taeoh, despídete de tu Hyung..—dijo y se agachó hasta quedar a la altura del niño, acercadole su mejilla para que Taeoh la besara.
—Muah—que adorable—Adiós Hyung.
Pude ver como Suk-ssi le ofrecía su mano a Taeoh, quién animadamente la agarro para que después ambos niños perderse por las escaleras, yendo a la habitación de mí hermano.
—Bueno, nos vemos después Jimin.
—Eso espero, no te preocupes que me preocupare de que hagan toda la maqueta sin distraerse.
—Me parece, nos vemos.
—Adiós Hoseok.
21:12 y mamá no había llegado aún. Ya era algo que más de asustarme, me estaba colmando, aquí no es bien visto que una señora casada se este paseando por las calles del pueblo a tales horas de la noche, y a sabiendas de que dejaba a solas a sus tres hijos.
Lo último no me molestaba, por lo menos no por mí. Pero los niños se la pasaban preguntando que a donde salía tanto mamá y yo no sabía que decirles.
Hace un par de minutos ambos niños ya se habían ido a su habitación para dormir, yo aún no quería ir a acostarme.
Mientras mamá llegaba, quise ordenar un poco, quizás limpiar algo para que ella no trabajase tanto cuando llegará.
Me sobresalte cuándo la puerta fue abierta y cerrada de golpe, era ella, era mamá quién pasaba por esa puerta, tirando su abrigo y cartera lejos, mientras se acercaba a paso acelerado hacía a mí, por un momento sentí nervios, que yo recuerde no he hecho nada como para molestarla.
—Me vas a decir en este instante que hiciste para que Bursin cancelará la boda—abrí mis ojos de par en par.
—¿C-cancelar la boda? ¿De que me estás hablando mamá?..—pregunté.
Ella carcajeo con burla.
—Vamos Jimin no te hagas el desconcertado ahora, bien sabes lo que hiciste y quiero que me des una explicación ahora de porque ella ya no quiere casarse contigo—guarde silencio, viéndola con angustia—Acabo de salir de su casa, vengo de allá, Bursin y Sana han tenido una fuerte discusión por esta abrupta decisión de esta niñita, lo han arruinado todo, dime que fue lo que hiciste, quiero una buena explicación al respecto jovencito.
—No hay explicación mamá, ni siquiera se porque ella lo habrá hecho..—y en parte decía una mentira, algo me decía porque ella lo hizo, un tiempo antes estuvimos hablando sobre el chico del que se había enamorado, yo le dije que debía luchar por ese amor que se tenían, no me sorprendería que ese acto de valentía sería el cancelar nuestra boda.
—Oh, sabes que si la hay, si no me dices habrá problemas tesoro, necesitamos una solución a esto y bien lo sabes. Debes casarte, todo el pueblo esta hablando de ti y ese hombre con el que te ves a escondidas Jimin.. la gente comenzara a decir cosas indeseables sobre tus gustos..
—Nadie se ve con nadie mamá, no veo a ningún hombre, y la gente no tiene porque hablar sobre temas que no les concierne, bien sabes que sólo tengo un sólo amigo, y ese es Yoongi..
—Otro problema más, ya después veré que hago con ese Alfa para que no se te acerqué nuevamente..—podía ver perfectamente como una vena se le marcaba en su cuello, en cualquier momento se desataría el caos.
—Deja de expresarte hacía él como si fuera una peste para ti, él es mi amigo. Y lo quiero mamá, no permitiré que me alejes de él, no ahora qué todo está bien, no ahora que por fin soy feliz mamá..
—¿De que mierda me estas hablando?..—calle, regañándome mentalmente por haber hablado de más al frente de ella—Respóndeme Park Jimin.
—Él es una persona importante..—dije cabizbajo.
—No es lo que me estas escondiendo, háblame con la verdad ante ti Jimin, no te crie para que seas un mentiroso..
—Él...él me gusta mamá..—no quise mirarla a la cara. Sabía que estaba toda enfadada conmigo—Y yo le gusto a él..y-y..eh, s-somos pareja mamá..
Ella no dijo nada.
