Estábamos en donde se realizaría la carrera, ya nos habíamos inscripto y estábamos esperando para empezar.

-Damas y caballeros, hoy es un día épico, porque hoy se enfrentan dos leyendas de las carreras- Dijo el presentador ¿Quienes serán esas personas? -Recien llegadas una de Argentina y la otra de Inglaterra, -¿Dijo Argentina? -¡Flash y Reverse Flash! -Grita.

¿Quien carajos es Reverse Flash? ¿Por qué dicen que es una leyenda? ¿Enserio me consideran una leyenda?
Vi a quien creo que es Reverse Flash iba vestida parecido a mi pero su campera era la de Reverse Flash. Maldita me copio el estilo, y si se nota que es mujer, no sabe disimular muy bien la forma de su cuerpo, en cambio yo si, lo hago desde que me monté por primera vez a una moto.

-Bien como es una bienvenida a Nueva York para estas leyendas haremos la carrera favorita de las leyendas. Así que ¿Cuál es su carrera favorita? -Dijo hacia nosotros.

-¡La vuelta del Demonio! -Gritamos a la par.

¡¿Pero qué?! ¡¿Enserio quien carajos es está?!

-Pues la vuelta de demonio será. -Dijo el presentador. -Corredores a la salida. -Dijo.

En cinco minutos estábamos todos en la línea de salida. Se acercó la típica rubia.

- En sus marcas, listos... ¡FUERA! -Grito con su voz chillona.

Salimos a toda velocidad hacia la comisaría. Estuve uno 40 minutos perdiendo a la policía y luego llegue a la meta. Eso se supone que es bueno de no ser porque llegamos con "Reverse Flash" a la par.

Lo vuelvo a decir ¡¿QUIEN CARAJOS ES?!

Vieron los vídeos y lo dejaron en empate. ¡Maldita! ¡¿Quien carajos sos?! Una hora y media después llegaron todos menos 5 que fueron arrestados.

-¿Quien va a retirar a nuestros perdedores? -Pregunta el presentador. Levanto mi mano y veo que "Reverse Flash" también lo hace.

Una vez en la comisaría entro a sacar a los que perdieron, y valla que los voy a matar, menos mal que les dije que no participarán, adivinen quienes fuero los que perdieron sip los chicos, el único que se salva es Jordan que el si sabe correr.

-Hola venimos a retirar a Scott, Dereck, Connor, Marcelo y Santiago. -Digo. - Aunque podría dejarlos en prisión por no hacerme caso. -Digo pensativa.

-¿Podrian sacarse el casco? -Dice el oficial.

-Lo haría, pero el idiota de mi hermano le puso pegamento y la única forma de sacarmelo es arrancarme el pelo. -Decimos a la vez.

Otra vez ¡¿Quien carajos es está?!

-¿A las dos a la vez? -Pregunta el oficial.

-Somos mellizas, y nuestro hermano nos hace las bromas a las dos a la vez. -Decimos a la vez.

Me harté, ni bien lleguemos al lugar de las carreras le voy a arrancar el casco si es necesario.

-Esta bien, los traeré en 5 minutos, son 5.000 dólares -Dice.

-Juro que los mato. -Decimos a la vez.

-Y si quieren retirar las motos son otros 10.000 -Dice como si nada.

-Juro que los torturó y luego los mato. -Decimos a la vez otra vez.

Sacamos 7.500 dólares cada una y pagamos la fianza. Si llevamos mucha plata encima, pero es la del premio.

-O chicas gracias por liberarnos. -Dicen los cinco a la vez.

-¡Nos deben 7.500 dólares a cada una! -Decimos gritando.

No tardan ni 5 minutos en darnos la plata.

-Y para la próxima me hacen caso. -Les digo dándoles un sape a cada uno.

-Si, si. -Dicen, dan mucho miedo cuando hablan a la vez.

Una vez de vuelta los chicos se dispersan. Y yo me giro a ver a "Reverse Flash" y noto que está me está mirando a mi.

-Ahora si no te escapas, ¿Quien eres? -Decimos. -Agh, deja de copiarme. -Volvemos a decir. -Suficiente a la cuenta de tres nos sacamos los cascos, bien. -Decimos a la vez.

-Uno... -Dice ella.

-Dos... - Digo.

-¡Tres! -Decimos a la vez. Y nos quitamos los cascos. -No. Puede. Ser. -Decimos a la vez. -¡Samantha/Katherine! -Decimos a la vez. - Hermanita. -Decimos a la vez.

Tal vez olvide decir que no somos mellizos sino que trillizos, ¿Ups?

-¿Qué haces aquí, no estabas en un internado en Inglaterra? -Pregunto.

-Si pero a mamá se le ocurrió la brillante idea de que viniera a vivir con Scott y Derek. -Dice ella.

Luego de ponernos al día, decidimos ir a buscar a los chicos, ya que se estaba haciendo tarde, los encontramos a todos coqueteando con unas rubias oxigenadas.

-Manga de idiotas, dejen de coquetear con esos animales. -Les digo y los seis voltean a verme, y los animales con las que estaban coqueteando me fulminan con la mirada.

-¿A quién llamas animal perra? -Dice la que creo que es la líder.

-A ti, a quien más arroz. -Le digo.

-¿Arroz? -Pregunto.

-Perdón tengo la costumbre de decir las palabras al revés. -Digo, y puedo jurar que puedo ver humo salir de sus orejas. -Bien, mientras está rubia quema su última neurona, vámonos que les tengo que mostrar algo. -Les digo.

Ellos simplemente me siguen, y cuando ya estoy a unos 7 metros escuchó.

-¿A QUIÉN LLAMAS ZORRA?! -Grita con su voz chillona.

-Les tengo una sorpresa. -Les digo.

Seguimos avanzando, hasta las motos, para irnos.

-Chicos, miren con quien me encontré. -Les digo, mientras señaló en dirección a Katherine.

-¡Kath! -Gritan los seis a la vez y la van a abrazar.

Los veo abrazarla hasta que veo como me hace señas de que no puede respirar.

-¡Idiotas, no la dejan respirar! -Les grito.

Y automáticamente la sueltan. Luego de hablar un poco nos vamos a casa. Una vez llegamos cada cual se va a su cuarto, incluida Kath, la cual tiene su habitación para cuando venia.

A la mañana siguiente me levanto me doy una ducha rápida y me visto con una remera gris oscura, un enterito corto de Jean claro y unas Converse gris oscuro.



Voy saliendo y veo a Kath vestida igual a mi, nos reímos y bajamos, esto es perfecto para una broma, los chicos anoche llegaron re cansados que por ahí ni se acuerdan de que Kath llegó anoche. Kath entra a la cociba, saluda y toma un café, un bowl con cereales y sale al patio. Después entro yo repito el proceso y sigo a mi melliza. Viendo como los chicos me miran confundidos.

Una vez afuera, veo que Kath está escondida así que me siento en una mesa que hay en el patio, y desayuno tranquilamente, veo como salen los chicos.

-¿Cómo hiciste eso? -Preguntan los chicos a la vez, causandome un escalofrío.

-¿Cómo hice que? -Pregunto.

-Pasar dos veces por la cocina. -Dice Connor.

-Es que descubrí un portal en la pileta, vengan que les muestro. -Les digo.

Una vez en la pileta les señaló un lugar al azar, Kath sale de su escondite y los tiramos a la pileta. Después de eso nos reimos.

-Maldición, como nos pudimos olvidar de Kath. -Dicen.

-Porque anoche estaban muy dormidos y hoy no se terminaron de despertar. Los conocemos muy bien. -Decimos a la vez, luego de eso salimos corriendo hacia la casa y cerramos las puertas con llave. -¡No entran hasta que se secan! -Decimos a la vez.

Luego nos ponemos a ver una película. Cuando terminamos de verla vamos a comprobar que estén secos. Como lo están los dejamos entrar.

-¿Vamos a una plaza? -Preguntamos a la vez con Kath y sonreimos con malicia, como cada vez que pasa eso, no lo de hablar a la vez, sino que cuando tenemos la misma idea, al mismo tiempo.

Veo como los chicos se estremecen.

-Esta bien, pero no vuelvan a hacer eso. -Dicen, causandonos ellos a nosotros un escalofrío.

Una vez en la plaza, Kath y yo salimos corriendo como niñas, los chicos nos intentan atrapar, hasta que los perdemos y nos trepamos a un árbol, vemos como los chicos nos buscan, hasta que pasan por debajo de nosotros, en ese momento bajamos y nos vamos corriendo hacia otro lado, diez minutos después estamos tranquilas sentada, tomando helado en una heladería a una cuadra de la plaza.

-¿Qué tal ah estado el internado? -Le pregunto en español.

-Es muy aburrido. No me dejaban hacer nada, claro que eso no me impidió, escaparme a las carreras y meter cigarrillos. -Dice.

-¿Fumas? -Le pregunto.

-Si ¿Y tu? -Pregunta.

-Obvio. -Le digo.

Seguimos charlando hasta que decidimos que es hora de volver con los chicos.

-¡Samantha McCalister Gómez y Katherine McCalister Gómez! ¡¿DONDE CARAJOS ESTABAN?!
-Grita nuestro hermano.

-¡No nos grites! -Le gritamos. -Estábamos en una heladería exagerado. - Le decimos como si nada.

-No se vuelvan a ir así me preocupe. -Dice.

Luego de pasar toda la mañana en la plaza, nos fuimos a casa a comer.