El estruendoso sonido de un silbato se escuchó por toda la sala común, haciendo que las personas que dormían plácidamente despertaran asustadas, observando a las causantes de aquello. Las madres de los estudiantes. — ¡Esta bien! Hoy no hay tiempo para holgazanear, las chicas vayan a bañarse y alistarse, saldrán con Inko, la señora Yao y la señora Jirou, Irán a un spa, arreglaran sus cabellos y se maquillarán. — ordenó Mitsuki, haciendo que las femeninas hicieran un saludo militar y se dirigieran a hacer justo lo que ella les había ordenado.

— ¡Los chicos de medirán los trajes! Quienes necesiten arreglos vendrán con Rei y conmigo, quienes estén bien buscaran Ramos de flores para sus citas o novias, Kaminari y Todoroki comprarán un ramo de más para que Jirou y Yaoyoruzu no deban preocuparse por darle un ramo a su novia. — Buscaré las togas y los birretes.— dijo Ángel, quien tomó a Nemuri de la mano para comenzar a caminar con ella hacia su auto.

— Yo confirmaré los invitados de cada uno, debo hacerlo ahora porque seguramente Midoriya invito a mil personas.— dijo Hizashi corriendo en pijama hacia los dormitorios de profesores.

— Iré a dormir. — dijo Aizawa con flojera.
 
(...)

La peliverde giró sobre su propio eje, observando el lindo vestido negro y largo que llevaba, luciendo un lindo peinado recogido que seguramente se soltaría luego de la ceremonia de entrega de licencias.

— ¿En serio nos tenemos que poner la toga? Nos vemos hermosas.— se quejó Mina, haciendo que las madres que las acompañaban rieran.

— ¡Somos unas diosas! — dijo Toru efusiva, haciendo a la peliverde sonreír.

— Te ves hermosa, mi amor.— dijo Momo, abrazando a su novia, quien sonrojada correspondió su abrazo.

— Tu más.— dijo Kyoka, tímida.

Ochako se acercó a su intentes amoroso, detallando los detalles de su vestido:— ¿Esa tela con brillos no pica.— la pecosa suspiró.

— Un poco, si.— dijo la pecosa, suspirando.— El rojo te queda muy bien Ochako.

La mencionada, sonrojada, jugó con sus cabellos:— ¿eso crees? — la peliverde asintió, sonriente.

— ¡Tsuyu-chan!— exclamó Toru al ver como la mencionada llegaba de terminar de cambiarse, siendo la última que faltaba.— pareces salida de un cuento de hadas.

— concuerdo.— dijeron todas en unísono.

— Gracias, kero, aún no puedo creer que esto esté pasando.— dijo la sonrojada peliverde de cabellos lacios mientras se acercaba a sus amigas.— las voy a extrañar mucho, chicas.

— ¡Oigan! No digan eso, me van a hacer llorar, y sabemos quien es mi hermano así que lloraré mucho. No quiero arruinar mi maquillaje.— dijo la pecosa, mirando al techo por un momento piensenlo, podemos vernos los fines de semana, ¿qué tal si cuando tengamos nuestra primera paga alquilamos un departamento juntas?

— ¡Me parece una gran idea!— dijo Mina con una gran sonrisa.— podemos hablar mejor mañana en la tarde y comenzar a buscar.

— ¡Siempre quise compartir casa con mis amigas! — dijo Toru, haciendo reír a todas.

— Basicamente ya vivíamos juntas, eso es algo más extenso. — dijo Ochako con una sonrisa.

La de cabellos rizados sonrió, abrazando a Toru y Uraraka: — Ya quiero ver que nos depara el futuro. — todas rieron, felices y con algo de nostalgia.

Mitsuki entró a la habitación en donde las femeninas aguardaban, llevando consigo las togas y los birretes que se podrían sobre aquella ropa de gala: — Por Dios, se ven preciosas.— dijo ella, entregándole a todas lo que le correspondía, dejando a la hermana de Izuku de última.

Mitsuki no pudo evitar abrazarla, soltando un par de lágrimas: — ¿En qué momento creciste tanto? Estoy tan orgullosa de ti, tan orgullosa de Katsuki...— dijo la rubia. Y en aquel momento todos los familiares de aquellas bellas señoritas entraron al lugar, siendo este un mar de lágrimas de orgullo y tristeza, después de todo, como dijo Mitsuki, nadie sabía en qué momento ellas habían crecido tanto. La peliverde se alegró de haber hablado con su madre antes de maquillarse, después de todo, si ella le hubiese dicho lo orgullosa que estaba luego de ello seguramente tendría que volver a maquillarse.

— Bueno, es hora, prepárense. — dijo Mitsuki, separándose de la menor y limpiando sus lágrimas.

(...)

Cuando las chicas, ahora mujeres, terminaron de cambiarse por completo fue cuando, por fin, sus compañeros pudieron observarlas, quedando anonadados por la belleza de quienes eran, en aquel momento, sus compañeras de clase y que pasarían a ser compañeras heroínas.

— ¡Oh por Dios! Te ves hermosa, Mon chérie.— chilló Aoyama, siendo el primero en reaccionar y acercarse a la hermana de Izuku.— ¡Todas ustedes tienen un hermoso brillo!

Ojiro chasqueó sus dedos de un lado a otro:— La policía quiere encontrarte, porque muchos hombres han muerto al ver lo bien que te ves en ese vestido.— dijo el rubio mientras se acercaba a Toru, su novia, entregándole a esta un ramo de flores.

Denki y Shoto se acercaron a Momo y Jirou, entregándoles a estas los Ramos que le darían a la otra:— Se ven preciosas.— dijeron ellos, antes de dirigirse a donde se encontraba la peliverde.

Kyoka intercambio su ramo con el de Momo, sonriendo ambas para luego darse un tierno y corto beso en los labios, Sato y Koda, quienes también compraron un ramo de flores, le entregaron estos a Mina y Ochako, quienes lo recibieron agradecidas.

— luces como una princesa.— dijo Tokoyami, sonrojado, entregandole un ramo de rosas púrpuras a su novia.

— gracias, fumikage.— dijo Tsuyu con una sonrisa y un lijero sonrojo al igual que su novio.

Por su parte la hermana de Izuku había entrado en pánico, logrando recibir solo el ramo de flores que le había entregado su hermano, su única salvación fue Momo, quien organizó a todos en una fila frente a ella, siento Katsuki el primero en esta, entregándole un ramo de flores naranjas. Shoto le dio un ramo de rosas blancas, él se había dado la tarea de conocer su significado, "amor puro" razón por la cual decidió regalárselas. Eijiro le regaló un ramo de rosas rojas, sonriendo mientras la observaba, haciendo un pequeño discurso sobre lo hermosa que se veía, Iida, a diferencia de los demás, le dio un ramo de hortensias azules, no agregando mucho al respecto y limitándose a decir "te ves muy hermosa hoy."

Denki le regaló freesias amarillas, hermosas, haciéndola considerar decorar su vestido con ellas. Sero le regaló girasoles, pequeños, sin embargo era un ramo realmente grande, Shoji le regaló gardenias, habiendo investigado el significado de esta misma flor al igual que Shoto, e Izuku, quien fue el primero en darle su ramo, le regaló tulipanes naranjas.

— Gracias a todos por...— antes de poder terminar su frase la peliverde fue interrumpida cuando alguien abrió la puerta, siendo este Izuki, quien iba acompañado de Hawks, quien llevaba un ramo de orquídeas púrpuras.

Izuki sonrió, abrazando a su hermana y acomodando su toga:— No creíste que no iba a venir ¿cierto? — dijo el villano con una sonrisa, haciendo aparecer un par de flores corazón sangrante.

Hawks también le entregó su ramo a la menor, susurrando en su oído dulces palabras que la hicieron sonrojarse, al notar esto Izuki de inmediato golpeo su cabeza. En aquel momento Nemuri, con un hermoso vestido de gala color violeta, junto con Ángel, quien llevaba un vestido azul, entraron al lugar, sonrientes.

— Ya es hora. — dijo Nemuri, nostálgica, al borde de las lágrimas al ver como aquellos chicos caminaban, abrazados unos a otros, teniendo una breve imagen de su primer año en UA.— Esto es lo peor de ser maestra.

La peliverde, quien abrazaba a Katsuki y a su hermano, vio los semblantes entristecidos de los demás, razón por la cual sonrió abiertamente: — ¡Este no es el final, es solo el comienzo! — dijo ella efusiva.

Todos sonrieron: — ¡Plus ultra! — gritó toda la clase al unísono.
 
(...)

— Izuku Midoriya.— dijo Nezu, el mencionado se levantó de su asiento y se dirigió al escenario, recibiendo su diploma y su licencia de héroe profesional. Abrazando a Izuku y Nezu como agradecimiento.

El chico lloró al ver estos, al igual que su madre, quien lo recibió con un abrazo, esperando a que su hija fuera la siguiente:— ______ Midoriya.— otra ovación de aplausos se escuchó mientras ella subía, recibiendo su diploma y su licencia.

— Estoy orgullosa.— dijo Ángel, acercándose y abrazando a la muchacha antes de que Aizawa pudiera hacerlo.

— Todo esto es gracias a ti.— dijo la pecosa con una sonrisa.

— Yo solo te di los medios, pequeña, el esfuerzo fue tuyo.— la albina acompañó a la estudiante a donde se encontraba.

Inko abrazó a su hija, diciéndole lo orgullosa que se sentía mientras también abrazaba a Izuku, luego de un rato los gemelos volvieron a sus asientos, cuando Momo, quien fue la última de su clase en recibir su diploma luego de Shinso, volvió a su haciendo Nezu volvió a tomar el micrófono, después de todo era la última que faltaba de todas las clases.

— Ahora todos seremos compañeros, somos todos iguales.— dijo Neito, sentándose a un lado de la peliverde por unos segundos, besando su mejilla y regresando a su asiento con el resto de su clase.

— ¡Felicidades por su graduación! — dijo el roedor, haciendo que todos los estudiantes lanzaran sus birretes al aire, dándole fin a la ceremonia.
 
(…)

Ambos bailaban, sonrientes, él había logrado, por poco, ser el primer baile de la chica, siendo este una canción convenientemente lenta, “Talking to the moon” que, a pesar de ser un momento lindo para los dos, les causaba cierto sabor agridulce en la boca, era como si en aquel momento vivieran algo que antes no pudieron, como si aquella fuera una segunda oportunidad para los dos, todos observaban al chico con cierto enojo, cosa que él ignoraba fácilmente: ― Tengo que hablar seriamente contigo. ― dijo él, haciendo que ella lo observara, curiosa. ― No pienso darme por vencido si escoges a alguien más.

La peliverde soltó una risa: ― yo estoy seguro de que fuiste hecha exactamente para mí, jamás me rendiré para poder tener tu amor, ya sea en esta vida o en la otra. ― ella levantó una de sus cejas mientras sonreía.

Ella giró, Shoto la recibió en sus brazos, deteniéndose mientras sostenía su rostro entre sus manos, haciendo a la chica observarlo a los ojos, en aquel momento Hawks estaba por gritar algo, sin embargo, Endeavor lo noqueó: ― Porque yo sé que tú me amas como yo te amo a ti. Porque sé que significo algo para ti, los amigos no se extrañan ni se conocen todo el cuerpo, los amigos no son la primera vez del otro. ― él acarició el rostro de la más baja, pasando una de sus manos por su cabello mientras sonreía, cosa que rara vez pasaba.

Ella observó a una ventana de aquel gran salón, aquella era una noche de luna llena, podía verse como pequeñas gotas de agua lluvia caían del cielo, haciéndola sentir triste sin razón aparente, Shoto observó aquel mismo punto, gracias a que había notado lo distraída que ella estaba, creyendo que aquel era una señal de rechazo. Él quiso separarse y dejarla ir, no se rendiría, sin embargo, la dejaría por aquel día.

La mano de la peliverde sosteniendo su muñeca fue lo único que lo detuvo de irse, Shoto la observó con confusión, sorprendiéndose al sentir los labios de la hermana de Izuku sobre los suyos, él, sin perder mucho el tiempo, rodeó la cintura de la chica con sus manos, haciendo el beso más profundo, pocas palabras podrían definirlo, era como el beso de dos personas que no se habían visto en mucho tiempo, un beso de dos amantes que fueron separados y por fin podían reunirse. Al separarse ambos unieron sus frentes.

― Shoto, tu eres el amor de mi vida, por alguna razón siento que tengo que decírtelo. Siento como si tuviera que besarte muchas veces y decirte cuanto te amo. ― dijo ella con una sonrisa, entre lágrimas, a pesar de tener a Shoto frente a ella sentía como si lo extrañara. ― quiero estar contigo para siempre.

Lagrimas comenzaron a correr por el rostro de Shoto, él, sinceramente, no sabia si eran de felicidad o de aquella extraña tristeza que tenia en su corazón al ver la luna y observar como la chica que amaba estaba frente a él, cuestionándose si en realidad aquello era real.

Era como un sueño.

Y si realmente aquello era un sueño no quería despertar.

―¿me das una cachetada? ― dijo el con seriedad, observando a su amada. ― Tengo que comprobar que esto sea real.

Ella soltó una risa, seguido de esto un grito eufórico de parte de Endeavor se escuchó desde el otro lado del salón, gritando el nombre de su hijo, el mitad mitad suspiró con fastidio, observando a su padre: ― Olvídalo, si esto fuera un sueño el viejo no estaría aquí. ― dijo Shoto, provocando que una risa saliera de la boca de su amada.

Ambos se observaron por una rato, sonriéndose el uno al otro para luego unirse en un beso.
 
(…)

Ella mordió su labio inferior, observando a su atractivo novio conversar por una videollamada, conversando seriamente asuntos de la agencia de su padre, en donde ella también trabajaba, sin embargo se ahorraba ir a las reuniones ya que tenia un lindo novio que iba por ella y le informaba todas las cosas importantes luego.

Hay momentos en el mes en donde algunas mujeres están mas dispuestas a tener relaciones de lo usual, ella siempre estaba dispuesta a cualquier cosa si Shoto se lo pedia, sin embargo, en aquel momento estaba mas caliente de lo normal.

Hace poco en una misión ella habia conseguido copiar una nueva particularidad y, en aquel momento, estaba a punto de provarla.

El sudor frío le corría por la frente al mitad mitad, estaba nervioso y todo era culpa de su novia.

Podía sentir la sonrisa que estaba pegada en su rostro mientras se arrastraba incómodo a su asiento, tratando de escuchar lo que fuera que Endeavor estuviese parloteando. Trató de ignorar el brillo travieso en sus ojos verdosos, esperando que ella no estuviera planeando hacer algo arriesgado.

Pero algo, en el fondo, le dijo que estaba equivocado, y ese sentimiento confirmó sus pensamientos tan pronto como escuchó tu voz en su cabeza.

―Sho, eres un niño travieso por pensar en que te hago cunnilingus mientras mi suegrito está explicando amablemente lo que pasa en la agencia.

Él la miró con las mejillas encendidas por el hecho de que habia sido atrapado con las manos en la masa. Estaba tan avergonzado por eso.

La peculiaridad que la peliverde probaba era telepatía, lo que significa que puede recibir y transmitir información mentalmente. Además, podia inducir en otros ilusiones mentales, parálisis mental o física temporal.

Tratando de aclarar su mente y sintonizar su voz, negó levemente con la cabeza.

―Sho ... ¿Sabes las cosas que podríamos hacer si solo no estuvieras en esa llamada? ― La pecosa vio a su novio tragar saliva, mientras una sonrisa tímida se abría paso en sus labios brillantes.

―______ ... no es un buen momento para esto ... ― pero todo lo que ella hizo fue ignorar su declaración. Shoto siempre le decía que sus ideas eran arriesgadas. Pero al final, se pondría caliente y no hará nada para detenerte.

En aquel momento Shoto agradecia tener su micrófono desactivado.

―Qué mal mentiroso ... ¿quieres decir que no quieres escuchar lo que me gustaría hacerte? ― Preguntó, fingiendo el leve dolor en tu voz. Shoto se mordió el labio. Esa fue su señal para reanudar su charla sucia.

―Si estuviéramos solos, te haría ponerte de pie, apoyarte contra el escritorio mientras comienzo a besar lentamente tus labios hasta tu cuello, mientras pongo mi mano en tus pantalones y acaricio tu lindo amigo endurecido. ― le dijo ella lentamente mientras se inclinaba hacia atrás en el asiento viendo cómo su novio enderezaba la espalda.

―Me pondría de rodillas, lamiendo y chupando, como si mi vida dependiera de ello. Y mientras te lo hago, te miraba, con grandes ojos de ciervo mientras te deslizas dentro y fuera de mi boca. ― ella notó cómo la respiración de Shoto se hizo más profunda, liberando inconscientemente frías bocanadas de aire. Luego se mordió el labio inferior, tratando de pensar en otra cosa para evitar tener una erección durante la video llamada.

―Piensa en el viejo ... Endeavor ... papá de mierda ... ― la pecosa ahogó una risita ante sus malas intenciones y lo apasionado que estaba tratando de reprimir su erección.

―Entonces me obligarías a acostarme en el escritorio, con mis piernas sobre tus hombros mientras te adentras en mi, haciéndome suplicar por más y más, usándome como tu juguete personal para hacer el amor. ― Shoto estaba mirando con impaciencia el reloj ahora, contando los minutos antes de que pudiera llevarla a la fuerza a la habitación y darle lo que quería. Sus manos estaban temblando y la erección ahora estaba allí mientras imaginaba todas esas cosas.

Shoto se encontró ahogándose con el aire cuando su novia le dio una imagen mental. La imagen de ella debajo de él, jadeando con fuerza, gimiendo de placer y gimiendo su nombre mientras la embestía, era demasiado real. Aquella particularidad era peligrosa para él, y no sabia si debería amarla u odiarla. Además de eso, el dolor palpitante en sus pantalones era insoportable, sintió que su miembro se contraía de emoción cuando ella gemía de placer dentro de su cabeza.

―Amor ... estás jugando un juego peligroso ... ―

―Shou ... estoy tan mojada ... quiero que me llenes por completo, quiero que me folles tan fuerte hasta que no pueda caminar durante una semana entera. ― murmuró en su cabeza mientras él se frustraba, imaginando lo mojada que su novia estaba ahora. Tragó saliva, su corazón latía con fuerza en su caja torácica mientras sus manos temblaban al querer tocarla, pero por ahora, tendría que agarrar sus rodillas.

Él le lanzó una mirada fugitiva y se atragantó cuando clavó los ojos en las pupilas dilatadas de su novia. Lo estaba mirando con una mirada tan intensa que hizo que un escalofrío recorriera su espalda. La presencia de su erección era difícil de ignorar, y en ese momento, no le importaba si alguien más lo notaba, no cuando su mente estaba llena de ella. Sus ojos seguían cambiando de la pantalla al reloj, y viceversa, contando mentalmente los minutos hasta el final de la reunión obligatoria.

A la que _____ no asistió gracias al gran favoritismo de Enji.

Tan pronto todos comenzaron a despedirse, Todoroki fue el primero en levantarse apresuradamente colgando la llamada y metiendo todos los cuadernos y bolígrafos donde tenia sus apuntes sobre otras reuniones en una mochila, por una vez sin preocuparse por el desorden que había hecho. Luego, se movió hacia ti, agarrándote con fuerza por el antebrazo y te arrastró con fuerza fuera del salón principal de la casa, que habia sido regalada por Endeavor recientemente.

Shoto no dijo nada durante el camino hacia el dormitorio, y si ella trataba de decir algo, la mirará con frialdad. Si hablaba, perderá el poco control que aún tenía sobre su cuerpo y acabará llevándola en medio del pasillo. Una vez que los dos finalmente entraron a su habitación, él la tomó por la cintura y la subió al escritorio de la muchacha, se alteró cuando varios de los papeles con sus dibujos se arrugaron, abriendo ansiosamente sus piernas y arrancando sus bragas.
Ella se quejó internamente de su destructividad, mientras él miraba con hambre. Shoto lanzó otro suspiro frío, haciéndole gemir cuando el aire frío golpeó su sensible hendidura, las piernas temblaron cuando Shoto le agarró los muslos con dureza.

―Sho…―

―¡Cállate! ― dijo, gruñendo, mientras empujaba dentro de ti dos dedos fríos. La espalda de la pecosa se arqueó de placer, sus paredes se contrajeron alrededor de sus dedos cuando otro pequeño gemido salió de sus labios.

―No estás en posición de decirme qué hacer. ― Dijo, con los dedos bombeando furiosamente dentro de ti. Lanzó un gemido bajo cuando su miembro se movió de nuevo, y se preguntó por un momento si estaba bien saltarse los juegos previos. Los ojos de Shoto se movieron de su intimidad a su cara, disfrutando el sonido que salió de tus labios. Podía sentir cómo ella se estaba poniendo más húmeda que antes, jugos resbaladizos cubriendo sus dedos hasta sus nudillos, resbalando también sobre la mesa.

La habitación se llenó de salpicaduras, gemidos y gruñidos ocasionales. Shoto le sonrió a su nerviosa novia, disfrutando del enrojecimiento que cubría sus mejillas mientras sus ojos estaban fijos en los de él. Su pulgar comenzó a tocar su clítoris con movimientos circulares, aplicando la cantidad adecuada de presión.

― ¿El gato te comió la lengua ahora? ― preguntó, la diversión era clara en su voz mientras te veía luchar por mantener a raya tus gemidos. No satisfecho con tu silencio, se agachó, rodeando su sensible clítoris con su lengua, moviéndolo y chupándolo con entusiasmo, finalmente ganándose un gemido más fuerte de ti.

Añadió otro dedo dentro de ella y aumentó la velocidad, metiéndolos apresuradamente mientras se burlaba de tu clítoris, alternando la temperatura de su lengua de vez en cuando. Tan pronto como los muslos de la chica empezaron a temblar bajo sus manos y sus paredes se apretaron alrededor de sus dedos, supo que ella estaba cerca. Sus movimientos se volvieron más duros, empujando sus dedos lo más profundo que pudo, amando cómo tus gemidos eran más fuertes.

Finalmente le rodeó los dedos con un gemido sin aliento, pero él no se detuvo. Lamió todo su jugo en su boca antes de comenzar una vez más a comerla, devorando su intimidad como si fuera la mejor comida que haya tenido en su vida mientras agregaba un tercer dedo, bombeando violentamente dentro de ti.

―Sho ... estoy ...―  ella era un desastre quejumbroso, patéticamente tratando de detenerlo. La temperatura de su cuerpo se elevó, el calor se extendió desde entre las piernas hasta el estómago y bajó por las piernas. Entonces, el interior de sus muslos tembló y la necesidad de liberarse fue insoportable. Pero él no escuchó, sus súplicas cayeron en oídos sordos mientras seguía disfrutado de tu agujero y clítoris. Sus piernas temblaron por el placer que Shoto le estaba ofreciendo, y luego, se corrió por segunda vez.

Se detuvo, separó su rostro de la intimidad de su novia y miró satisfecho el lío que hizo: la superficie de la mesa en la que estaba sentada tenía un pequeño charco de agua, mientras que las gotas caían del borde del tatami, todos los papeles que habían caído estaban mojadas. Ella tenía la boca abierta, jadeando mientras intentaba recuperar el aliento. Sus mejillas estaban cubiertas de pigmento rojo mientras sus piernas estaban abiertas y todavía temblaban un poco.

―Si crees que hemos terminado, estás equivocada, esto es solo el comienzo, mi hermosa _____ ... ―sonrió, tomando un agarre de tu cabello y tirándote en un beso desordenado, en el que pudo saborearse a si misma. Pero terminó demasiado rápido para su gusto. Él la tomó por los hombros y la empujó al suelo mientras se enderezaba.

―Ahora, quiero estar dentro de esa bonita boca tuya. ― dijo empujándola hacia abajo, hasta que su cara estuvo frente a su bulto. Ella desabrochó sus pantalones y su miembro, finalmente libre, acercándolo a su boca, untando su líquido pre seminal en tus labios regordetes. Shoto sonrió internamente e impaciente empujó su miembro caliente y palpitante dentro de su boca, amortiguando todos sus ruidos.

La peliverde ahuecó sus mejillas cuando él comenzó a empujar ferozmente en su boca húmeda, amando la forma en que amordazaba su miembro. Un hilo de saliva corría por la barbilla e la chica mientras se formaban lágrimas en la esquina de sus ojos, gracias a la sensación repentina, tratando de girar su lengua alrededor de su eje. Shoto empujó su miembro hasta el fondo de su garganta y tomó la vista: era algo tan increíblemente erótico ver su miembro desaparecer en su boca ansiosa, amorosa y húmeda que lo volvía loco.

Le encantaba verla toda despeinada, llevándolo todo a su boca y sintiendo la textura de su lengua a su alrededor. Alejándose, dándose tiempo para recuperarte, observó cómo la saliva corría por la barbilla de la chica hasta llegar a su ropa, que estaba arrugada y faltaban los primeros dos botones, mientras su cabello, verde y desastroso, sobresalía desordenadamente en todas las direcciones posibles. Sonriendo para sí mismo, se agachó, la tomó por la cintura y luego, sin gracia, la arrojó sobre la cama. Su cara pronto fue empujada hacia abajo sobre el colchón, con el trasero en el aire mientras él comenzaba a burlarse de su húmeda intimidad.

―Estás empapada, amor. ―murmuró mientras ella gemía cuando sus dedos helados entraron en contacto con su clítoris caliente.

―¡Sho ... hazlo ya! ―dijo. Shoto chasqueó la lengua, golpeando con dureza su trasero, seguramente dejando una huella roja en la mano.

―La palabra mágica, amor. ― dijo golpeando de nuevo el mismo lugar, esta vez haciendo que su mano se caliente. El cambio de temperatura hizo que un escalofrío recorriera su espina dorsal de puro placer, yendo directamente a su centro cuando se le puso la piel de gallina.

―Por favor… ¡Por favor! ¡Hazme venir de nuevo! ― rogó la peliverde, cuando finalmente él empujó su miembro dentro de ella con un rápido empuje. Ella hizo una mueca de dolor cuando él comenzó a penetrar su intimidad, pero pronto disminuyó cuando una sensación de felicidad invadió su cuerpo y su mente.

Shoto seguía golpeando su trasero, alternando la temperatura entre frío y calor, amando el efecto que tenía en su novia. Luego, tomó un agarre de su cabello verdoso y tiró de ella mientras le metía en la boca tres dedos.

―Chupa. ― dijo, jadeando un poco junto a su oreja. Observando, con la boca abierta y con lujuria en sus ojos, mientras ella giraba su lengua alrededor de sus dedos, chupándolos como si fueran su miembro. Shoto sintió que sus paredes se tensaban a su alrededor y, de improviso, empujó sus dedos más profundamente en tu boca, haciéndole arcadas cuando tus ojos se abrieron con sorpresa.

Cuando llegó a cierto punto, su cabeza comenzó a dar vueltas, los ojos se volvieron hacia atrás, sintiendo que otro orgasmo le golpeaba. Al escuchar el más mínimo cambio en sus gemidos, Shoto, aceleró, golpeando el mismo lugar repetidamente cuando finalmente se corrió sobre su miembro con un gemido agudo.

Shoto sacó su miembro de su intimidad, girándola, haciendo que su espalda golpeara el colchón. Shoto tomó sus piernas y las colocó sobre sus hombros, mientras sus manos rasgaban su camisa y su sostén. Sus manos agarraron sus pechos, pellizcando, girando y tirando de sus duros pezones.

Sin previo aviso, empujó su miembro hacia atrás en su intimidas: las caderas empujando brutalmente contra las tuyas. Shouto se encontró disfrutando demasiado de tus patéticos gritos de placer, amando cómo él era la razón de tu placer. No importa cuántas veces tengan relaciones sexuales los dos, él siempre amará y apreciará esos momentos íntimos contigo, especialmente tus reacciones.

―¿Ya terminaste con las burlas? ― se burló mientras su mano fría golpeaba su pecho izquierdo antes de tirar de él con brusquedad, haciéndole gemir de dolor y placer. Ella intentó hablar, pero tener su miembro golpeando profundamente dentro de ella lo hizo un poco imposible.

―Joder ... me recibes tan bien. ― gruñó apretando el agarre en sus pechos rebotantes mientras se inclinaba para besar sus labios. Sintiendo como si pudiera volver con solo escuchar su voz ronca. Shoto dejó que sus labios se arrastraran por su mejilla, salpicando tu rostro con besos como plumas, que definitivamente contrastaban con sus ásperas y despiadadas embestidas.

―No puedes entender lo caliente que estás ahora. ― susurró mientras una gota de sudor corría por su frente. Le empezaban a doler las caderas, pero valió la pena. Después de un par de embestidas más, finalmente soltó un orgasmo dentro de ti mientras silenciaba tus gemidos con sus labios.

Se quedó así unos minutos, amando cómo lo envolvían tus cálidas y resbaladizas paredes, pero en algún momento tuvo que sacar su miembro. Vacilante, se deslizó fuera, con los ojos fijos en tu agujero hinchado, que goteaba, manchando sus sábanas.

Shoto sonrió de todo corazón mientras se agachaba sobre ti, sosteniendo su peso con sus codos mientras besaba suavemente tus labios.

―¿Cómo estás? —preguntó, en un tono de fondo mezclado con, lo que se podría describir como,  inocencia, lo cual a la peliverde le dio ganas de reír. Shoto era honestamente la única persona que tendría sexo contigo como si no hubiera un mañana y luego se comportaría como si nada hubiera pasado.

―¿Tu qué crees? ― dijo, acariciando suavemente el contorno de su mejilla derecha. Shoto tarareó, inclinándose hacia su toque mientras presionaba un pequeño beso en tu palma. ― ahora tengo que ir a una reunión con Ochako.

―Sí, pero quiero abrazos. ―
 
(…)
 
La peliverde observó a Shoto con una sonrisa, tomando sus manos y suspirando, ella tenia un lindo vestido blaco mientras que su rostro era cubierto por un velo, el llevaba un smokin y su cabello estaba medinamente peinado hacia atrás, Endeavor lloraba en los brazos de su esposa, orgulloso y feliz, Rei le daba palmadas en la espalda a su esposo mientras observaba a los dos héroes con notoria felicidad.

―Ahora digan sus votos. ― dijo Inko, sonriente.

―Shoto, prometo pelear hasta la muerte a tu lado. ― dijo ella con una sonrisa, sus ojos de a poco se llenaban con lágrimas de felicidad.

El mitad mitad limpió una lagrima que caia por su mejilla a pesar de ya tener los ojos lo suficientmente rojos, después de todo no habia parado de llorar luego de que su novia comenzó la marcha nupcial: ― Tu muerte será mi derrota. ― dijo él, forzando una sonrisa.

―El tiempo siempre es escaso cuando se necesita. ― dijo ella, presionando sus labios mientras sonreía.

―Pero para los que aman dura para siempre. ― continuo Shoto.

―Porque yo creo que ni siquiera la muerte nos va a separar. ― dijo ella.

―¿Por qué dar por separadas una vida de la siguiente si cada una proviene de la anterior? ― dijo Shoto con una sonrisa. Apretando las manos de la peliverde.

―Te amo. ― dijeron ambos al unisono.

Momo apretó la mano de Kyoka, llorando ante los hermosos votos de sus mejores amigos y esperando que en un futuro cuando se casara con Jirou ambas pudieran tener una ceremonia tan hermosa como esa.

―______ y Shoto Todoroki. Los declaro marido y mujer, ya puedes besar ― antes de que Inko pudiera terminar su hija tomó a Shoto en sus brazos, besándolo. ―… al novio.

―¡Si! ― gritó Endeavor con euforia. ― La siguiente meta son los nietos.

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Final bueno y alternativo Shoto Todoroki.

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Espero les haya gustado mucho, quise hacerlo algo relacionado al after ending, espero les haya gustado. :3

Aquí unos Datos.

Incluso antes de casarse ellos eran sexualmente activos.

Shoto y ______ tuvieron tres hijos accidentalmente, luna de miel, san valentin y año nuevo, llamados, Tsuki, una niña cuyo nombre significa luna, Ai, un niño cuyo nombre significa amor y Teka, en honor a la madre de Enji.

Teka heredo el quirk de su padre, con la variación que podía mover el hielo y el fuego a voluntad después de crearlos, Ai heredo crioquinesis, la cual le permite manipular el hielo a su voluntad, crear ambientes frios, crear hielo y enfriar el ambiante manipulando las nueves para generar nieve de la nada, Tsuki heredó la particularidad de su madre posteriormente cuando esta se enteró que ella quería ser una heroína, sin embargo, su fuego solo podía curar a las personas y no provocaba daños.
 
Endeavor le heredó la agencia a ______ y no a Shoto, sin embargo, a ella le daban mucha pereza los asuntos administrativos asi que su esposo terminó siendo quien la dirigía
 
Katsuki se emborrachó el dia de la boda y golpeó al novio, cuando estuvo sobrio dijo que no se arrepentia de nada.
 
Katsuki esperaba a que Shoto y ______ se divorciaran.
 
Izuku lloró mucho el dia de la boda.
 
Touya casi asesina a Shoto, sin embargo, no lo hizo para que _______ no se entristeciera.

________ murió primero por causas naturales, Shoto le siguió dos años después.

Su matrimonio fue lindo y feliz, ninguno de los dos se arrepintió de nada.