Cuando quise verla a la cara, no me dio tiempo de reaccionar cuando ella había estampado su palma en mi mejilla, pocos segundos después sentí calor en la zona, comenzaba a arderme el rostro.
—¡Cállate! ¡No quiero escucharte!
Le miré, aún con mis manos en la zona golpeada, dolía como un demonio. Mi garganta dolía y las lágrimas amenazaban con salir, nunca creí que ella sería capaz de golpearme, pero lo hizo, y ahora sí la creía capaz de todo.
—E-es la verdad. Debes asumir que tu hijo es homo-
—¡Cállate maldita sea! ¡Mi hijo no es gay, al niño que crie no le gustan los hombres! No no no no no..—llevo sus manos a su cabello, pasándolas con exasperación—Esto no me puede estar pasando. Que dirá la gente.. ¿Sabes el problema que significa todo esto para nuestra familia?..
—Deja de pensar por un vez en lo que dirá la gente mamá... esto no es un problema para la familia si dejas de verlo como tal—mí voz comenzaba a quebrarse—Debes aceptarme tal y como soy, te pese o no a tu hijo querido le gustan los hombres..
—No claro que no, esto sólo es temporal, esto se irá de ti. Ese mal que esta dentro de ti se irá y todo volverá a la normalidad, mi hijo no será homosexual—trataba de auto convencerse, lágrimas resbalaban por mis mejillas, todo esto me apenaba, no quería que las cosas terminarán así—Te llevaré a los mejores psicólogos, te medicare. Hare lo que sea para dejes de ser un anormal..
Mi corazón dolió.
Uf, si que lo hizo.
—¿Anormal? ¿Eso es lo que soy para ti? ¿Un chico anormal por tener un gusto diferente y fuera de tu entendimiento?..
—Sí.
Sonreí cabizbajo, mí boca supo a salado, mis ojos aguados no me dejaron ver con claridad, mí pecho dolía, quemaba.
—Ahora se porque Chanyeol nos dejó, ¡Ahora entiendo porque se fue de casa hace tantos años atrás! Tú nunca lo dejaste ser, él siempre buscó cosas diferentes, él siempre quiso destacar sobre los demás..—un recuerdo llegó a mi cabeza.
~Quiero estudiar arte mamá~
~Eso es para pobretones chan~
—¿Qué fue lo que dijiste?..—si las miradas mataran, estaría muchos metros bajo tierra, me sentí cohibido.
—Lo que escuchaste mamá, él se fue y todo fue por tu culpa, porque nunca supiste entenderlo, nunca creíste en el cuando todos aquí lo acusaban de brujería y todas esas mierdas que nunca fueron verdad. Le diste la espalda cuando todos aquí querían verlo muerto por todo lo que paso—lo único que sentí fue como otra vez ella golpeaba mi mejilla, pero esta vez fue más dura.
Caí al suelo y choque con la esquina del mueble, golpeando la comisura de mis labios, solté un gemido de dolor, sollozos, quise patalear, gritarle en la cara lo muy mal madre que estaba siendo, pero de mi boca sólo salieron llantos de impotencia, de dolor, rabia.
—¡Cállate si no quieres que te mate con mis propias manos! ¡No quiero que digas nunca más ese nombre en esta casa, él para nosotros está muerto! ¡Muerto! El decidió irse y dejar a toda su familia, es un mal agradecido, igual que tú..
—D-debes recapacitar mamá, no es sano que una madre le haga esto a un hijo..
—Tú no eres el sano aquí, tú debes recapacitar y ser normal otra vez..
Y se fue, se fue y se encerró en el baño, quizás para lavar sus manos que sin querer se mancharon con mí sangre. Me sentí devastado, sólo, excluido. Nunca en mi vida creí que mamá se portaría así, nunca creí que me tacharía de anormal por amar con el alma a un niño, por desgraciadamente haberme enamorado completamente de Yoongi.
Daría lo que fuera por poder irme y dejar éste asqueroso pueblo, pero solo era un niño que aún no sabía lo que quiere.
O eso siempre me refregaba en la cara mí madre.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro